MSI MEG Aegis Ti5 10th Review en Español (Análisis completo)

El MSI MEG Aegis Ti5 10th llega finalmente a nuestras manos, el PC gaming de sobremesa más potente y novedoso de la marca gracias a un diseño que te dejará sin aliento. Decir que su chasis es agresivo es quedarse corto, y además repleto de iluminación e interacción gracias a una pantalla y mando de control directamente integrados con Dragon Center.

Por si fuera poco, MSI ha optado por el mejor hardware gaming, un Intel Core i9-10900K con refrigeración líquida, una Nvidia RTX 3080 con disipador custom y 128 GB de memoria RAM. Además, cuenta con bastante capacidad de expansión de almacenamiento si no tenemos suficiente con los 5 TB disponibles de fábrica. Si tienes 4700 euros puede ser tuyo, mientras tanto ¡empecemos este análisis!

Damos las gracias a MSI por confiar siempre en nosotros y cedernos temporalmente este PC para su análisis.

MSI MEG Aegis Ti5 10th características técnicas

Unboxing

Para un chasis con más de 50 cm de altura y profundidad nos encontraremos una caja con dimensiones muy amplias, superiores a los 60 cm y pesando 17 kg. Dicha caja está construida en cartón rígido de grosor estándar, decorada con fotos y especificaciones del equipo sobre un acabado estilo vinilo en color negro.

En su interior se ha colocado el MSI MEG Aegis Ti5 10th obviamente montado al completo y bien sujeto mediante dos moldes de espuma de polietileno. A su vez se encuentra metido dentro de una bolsa textil que lo protege del polvo. Dentro de una pequeña caja tenemos el resto de accesorios.

El bundle contará con los siguientes elementos:

• PC MSI MEG Aegis Ti5 10th
• Cable de alimentación
• 2x Cables SATA a 6 Gbps
• Tornillos para instalación de SSD SATA
• Manual de usuario
• Guía de instalación rápida y pegatinas
• Tarjeta de garantía
• Bayeta de microfibras para limpiar el polvo

El diseño exterior más agresivo del mercado

Obviado su hardware, el MSI MEG Aegis Ti5 10th destaca sobre cualquier PC que hayamos visto por su increíble diseño. Todo un alarde de innovación que da un giro de tuerca a las iteraciones anteriores sin perder su esencia.

Comenzamos analizando el diseño de su sistema de soporte, que consiste en dos patas de aluminio que lo dotan de excelente estabilidad. Dichas patas están integradas al chasis metálico interior y a su vez con un asa superior en la parte trasera que utilizaremos para transportar el equipo. La forma cilíndrica inferior cuenta con iluminación ARGB Mystic Light y capacidad de giro, aunque sus carcasas serán de plástico.

Seguimos hacia las caras laterales del chasis, cuya descripción estética más aproximada sería la de una nave espacial. Ambos lados son simétricos, y aunque no lo parezca, son en definitiva tapas que podremos extraer perfectamente retirando sus respectivos tornillos traseros. El mecanismo de fijación es por deslizamiento mediante pestañas, así que su extracción es muy sencilla.

Sobre un chasis metálico tendremos elementos de plástico rígido en color gris metalizado en distintas alturas. Siempre dejando un amplio espacio central con una rejilla metálica de grano medio para asegurar una correcta refrigeración y filtración de polvo. En el borde superior y a ambos lados tendremos dos extensiones para poder colgar los auriculares, dando una estética bastante peculiar cuando están desplegadas. En estos laterales del MSI MEG Aegis Ti5 10th no faltan dos zonas de iluminación ARGB.

Panel I/O y frontal conectado a Dragon Center

El apartado de conexiones y diseño del frontal de este MSI MEG Aegis Ti5 10th merece un apartado independiente por lo diferente que es a lo que ofrecen otros equipos. Su estética contrasta con el resto del equipo por su color negro sobre dos tapas acrílicas que dejan ver parcialmente el contenido del interior.

