¡Bienvenidos nostálgicos! Vamos a desbloquear recuerdos con los trackballs, que son uno de los ratones más veteranos del mercado. Sin embargo, siguen en el mercado y siguen vendiéndose, ¿por qué? Los repasamos a fondo.
Muchos los conoceréis, pero otros más jóvenes que se han criado con ratones ópticos e, incluso, inalámbricos no conocerán de su existencia. El concepto del trackball surge a inicios de los años 2000, y la idea radica en no tener que mover el ratón por una superifice para que se mueva el cursor. Veamos si estos ratones son útiles o no lo son.
Índice de contenidos
Qué son los trackballs
Se trata de un ratón que no se desplaza para mover el cursor, sino que incorpora una bola que se manipula con el dedo pulgar para dicho fin. Este tipo de ratón viene con sus clic derecho e izquierdo, al igual que con su scroll e, incluso, el boitón de perfiles DPI en determinados modelos.
La bola tan característica se puede mover en todas direcciones, y el ratón permanece fijo. Esto nos ahorra estar preocupados por tener una mesa grande, una alfombrilla que proporcione un buen tracking, cambiar los surfers de nuestro ratón gaming cada dos por tres, etc.
Podréis ver trackballs en los que la bola está situada en la parte superior del ratón, debiendo moverse con el dedo índice o corazón. Esto depende de si el usuario es diestro o zurdo, y es que no hay opciones para zurdos, sino que deberán recurrir a los ambidiestros.
Como es obvio, aquellos trackballs que tienen la bola en la parte superior, tiene los clics izquierdo y derecho en los laterales: todo depende de los gustos y estilos de cada usuario.
Con todo esto, existe cierto debate sobre si considerar a un trackball un ratón convencional. En un pasado, no existía esta duda y se integraba dentro de los ratones como una opción completamente viable. Pasados los años, han desaparecido de los setups debido al auge del ratón óptico, láser y la conectividad inalámbrica.
Te recomendamos la lectura de nuestros consejos a la hora de elegir un ratón.
¿Los trackballs son mejores que los ratones convencionales?
Parece una pregunta ridícula, ¿verdad? Pues, hay estudios detrás sobre qué es lo más interactivo e intuitivo para un usuario a la hora de manejar un periférico de entrada para mover el cursor o interactuar con el GUI o interfaz.
Elsevier Press publicó el libro Handbook of Human Computer Interaction, elaborado por M.G. Helander, T.K. Landauer, P.V. Prabhu, en el que se analiza 6 dispositivos: ratón, trackball, joystic, tablet, un pen táctil y una pantalla táctil. Se hizo una calificación sobre su eficacia en una variedad de tareas, ocupando el 1º puesto la tablet gráfica y en el segundo estaba el trackball.
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Sí que es cierto que la primera edición de dicho libro tiene lugar en 1988, por lo que la industria de la informática ha cambiado radicalmente. No obstante, se han ido sacando nuevas ediciones actualizadas.
Ventajas del trackball
Conocido su funcionamiento y lo que ofrece, es hora de valorar qué ventajas puede ofrecer respecto a un ratón convencional. A priori, encontramos estas:
- No es necesario contar con mucho espacio en el setup. No vais a mover el trackball, por lo que esto despreocupa al usuario de tener una buena alfombrilla y mucho espacio en la mesa.
- Tamaño compacto. Los trackballs no son armatostes, aunque sí lo fueron en su momento, así que contribuye a la ventaja anterior.
- Preciso. Se han mejorado bastante con el paso del tiempo, y son mucho más capaces que antes. El hecho de que podamos mover el cursor con la punta de nuestros dedos, da cierta sensibilidad que puede ser interesante. Además, no tendremos que mover la muñeca para nada, estando concentrados únicamente en el pulgar.
- Mantenimiento más sencillo. Como mucho, tendremos que limpiar la parte superior del trackball, haciendo énfasis en la bola y en los clicks o el scroll. Aquí no hay que preocuparse por los pesos del ratón o por los surfers.
