El portátil más atrevido de Microsoft está aquí, una fusión entre notebook y tablet con sistema operativo Windows que podemos desmontar y combinar como mejor nos parezca. Así es el Microsoft Surface Pro 7, ¿tenéis curiosidad? Seguid leyendo.
Características técnicas de Microsoft Surface Pro 7
Unboxing de Microsoft Surface Pro 7
El embalaje de Microsoft Surface Pro 7 llega en una caja blanca de acabado mate con el nombre de la serie Surface en la esquina superior izquierda. El único elemento representativo adicional es una imagen de la propia pantalla apoyada sobre su soporte desplegable.
En la base encontramos una extensa cantidad de información así como una pegatina con el modelo, número de serie y componentes de Microsoft Surface Pro 7, que pueden variar según su rango de precio.
Para esta review disponemos no sólo de la pantalla Microsoft Surface Pro 7, sino también de un teclado Surface Pro Signature Type y lápiz Microsoft Surface. Adicionalmente dedicaremos una review en exclusiva al ratón Microsoft Surface Arc, que aquí dejamos de lado para dar prioridad al trackpad.
El contenido de la caja se resumen en:
- Microsoft Surface Pro 7
- Cable con conector Surface Dial y transformador de carga
- Cable con conexión a la corriente
Diseño de Microsoft Surface Pro 7
El Microsoft Surface Pro 7 es un modelo de portátil convertible concebido para ser lo más personalizable posible por parte del usuario. Es por este motivo que podemos adquirir cada uno de los componentes de Surface por separado y disponemos además de una gama de acabados y color entre los que escoger:
- Pantalla: puede adquirirse en color Platino o Negro
- Teclado: disponible en Rojo Amapola, Azul Hielo y Carbón
- Lápiz: lo encontramos en Rojo Amapola, Azul Cobalto, Negro y Platino
- Ratón: podemos optar entre Rojo Amapola, Azul Hielo
Acabados
En el Microsoft Surface Pro 7 es observable una combinación de materiales tanto por elementos como por superficie, de modo que vamos a analizarlos por partes. Principalmente tenemos plástico y cristal en la pantalla y un forro de alcántara para el teclado.
La cobertura para los laterales y reverso del Microsoft Surface Pro 7 es de plástico negro mate con una tonalidad levemente perlada. Sus dimensiones son de 292 mm x 201 mm x 8,5 mm y alcanza un peso de 790 gramos.
La pieza trasera dispone a su vez de dos bisagras, una en cada extremo, que permite un giro de unos 145º. Este mecanismo es sólido y tiene una movilidad que requiere un poco de fuerza, por lo que cuando apoyemos la pantalla en una superficie no notaremos que la bisagra ceda bajo su peso y se abra más de la cuenta.
Al levantar esta sección queda visible la cobertura de plástico inferior en la cual observamos el logo de Microsoft serigrafiado acompañado de dos pegatinas con números de serie. En el diseño del reverso hay una doble altura debido a que los bordes de la aleta desplegable disponen de un grosor adicional.
Pantalla
Sobre la pantalla, esta tiene un total de 12,3 pulgadas y la zona activa permanece rodeada por un marco negro de en torno a 15mm. Personalmente no somos muy partidarios de conservar estos márgenes, especialmente cuando en la actualidad se busca minimizarlos lo máximo posible. Por otra parte si empleamos el Microsoft Surface Pro 7 como una tablet quizás echaríamos en falta estas zonas de inactividad táctil para poder sostener la pantalla con comodidad, de modo que en este sentido la decisión de Microsoft es comprensible aunque no nos termine de convencer.
Continuando con la observación del reverso, la inclinación de la sección móvil permite elevar el Microsoft Surface Pro 7 y sostenerse por sí solo en posición apaisada. Es también aquí donde encontramos el imagologo de Microsoft con un acabado brillante con un cambio de material, siendo aquí reflectante.
Es en la base donde apreciamos la conexión analógica para el teclado Surface Pro Signature Type Cover, con el cual pasamos de tener una tablet a un ordenador portátil totalmente funcional. Esta se lleva a cabo a través de seis pines y está imantada al igual que el teclado, facilitando así su vinculación.