La mitad superior cuenta con aberturas en sus laterales para dejar salir el aire caliente del interior del chasis. A través de la placa de plástico podremos ver bastante bien la tarjeta gráfica, pues a ambos lates no pueden faltar dos tiras de iluminación que se sincronizan con el resto presentes. Esta también integra el panel de puertos frontal, en el que encontramos:

• Botón de encendido
• 2x USB 3.2 Gen1 Type-A
• 1x USB 3.2 Gen2 Type-C
• 2x Jack de 3,5 mm para salida de audio y entrada de micro

La parte frontal tiene otro cristal acrílico con mayor opacidad, aunque también con aberturas para refrigeración. En ella tenemos una destacada novedad como es el mando de control o Gaming Knob, el cual consiste en tres elementos que funcionarán de la siguiente forma:

• La perilla central integra una pantalla a color conectada directamente al software Dragon Center. En ella se muestran un total de 5 menús como los de iluminación, monitor de rendimiento o escenario de uso.
• Un dial cilíndrico nos permitirá seleccionar cada uno de estos menús tanto a izquierda como a derecha. Además, una vez seleccionado apretando el botón central, el propio dial permite navegar entre las opciones disponibles, por ejemplo efectos de luz, modos de rendimiento, etc. Apretando de nuevo el botón la opción que aparezca quedará directamente seleccionada sin necesidad de acceder al software.

Todo esto será posible solamente si tenemos MSI Dragon Center instalado en el MSI MEG Aegis Ti5 10th, que por otro lado ya vendrá disponible con el sistema operativo de fábrica. Además de los apartados generales como rendimiento, monitor de recursos o cancelación activa de ruido, contaremos con uno específico para el Gaming Knob. De un máximo de 9 menús debemos optar por 5 de ellos, cada uno con sus propias funciones que debemos personalizar en la zona inferior. Cuantas más seleccionemos, más posibilidades nos brindará el dispositivo.

La gestión de iluminación será del todo básica tenerla en el Gaming Knob, aunque esta vez no podremos direccionar el color de cada LED de forma individual. En su lugar, todo el sistema estará sincronizado para operar con las distintas animaciones dándonos un resultado impresionante como ningún otro PC.

Conectividad trasera

Antes de analizar su configuración de hardware nos queda ver la conectividad trasera que ofrece el MSI MEG Aegis Ti5 10th. No está al nivel de una placa base Z490 estándar del fabricante, pero tendrá conexiones variadas e interesantes para todo tipo de público.

La posición de la placa no es la habitual en los chasis, pues está girada 180^o y ubicada más a la derecha con la tarjeta gráfica colocada en la zona superior. Dicha placa contará con las siguientes conexiones:

• 1x USB 3.2 Gen2 Type-C
• 3x USB 3.2 Gen2 Type-A (rojos)
• 1x Thunderbolt 3
• 2x USB 2.0 (negros)
• 1x PS/2
• 1x Puerto HDMI 1.4
• RJ45 LAN 2,5 Gbps (negro)
• RJ45 LAN 1 Gbps (rojo)
• 1x Salida óptica de audio S/PDIF
• 5x Jack de 3,5 mm
• 1x HDMI 2.1 (GPU)
• 3x DisplayPort 1.4 (GPU)

Entre ellos el que más destacada seguramente es el puerto Thunderbolt 3, que no suele ser habitual en placas de montajes de escritorio en beneficio de más conexiones USB 3.2 Gen2. Y lo cierto es que es un puerto más útil para portátiles por las posibilidades que ofrece en cuanto a velocidad y versatilidad para almacenamiento externo.

El puerto HDMI integrado no ofrece demasiada utilidad salvo que utilicemos en algún momento los gráficos integrados del i9-10900K. Echamos en falta un botón de BIOS Flashback o al menos un Clear CMOS para resetear la configuración de la BIOS en caso de realizar overclocking.

Esta zona trasera también cuenta con una capacidad de 4 slots de expansión de los cuales ya tenemos prácticamente tres ocupados debido a la tarjeta gráfica dedicada y su grosor de 2,5 slots. Pero todavía podríamos introducir por ejemplo una tarjeta de expansión Wi-Fi o USB en el 4º espacio disponible.

