El próximo año 2015 llegarán al mercado los nuevos procesadores Intel Broadwell y Skylake, ambos fabricados en el mismo proceso de 14nm. Inicialmente debían llegar entre abril y junio del próximo año pero parece ser que finalmente habrá que esperar un poco más para tener entre nosotros a Skylake.
Por motivos desconocidos Intel ha decidido retrasar Skylake hasta finales de agosto- octubre del mismo año 2015, dicho retraso puede afectar negativamente a las ventas de los nuevos equipos con Windows 10, que en el mejor de los casos podrían llegar a finales de septiembre para empezar a ser comercializados unas semanas después. Este retraso puede afectar ala demanda inicial de Windows 10 ocasionando pérdidas a Microsoft.
Fuente: CHW