Hasta hace solo unos años, los servicios VPN solamente eran exclusivos para grandes corporaciones que pretendían interconectar de forma segura sus distintas sedes. Hoy en día es muy distinto y cualquier puede acceder a una VPN con su ordenador o teléfono. Por eso vamos a ver cuáles son los mejores navegadores para VPN de la actualidad.
Los requisitos para conectarnos a una VPN suelen ser dos, tener un ordenador con conexión a Internet y estar suscritos al servicio. Pero muchos de ellos funcionan de forma gratuita, si bien es cierto que con limitaciones de datos o ancho de banda.
Si solamente deseamos navegar a través de una VPN, entonces necesitaremos un navegador compatible o que integre este servicio, así que diremos cuáles son los más ampliamente compatibles y la verdad sobre aquellos otros que tienen una VPN integrada.
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¿Por qué utilizar una VPN para navegar?
Muchos usuarios se estarán iniciando en el mundo de las VPN y no tendrán demasiados conocimientos de las mismas. Por ello lo mejor será conocer estos navegadores que siempre nos asegurarán un acceso a VPN sin trabas ni incompatibilidades.
Explicado de forma sencilla una VPN o Red Privada Virtual es un servicio que permite crear una extensión de red LAN segura y cifrada que entra en los dominios de Internet. Esto quiere decir que una VPN es una red de área local pero que es capaz de conectar nodos geográficamente separados entre sí.
La gran ventaja de esto es que es posible ampliar la cobertura de una LAN no solo a un edificio de tras de un router, sino a varios de ellos separados a través de un servidor. En una VPN la información circula con una capa extra de encriptación sobre túneles por todo Internet a priori no detectables por hackers (tunneling), proveedores y otros servicios que pretendan coger nuestra información de navegación. Para ello se utilizan protocolos como Open VPN, L2TP, IPSec o IKEv2 que se añaden a los típicos HTTPS, SSL, TCP, etc.
El motivo principal por el que debemos usar una VPN es precisamente por obtener una experiencia más privada y más segura. Esto viene bien si trabajamos desde casa o desde lugares públicos con datos sensibles. Seguramente todos habremos oído sobre brechas de seguridad en la red, así que una VPN es un escalón más que nos aleja de ese peligro. No son infalibles, pero al menos se lo ponemos más complicado a los hackers.
Cómo influye una VPN en nuestro navegador
La ventaja más importante de una VPN es que es aplicable prácticamente a cualquier tipo de conexión de red y a cualquier aplicación, ya sea un navegador, un servicio SSH, FTP o correo.
Pero quizás el más importante es el de eliminar los bloqueos interpuestos por gobiernos en distintos países. Si nos vamos por ejemplo a China, usemos el navegador que usemos, no podremos acceder a servicios tan familiares como Facebook, YouTube entre otros muchos. Con una VPN podemos saltarnos estas barreras, te explicamos cómo:
- El funcionamiento básico de una red VPN es conectar nuestro equipo a un servidor ubicado en cualquier parte del globo con independencia de nuestro router
- Este servidor nos va a dar una nueva IP, ya que hace de router y por él pasará toda nuestra conexión. Así entraremos en una nueva LAN de gran extensión.
- Físicamente seguimos en nuestra casa, pero virtualmente es como si perteneciéramos al país en donde está el servidor.
- Así conseguimos evadir el bloqueo de nuestro país y acceder a servicios del país en donde está el servidor.
Así que no solo podremos navegar de forma segura y anónima, sino que podremos ver streaming de canales que en nuestro país no existen y acceder a sitios web bloqueados.
Podríamos ir un paso más allá y crear nuestra propia VPN si tenemos un router compatible, y así poder conectarnos remotamente a nuestros equipos sin necesidad de abrir puertos bien conocidos como el 80 o 443. De igual forma, ubicaríamos un servidor en nuestra propia casa, accediendo así al contenido de nuestro país desde el extranjero.
Diferencias entre VPN y proxy: la verdad sobre los navegadores con VPN
En esta pequeña lista además de ver los mejores navegadores para VPN, también vamos a citar algunos otros que, por su simplicidad o características, merecen la pena tenerlos en cuenta. Pero su servicio más bien se parecerá al de un proxy, un concepto distinto al de una VPN.
Cuando hablamos de proxy lo que encontramos es un servidor remoto que se coloca entre nuestro equipo y el destino al que solicitamos o entregamos información a través de una red. Esto puede parecer similar a una VPN en principio, ya que nos sitúa virtualmente en otra ubicación, pero no obtendremos ningún tipo de protección extra con protocolos VPN, la conexión no irá cifrada, no al menos a ese nivel.
Un proxy solamente enmascara nuestra dirección IP pública para saltarnos ciertos bloqueos de sitios web si utilizamos un proxy web que funciona mediante HTTP y HTTPS generalmente. Cuando nos referimos a un navegador con VPN integrada, normalmente es un estado intermedio entre proxy y VPN, ya que no cifra la conexión, pero utiliza protocolos como TLS o SOCKS, y ofrecen la posibilidad de conectarnos a distintos servidores.
En resumen, un proxy no da la seguridad de una VPN, nunca, pero se puede utilizar por facilidad y comodidad para acceder a sitios web puntualmente.
Cuando usar extensión o aplicación VPN
En este artículo nos centramos en los mejores navegadores para VPN, por lo que deduce que debemos establecer una relación entre ellos y la VPN. Esto se hace mediante extensiones, pequeños programas o plugins que se añaden al propio navegador para modificar los parámetros de acceso a Internet. Es importante por tanto diferenciar entre extensión, aplicación y navegador con VPN integrada.
- Extensión: con una extensión podremos navegar a través de una VPN por todos los sitios web a los que accedamos desde el navegador que la tiene instalada. Pero no es extensible a otras aplicaciones y a otros navegadores, reduciéndose por tanto a una sola aplicación. La usaremos solo para ese navegador.
- Aplicación: con una aplicación instalada sobre el sistema operativo conseguimos que todas las conexiones vayan cifradas, desde las propias del sistema hasta las realizadas por un navegador, aplicación P2P o servicio de correos y chat. La usaremos cuando queramos cifrar todo el contenido que sale de nuestro equipo.
- Navegador con VPN: este caso es similar al primero, ya que básicamente es una extensión permanentemente instalada sobre el navegador. Lo que ocurre es que esta normalmente es gratuita y se trata de un proxy SSL de los comentados en el apartado anterior. La usaremos por ser gratuita y no queremos complicarnos la vida, pero no cifra el contenido.
Navegadores para extensiones VPN
Tras tener claras las nociones de una VPN, podremos ir directos al grano y entender mejor los usuarios y posibilidades que tendríamos en extensiones VPN para navegador.
Dos serán los navegadores clave para utilizar una VPN: Mozilla Firefox y Google Chrome. No obstante, existen servicios dedicados que ofrecen compatibilidad con navegadores como Opera o Microsft Edge, aunque sinceramente serán minoritarios y por ello no son ni mucho menos recomendados.
Google Chrome: el de mejor compatibilidad
¿Quién no utiliza a día de hoy el navegador gratuito de Google? La respuesta sería los que usan Firefox o Edge o los nostálgicos de Internet Explorer. En este caso se trata de navegar de forma anónima y segura, así que descartemos los dos últimos ya desde el inicio.
Chrome es un navegador programado en C++, Python y JavaScript, y está disponible de forma gratuita y sin limitación alguna para cualquier usuario y prácticamente cualquier plataforma, como Windows, Mac, Linux, Android, iOS y SmartTV. No es un navegador de código abierto, esto que quede claro, pero su condición de gratuito lo hace ser el más utilizado del mundo en la actualidad.
Una de sus grandes ventajas es la enorme compatibilidad con todo tipo de extensiones y funcionalidades, por lo que todas las compañías de VPN cuentan con extensiones para él. No es necesario descargarlas, ya que cuenta con una tienda integrada similar a Play Store para obtenerlas.
Ya de serie cuenta con un modo de navegación segura mediante llamada modo incógnito. Es similar a la navegación privada de Safari o Firefox, en donde no se registra la actividad, los datos temporales de navegación ni las cookies.
Una de sus mayores ventajas para el uso de extensiones es el poder replicar la configuración del navegador en todas las plataformas en la que lo utilicemos. Solo necesitamos asociar la cuenta de Google a él. Y no solo las extensiones, sino la configuración personalizada, los datos de navegación y los marcadores. Toda esta configuración también será trasladada al sistema operativo basado en el navegador, Chrome OS.
Para instalar una extensión será tan sencillo como acceder a chrome web store y realizar la búsqueda correspondiente.
Mozilla Firefox: el más completo y de más largo recorrido
La segunda opción como mejor navegador para VPN es Firefox, un navegador esta vez sí de código abierto y también con adquisición de forma gratuita. El más utilizado a nivel mundial antes de la llegada de Chrome desde 2003, cuando comenzó su andada. Su condición de software de código abierto ha hecho es una gran cantidad de versiones gemelas hayan aparecido, como Globus VPN Browser o Avast Browser entre otros muchos.
Al igual que Chrome, utiliza la navegación por pestañas, y el modo de funciones añadidas en forma de complementos o extensiones. Al ser de código abierto las compañías VPN tienen más sencillo integrar sus soluciones al navegador, por lo que el 100% de servicios casi sin excepción operan con Firefox. Cuenta con una tienda o sitio propio en donde encontrar nuestra extensión entre las más de 6000 que existen.
Es uno de los más completos en cuanto a configuración y funciones, así como personalización, soportando todos los estándares web actuales y futuros, integrando el motor de renderizado Gecko. Al igual que Chrome, tiene un modo de navegación en incógnito en donde nuestros datos no se grabarán durante la sesión. Finalmente es compatible con todas las plataformas basadas en sistemas operativos de 32 y 64 bits, incluidas todas las basadas en distros de Linux y Solaris.
Con la combinación de teclas Ctrl + mayus + A accederemos a la sección de complementos en donde poder encontrar lo que buscamos.