Finalmente, la ubicación de la fuente de alimentación nos deja el conector de 3 pines bastante escondido y discreto en la zona inferior del chasis. En este caso la fuente no cuenta con interruptor de apagado y encendido, aunque sí con el típico ventilador inferior para refrigerar los componentes de la misma.

Interior y montaje del MSI MEG Aegis Ti5 10th

Es la hora de extraer las tapas laterales del MSI MEG Aegis Ti5 10th y ver más en detalle lo que nos brinda su interior en cuanto a distribución de componentes y características técnicas. Pese a ser una torre de escritorio, la extracción del lateral derecho implica la pérdida de garantía. Una desventaja si queremos instalar unidades SSD SATA, pues los puertos SATA solo son accesibles desde dicha zona.

Desde la zona izquierda se nos permite acceder a dos slots de instalación para unidades SSD SATA de 2,5” y una ranura M.2 para unidades NVMe de 2280. En el primer caso ya hemos visto la problemática de conectar las unidades a la placa base en el lado contrario, aunque superada la garantía tenemos total libertad de movimientos.

En dicha zona también contamos con el microcontrolador para las tiras ARGB, con todas sus conexiones ya ocupadas y a su vez conectado a un puerto USB interno de la placa. Nos resulta curioso encontrar un ventilador en modo succión justo detrás del socket de la CPU, que ayudará a refrigerar toda esta zona de forma más eficaz.

Pasamos a la zona derecha, en la que dejamos al descubierto el acceso a la tarjeta gráfica dedicada y al sistema de refrigeración líquida. Este se presenta en un marco de plástico provisto de una bisagra que permite desplegar el radiador hacia fuera para trabajar en el hueco del interior. En dicha zona, tenemos como elementos importantes accesibles la propia CPU y memoria RAM, así como uno de los dos SSD M.2 y el disco duro de 3,5”.

El habitáculo de la tarjeta gráfica está diseñado para mantenerla en posición horizontal opuesta a la habitual en chasis ATX, con escaso espacio para trabajar en ella. En la parte central cuenta con una sujeción de seguridad, y otra en el extremo aún menos accesible que dificulta mucho el trabajo de extracción. Debido a la colocación de la placa base, no se ha hecho uso de cable riser para la conexión de la misma.

Configuración de refrigeración al completo

Del sistema de refrigeración de este MSI MEG Aegis Ti5 10th debemos reconocer que no es demasiado silencioso en general, y aunque permite una completa gestión desde el software Dragon Center.

En cuanto a refrigeración propia del chasis contamos con un ventilador básico visto en el lateral derecho. Aunque el flujo no va a ser una maravilla, nos permitirá meter aire hacia el habitáculo principal para que los ventiladores del sistema de refrigeración hagan mejor su trabajo. Un ventilador en la zona trasera en modo extracción se encargará de renovar el aire interior y mejorar las condiciones de temperatura para placa y memorias RAM.

Como elemento principal de enfriamiento tenemos nada menos que un sistema de refrigeración líquida todo en uno MSI Dragon 240 mm. Se trata de una variante del Coreliquid 240R que ya analizamos hace un tiempo con excelentes resultados. Esta configuración cuenta con radiador de aluminio de 240 mm provisto de dos ventiladores en modo extracción, esta vez sin iluminación y bomba integrada. El bloque de CPU sí que cuenta con iluminación aunque queda totalmente escondido, pero se asegura un rendimiento casi igual que la versión independiente de venta.

El siguiente elemento clave de refrigeración es la tarjeta gráfica, y en este apartado MSI ha mejorado considerablemente la construcción frente a los modelos Ventus que típicamente se utilizaban para las torres premontadas. Siendo toda una RTX 3080, MSI ha optado por un disipador de triple ventilador. Estos no presentan giro alternado como los modelos MSI Trio por ejemplo, pero sí tecnología Zero Frozr que permite apagar automáticamente los ventiladores mientras la GPU permanezca en reposo. El disipador utilizado cuenta con tres bloques de aluminio con denso aleteado unidos entre sí por heatpipes de cobre que parten de un cold plate no distinto a las tarjetas custom del fabricante.

