En esta ocasión vamos a analizar un SSD externo un poco más particular no solo por su diseño, sino por estar enfocado a uso en consola, se trata del Western Digital Black D30. Con un rendimiento de 900 MB/s en lectura y escritura bajo USB 3.2 Gen2, se queda a medio camino entre el P10 y el potente D50 Gen2x2. Con su peculiar diseño en forma de cajón militar, ofrece resistencia y alta capacidad para almacenar juegos de PC o consola. ¿Te va quedando poco espacio para nuevos juegos? Veamos si éste SSD es lo que estás buscando

Antes de continuar, agradecemos a Western Digital su confianza en nosotros al cedernos este SSD portátil para su análisis.

Western Digital Black D30 características técnicas

Unboxing

Ya desde su presentación el Western Digital Black D30 utilizará una estética inspirada en el mundo militar con su fuente característica, color negro y la imagen a color de la unidad. Tendremos parte de sus especificaciones tanto en la cara principal como trasera.

Abrimos esta caja de cartón flexible para encontrar un blíster de plástico semirrígido que almacenará de forma segura la unidad. Junto a ella tenemos el resto de accesorios por separado en distintos apartados.

El bundle incluye:

Unidad Western Digital Black D30
Soporte vertical
Cable USB-C a USB-A

Un cable con ambas cabeceras USB-C hubiera estado bien para asegurar compatibilidad con portátiles Max-Q como los MacBook o similares, los cuales no llevan USB estándar.

Diseño militar muy original

El apartado de diseño de este Western Digital Black D30 y toda la serie P y D será bastante original y atractivo, al menos en nuestra opinión. Y es que se presenta en un encapsulado inspirado en un maletín miliar en color negro, estando fabricado íntegramente de plástico rígido.

El único inconveniente por así decirlo será el tamaño, pues con unas medidas de 96 mm de largo, 35 mm de grosor y 58 mm de ancho no va a ser el SSD externo más pequeño del mercado. Notemos que su grosor es mayor que por ejemplo el P10, más planito al ser básicamente un SSD de 2,5” encapsulado.

Nos parece curioso que no se ha certificado con protección IP55 y ni mucho menos IP68, aunque notamos que el cerramiento de las zonas es perfecto y parece que no lleva aberturas más allá del puerto USB. En cualquier caso, no merece la pena mojarlo y arriesgarnos a un desastre. Aunque el tamaño es amplio, se nota un SSD bastante rígido y que soporta bien caídas, y no notamos que ningún elemento interno esté bailando ni mal fijado.

Analizando su encapsulado en detalle, tenemos una composición de dos piezas que se unen entre sí a presión y posiblemente estarán pegadas. Apenas se notará, porque se realiza justo por el borde de la cara superior notándose solo en las pestañas que sujetarán el soporte para colocación vertical. Tened en cuenta que los tornillos de llave hexagonal ubicados en las esquinas de ambas caras serán puramente estéticos. Al menos nosotros no hemos conseguido absolutamente nada extrayéndolos, un poco trolls estos de WD.

Para no dañar el serigrafiado en color blanco de la cara principal ni su diseño 3D, se ha incluido un pequeño soporte para colocar el Western Digital Black D30 verticalmente, como si fuese un HDD externo. Es un pequeño detalle por parte de la marca que ayudará a una mejor colocación del SSD junto a nuestro equipo o consola.

La interfaz de conexión se encuentra en uno de los laterales, ligeramente escorada a un lado para dejar espacio a un amplio LED que se iluminará cuando conectemos el SSD, y parpadeará cuando haya transferencia de datos. El cable que se incluye será de buena calidad, con trenzado interno y encapsulado de goma, con unos 50 cm de longitud.

Características técnicas

El Western Digital Black D30 utilizará como interfaz nativa la de USB 3.2 Gen2, ya sea Type-C o Type-A, soportará como máximo 10 Gbps (1,25 GB/s como máximo). Esto no impide que podamos utilizarlo en puertos Gen2x2 o Thunderbolt 3/4, aunque obviamente no aumentaremos el rendimiento por ello.

Con esta interfaz a 10 Gbps se asegura la compatibilidad con una gran gama de dispositivos además de PC con Windows, como PS4 / 4Pro / 5, Xbox Series X/S y por supuesto Mac OS 10.11 o superior. Es un SSD pensado para ampliar la capacidad de almacenamiento de consolas, con rendimiento suficiente para hacer una carga rápida de juegos y jugar con fluidez.

