Hace poco se han filtrado los planes de AMD para sus tarjetas gráficas hasta el año 2018, y muestran que la compañía empezará a adoptar memorias HBM2 en el 2017 y hará la transición a un nuevo estándar de memoria en el 2018.
Lamentablemente, esta nueva hoja de ruta no incluye información sobre la próxima arquitectura Polaris de AMD, pero al menos confirma que la compañía no usará la memoria HBM2.
La compañía también dijo que prevé un aumento de hasta 2.5 veces en el rendimiento por watt con la nueva GPU Polaris, de modo que esta arquitectura funcionará aún mejor de lo previsto inicialmente con el proceso de fabricación FinFET de 14nm.
Asimismo, la arquitectura Polaris también ofrecerá un nuevo procesador de comandos así como un nuevo motor gráfico. El nuevo procesador ayudará a AMD a mejorar las tareas de computación asíncronas con la nueva API DirectX 12.
Aunque Polaris no se beneficie del soporte para la memoria HBM2, la arquitectura Vega prevista para el año 2017 será la primera GPU que contará con esta memoria, de modo que las GPUs Polaris seguirán usando memorias GDDR5, o incluso GDDR5X.
La nueva hoja de ruta de AMD también confirma que la próxima generación de GPUs usarán conexiones de pantalla DP 1.3 y HDMI 2.0, permitiendo así la conexión de los monitores más modernos del mercado, además de habilitar la reproducción 4K a 120 Hz y otras funciones avanzadas.
Finalmente, en el año 2018, la compañía planea la implementación de la arquitectura Navi que contará con una memoria de próxima generación cuyo nombre se desconoce.
Esperemos que esta sea la primera filtración de muchas otras en relación con las próximas GPUs de AMD y NVIDIA, aunque hoy mismo ya abordamos otra filtración según la cual la nueva serie de tarjetas AMD Radeon M400 incluye sobre todo unidades rebautizadas con el fin de atraer a nuevos compradores.