Solamente echamos en falta refrigeración para la el VRM de la placa base, ya que esta no cuenta con absolutamente ningún bloque pasivo. Esto va a ser un hándicap a la hora de efectuar overclocking al conjunto, ya que la demanda de potencia de la CPU va a ser bastante elevada y con ello el estrés de los MOSFETS y Chokes implementados. Veremos más adelante en qué temperaturas se traduce dicha ausencia, aunque adelantamos que no son demasiado elevadas.

Apartado de red completo

El hecho de ser un equipo de escritorio, hoy día no es impedimento para disponer de un completísimo apartado de conectividad de red con doble LAN y tarjeta inalámbrica. En el primer caso tenemos un chip Intel I225-V que ofrece un ancho de banda máximo de 2,5 Gbps y otro Intel I219-V con 1 Gbps.

La placa incluye ranura CNVi con una tarjeta de red Intel Wi-Fi 6 AX200 ya instalada. Esta es la tarjeta de red por excelencia actualmente en portátiles y placas de gama alta, para dotar al equipo de conexión inalámbrica bajo IEEE 802.11ax. Ya sabréis a estas alturas que soporta un ancho de banda máximo de 2,4 Gbps en la banda de 5 GHz y de 574 Mbps en la banda de 2,4 GHz.

Elementos de hardware utilizados

Llega el momento de conocer más en detalle los elementos que componen el MSI MEG Aegis Ti5 10th, que serán prácticamente lo mejor disponible en el mercado para equipos gaming.

Empezamos por el elemento más importante, su CPU, que se trata nada menos que de un Intel Core i9-10900K. Con datos que poco a poco se van filtrando de la 11ª generación, los PC premontados actuales equipan los procesadores de arquitectura Comet Lake-S, los más potentes de la marca azul para juegos antes de la llegada de los AMD Ryzen 5000. Su TDP de 125W y núcleos desbloqueados nos permitirán efectuar un overclocking de unos 5,1 o incluso 5,2 GHz si nos tocase un buen silicio.

La arquitectura de 14 nm es una vez más optimizada en esta CPU de 10 núcleos físicos y 20 lógicos con 20 MB de memoria caché L3 y estrenando nuevo socket LGA 1200. Esta CPU opera a una frecuencia base de 3,7 GHz, y Turbo Boost 3.0 de 5,3 GHz en un solo núcleo. La frecuencia máxima de operación en todos los núcleos a la vez es de 4,9 GHz y 5,0 GHz si activamos el Gaming Mode en la BIOS de la placa. De forma testimonial dispone de gráficos integrados Intel UHD Graphics, en desuso en esta versión por tener gráfica dedicada.

Y precisamente seguimos con la tarjeta gráfica, que como no podría ser de otra forma aparece la arquitectura RTX 30 Ampere de Nvidia también en cajas premontadas. La versión que MSI ha equipado cuenta con una frecuencia base de 1440 MHz y turbo de 1710 MHz, igual que la versión de referencia de la marca verde. La frecuencia real obtenida con GPU-Z a máximo estrés es de 1935 MHz. Y lo cierto es que esperábamos al menos un pequeño overclocking de 50 o 75 MHz por el buen disipador que tiene. La capacidad de overclocking no obstante va a ser buena, pues tenemos una doble entrada de alimentación de 8 pines con un Power Limit bloqueado.

En su interior tenemos lo que en otras RTX 3080, es decir, un chipset de 8 nm Samsung provisto de 8704 Núcleos CUDA, 272 Núcleos Tensor de 3ª generación y 68 Núcleos RT de 2ª generación. A esto le sumamos 10 GB de memoria GDDR6X operando a 19 Gbps (9500 MHz de frecuencia efectiva). Su ancho de bus se eleva a 320 bits y el ancho de banda a 760 GB/s, siendo la mejor tarjeta para juegos en relación a su precio frente a la RTX 3090.