Al combinar ambas piezas, la pantalla se mantiene vertical gracias a la aleta móvil trasera, con la cual podemos ajustar la inclinación de la misma según nuestras necesidades. En esta posición podemos observar que los altavoces integrados quedan situados a ambos lados de la pantalla en su mitad superior, contando con unas leves ranuras ausentes de cristal y cubiertas con malla de aluminio negro. También en el margen superior de la pantalla observamos tanto la cámara como dos micrófonos integrados en el cristal.
Puertos, botones y conexiones
En la zona superior contamos con dos botones, uno de volumen y otro para encendido y apagado. Estos sobresalen levemente por encima del diseño del dorso y presentan el mismo material y color de acabado que el resto de la cobertura. Por su parte en el lateral izquierdo sólo hay un jack 3.5 mixto para auriculares con micrófono y en el derecho disponemos de un puerto USB tipo C y otro tipo A además de la conexión Surface Dial tanto para el cargador como dispositivos de Microsof que adquiramos a parte. Por último, también contamos con un lector de tarjetas micro SDXC.
Teclado
El Surface Pro Signature Type Cover no es sólo un teclado, sino también una cubierta protectora cuando cerramos el Microsoft Surface Pro 7 y nos desplazamos de un lado a otro. El material escogido para forrar la totalidad de su estructura es la alcántara, un material textil sintético con un tacto similar al ante. Definitivamente en el uso nos ha resultado más agradable que el simple plástico o aluminio dado que nos transmite una sensación térmica más cálida, aunque siendo fibra probablemente podamos esperar que atrape algo de suciedad con el paso del tiempo. La ventaja es que al ser sintético deberíamos poder limpiarlo con facilidad.
Integrado dentro de una zona con depresión respecto a la superficie de la pieza tenemos el teclado. Este desnivel impide que al cerrarlo la pantalla impacte contra las teclas directamente, aunque la altura de estas sobresale sobre su base alcanzado una homogeneidad respecto al soporte que podemos sentir al pasar la mano sobre ellas.
Es un teclado al 60% con interruptores de membrana con una separación de unos tres milímetros entre sí. La tecla de Bloq Mayus presenta un LED blanco dedicado para cuando este esté activo y todo el teclado en su conjunto ofrece retroiluminación a sus caracteres, que disponen de una tipografía fina y delicada.
La puesta en uso del Microsoft Surface Pro 7 admite colocar el teclado tanto totalmente plano sobre la superficie de trabajo como con una elevación de unos 10º que permite una ergonomía de pulsado más óptima. No podemos decir que la diferencia sea determinante pero definitivamente preferimos la segunda opción. Los bordes del teclado presentan un leve biselado descendente, más flexible, que evita un canto recto en el que apoyar nuestras muñecas al trabajar.
Como no podía ser de otra forma, al cierre la presencia del Surface Pro Signature Type Cover pasa por ser un forro de tablet totalmente convencional. En ella podemos ver la zona del lomo con la diferencia de sección que funciona como soporte para facilitar las dos alturas optativas en su uso sobre mesa.
Si le damos la vuelta observamos que el punto de unión con el Microsoft Surface Pro 7 se realiza en el dorso y la zona de conexión de los pines queda cubierta por una pieza de plástico forrada en alcántara con un grosor ligeramente mayor en el que se esconden los imanes.
Es también en el reverso donde encontramos la única señal de que el teclado pertenece a Microsoft, estando el logo de la marca serigrafiado en uno de los laterales.
Trackpad
Continuamos nuestro análisis del Surface Pro Signature Type Cover pasando a comentar el trackpad. Este es un complemento que aquellos que no busquen una tablet convertible para la cual no sólo adquirir un teclado sino también ratón agradecerán bastante. Debido a las dimensiones de la pantalla en la base del teclado hay espacio más que suficiente en la que integrar un trackpad, y así lo han hecho. Este es del mismo material plástico empleado en los botones y no presenta clic derecho e izquierdo diferenciados, aunque podremos notarlos al hacer clic en él.
Lápiz Surface
Otro complemento adicional que podemos observar es el Lápiz Surface, un pen que funciona con una pila AAAA y podemos adquirir por separado. Al igual que todos los demás componentes podemos escoger el color del mismo y apreciamos que los materiales elegidos para su fabricación combinan plástico y aluminio. Su conectividad es Bluetooth 4.0
El cuerpo central del bolígrafo tiene un acabado que procura ser mate, reduciendo el contraste entre los dos materiales. En todo el lápiz reconocemos sólo dos botones: uno en el cuerpo central y otro en la tradicional goma de borrar.
La longitud y grosor de este pen no difiere de las de un lápiz convencional. Pesa sólo 20 gramos y su conexión con Microsoft Surface Pro 7 se realiza a través de Bluetooth 4.0. En la zona superior de plástico, que podemos girar para sustituir la pila cuando se gaste, está integrado un pequeño LED que responderá con un patrón de luz cuando realicemos el emparejado o el Lápiz Surface esté bajo de batería.
La mina que encontramos en el pen es extraíble por la propia punta del mismo sin necesidad de abrirlo, aunque hemos echado en falta la presencia de al menos un reemplazo dentro de la caja del Lápiz Surface. Afortunadamente la longitud y grosor de la misma es estándar, de modo que podemos adquirir más tanto el la Web Oficial de Microsoft como otros proveedores.
Hardware interno de Microsoft Surface Pro 7
El Microsoft Surface Pro 7 no es un ordenador hecho para abrirse, de modo que en esta ocasión no os traemos fotos con la carnicería interna que solemos hacer con los componentes. No obstante, aquí os contaremos qué es lo que hay sobre la mesa.
CPU y GPU
De la mano de CPU-Z encontramos que el procesador integrado en el presente modelo de Microsoft Surface 7 tenemos una Intel Core 7 de décima generación, concretamente el 1065G7 a 1.30GHz. Se trata de un modelo de cuatro núcleos y ocho hilos con una litografía de 10 nanómetros. Este modelo es ya bastante conocido para nosotros dado que es el escogido por ordenadores de alta gama, de modo que estamos familiarizados con las prestaciones que ofrece.
La GPU por su parte está integrada y es el también conocido modelo Intel Iris Plus Graphics, la cual trabaja con una memoria base a 1800MHz . Usa una arquitectura de décimo primera generación (11.0) y soporta DirectX 12.0, teniendo capacidad para 512 unidades de sombras, 32 unidades de mapeo de texturas y 8 ROPs.
Almacenamiento en disco y RAM
Para el Microsoft Surface Pro 7 contamos con 16 GB de RAM LPDDR4X y 250 GB de almacenamiento en la unidad SSD. Tanto la memoria SSD como la memoria RAM están soldadas a la placa base, por lo que a aquellos que os habíais preguntado si podríais ampliar las especificaciones presentes lamentamos deciros que es imposible. No obstante, dentro de la gama Microsoft ofrece tres variantes con diferentes componentes y capacidades, por lo que podréis escoger el que se ajuste mejor a vuestras necesidades.
Sistema de refrigeración
La disipación en el Microsoft Surface Pro 7 se lleva a cabo a través de dos heatpipes de cobre que entran en contacto directo con la superficie del procesador mediante pasta térmica. Con un uso tópico del ordenador no notaremos cambios de temperatura significativos o sonido, pero si utilizamos programas de edición un poco más exigentes o juegos podremos escuchar el sonido de los disipadores de calor.
Puesta en uso de Microsoft Surface Pro 7
El Microsoft Surface Pro 7 es un ordenador «de paseo», un modelo portable y transformable que está pensado para reducir al máximo su peso y mantener una gran versatilidad. Lo indispensable para gestionarnos con él es adquirir pantalla y teclado como un pack en cualquier distribuidor de Microsoft, pues la ventaja de este producto reside en que todos los accesorios puedan adquirirse de forma individual si algo se estropea fuera de garantía y podamos adquirir un sustituto.
No podemos decir lo mismo del ordenador en sí, dado que si nuestra memoria RAM o SSD fallan necesitaremos reemplazar por completo la placa base (a la cual están soldados) y esto puede ser un gasto que no merezca la pena para muchos usuarios o un tiempo largo en caso de tramitar la garantia con Microsoft. Aunque nos hemos informado por unos conocidos y nos comentan que Microsoft tiene uno de los mejores servicios post-venta en España.
