La tecnología inalámbrica es cada vez más una constante en nuestras vidas, algo ya tan natural e imprescindible como la conexión a internet. El Bluetooth junto con el Wi-Fi es uno de esos elementos que, aunque apareció de forma bastante discreta, permite actualmente interconectar casi cualquier tipo de dispositivo. ¿Queréis saber más? Acompañadnos.
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El origen del Bluetooth
El Bluetooth es un modelo de conectividad que encaja en el perfil de redes inalámbricas de área personal (WPAN). Su origen se remonta a 1998, cuando se produjo una asociación entre cinco empresas: Ericsson, IBM, Intel Corporation, Toshiba y Nokia (aunque actualmente hay muchas más) para trabajar en un nuevo modelo de tecnología inalámbrica. Juntas conformaron la asociación que hoy conocemos como Bluetooth Special Interest Group.
Debido a su modelo tecnológico y la intención de difundir una función común en gran cantidad de dispositivos, la propia asociación procuró infundir estos conceptos de unidad y versatilidad al logotipo. El origen del término Bluetooth se remonta al rey danés y noruego Harald Blåtand, cuyo nombre traducido al inglés es Harald Bluetooth y a quien se atribuye la unificación de las tribus danesas.
Son las iniciales del nombre de este rey las que se han llevado al alfabeto rúnico futhark, fusionándolas de nuevo para conformar el monograma que conocemos hoy. El tradicional color azul con que lo identificamos también puede considerarse una referencia a la tintura de glasto, una planta de cuyas hojas se extraía este color para usos bélicos, tintes de tejidos o ceremoniales.
Versiones de Bluetooth
El Bluetooth tal y como lo conocemos comenzó a desarrollarse a finales de los años noventa, apareciendo el primer modelo estable (Bluetooth 1.0) en 1999. A partir de aquí este tipo de conectividad inalámbrica fue mejorando progresivamente tanto en velocidad, estabilidad y versatilidad hasta llegar a su versión más reciente:
- 1999, Bluetooth 1.0: aunque sea el modelo original y supusiera un paso adelante tecnológicamente hablando, lo cierto es que la primera versión de Bluetooth fallaba más que una escopeta de feria. Su velocidad punta era de sólo 1 Mbps y el hardware necesitaba obligatoriamente el identificador del dispositivo Bluetooth para transmitir y por tanto no existía la posibilidad de hacerlo anónimamente.
- 2002, Bluetooth 1.1: podemos considerar que esta es la versión pulida del 1.1. Muchos de sus errores iniciales fueron corregidos y añadieron soporte para canales no cifrados así como indicadores de señal recibida (RSSI). Fue este modelo el primero que recibió la ratificación de estándar.
- 2003, Bluetooth 1.2: la velocidad de transmisión llegaba a alcanzar 721 kbit/s, garantizando una conexión e intercambio de datos más rápida. También introdujo el control de flujo y los modos de retransmisión de L2CAP así como mejoras en la calidad de los enlaces de audio. Este sería el último tipo de Bluetooth que funcionaba con modulación por desplazamiento de frecuencia gausiana o GFSK.
- 2004, Bluetooth 2.0: el también llamado Core Bluetooth presentaba compatibilidad total con su versión anterior y tasas de transferencia mejorada mediante EDR de hasta de 2 Mbps. Con él se introdujo el sistema de modulación por desplazamiento de fase o PSK con dos variantes: P/4-DQPSK y 8DPSK.
- 2007, Bluetooth 2.1: también compatible con Bluetooth 2.1, en esta revisión se depuró una mejora en el sistema de emparejamiento de dispositivos. Esto proporcionaba una conexión más estable y mayor seguridad, pudiéndose a alcanzar los 3 Mbps en tasa de transferencia. Un último punto de interés residía en un menor gasto de energía en modo de bajo consumo.
- 2009, Bluetooth 3.0: aquí se produjo un importante salto en lo que a velocidad se refiere, pasando de los 3 Mbps de sus antecesores a 24 Mbps. ¿Cómo? Pues pasando de la conexión nativa a un formato de enlace IEEE 802.11. No obstante esto sólo ocurría en los dispositivos catalogados como Bluetooth 3.0 + HS.
- 2010, Bluetooth 4.0: el llamado Bluetooth Smart Ready o Bluetooth de baja energía (BLE o LE) incluía los protocolos Bluetooth clásicos. Estaba principalmente enfocado a dispositivos y aplicaciones de baja potencia. Su velocidad de transferencia de datos alcanzaba entre 25 y 32 Mbps cubriendo hasta 60m de radio. No obstante dentro de la versión 4.0 también se podían encontrar dispositivos que no tenían retrocompatibilidad, por lo que recibían el nombre Bluetooth Smart. Estos eran compatibles con los de su mismo tipo y los Bluetooth Smart Ready.
- 2016, Bluetooth 5.0: con esta versión se experimentó de nuevo un enorme aumento en la velocidad de transmisión de datos, llegando a 50 Mbps. Su rango de rango de cobertura estable alcanza los 120m, aunque se puede estirar hasta 240m. Mantiene las características de bajo consumo adoptadas pos Bluetooth 4.0 y se mueve en el rango de los 2.4 GHz.
- 2019, Bluetooth 5.1: esta versión es relativamente nueva y no son muchas las diferencias que presenta respecto a su original, el 5.0. Aporta la capacidad de identificar la dirección desde la que nuestro dispositivo recibe la señal de conexión.
Rango de acción
En general se puede apreciar que con cada versión de Bluetooth su capacidad máxima de alcance tiende a aumentar. No obstante para aquellas personas que es prioritario saber este dato mucho más que la versión (velocidad) de datos, existe la categoría de rango de acción.
Con ella se establece un parámetro promedio de alcance de comunicación entre dispositivos. En este aspecto debemos tener en cuenta que por norma general un mayor número de paredes u obstáculos suelen resentir su capacidad, que se establece en:
- Clase 1: capaz de cubrir hasta 100m con un consumo de 100mW.
- Clase 2: su señal alcanza hasta de 20m y una potencia media de 2.5 mW.
- Clase 3: reducida a menos de un metro y con una media de 1mW.
- Clase 4: de onda corta, con una cobertura de hasta 50cm y potencia general de 0.5mW.
Utilidad y funciones
La tecnología Bluetooth como modelo de conexión inalámbrica resulta extremadamente versátil. Su público objetivo está más dirigido a la interacción entre dispositivos que a la transmisión de datos en red, más propia del WiFi, por lo que cubre una gran variedad. La capacidad de establecer comunicación en un rango de onda corta con cada vez mayor diversidad de dispositivos ha hecho que gran número de compañías integren esta característica en todo tipo de productos: teclados, ratones, ordenadores, tablets, relojes, coches e incluso bombillas.
Cómo sacarle provecho al Bluetooth
Como podréis deducir las aplicaciones del Bluetooth son tan variadas como los dispositivos en los que puede implementarse, de modo que vamos a mostraros una selección de los mejores ejemplos:
Periféricos
Teclados, ratones y lápices son tres productos estrella que utilizamos tanto en nuestros ordenadores como con smartphones y tablets. Para aquellos que no contéis con puerto USB para conectar los nanoreceptores de modelos inalámbricos o con cable, el Bluetooth supone una excelente alternativa que está ya integrada en casi la totalidad de móviles, tablets y ordenadores portátiles del mercado. Incluso si no está integrada en la placa base de vuestro PC podéis adquirir un adaptador por muy poco dinero. ¿Ventajas? A grandes rasgos la conectividad vía Bluetooth demanda un consumo mucho menor que el de dispositivos inalámbricos de radiofrecuencia, por lo que obtendremos una mayor autonomía.
Manos libres
En esta sección encajarían tanto los auriculares, relojes inteligentes e incluso automóviles equipados con esta tecnología. Vincular todos ellos a nuestro smartphone nos puede permitir disponer de nuestra lista de reproducción de música favorita en el navegador del coche o poder interactuar con nuestro asistente virtual (Alexa o Google). Para los auriculares, los modelos sin cable suponen toda una liberación y además suelen traer controles integrados si no queremos tener que estar cambiando canciones o el volumen manualmente en nuestro teléfono. Y qué decir de las posibilidades integradas en un smartwatch. Desde transcribir mensajes orales hasta poder contabilizar nuestros pasos, música o planes de ejercicio planificados.
Bloqueo y desbloqueo del móvil u ordenador
Esta es una de las funciones más interesantes que podemos conseguir con conectividad Bluetooth. Periféricos con sistema operativo Android de algunas marcas como Xiaomi tienen equipada una opción de bloqueo y desbloqueo en remoto desde un segundo dispositivo. Esto significa que desde nuestro reloj inteligente o auriculares podríamos desbloquear el teléfono sin necesidad de tocarlo, contribuyendo a la función de manos libres.
Alternativamente, en Windows 10 también tenemos la opción Bloqueo Dinámico. Esto genera que una vez emparejado nuestro ordenador con el teléfono móvil o tablet, el sistema operativo cierre sesión una vez dejan de estar vinculados al salir del rango de comunicación.
Chat sin uso de datos
Tanto si nuestra cuota mensual de datos móviles está a cero o se ha caído el internet, existen posibilidades para poder chatear dentro del alcance de rango de nuestro Bluetooth. Para tal fin existen aplicaciones como Bluetooth Chat. Aunque es cierto que su capacidad se limita al rango más próximo supone una solución bastante creativa para circunstancias excepcionales.
Compartir uso de datos
Tanto si vosotros como algún familiar o amigo se ha quedado sin datos en un momento crítico, Bluetooth también es una alternativa para compartir nuestra tarifa con otra terminal. Esta vinculación llamada tethering era antes una función exclusiva mediante WiFi, en que un móvil u ordenador actúa a modo de emisor.
Automatizar tareas
Si hay actividades muy específicas para las que utilizamos el Bluetooth, como escuchar música con nuestros auriculares, podemos automatizar la apertura del reproductor o aplicación cuando nuestro smartphone o tablet detecte la conexión de auriculares o altavoces. Aplicaciones como YouBlue React están pensadas para este tipo de funciones y ofrece un margen de configuración bastante amplio.
Comunicación entre impresora y PC
Esta es sin duda una de las mejores alternativas para trabajar sin gran cantidad de cables ya sea en casa o la oficina. Las impresoras más modernas cuentan con modelos de conectividad Bluetooth que funcionan de manera idéntica al formato que se encuentra conectado en red o nuestro ordenador, permitiéndonos enviar documentos e imágenes directamente a imprimir.
[irp]Conclusiones sobre el Bluetooth
La tecnología Bluetooth como complemento a nuestros dispositivos del día a día puede ofrecer grandes ventajas a los usuarios que busquen agilizar actividades cotidianas. En general es una tecnología que se presta mucho a facilitarnos la vida y es probablemente esto lo que la haya hecho tan popular. Su menor consumo la presenta como una muy buena alternativa a los receptores inalámbricos de 2.4Ghz dado que permite a los dispositivos una mayor autonomía, que al fin y al cabo es una de las mayores ventajas.
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Al igual que en el desarrollo de los USB o tarjetas SD, el Bluetooth ha pasado ya dos décadas entre nosotros y los progresos que ha experimentado tecnológicamente distan mucho de las características que presentaba en un principio. Así que, ¿qué os parece a vosotros? ¿Hay alguna función o actividad que realicéis por Bluetooth y que no hemos mencionado? ¿Cómo de habitualmente lo utilizáis? Contadnos vuestras impresiones en los comentarios.