Respecto a la placa base no podríamos tener otra que una versión personalizada para este equipo con chipset Intel Z490. De ella destaca su puerto Thunderbolt 3 y un formato Micro-ATX que permite expandir la conectividad PCIe. Esta versión tiene un VRM de 10 + 1 fases de alimentación con MOSFETS de On Semiconductor modelo NCP302155 con una capacidad individual de 55A. No son del alto nivel como los presentes en placas MSI Z490 de consumo general, pero funcionan bastante bien. La capacidad de almacenamiento también es bastante destacable con tres ranuras M.2 PCIe 3.0 y varios puertos SATA a 6 Gbps.

La capacidad de memoria se ha llevado al máximo, con cuatro módulos Samsung de 32 GB haciendo un total de 128 GB. Estos por supuesto serán módulos Dual Rank compatibles con Dual Channel y operando a una frecuencia máxima de 2933 MHz. Honestamente hubiéramos preferido que se sacrificase capacidad en beneficio de más elevada frecuencia, ya que el rendimiento en juegos aumentaría un poco.

El último elemento principal del MSI MEG Aegis Ti5 10th será la configuración de almacenamiento, dotada de un total de 5 TB disponibles. El conjunto más rápido y donde se instala el sistema operativo serán dos Western Digital PC SN730 PCIe 3.0 de 1 TB configurados en forma de RAID 0. Junto a ellos, tenemos una tercera unidad Toshiba HDD de 3,5” con capacidad de 3 TB para almacenamiento masivo de datos. Sin duda una excelente configuración extrayendo máxima capacidad en rendimiento secuencial para la interfaz PCIe 3.0 de esta placa.

Pruebas de test de rendimiento

Ya hemos visto todo lo que nos ofrece sobre el papel el MSI MEG Aegis Ti5 10th, así que es el turno de ver hasta dónde puede llegar en rendimiento. Evaluaremos el rendimiento general del equipo con benchmarks, así como test dedicados a GPU, CPU, RAM y SSD.

El banco de pruebas usado será:

• Equipo: MSI MEG Aegis Ti5 10th
• Monitor: ViewSonic VX3211-4k-MHD

Las pruebas se han realizado con Windows 10 actualizado a su última versión, BIOS más actual, y todos los drivers instalados. El perfil de rendimiento usado es el de máximo rendimiento de Windows, con la configuración de componentes de fábrica.

Rendimiento del SSD

Empezamos con una prueba rápida para evaluar la capacidad de lectura y escritura del RAID 0. Para ello, hemos utilizado el software CrystalDiskMark 7.0.0.

En comparación con los resultados obtenidos en otros análisis con una sola unidad, tenemos un incremento de rendimiento en las operaciones secuenciales. De los aproximadamente 2900 MB/s de lectura de una unidad de 1 TB, pasamos a más de 3500 MB/s con ambas unidades y llegando así a las cifras máximas reales de la interfaz. En operaciones aleatorias sin embargo se disminuye un poco el rendimiento frente a una sola unidad.

Benchmarks y test sintéticos

Pasemos ya al bloque de test sintéticos en donde probamos el desempeño de la CPU individual y con GPU. Para ello hemos utilizado los siguientes programas:

• Cinebench R15
• Cinebench R20
• PCMark 8
• PCMark 10
• 3DMark Time Spy, Fire Strike y Port Royal
• VRMark Orange Room

Empezando por los test de rendimiento de Cinebench, en multicore estamos obteniendo cifras acorde a las vistas durante el análisis de esta CPU, si bien el monocore se queda un poco por debajo. Esto se debe a que el boost 3.0 estará un poco tocado a nivel de BIOS, así que aún hay un poco margen de mejora aquí. El resto de test está a buen nivel y con las cifras que esperábamos comparándolas con las obtenidas en las RTX 3080 y 10900K de forma individual.