- Ergonomía. Logitech es una de las marcas que se ha preparado para dotar a los trackballs de más ergonomía, convirtiéndolos en un periférico muy interesante para aquellos que tengan molestias en el túnel carpiano o en el antebrazo.
- Su precio no es disparatado. Teniendo en cuenta que no es un producto tan demandado, sorprende que los precios no sean desorbitados. Sí que es cierto que encontramos muchos ratones de gama baja a mejor precio, lo que sí es una barrera de entrada.
Desventajas
El lado malo de los trackballs existe y tiene distintas desventajas que debéis conocer antes de decantaros por uno:
- Son más grandes que los convencionales. Son bastante más aparatosos en este sentido, sobre todo si tenemos en cuenta que existen ratones muy pequeños (para portátiles, por ejemplo).
- Peor oferta. Al ser un producto menos demandado, no encontramos un catálogo súper extenso de diversas marcas en el que encontrar nuestro trackball ideal.
- Precio ligeramente superior, si tenemos en cuenta los ratones de gama media y baja. Son productos que se mueven por los 30-35€ de partida, lo que puede ser una gran barrera para muchos usuarios que desconocen si van a convencerles o no.
- Puede que no te adaptes a ellos. Hay usuarios que terminan desistiendo y optan por los ratones convencionales, y es que el uso de trackballs requiere un periodo de adaptación.
- ¿Peor rendimiento gaming? Aquí abrimos debate, pero lo cierto es que en eSports nadie utiliza estos ratones, por lo que no serán lo mejor para este fin.
- Contraindicado para manos pequeñas. Su tamaño es más grande que un ratón convencional, así que si tienes una mano pequeña, puede que no te termines adaptando. Al final, tenemos que estar cómodos cuando usamos el ratón y posamos la mano sobre él.
Modelos recomendados
La mejor forma de terminar el post es recomendando ciertos modelos con los que no vais a fallar a la hora de comprar un trackball.
Amazon Basics: la experiencia más económica
Se trata de la opción más económica que hemos encontrado dentro de los trackballs, y es completamente inalámbrico (uso de 2.4 GHz). Destaca por tener botones programables, alcance de 9 metros y compatibilidad con Windows y Mac.
Por 25-26€ nos parece un buen precio, aunque no esperéis el mejor trackball del mercado. Sin embargo, me parece interesante para quienes no han probado uno y se quieren ver con uno antes de comprar el definitivo.
Última actualización el 2024-11-21
Logitech ERGO M575: el «elegido»
Decimos que es el elegido por su relación calidad-precio, como por ser un trackball bastante moderno que viene con distintos matices que quiero destacar. En primer lugar, viene con un diseño ergonómico para diestros que nos permite tener una posición más natural.
Tiene conectividad inalámbrica a través de bluetooth (10 metros de alcance) cuya autonomía asciende a 24 meses de uso con solo una batería. Decir que su tamaño está diseñado para que las personas con manos más pequeñas puedan manejarlo sin problema.
Su vida útil llega a los 3 millones de clics, así que tendréis un ratón para muchos años.
Última actualización el 2024-11-21
Kensington K7237EU Orbit: para productividad
Enfocaría este trackball hacia usos más productivos que los de navegar por Internet o hacer tareas de ofimática. Estamos ante un trackball con la bola en el centro del dispositivo, el cual viene con dos clics a los laterales y un tracking de la bola óptico, siendo ésta de 40 mm.
Al tener tecnología óptica de tracking, podemos mover el cursor de forma más precisa con menos movimientos en la mano. Para la ergonomía trae un reposamuñecas extraíble que es muy interesante para la fatiga de la extremidad. Por otro lado, es para ambidiestros, así que dará igual de qué mano seas dominante.
Última actualización el 2024-11-21
Hasta aquí todo sobre los trackballs, así que esperamos que haya sido de ayuda esta información. No os vayáis con alguna duda, y dejadla abajo para que podamos solventarla.
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¿Qué os parecen los trackballs?
