Todos los fabricantes han actualizado ya su arsenal de placas con las nuevas Nvidia Super, y hoy vamos a analizar la Gigabyte GTX 1650 Super OC 4G. Una tarjeta gráfica que como sus hermanas, se sitúa en la gama de entrada del mundo gaming, con un chip TU116 ampliado a 1280 CUDA. Y su memoria de 4GB ahora de tipo GDDR6 para elevar las prestaciones para acercarse un poco más a la GTX 1660.
Vamos a ver lo que nos puede ofrecer esta variante con overclock a 1755 MHz y disipador WINDFORCE 2X bastante pequeñito y compacto.
Antes de continuar, agradecemos como siempre la confianza que Gigabyte deposita en nosotros para cedernos este producto y poder hacer la review.
Gigabyte GTX 1650 Super OC características técnicas
Unboxing
Empezamos como de costumbre por el Unboxing de esta Gigabyte GTX 1650 Super OC, una tarjeta que nos ha llegado con la prestación habitual del fabricante. Para ello ha utilizado una caja de pequeñas dimensiones con apertura de tipo estuche y construida en cartón grueso. En la cara principal no puede faltar el ojo de transformer, junto a las principales características de la tarjeta en su cara trasera.
La abrimos, y lo que tenemos es el producto principal dentro de una bolsa antiestática y a su vez metida dentro de un molde de espuma de polietileno de gran densidad para que esté perfectamente protegida. Además de la tarjeta, solamente encontramos un librito de instrucciones. Todos los puertos y conectores de la tarjeta se han protegido mediante capuchones de plástico para que nada entre dentro de ellos ni se puedan romper.
Diseño exterior
El disipador WINDOFRCE 2X no podía faltar en esta tarjeta Gigabyte GTX 1650 Super OC, un elemento fundamental del fabricante con el cual saca el máximo partido del chip TU116 gracias a su capacidad de refrigeración. Sin embargo esta tarjeta es una de las más pequeñitas que encontramos con esta configuración de doble ventilador, con solo 225 mm de largo, 119 mm de anchura y 40 mm de grosor, ocupando poco más de 2 slots de expansión. Esto la hace muy buena opción para chasis ITX que permitan meter tarjetas dedicadas en poco espacio.
Los acabados de la carcasa de plástico duro son tan buenos como sus hermanas mayores, siendo de un buen grosor y con la misma estética. Se basa en una carcasa integral en acabado gris oscuro mate con elementos en blanco para darle ese toque gaming elegante que caracteriza las creaciones de Gigabyte.
En esta ocasión sí que nos ha faltado algo de iluminación, aunque esto suponemos que es una maniobra para minimizar gastos y bajar el precio de esta tarjeta. De hecho la encontramos bastante más barata que por ejemplo la versión de Nvidia. Veremos más delante cómo es su rendimiento.
En el interior como decimos, tenemos el bloque de disipación por aire WINDFORCE X2, construido en aluminio y con una cara visible formada por dos ventiladores de 90 mm de diámetro. El espacio de la carcasa está prácticamente ocupado al completo por ellos, algo necesario para compensar un menor grosor del disipador con un mayor flujo de aire cuando sea necesario. Estos ventiladores cuentan con un total de 11 aspas en diseño helicoidal para proporcionar buenas prestaciones tanto en flujo como en presión de aire.
También se ha implementado la tecnología de 0 dB para apagar los ventiladores de forma automática si la tarjeta no está bajo carga y con un bajo consumo de energía. A régimen máximo, estos dos ventiladores pueden llegar a las 2800 RPM aproximadamente. No es posible gestionarlos por separado, ya que implementan un sistema de movimiento alternado para mejorar el flujo de aire en la zona central. Apreciamos este gran detalle que ya no solo es exclusivo de la gama media/alta, sino también de las tarjetas más discretas.
En esta ocasión los laterales de la Gigabyte GTX 1650 Super OC tapan lo que viene siendo la mitad superior del disipador, es decir, el hueco que ocupan los ventiladores. El resto del bloque metálico está completamente libre para que el aire caliente pueda ser expulsado de la mejor forma posible. En esta zona solamente encontramos el logotipo de Gigabyte sin iluminación alguna y el de GeForce GTX a su lado. El frontal en este caso sí que está tapado para mejorar la estética.
Y terminamos esa revisión al diseño exterior con la zona superior de la tarjeta si es que la colocamos en nuestro PC de la forma tradicional. En ella vemos un gran backplate que cubre la zona por completo y construido en plástico duro de unos 2 mm de espesor. Solamente quedan libres los 6 tornillos que mantienen el bloque sujeto al chipset. En esta placa vemos detalles en plateado para el logotipo y algunas líneas, pero en ningún caso son de aluminio como puede parecer en las imágenes.
Puertos y conexiones
Continuamos con la zona de puertos de la Gigabyte GTX 1650 Super OC para centrarnos ahora en los puestos de vídeo que se incluyen y el resto de conexiones importantes de la tarjeta gráfica. Atrás tenemos:
- 1x HDMI 2.0b
- 1x DisplayPort 1.4
- 1x DVI-DL
Una conectividad variada ciertamente, pero debemos ser realistas y pensar que ya pocos monitores existen con este tipo de conexión DVI. El fabricante ha pensado que puede a ver usuarios con poco presupuesto que quieran actualizar su tarjeta de vídeo y mantener su antiguo monitor, y lo vemos más o menos lógico en este rango de precios. De igual forma, no es tampoco una tarjeta con gran capacidad de renderizado, por lo que la ausencia de más salidas HDMI o DisplayPort no es tan grave como en otras tarjetas.
Recordemos que el puerto DisplayPort nos va a dar una resolución máxima de 8K a 60 FPS, mientras que en 4K llegaremos a los 165 Hz o 4K@60 FPS a 30 bits, y en 5K podremos llegar hasta los 120 Hz. En el caso del HDMI, soporta una resolución 4K@60 Hz, así que la mejor opción será el DisplayPort de largo para monitores de altas prestaciones. El aspecto positivo al menos es que tenemos puertos con el último estándar implementado en ellos.
Respecto a las demás conexiones, tenemos como interfaz principal una ranura PCIe 3.0 x16 para conectarse directamente a los carriles de la CPU. En cuanto a alimentación se refiere, nos mantenemos con la misma configuración otras GPU 1650, con una entrada de 6 pines para alimentar una GPU que tiene un TDP de 100W y un consumo aproximado de 100W sin overclocking. Así mismo, en el interior de la placa, y esta vez sin ser visible desde el exterior, tenemos un conector de 4 pines para dar alimentación a los ventiladores.
Gigabyte GTX 1650 Super OC: PCB y hardware interno
Seguidamente vamos a efectuar la apertura de esta tarjeta gráfica Gigabyte GTX 1650 Super OC. Esta es la mejor forma de ver de la forma más detallada la construcción de la PCB y electrónica, y el diseño del bloque de refrigeración. Para ello solamente debemos retirar los 4 tornillos principales que sujetan el bloque al socket y otros dos tornillos más pequeños que la afianzan. Recordad que si hacéis esto por vuestra cuenta, perderéis la garantía del producto al romper el sello del tornillo.
Disipador WINDFORCE X2
Empezamos por el disipador, el cual se compone de un solo bloque de tamaño completo que ocupa prácticamente toda la carcasa de la tarjeta. Está construido en aluminio, y en este caso vemos una densidad de aletas notablemente inferior a los modelos superiores por el simple hecho de ser una GPU con menor TDP.
En él destaca el gran bloque de aluminio situado en la zona central por el que pasa un solo heatpipe de cobre desnudo que hace contacto directo con el chip principal. Este heatpipe consta de dos capas de cobre y entre ellas unos microcanales con líquido para mejorar la trasferencia de calor. Pero lo que nos llama la atención es que la GPU está colocada de forma trasversal a este tubo de cobre, por lo que la superficie de aprovechamiento es baja. En este caso no le damos mucha importancia, pero en GPU de superior TDP sería más crítico de cara a la trasferencia de calor.
A su vez, el heatpipe se extiende a derecha e izquierda para repartir el calor hacia las otras zonas del disipador y así extender su eficacia. El diseño tiene la ventaja de poder retirar simultáneamente el calor de los chips de memoria gracias a su extensión y a incorporar pads térmicos de silicona. De igual forma, parte del disipador hace contacto directo con el VRM compuesto por 3 fases de alimentación.
Arquitectura de la Gigabyte GTX 1650 Super OC
Ahora pasamos al PCB, que al igual que ocurre en otros modelos cuenta con zócalos que no están utilizados, como son los de los chips de memoria, por ser una placa genérica susceptible de ser utilizada por otras GPU de distinta configuración. Vemos que es una placa bastante compacta y mucho más corta que el disipador y carcasa.
En cualquier caso tenemos un VRM compuesto por 3 fases de alimentación con MOSFETS de la serie Ultra Durable de Gigabyte que darán energía al chipset para soportar procesos de overclocking como ahora más adelante veremos.
Vamos a darle un repaso más en profundidad a las especificaciones de la Gigabyte GTX 1650 Super OC para saber qué ha cambiado respecto a la 1650 normal. Este nuevo refresco de Nvidia mantiene el chipset TU116 con proceso de fabricación en 12 nm FinFET y arquitectura Turing. Pero ahora su interior tenemos 20 multiprocesadores de flujo (SM Count) y 1280 Núcleos CUDA, prescindiendo una vez mas de núcleos RT y Tensor. Apreciamos un importante aumento de CUDA, ya que la versión anterior contaba con 896, quedándose ahora más cerca de la 1660 Super como se verá en los resultados.
La frecuencia base es de 1530 MHz, mientras que la frecuencia boost máxima en este modelo OC es de 1755 MHz, cifra inferior a otros modelos como el de Asus, y que se va a reflejar en los FPS. La configuración de caché L1 se mantiene igual, con 64 KB por SM, y la caché L2 con 1024 KB. De esta forma, se obtienen 80 TMUs (unidades de textura) y 32 ROPs (unidades de rasterizado).
Otra de las novedades que aumentarán el rendimiento de esta tarjeta, radica en su configuración de memoria. Se mantienen los 4 GB, pero ahora son de tipo GDDR6 trabajando a 6000 MHz, lo que genera una frecuencia efectiva de 12 Gbps, siendo todavía inferior a los 14 Gbps que pueden llegar otros modelos. El aumento de rendimiento será de aproximadamente un 50% respecto al modelo 1650 normal, y el doble de potente que una GTX 1050. El ancho de bus de mantiene en 128 bit (4 módulos x 32 bits) que generan un ancho de banda de 192 GB/s.
Lo cierto es que en este refresco sí que se han producido bastante cambios y no solo un cambio de memoria como en la 1650 Super. No obstante continuamos pensado que esto se podría haber hecho ya desde el inicio de la arquitectura, pero todo sabemos que esta decisión de Nvidia se debe a que las Radeon RX Navi vienen pisando con fuerza.
Banco de pruebas y test de rendimiento
Ahora vamos a realizar los correspondientes test de rendimiento, tanto benchmarks como pruebas en juegos, a esta Gigabyte GTX 1650 Super OC. Nuestro banco de pruebas consta de los siguientes componentes:
BANCO DE PRUEBAS |
|
Procesador: |
Intel Core i9-9900K |
Placa Base: |
Asus Maximus XI Formula |
Memoria: |
|
Disipador |
|
Disco Duro |
|
Tarjeta Gráfica |
Gigabyte GTX 1650 Super OC |
Fuente de Alimentación |
Todas las pruebas y test sintéticos las hemos realizado con los filtros tal y como vienen en la configuración de cada programa. Las pruebas constan de test que se ejecutan en las tres resoluciones principales, Full HD, 2K y 4K. Hemos ejecutado todas ellas sobre el sistema operativo Windows 10 Pro en su versión 1903 totalmente actualizado y con los drivers Nvidia 441.41, siendo la última versión disponible.
¿Qué buscamos en estas pruebas?
En primer lugar, la mejor calidad de imagen posible. El valor más importante para nosotros es la media de FPS (Fotogramas por segundo), a mayor número de FPS más fluido irá el juego. Las puntuaciones de benchmarks nos ayudarán a comparar esta GPU con la competencia. Para diferenciar un poco la calidad, os dejamos una tabla para valorar la calidad en FPS en función de la cantidad que obtengamos en cada juego y resolución.
FRAMES POR SEGUNDO | |
Frames por Segundo (FPS) | Jugabilidad |
Menos de 30 FPS | Limitada |
30 ~ 40 FPS | Jugable |
40 ~ 60 FPS | Buena |
Mayor de 60 FPS | Bastante Buena |
Mayor de 144 Hz | Nivel e-sports |
Benchmarks
Para las pruebas de benchmark utilizaremos los siguientes programas y test:
- 3DMark Fire Strike normal
- 3DMark Fire Strike Ultra
- Time Spy
- VRMARK Orange Room
Una vez más vemos que los resultados muestran una notable mejora respecto a la Nvidia GTX 1650 “normal” y es evidente al tener muchos más CUDA y GDDR6 para mover los gráficos. No obstante, la frecuencia OC de este modelo es más bien discreta, y esos 1755 MHz no van a ser capaces de superar al modelo de Asus que probamos hace unos cuantos días. En cualquier caso, son valores muy similares, y a poco que aumentemos de forma manual la frecuencia de las memorias con un overclock suave tendremos idéntico rendimiento a un precio menor.
Pruebas en juegos
Vamos a ahora a evaluar el rendimiento real en juegos, teniendo así una prueba más palpable de lo que nuestra Gigabyte GTX 1650 Super OC podrá entregar bajo DirectX 12, OpenGL en este caso.
Las pruebas las vamos a realizar a las tres resoluciones más utilizadas en gaming, nos referimos a Full HD (1920 x 1080p), QHD o 2K (2560 x 1440p) y UHD o 4K (3840 x 2160p). De esta forma, tendremos una gama completa de resultados para poder compararlos con otras GPU. Para cada uno de los juegos, hemos mantenido los ajustes automáticos seleccionados en cada uno y para cada resolución.
- Final Fantasy XV, standard, TAA, DirectX 12
- DOOM, Ultra, TAA, Open GL
- Deus EX Mankind Divided, Alto, Anisotropico x4, DirectX 11
- Far Cry 5, Alto, TAA, DirectX 12
- Metro Exodus, Alto, Anisotropico x16, DirectX 12 (sin RT)
- Shadow of the Tomb Rider, Alto, TAA + Anisotropico x4, DirectX 12
- Control, Alto, sin RTX, renderizado a 1920x1080p, DirectX 12
- Gears 5, Alto, TAA, DirectX 12
Los resultados de rendimiento se mantienen casi constantemente a 1 o 2 FPS de diferencia con el otro modelo 1650 Super probado, algo normal por ser su frecuencia máxima inferior. En otros títulos como DOOM o Metro parece haberse notado un poco más, porque dependen mucho más de la GPU por el motor gráfico utilizado. En cualquier caso, siempre estamos muy por encima de la 1650 que es el objetivo.
Esta tarjeta gráfica, a pesar de ser una gama de entrada para el mundo gaming, tiene un interesante rendimiento en Full HD y 2K, con tasas muy cercanas a los 50 FPS en casi todos los casos. Considerando que la configuración en los juegos es alta, a poco que modifiquemos las texturas, campo de visión y filtrado, obtendremos los tan deseados 60 FPS. Gran opción para presupuestos apretados.
Overclocking que se hace notar
Hemos efectuado un overclocking a esta Gigabyte GTX 1650 Super OC hasta dar su máximo asegurando siempre la estabilidad. En este caso hemos utilizado el software EVGA Precision X1, que va fenomenal con las GPU de Nvidia. De esta forma hemos realizado un nuevo test en 3DMark Fire Strike y nuevas pruebas a Shadow Of The Tomb Raider en las tres resoluciones.
La ventaja de tener un overclocking de fábrica más pequeño es que será susceptible de un mayor aumento del mismo, al menos hasta lo que el VRM nos permita. En este modelo hemos podido aumentar la frecuencia de la GPU unos 150 MHz, que se ha traducido en una frecuencia de operación de 1830-1850 MHz, quizás algo limitada por el sistema de alimentación. Así mismo, las memorias las hemos aumentado hasta los 6780 MHz, con una subida de nada menos 780 MHz para situarlas casi en los 14 Gbps de trasferencia. Esta es la máxima capacidad ala que hemos obtenido una estabilidad satisfactoria para poder jugar.
Aquí os dejamos los nuevos resultados obtenidos en las pruebas realizadas en comparación con la configuración estándar.
Shadow of the Tomb Rider | Stock | @ Overclock |
1920 x 1080 (Full HD) | 68 FPS | 73 FPS |
2560 x 1440 (WQHD) | 45 FPS | 50 FPS |
3840 x 2160 (4K) | 22 FPS | 26 FPS |
3DMark Fire Strike | Stock | @ Overclock |
Graphics Score | 12247 | 13148 |
Physics Score | 23902 | 23713 |
Combinado | 11254 | 12063 |
Con este aumento hemos obtenido resultados que prácticamente podrían igualar a una GTX 1660. Y en proporción con su rendimiento base, el porcentaje de aumento supera a la versión de Asus probada con un rendimiento ligeramente superior en juegos. El aumento ha sido de 5 FPS en 1080p, 5 FPS en 2K y 4 FPS en 4K que es mucho para esta resolución.
Gigabyte ha demostrado aquí la capacidad de su VRM de 3 fases ,y la solvencia de este disipador de doble ventilador que ha mantenido las temperaturas en unos cómodos 49⁰C bajo estrés funcionando al máximo y algo más de 55⁰ si los mantenemos en su configuración automática.
Temperaturas y consumo
Finalmente, hemos procedido a estresar la Gigabyte GTX 1650 Super OC durante unas horas mientras monitorizábamos sus temperaturas y consumo. Para ello, hemos utilizado como FurMark para el estrés y HWiNFO para capturar resultados, junto a un vatímetro que mide la potencia de todo el equipo completo, excepto el monitor. Con la llegada del invierno, la temperatura ambiente en la habitación es de 21°C.
Otra consecuencia de tener una menor frecuencia OC, es la de obtener un mejor consumo de esta tarjeta con tan solo 172 W en nuestro banco de pruebas y unas temperaturas sumamente buenas con 56⁰C bajo un estrés prolongado y los ventiladores en modo automático.
El conjunto es muy silencioso, nunca llegando a su máximo régimen. Algo que sí hemos detectado es que a veces el sistema de ventiladores se acelera cuando empieza a funcionar desde el estado de reposo. Quizás el firmware de control no esté totalmente ajustado, aunque siempre podremos instalar AORUS Engine para controlar estos ventiladores o hacer overclocking a la tarjeta gráfica si no optamos por el software de EVGA o cualquier otro.
Palabras finales y conclusión acerca de Gigabyte GTX 1650 Super OC
Si algo se ha conseguido con esta nueva 1650 Super es ajustar su rendimiento para que no exista la brecha actual entre la 1650 y la 1660. Es algo que se debería de haber hecho desde la primera versión, aunque más vale tarde que nunca.
El modelo que Gigabyte lanza al mercado nos ofrece un overclocking de fábrica de 1755 MHz, quizás un poco menor a lo que esperábamos pero también lleva consigo una disminución de precio. Con ella hemos obtenido cifras de rendimiento muy cercanas a la competencia, y que solo varían un par de FPS en casi todos los casos. La experiencia de juego es satisfactoria tanto en Full HD, así como en 2K si no somos exigentes con los gráficos.
La calidad del VRM de Gigabyte se demuestra sobre todo en overclocking, ya que nos ha permitido elevar 780 MHz a las GDDR6 y 150 MHz a la GPU para colocarse con unos registros entre 4 y 5 FPS superiores a los obtenidos en stock, igualando y superando a la competencia. Recordemos que en esto también influye la lotería del silicio.
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También hemos obtenido excelentes resultados de temperaturas con el bloque WINDOFRCE 2X. A pesar de las compactas medidas de la tarjeta gráfica y tener un bloque no demasiado contundente, los dos ventiladores hacen un gran trabajo para mantener las temperaturas en unos cómodos 56⁰C de forma constante bajo proceso de estrés y juegos.
Finalizamos este análisis con el precio y la disponibilidad de la Gigabyte GTX 1650 Super OC, que ya está en venta por un precio de tan solo 189 euros en nuestro país. De esta forma se convierte en una de las Super más económicas de doble ventilador. La falta de un OC más agresivo se compensa con el precio y su disipador.
VENTAJAS |
INCONVENIENTES |
+ GRAN RESPUESTA EN OVERCLOCKING |
– FRECUENCIA ALGO BAJA DE STOCK |
+ RENDIMIENTO EN FULL HD E INCLUSO 2K | |
+ DISIPADOR COMPACTO Y POTENTE |
|
+ RENDIMIENTO/PRECIO | |
+ DISEÑO CUIDADO Y VRM DE CALIDAD |
El equipo de Profesional Review le otorga la medalla de plata: