Durante años Intel ha utilizado una estrategia Tick-Tock consistente en un ciclo de dos años, en los cuales en un año se cambiaba la microarquitectura de sus procesadores y el otro año se pasaba a un proceso de fabricación de menos nm, algo cada vez más difícil de mantener. Ante esta situación el ciclo Tick-Tock se ha ampliado a tres años y la próxima reducción de nm llegará en 2017 con Intel Cannonlake.
Intel Cannonlake estaba previsto para 2016 pero los retrasos en el desarrollo del proceso de fabricación a 10nm Tri-Gate de la empresa ha provocado su retraso hasta 2017. En 2018 tendremos nuevos chips a 10nm llamados Icelake y en 2019 veremos la tercera generación a 10nm, Tigerlake.
Respecto a novedades en los 14nm, se confirma una vez más que veremos una tercera generación de chips a 14nm en 2016, los Intel Kaby Lake. Ya en 2019 llegarán los primeros chips a 5nm de Intel.
Fuente: techpowerup