Cualidades de la pantalla
La pantalla de Microsoft Surface Pro 7 dispone de una resolución de 2736 x 1824 px y consiste en un panel con tecnología Pixel Sense. Para aquellos que no conozcan las peculiaridades de esta pantalla, os lo resumimos en cuatro puntos:
- Primero de todo tenemos un Cristal Corning Gorilla Glass
- Lo siguiente es el propio panel LCD con una matriz de sensores ópticos integrados
- Justo detrás, un entramado de láminas ópticas distribuyen la luz por el panel
- Por último, un panel con LEDs blancos e infrarrojos
Básicamente la tecnología Pixel Sense detecta objetos o pulsaciones en la superficie táctil utilizando sensores de infrarrojos integrados en el panel mientras un sensor óptico presente en cada píxel permite detectar con mayor precisión la sensibilidad táctil (presión) de la misma.
Esta tecnología nos aporta pocos matices si utilizamos el Microsoft Surface Pro 7 sólo con los dedos cuando esté en modo tablet o para tocar algo puntualmente en pantalla. Donde realmente destaca es con el uso combinado del Lápiz Surface.
Continuando con otros aspectos, la distorsión de imagen en la pantalla es casi inexistente de forma oblicua, el color conserva su tonalidad de forma correcta y sólo en ángulos más cerrados pierde intensidad. El brillo máximo de la pantalla resulta bastante intenso y no reduce la saturación de los colores. Su legibilidad en ambientes de intensa luz natural se mantiene aceptable y a grandes rasgos todo responde como era de esperar.
Calibración y prestaciones óptimas
No podemos hablar de pantalla y color sin considerar el estado de gamma, temperatura de color y contraste presente por defecto en el panel de Microsoft Surface Pro 7. Para ello empleamos dos programas que para nuestros lectores habituales son dos viejos conocidos: DisplayCAL y HCFR. Ambos están acompañados de un colorímetro analógico con el que hemos realizado las mediciones. Antes de nada comenzamos con HCFR y hacemos una medición de parámetros estándar antes de proceder a calibrar el panel:
Niveles por defecto
Niveles tras calibración con colorímetro
- Respuesta lumínica: la luminosidad (en amarillo) presente por defecto en Microsoft Surface Pro 7 describe una curva sensiblemente más elevada que el estándar (celeste) lo cual nos puede llevar a percibir una saturación de color inferior a la real.
- Gamma: mientras que el punto medio se encuentra en esta categoría dentro de un porcentaje 2.2, aquí notamos que este numero está a la baja en el Microsoft Surface Pro 7 con 1.3.
- Escala de grises: se mantiene en un punto medio de 5 puntos aunque tiende a ser irregular según la cantidad de saturación.
- Temperatura de color: el índice ideal medio se encuentra en los 6500K, al cual Microsoft Surface Pro 7 no alcanza, quedándose con unos 6300K. No es un número ideal, aunque tampoco una alteración de color grave.
Sobre el color RGB, observamos que el verde es el más destacado de los tres, quedando rojo y azul casi a la par. Estos dos últimos no alcanzan el punto medio blanco mientras que el primero lo supera, por lo que confirmamos la presencia de un leve desequilibrio de color.
Visto lo anterior entramos a comentar el proceso de calibrado, y es que en los resultados podemos ver porcentajes de perfil ligeramente inferiores a los encontrados a otros portátiles de gama alta. El Adobe RGB queda cubierto en un 62%, mientras que DCI P3 no llega al 65%. El mejor parado es el sRGB rozando el 90% de cobertura.
Las conclusiones que podemos obtener de estos resultados es que quizás esta pantalla no sea la mejor opción para realizar actividades referentes al entorno editorial dado que la verosimilitud del color que obtenemos es mejorable en un monitor profesional. No obstante este es el único entorno en que mostramos reticencia para su uso dado que por norma general la consideramos aceptable para todo lo demás.
Los datos posteriores al calibrado nos permiten ahondar más específicamente en los parámetros del Microsoft Surface Pro 7. Su contraste es de 1291:1, el cual está por encima del mínimo recomendable (1000:1). La luminosidad es 412.6 cd/m², que también es un número correcto. El punto blanco medio queda en 6600K, que está algo por encima de lo ideal pero tampoco resulta excesivo, simplemente veremos los colores con algo de más claridad. Por último, el porcentaje de ΔE se mantiene en valores inferiores a 1, lo cual son excelentes resultados.