Navegadores con VPN integrada
Tras ver los dos navegadores que cubrirán el 99% de nuestras necesidades de VPN, vamos a seguir con otros dos que consideramos de importancia para el ámbito de la privacidad. Se trata del navegador web Opera y Tor, el buscador Darkweb por excelencia.
Navegador Opera: con VPN gratuita integrada
El navegador Opera también es de los que mayor recorrido tiene, siendo gratuito y programado en C++ por Opera Software. Los que trabajaron con el sistema Linux en sus inicios de interfaz gráfica lo conocerán bien, porque era una de las pocas opciones que había. Además, era compatible con Blackberry, Maemo y Symbian, todos unos clásicos.
Está disponible de forma gratuita, aunque es un software propietario con componentes en código abierto. Admite extensiones o complementos como los demás navegadores, pero no es tan popular para las compañías suministradoras de VPN. Y es que en las últimas versiones se ha integrado una función VPN al propio navegador de uso gratuito.
No necesitamos entonces ninguna aplicación para su activación, tan solo acceder a su apartado de configuración para comenzar a utilizarlo. De esta forma todas las conexiones con sitios web irán a través del servidor al que nos conectemos. En este punto no tenemos tantas opciones como en los servicios VPN dedicados, solo conexión a Europa, Asia y América y ni siquiera sabemos la ubicación del servidor.
Como se ha comentado antes, no es una VPN como tal, ni tampoco un Proxy, sino una mezcla de ambos según el creador, en donde se utilizará el servidor intermedio para cambiar virtualmente de país y acceder a contenido geobloqueado. Podría llamarse proxy SSL con una encriptación más débil que una VPN aunque funciones similares.
Orbot Proxy con Tor para Android
Tor significa The Onion Router, siendo un navegador web basado en código abierto y licencia gratuita al igual que el protocolo sobre el que trabaja. Tor es mucho más que un navegador, es una red superpuesta sobre Internet, una WAN en sí misma por la que navegaremos de forma anónima y cifrada sin necesidad de tener una VPN.
A la red Tor se la conoce como Darknet por el hecho de navegar con la IP enmascarada y sin revelar datos del usuario en la red. El navegador Tor está disponible para plataformas de Linux, Windows Mac y Android. Una de sus mayores utilidades para los usuarios es poder acceder a la Deep Web, aquella cuya información no es indexada por los buscadores normales. Pero es perfectamente útil para una navegación normal y corriente con la ventaja de usar una capa extra de cifrado.
Orbot es una aplicación solamente disponible para Android que permite cifrar todas las conexiones entrantes y salientes del teléfono tanto en WiFi como en red móvil. No es un servicio VPN como tal, siendo más bien un Proxy seguro que funciona a través del protocolo SOCKS4, SOCKS5 y HTTPS.
La mayor ventaja de este servicio frente a Opera VPN por ejemplo es que podremos seleccionar el servidor y país al que conectarnos, sin que el impacto sobre el ancho de banda sea tan notorio. Utilizándolo con Tor obtendremos una conexión anónima y cifrada como pasa con las extensiones VPN para navegadores.
Extensiones y servicios VPN para navegadores
Ya nos queda claro que si deseamos utilizar una VPN solo para acceder a sitios web y consumir contenido en streaming bloqueado en nuestro país tendremos que utilizar Chrome o Firefox. Ahora solamente nos queda ver cuáles son las mejores VPN del mercado.
Tenemos útiles artículos en donde conocemos los mejores servicios independientes disponibles en la actualidad tanto gratuitos como de pago o ambos unidos. Así que échale un vistazo a estos enlaces.
Tened muy presente que la mayoría de opciones gratuitas de verdad estarán muy limitadas en cuanto a opciones de conexión con servidores, ancho de banda útil y cantidad de datos utilizados por día o mes. Es el precio a pagar por ahorrarnos una suscripción Premium, pero no dejan de ser opciones perfectas para navegar de forma anónima.
Conclusiones sobre los mejores navegadores para VPN
Llegamos al final de este pequeño artículo en donde solamente pretendemos remarcar y dejar claro que las dos opciones más recomendables en cuanto a navegadores para VPN son Chrome y Firefox.
No por nada son los dos más utilizados por usuarios que utilizan diariamente Internet por encima de Edge, Internet Explorar, Safari y Opera. El 99% de compañías que suministran VPN verdaderas usan, bien extensiones para estos navegadores o bien aplicaciones que instalaremos en nuestro sistema.
Recomendamos utilizar extensiones de navegador si tan solo deseamos navegar por sitios web de forma anónima y segura, de forma esporádica o continua. Para ello las opciones VPN gratuitas creemos que son las más útiles.
Si lo que pretendemos es utilizar el servicio de forma continua, de larga duración y con mucho consumo de datos, entonces será mejor optar por un servicio de pago, los hay muy baratos. Así mismo será mejor opción el instalar la aplicación directamente en el sistema para cifrar no solo los datos del navegador, sino todas las conexiones entrantes y salientes.
Finalmente os dejamos unos cuantos enlaces a tutoriales de redes por si os interesan:
¿Con qué objetivo deseas tú utilizar una VPN? Cuéntanos qué navegador te parece mejor opción y qué servicio VPN.