En su interior encontraremos unas memorias SanDisk NAND TLC de 96 capas para crear versiones de 500 GB, 1 TB o hasta 2 TB. Esta unidad de 1 TB debería de contar con dos chips, utilizando dos canales para ello, gestionados por un controlador WD Gen3 NVMe que hará de puente entre la interfaz USB y PCIe. El rendimiento máximo especificado será de 900 MB/s de lectura secuencial y otros 900 MB/s de escritura secuencial, pero nada de información acerca de los IOPS en operaciones aleatorias.

El fabricante no ha especificado nada acerca de su vida útil o TBW más allá de los 3 años de garantía que nos dará. Tampoco se nos informa de compatibilidad con cifrado AES de 256 ni TCG Opal, así que interpretaremos que no existen en la unidad. Las temperaturas de operación se sitúan entre 0 y 45^oC, un clásico, y las temperaturas de almacenamiento entre -20 y 65^oC un límite un poco más bajo que otras unidades que alcanzan los 85^oC, si bien su rendimiento más bajo le hará generar menos calor.

Equipo de pruebas y benchmarks

Pasamos ahora a realizar algunas pruebas de rendimiento a este Western Digital Black D30. Para ello, hemos utilizado nuestro equipo habitual con placa AMD Z570 junto al 3700X, y un SSD interno Corsair MP510.

Las pruebas a las que hemos sometido este SSD son las siguientes:

Explorador de Windows
Crystal Disk Mark
AS SSD Benchmark
ATTO Disk Benchmark
Anvil´s Storage

Todos estos programas están en versiones actuales, y si bien es cierto que en este caso es una unidad conectada por USB, merece la pena ver cuál sería su rendimiento como SSD normal.

Recordad no abusar de estas pruebas en vuestras unidades, ya que el tiempo de vida se reduce.

El rendimiento de la unidad en benchmarks es acorde con lo que promete el fabricante, superando los 930 MB/s en lectura, aunque por muy poquito no llega a los 850 MB/s en escritura. No obstante son tasas muy buenas, sorprendiendo su excelente rendimiento en bloques aleatorios al superar los 250 MB/s en Q32T1 y los 40 MB/s en Q1T1, nada mal. Como siempre, en el resto de test estas cifras caen un ligeramente por debajo de los 900 MB/s, aunque es algo habitual rente a CDM.

Pasamos a los resultados de lectura y escritura copiando ficheros desde Windows 10, obteniendo 529 MB/s y 547 MB/s respectivamente. Al utilizar un SSD NVMe interno no habrá limitación en este aspecto, así que podríamos concluir que es el rendimiento real de la unidad en el explorador de archivos. Son cifras realmente buenas, muy estables durante el proceso y sin bajones mientras sean bloques tipo ISO o vídeo. Obviamente el rendimiento dependerá del tipo de archivo, disminuyendo con ficheros pequeños, .exe o .dll.

Palabras finales y conclusión acerca del Western Digital Black D30

No será el SSD externo más potente del mercado, porque tampoco lo busca, el Western Digital Black D30 está enfocado que ofrecer buenas prestaciones espacialmente para consolas de nueva generación. La posibilidad de llevar con nosotros todos o parte de nuestros juegos en un SSD de gran tamaño y no comprometer la capacidad de una Xbox SX o PS5.

La unidad cumple a la perfección con lo que promete, una interfaz USB 3.2 Gen2 bastante extendida ya, con 900 MB/s en lectura y escritura. Suficiente para superar un SSD SATA, y proporcionar bajos tiempos de carga y rendimiento muy estable en la copia de ficheros en Windows. Además lo hace con un encapsulado espectacular, muy original inspirado en un maletín militar, y que soporta perfectamente caídas.

Te recomendamos la lectura de los mejores SSD externos del mercado

El Western Digital Black D30 tiene un precio oficial de 180 euros para la versión de 1 TB, partiendo de los 110 euros para el modelo de 500 GB y alcanzando los 320 euros para el modelo de 2 TB. Afortunadamente en Amazon se reducirá un poco el precio, pero siguen siendo cifras propias de un SSD Gen2x2 o Thunderbolt de 2000 MB/s, así que no podemos considerar que sea muy competitivo.

En este rango de rendimiento hay muchos rivales más baratos, así que las armas serán la calidad de esta marca, fiabilidad con rendimiento muy estable y una buena estética