Sobre la uniformidad de color ene pantalla, vemos que en general es correcta excepto por el tercio superior izquierdo, en el cual hay un notable desajuste que no obstante no se percibe a simple vista.
Lápiz Surface en uso
El Lápiz Surface tiene una respuesta correcta. Su percepción en pantalla está presente hasta con un centímetro de distancia y lo más interesante del mismo es que las funciones de sus dos botones integrados pueden cambiar según el programa que esté en uso, especialmente aquellos de edición como Photoshop o Illustrator.
Evidentemente no podemos esperar de él la misma calibración que solemos tener con una tableta gráfica y su software de configuración, pero sin duda nos permite salir del paso e incluso realizar ilustraciones sencillas con total comodidad.
Cámara integrada, micrófonos y altavoces
En el Microsoft Surface Pro 7 encontramos dos cámaras independientes, una trasera y otra frontal. Es por este motivo que vamos a abordar esta sección comentándolas por separado. Sobre la grabación de vídeo, en ambos casos este es en 1080p a 30fps y con una relación de aspecto de 16:9. Adicionalmente junto a la cámara frontal contamos con dos micrófonos de campo lejano, mientras que detrás tenemos sólo uno.
- Cámara frontal: dispone de reconocimiento facial, HD Ready, temporizador y permite ajustar el balance de blancos, brillo, desenfoque de movimiento y el ISO. Su máxima resolución es de 4.4MP con un ratio de aspecto de 3:2 (2560×1706).
- Cámara trasera: Mismas características iniciales, solo que la resolución máxima aumenta a 8.0MP a 4:3 (3264:2176).
Sobre la calidad general, hay que tener en cuenta que en ninguno de los casos la cantidad de megapíxeles es especialmente elevada y las cámaras no disponen de auto enfoque. Los resultados esperables no son por tanto fuera de lo ordinario, quedando por debajo de la capacidad de los smartphones del mercado actual.
Pruebas de rendimiento de Microsoft Surface Pro 7
La sección con más relevancia para muchos usuarios está aquí, y es que los test de rendimiento generalmente son los que nos dan una mejor idea de la capacidad y uso ideal que podemos esperar del Microsoft Surface Pro 7. Para ello utilizamos:
- Crystal Disk Mark
- CineBench R15
- CineBench R20
- 3DMark
Rendimiento CPU y GPU
Cinebench deja pantente algo que ya esperábamos y sólo necesitaba una confirmación con números: este convertible no es para gaming. La gráfica integrada no está preparada para soportar grandes cargas de partículas o animar y renderizar gráficos, ni tampoco editar vídeos de forma avanzada.
Fire Strike y Time Spy, test de estrés dentro de 3DMark nos lo confirman, aunque debemos aclarar que esto no significa que podáis jugar a lanzamientos con menor carga gráfica, como juegos móviles o para tablets e incluso arcade en emulador. Que los resultados para el más alto rendimiento sean bajos no significa que no sirva para nada más.
Rendimiento del almacenamiento SSD
Pasando a analizar la velocidad de lectura y escritura en disco, aquí os podemos decir que los resultados de media son bastante buenos. Tenemos una lectura máxima de 2315.26 MB/s y escritura de 1593.02 MB/s, que son números con los que nos solemos manejar en la gama alta y no traen ninguna sorpresa.
Batería y autonomía
Llegamos aquí a uno de los aspectos más importantes en un ordenador portátil, y es que la autonomía es un detalle al que siempre debemos prestar atención a la hora de comprar. El Microsoft Surface Pro 7 cuenta con una batería de 5,702 mAh, 7.57 V y un consumo de 43.2 Wh. En la web oficial de Microsoft se indica que su autonomía máxima alcanza las diez horas y media, aunque esto es con matices.
Efectivamente, en modo Ahorro de Energía y con un bajo brillo podemos esperar unas 10h de uso poco exigente del portátil (escuchar música, navegar por internet, escribir y editar documentos…). Con Recomendado podemos trabajar sobre unas seis horas aproximadamente, mientras que con Alto Rendimiento empleando programas como Photoshop, InDesign o Illustrator la media baja sobre cuatro horas aproximadamente.
Sobre el cargador, aquí disponemos de un puerto adicional USB tipo C en el que poner a cargar un segundo dispositivo, un detalle presente en toda la gama Surface y que es muy de agradecer.
Como aspecto negativo, debemos anotar antes de cerrar esta sección que la batería de Microsoft Surface Pro 7 se encuentra fijada a la carcasa trasera, por lo que su reemplazo tiende a ser un tanto dificultoso, especialmente si tenemos en cuenta que es necesario retirar la placa base para acceder a ella.
Temperaturas
Aquí tenemos un aspecto eminentemente positivo dado que las temperaturas medias que alcanza Microsoft Surface Pro 7 tienden a mantenerse bastante bajas. En trabajo, con actividades de navegación y uso de programas como el paquete Office tenemos unos estupendos 33-36º, cantidad que se eleva en torno a 65º con tareas más exigentes como trabajar en Photoshop con archivos pesados. Como podréis imaginar, a partir de los 45-50º podremos escuchar la actividad de los ventiladores de forma leve y un ligero calentamiento en la zona posterior del Microsoft Surface Pro 7, aunque no es algo alarmante.
Conectividad inalámbrica
Al margen del Bluetooth 5.0, la capacidad del Wi-Fi 6 compatible con 802.11 ax es buena tras haberla probado en una red con contratación de 100MB.
Palabras finales y conclusiones sobre Microsoft Surface Pro 7
Para describir la experiencia con Microsoft Surface Pro 7 nos quedamos con: flexibilidad. El concepto de Microsoft para traer al público un modelo de portátil 2 en 1 en que podamos combinar cada una de sus partes con varios modelos dentro de una misma gama es sin duda una apuesta acertada. Como añadido a la variedad de color tenemos también la posibilidad de comprar un teclado diferente ante cualquier incidencia fuera del periodo de garantía.
Lamentablemente no puede decirse lo mismo sobre la cuestión de ampliación o reemplazo de componentes del propio Microsoft Surface Pro 7, en el que tanto la RAM como SSD se encuentran soldadas a la placa base y requerirían una sustitución de la pieza completa. El acceso a la batería es también un tanto complicado y esta se encuentra fijada a la caratula trasera de la pantalla, que tampoco pone las cosas fáciles.
Te recomendamos la lectura de: Mejores ordenadores portátiles del mercado.
No obstante, no todo va a ser negativo. El teclado con recubrimiento de Alcántara nos ha terminado convenciendo dado que al tacto es bastante suave y agradable, la retroiluminación de las teclas no es regulable (aunque se atenúa en periodos de inactividad) y el teclear necesita muy poco recorrido y escasa presión. La alternativa de posicionarlo totalmente paralelo a la mesa o con una elevación de 10º (nuestra favorita) nos ha parecido un acierto, y el sistema de imantado para conectarse a la pantalla es la guinda del pastel.
Sobre la pantalla en sí, la resolución es sin duda un estándar dentro de la gama alta, aunque la cobertura de color nos ha parecido algo más baja de lo esperado. El brillo es adecuado y la calidad de sonido no hace milagros pero es competente para tratarse de una tablet convertible. La cámara no destaca, pero es correcta y cumple con las necesidades básicas del usuario.
Podemos adquirir el Microsoft Suface Pro 7 desde 809,10€ hasta 2.249,10€, aunque el modelo que os hemos traído es de 1.409,90€. El lado bueno es que la gama disponible abarca un rango de presupuesto bastante amplio, de modo que podemos adquirir un Surface con prestaciones muy variadas.
VENTAJAS |
INCONVENIENTES |
PUERTO USB A Y C INTEGRADOS |
EL MARGEN DE LA PANTALLA ES ALGO GRUESO |
PODEMOS COMPRAR TECLADO Y PANTALLA POR SEPARADO | LA COBERTURA DE COLOR PODRÍA SER MAYOR |
VERSÁTIL, TRANSPORTABLE |
El equipo de Profesional Review le otorga la Medalla de Oro:
- Pantalla táctil de 12.3 pulgadas (2736x1824 pixels)
- Microsoft surface pro signa - teclado hdwr coral
Última actualización el 2024-11-22