Hoy queremos hablar de si es necesario hacerle overclock a las memorias RAM, así como algunas de sus consecuencias, tanto para bien como para mal.
A una gran parte de la comunidad en PC le gusta poder tener control absoluto sobre los componentes que conforman su ordenador; así como tener la posibilidad de trastear con las capacidades de dichos componentes. Una de las prácticas más comunes en este aspecto es el overclocking (o subida del reloj), acción habitualmente aplicada sobre procesador y gráfica; pero también extensible a otros componentes del PC, como las memorias RAM.
Índice de contenidos
Un poco de contexto
Las memorias RAM están intrínsecamente relacionadas con el procesador de nuestro equipo y trabaja juntamente con él para cargar y contener datos cruciales para este. Por su funcionamiento, realizar un overclock a estas memorias difiere de lo que haríamos habitualmente en un procesador (control de voltajes y subida de frecuencias); esta práctica en las memorias gira mucho más en torno a “técnicas de ensayo y error” a través de las cuales elevamos algunos de los muchos parámetros que inciden en la velocidad a la que operan estos módulos de memoria a través de nuestra BIOS. Todo ello con el objetivo de aumentar el valor del multiplicador de esta memoria.
El valor de este multiplicador está dado por la velocidad base de la memoria RAM y el propio valor del BCLK (Base Clock de nuestra placa base), pero sobre el actual parámetros como el rango de voltajes, las latencias, e incluso la configuración de los canales de nuestra memoria. Trabajar sobre cada uno de estos valores y modificar los adecuados es necesario para realizar un overclock sobresaliente a este componente de nuestros ordenadores.
[irp]El papel del perfil XMP
Las memorias RAM tienen, en función de su tipo, una velocidad base que no suele corresponderse con la capacidad real de estos módulos. Si hablamos de las memorias DDR3, este valor es 1066 MHz a 1.5 voltios, pero son comunes los módulos de 2400 MHz en el mercado; normalmente con voltajes mayores, en torno a los 1.8 voltios, y con mayores latencias. Generalmente, cuanta menor la latencia y más MHz mayor velocidad, pero estos valores son excluyentes.
Estos valores superiores a los de la especificación de la memoria se corresponden con la capacidad que el fabricante cree que tiene cada módulo. Los valores necesarios para que la memoria opere a esa velocidad se recogen en un estándar establecido por la Joint Electron Decive Engineering Council (JEDEC) y recogido en el perfil XMP: un overclock de fábrica en torno a valores seguros que iguala la velocidad de la memoria con el establecido por el fabricante.
Os explicamos como activar el perfil XMP paso a paso con esta guía
Sin embargo, el perfil XMP no lo hace todo por el usuario; suelen ser conservadores en cuanto a las capacidades de cada módulo, pudiendo estos alcanzar velocidades mucho mayores. Algo parecido a lo que ocurre con los procesadores en su proceso de selección y adecuación de voltajes y frecuencias (binning), donde la mayoría de los chips alcanzan mayores frecuencias de las establecidas. Para sacarle el máximo partido a nuestra RAM toca hacer ajustes propios.
¿Todas las memorias RAM pueden dar más de sí?
Llegados a este punto y con esta información, algunos lectores pueden estar preguntándose cual es la capacidad real de sus módulos de memoria RAM. Técnicamente, todos los módulos de memoria tienen algo más de la capacidad anunciada por el fabricante. Como cada módulo es diferente, tendríamos que realizar pruebas cambiando parámetros hasta comprobar cómo de bien parados hemos salido de esta lotería del silicio; la realidad es que podemos aplicar un par de herramientas sencillas para hacernos una idea de la capacidad real de esta pieza de nuestros equipos.
En lo personal, encuentro bastante fácil de utilizar Ryzen DRAM Calculator, una herramienta desarrollada para favorecer el overclock de la memoria RAM durante los años de la primera generación de procesadores Ryzen, debido a lo susceptibles que eran a la velocidad de este componente.
La herramienta se puede usar ya seas usuario de Intel o AMD (aunque con el segundo los resultados son más precisos); e incluye un test de memoria para comprobar el estado de esta antes de realizar posibles cambios. Para usar esta herramienta, tan sólo debemos iniciarla, cambiar en el desplegable nuestro procesador (si procede), hacer clic sobre “R – XMP” y sobre “Calculate SAFE” para que nos genere un perfil de valores estable y generalmente superior al de fábrica. Conociendo esos valores, sólo queda asimilarlos desde la BIOS de nuestra placa para aplicarlos.
Rendimiento de la memoria RAM con overclock
Como podéis ver, si que hay mejora. Si queréis ver más resultados, echarle un vistazo a nuestro artículo sobre el escalado de memoria RAM con AMD Ryzen 3000.
Ventajas e inconvenientes si estás pensando en hacer overclock a tus memorias
Como ya hemos escrito. Aunque existen un gran número de fabricantes de módulos de memoria RAM en el mercado y las características y cualidades de estos módulos puedan parecer muy diferentes entre sí; la realidad es que todos estos fabricantes hacen uso de los mismos chips de fabricantes como Micron o Samsung para alcanzar dichos valores.
Ventajas que destacamos
Sacar a relucir el potencial de nuestros componentes es el principal atractivo del overclock, pero no el único. Entre las ventajas que podemos encontrar a realizar esta práctica vemos destacable:
- La posibilidad de obtener un rendimiento superior por una menor inversión con un OC liviano al componente.
- La capacidad de mejorar el rendimiento de nuestro equipo sin incurrir en un cambio de piezas. Especialmente destacable en ciertos equipos (Ryzen de 1ª y 2ª generación).
- Conocer los valores de voltajes y frecuencias a los que opera tu memoria RAM te puede ayudar a modificar estos valores para reducir su consumo en equipos en los que la gestión de energía sea prioritaria (portátiles).
- Aunque haya menos documentación, el OC de memoria RAM es una práctica más segura que el OC en otros componentes.
Principales problemas
En cuanto al lado menos apacible de esta práctica, destacaríamos la necesidad de adquirir ciertos concomimientos antes de comentar a operar sobre parámetros de nuestra BIOS, una tarea que no es tan hercúlea como pueda parecer (y tenemos diversos tutoriales sobre ello), pero que puede exceder las capacidades de algunos usuarios. A parte de ello, es importante:
- Saber que estaremos perdiendo la garantía de nuestro módulos si el fabricante detecta que los daños del módulo provienen del OC a los módulos de RAM.
- Los disipadores de las memorias RAM son pasivos y mucho menos capaces que los de otros componentes, por lo que no suele ser buena idea realizar un OC intenso para uso diario en estos módulos.
- Sacar el máximo partido al OC de estos módulos es una tarea relativamente tediosa y basada en el ensayo y error.
¿Es necesario realizar esta práctica sobre tu RAM?
En nuestra opinión, y aunque se trate de una tarea más inocua que otros tipos de OC, hacerle OC a tus memorias no nos parece que merezca la pena en la mayoría de los escenarios. Si nuestro equipo funciona correctamente a través del perfil XMP y sus valores, forzarnos a modificar, probar y cambiar los diferentes parámetros que interceden en esta actividad no se corresponden al beneficio que podemos ver en nuestro equipo.
Si de verdad necesitamos potencia extra para ejecutar algún programa, centrar nuestros esfuerzos en practicar un OC a componentes como el procesador será, en la mayoría de las ocasiones, más efectivo que un overclock sobre las memorias.
Te recomendamos la lectura de nuestra guía de las mejores memoria RAM
No te instamos a no hacerlo, especialmente si tienes gusto por modificar todo los elementos que toman parte en el funcionamiento de tu equipo; pero sí te avisamos de que no veras una transformación tan clara en el rendimiento de tu ordenador como al hacer OC sobre tu procesador o tarjeta gráfica.