Rendimiento en juegos

La siguiente prueba se trata de evaluar el rendimiento en juegos para ver hasta dónde es capaz de llegar con este MSI MEG Aegis Ti5 10th. Para ello hemos realizados pruebas a resoluciones Full HD, 2K y 4K con la configuración que sigue en cada juego:

• Final Fantasy XV, standard, TAA, DirectX 12
• DOOM 2016, Ultra, TAA, Open GL 4.5
• Deus EX Mankind Divided, Alto, Anisotropico x4, DirectX 11
• Far Cry 5, Alto, TAA, DirectX 12
• Metro Exodus, Alto, Anisotropico x16, DirectX 12 (Con RTX)
• Shadow of the Tomb Rider, Alto, TAA + Anisotropico x4, DirectX 12

El rendimiento en juegos también se ha visto un poco afectado por la frecuencia de la memoria RAM, ser módulos Dual Rank y también por mantener la tarjeta gráfica a la frecuencia del modelo de referencia. Con unas memorias de 3600 MHz sin duda hubiéramos rascado esos FPS que nos faltan en Full HD sobre todo, aunque las cifras en 4K son similares al resto de tarjetas RTX 3080 analizadas.

Consumo y temperaturas

Finalmente hemos efectuado una prueba de estrés al MSI MEG Aegis Ti5 10th para ver cómo se ha comportado tras unos 60 minutos a máximo rendimiento en GPU con Furmark y CPU con Prime95. Las temperaturas han sido monitorizadas con HWiNFO.

A continuación os dejamos los consumos que hemos obtenidos con el equipo:

Las temperaturas de CPU son muy buenas debido a la refrigeración líquida que se ha instalado, con picos muy ajustado inferiores a los 70^oC durante el tiempo de estrés. Y como cabía esperar, las temperaturas en superficie del VRM son elevadas, aunque menos de lo que esperábamos. Así que no se pone en peligro la integridad de los MOSFETS en ningún momento, pero un par de disipadores hubieran mejorado mucho el panorama. Finalmente, los SSD registran temperaturas similares a las de un portátil, así que no tendremos problemas de thermal throttling en ellos.

Por parte de la tarjeta gráfica, podemos decir que es un disipador algo más ruidoso que el utilizado en los modelos custom del fabricante y además con algo menos de rendimiento. Al estar en un recinto cerrado las temperaturas aumentan, por ello está lejos de esos 65-70^oC ideales para esta GPU.

Palabras finales y conclusión acerca del MSI MEG Aegis Ti5 10th

Terminamos el análisis de este colosal equipo en el que MSI ha llevado hasta el límite su creatividad, pero también las prestaciones y de paso el precio. Queda claro que no es un equipo para todo el mundo, pero será adecuado tanto para gamers como para creadores.

Su radical chasis y estética serán todo lo que un aficionado al modding e iluminación aspiraba, con múltiples zonas ARGB Mystic Light gestionables desde Dragon Center. Pero se va un paso más lejos y con el mando frontal provisto de pantalla podremos llevar a otro nivel la interacción, algo que solamente ofrece este equipo en el mercado. Echamos un poco en falta más puestos USB, pero queda justificado con la presencia de Thunderbolt 3 ideal para creadores de contenido.

Te recomendamos nuestra guía de mejores monitores del mercado

Si la estética es de 10, la configuración de hardware no se queda atrás, con un i9-10900K junto a 128 GB de memoria y una Nvidia RTX 3080 tendremos el arma definitiva para juegos o renderizado de vídeo en 4 y 8K. Nosotros hubiéramos apostado por menos capacidad de RAM y mayor frecuencia para exprimir más los FPS, pero este PC está orientado a jugar en 4K y aquí prácticamente iguala al resto de tarjetas 3080 de Nvidia.

En un PC de tal magnitud y rendimiento echamos en falta detallitos como disipadores en el VRM o SSD, o incluso un disipador de GPU algo más silencioso. No van a poner en problemas la experiencia de juego ni fiabilidad del conjunto, y de hecho tenemos una refrigeración líquida de calidad para la CPU que la lleva a excelentes temperaturas.

Es hora de pasar por caja, y el MSI MEG Aegis Ti5 10th estará disponible por un precio de nada menos que 4700 euros. Cada año el hardware mejora y con ello las configuraciones de PC, pero también los precios de modelos tan extremos como este. Accesible para muy pocos, así que el que se lo pueda permitir tendrá un PC pata negra único en su especie.

El equipo de profesional review le otorga la medalla de platino: