Sharkoon Skiller SGM2 es la nueva creación la marca gaming junto con el Drakonia II. En este caso se ha optado por un diseño clásico con los botones clásicos de un ratón, e ideal para manos de tamaño medio y grande. No podría faltar la abundante iluminación RGB y un sensor óptico de buenas prestaciones para conformar uno de los ratones gaming más asequibles del mercado.
En este análisis veremos de lo que es capaz este equipo y te proporcionaremos información completa para que sepas si es tu ratón o no.
Como siempre, agradecemos a Sharkoon su confianza en nosotros para cedernos el producto.
Características técnicas de Sharkoon Skiller SGM2
Unboxing y diseño
El Sharkoon Skiller SGM2 viene con una presentación de lujo, y no por ser un producto barato han descuidado ésta. Estamos ante una caja de cartón con un llamativo diseño en fondo negro, una imagen del ratón al más puro estilo gaming y letras plateadas en el logo de “Skiller”.
Ratón y accesorios vienen perfectamente acomodados en un molde de cartón y plástico para evitar golpes y roturas.
Dentro de la caja encontramos, además del ratón óptico, la guía de usuario para instalación e información, y un juego de patillas de repuesto. Detalle muy interesante y que es raro ver en un ratón tan económico.
El Sharkoon Skiller SGM2 es el segundo estreno de la marca junto al nuevo Drakonia II, también analizado recientemente por nosotros. En este caso tenemos un ratón de corte clásico y con un diseño orientado a ser compatible con los tres tipos de agarre para manos de tamaño medio y grande.
En general es un ratón grande, aunque bajito, con unas medidas de 132 mm de largo, 69 mm de ancho y solamente 42 mm de alto. Además, cuenta con un peso bastante ajustado de 106 gramos sin cable. Gracias a ser tan bajo, los tres tipos de agarre son posibles, aunque el ideal es el Palm Grip y Claw Grip.
Este Sharkoon Skiller SGM2 está construido en plástico negro, que notamos de buen grosor y rigidez, sin elementos sueltos ni bordes mal cuidados, por lo que el acabado es realmente bueno. En los laterales también se han colocado agarres de goma con rugosidad para que podamos sujetar bien el equipo en desplazamientos rápidos. Estos agarres no son blandos.
En la parte superior del ratón podemos encontrar los dos botones estándar para clic izquierdo y derecho con switch de una dureza media-alta y bastante sonoros. Estos botones son independientes y separados de la carcasa del ratón, algo que se agradece en un ratón gaming clásico.
Pero también tenemos una rueda de tamaño medio y recubierta con goma, que, si se pulsa, también es un botón. Finalmente tenemos un botón para selección de hasta 4 perfiles DPI. El ciclo de vida de todos los botones se sitúa en unos 5 millones de clics.
En la zona lateral, además del recubrimiento de goma dura, también tenemos dos botones de navegación, los cuales tienen un clic muy tierno y están bastante adelantados en cuanto a posición. Esto provoca que debamos estirar el dedo para alcanzarlo correctamente, pero sin problemas mayores.
En el lado derecho no tenemos botones y si el recubrimiento de goma dura. En general es un buen agarre, firme y con buena accesibilidad a los botones.
Claramente se trata de un ratón diestro, con una gran caída hacia la zona exterior para facilitar el clic derecho y botones principales asimétricos y de gran extensión. Vemos que la rueda no es demasiado prominente, pero su control es muy bueno, sin saltos marcados ni sonido.
La parte trasera tiene una curva suave y que se adapta perfectamente al agarre palm grip y claw grip. Junto con la curvatura general del ratón el agarre es firme y muy cómodo.
En la parte inferior tenemos cuatro pies de PTFE para proporcionar una buena superficie de desplazamiento con posibilidad de ajustar el peso. Este Sharkoon Skiller SGM2 monta un sensor óptico SPCP6651 con una resolución de 6.400 DPI y 1000 Hz de tasa de sondeo máxima. Este sensor soporta aceleraciones de 22,5 g, muestreo de 6.000 cuadros por segundo y una distancia lift-off de 2 mm. La configuración DPI viene determinada por cuatro escalones de 400, 1.200, 3.200 y 6.400 DPI, suficiente para trabajar bien con resoluciones de Full HD hasta 4K, aunque no más de eso.
Pero esto no es todo lo que tenemos en esta zona inferior, ya que se implementa un botón para seleccionar el perfil de color para el sistema de iluminación RGB de 10.6 millones de colores que tiene este ratón.
Este sistema no es configurable mediante software, así que la única interacción disponible será desde este botón inferior. Tendremos distintos colores fijos y un modo arcoíris como perfiles de color. Pero no solo tenemos esto, ya que el logotipo dispone de iluminación que indica el perfil DPI seleccionado.
El ratón además cuenta con conectividad alámbrica, mediante un cable USB de 1,80 metros de longitud. El cable tiene un acabado textil trenzado y un baño de oro en los contactos eléctricos.
Agarre y pruebas se sensibilidad al movimiento
Llegamos al apartado que más le interesará a muchos, y es el de describir la experiencia de uso de este Sharkoon Skiller SGM2 y las pequeñas pruebas a las que sometemos los equipos para detectar buen o mal rendimiento.
Debemos decir que la experiencia en el agarre es buena, tenemos entre nuestras mano un ratón completamente diestro con una gran caída hacia el exterior que facilita mucho el clic derecho. Es un ratón bastante largo, aunque muy bajito, lo cual permite que podamos agarrarlo de las tres formas principales: palm grip, claw grip y fingertip grip.
La posición más cómoda con una mano grande, bajo mi punto de vista, es la de claw grip o tipo garra, cogido por ambos lados y con un ligero arco en los dedos sin hacer contacto con la zona superior del ratón. Además, la posición debe ser adelantada, para coger bien los botones laterales. Esto también es extensible a manos más pequeñas.
Los botones son amplios y largos, así que con el agarre en punta y garra tendremos buen acceso a todos los controles.
Es un ratón bastante versátil, hemos obtenido una buena experiencia con él jugando y trabajando de forma normal. Los botones principales son más bien duros y los laterales más blandos que el resto. Quizás se desenvuelva mejor en juegos FPS debido a su diseño y posición de agarre ideal. Con solo 6 botones no programables quedará un poco limitado en RPG y Rol para jugadores profesionales, aunque seamos sinceros, es raro configurar macros y controles extras en un ratón para un juego.
Pasamos ahora a ver los resultados y experiencia en las pruebas de sensibilidad.
- Varianza el movimiento: El procedimiento consiste en meter el ratón en un recinto de unos 4 cm, luego movemos el ratón de un lado a otro y a distintas velocidades. De esta forma la línea que vayamos pintando en Paint tomará una medida, si las líneas varían de longitud, significará que tiene aceleración, sino no la tendrán. Y en este caso, para sorpresa de algunos, no tenemos aceleración alguna en este ratón, y hemos repetido la prueba varias veces para corroborarlo. Efectuando cualquier tipo de movimiento, el ratón siempre traza una línea de idéntica longitud, así que nuestra enhorabuena.
- Skipping de píxeles: Efectuando lentos movimientos, y a distintos DPI, el salto de píxeles es inexistente, tanto en alfombrilla como en madera.
- Tracking: las pruebas en juegos como DOOM o mediante la selección y arrastre de ventanas, el movimiento es correcto sin experimentar saltos o cambios de plano accidentales. No dispone de capacidad para movimiento extremadamente rápidos de más de 25 G, pero será raro llegar a esos registros.
- Desempeño en las superficies: Ha funcionado bien en todo tipo de superficies, brillantes como metal, cristales y por supuesto madera y alfombrillas, su distancia de lift off es relativamente alta y eso proporciona tolerancia a pequeñas grietas y superficies irregulares.
En general debemos decir que el comportamiento es muy bueno. No disponemos de ningún tipo de software de gestión ni asistencia a la precisión, por lo que las prestaciones son las puras del sensor y nada más.
Palabras finales y conclusión acerca de Sharkoon Skiller SGM2
A pesar de ser un ratón que no llega a los 20 euros, debemos reconocer que las prestaciones que da son de muy buen nivel. Tenemos un Sharkoon Skiller SGM2 de buenos acabados, buen plástico y una iluminación que funciona muy bien. Algo que este ratón no tiene, es gestión mediante software, aunque sería raro en un ratón de este coste, aunque es una limitación, claro.
En cuanto a la experiencia de uso, expresamos sensaciones más que positivas, el diseño tradicional y sin florituras nos proporciona buen agarre en los tres tipos para manos grandes, y palm grip para manos pequeñas. La disposición de los botones es buena, aunque los laterales están un poco adelantados. La rueda es muy buena sin apenas sonido y fácil de manejar.
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El sensor óptico SPCP6651 de 6.400 DPI tampoco presenta fallos en la sensibilidad, aunque para grandes resoluciones sí que viene algo justito debido a sus DPI. Aún así el desplazamiento es muy bueno y el deslizamiento de las patas también, en gran parte por ser un ratón bastante liviano.
Este Sharkoon Skiller SGM2 lo podremos encontrar por un precio recomendado de tan solo 18 euros por lo que es un producto muy asequible y con un gran nivel. No cabe duda de que el nivel de prestaciones ha subido mucho y este equipo es el vivo ejemplo.
VENTAJAS |
INCONVENIENTES |
+ DISEÑO CLÁSICO MUY VERSÁTIL Y ERGONÓMICO |
– CLIC PRINCIPAL ALGO DURO Y SONORO |
+ BUEN SENSOR ÓPTICO |
– NO ES GESTIONABLE POR SOFTWARE |
+ PRECIO |
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+ ILUMINACIÓN RGB |
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+ BUENO PARA TRABAJAR Y JUGAR |
El equipo de Profesional Review le otorga la medalla de plata y producto recomendado