Probablemente a lo largo de estas semanas hayáis leído algo sobre el escándalo de Huawei y las memorias de su modelo Huawei P10. Se hizo público que la marca china usaba memorias de distintos proveedores para su teléfono, y que dichas memorias tenían diferentes prestaciones. De tal forma algunas funcionaban mejor que otras.
La polémica de las memorias del Huawei P10 es «Una llamada de atención»
La práctica no es ilegal, aunque de dudosa moralidad. En una primera instancia Huawei la definió como una práctica de lo más común en la industria. Dicha respuesta les valió numerosas críticas. Parece que la empresa rectifica ahora sus palabras.
Una llamada de atención para Huawei
Richard Yu, uno de los directivos de la empresa, ha expresado que estos hechos son una llamada de atención para la empresa. También una profunda lección de la que deben y han aprendido. También ha reconocido que la respuesta inicial dada por la empresa fue tanto inapropiada como arrogante. Estas nuevas declaraciones no están sirviendo de gran ayuda para Huawei.
Muchos usuarios ven estas declaraciones como una forma de evitar mayores problemas y de dar por cerrado el asunto. La verdad es que hay muchos usuarios que afirman haber perdido su credibilidad en la empresa. Se trata de una situación que puede ser peligrosa si Huawei no sabe actuar. Hasta el momento no ha estado actuando de la mejor manera.
Yu afirma que la empresa está trabajando para situarse más cerca de los consumidores y tener mucho más en cuenta sus sentimientos y opiniones. Queda por ver si dichas promesas se convierten realidad. ¿Qué os parecen estas declaraciones de Richard Yu?