Cómo conectar manualmente una VPN en Windows 11

En esta guía te voy a explicar cuáles son los pasos que debes seguir para conectar manualmente una VPN en Windows 11. Además, te hablo de los casos en los que te conviene conocer este método y qué diferencias hay entre acceder a una red privada de forma manual o
automática, gracias a una aplicación proporcionada por el proveedor. ¡No te lo pierdas!

Pasos para conectar manualmente una VPN en Windows 11

Para conectar una VPN manualmente en Windows 11, lo primero que debes hacer es acudir a la aplicación de Configuración. Accede a ella desde el menú de inicio, con el atajo de teclado Windows + I o buscando la app de ajustes con la búsqueda de Windows. Una vez hayas accedido a ella, accede al apartado Red e Internet.

A continuación, presiona en VPN para acceder a los ajustes de este tipo de conexión.

En el apartado VPN de los ajustes de Windows 11, haz clic en Agregar VPN.

Finalmente, introduce los datos que te haya proporcionado tu organización para iniciar la conexión.

Generalmente, es necesario seleccionar el tipo de conexión VPN, introducir un servidor y poner un usuario y contraseña. Adicionalmente, te recomiendo que marques la opción Recordar información de inicio de sesión. Esto evitará que tengas que poner una y otra vez los datos de la conexión de red privada. Cuando hayas terminado, pincha en Guardar y espera hasta que Windows 11 se conecte a la red privada.

Conectar manualmente una VPN: ¿cuándo es necesario?

Conectar manualmente una VPN en un ordenador con Windows es necesario en aquellos casos en los que el proveedor no proporciona una herramienta que automatice el proceso. Llegados a este punto, es importante diferenciar entre las VPN comerciales y las privadas. Me explico:

• VPN comercial. Son aquellas redes privadas que se comercializan para el público en general. Su objetivo es mejorar la privacidad en las conexiones de usuarios finales. Aunque utiliza la tecnología propia de una VPN, no se crea una red de área local privada para compartir recursos organizativos. Más bien, se aprovecha este enfoque para evitar que agentes externos, como el proveedor de servicios, rastreadores o hackers. Estos servicios se han vuelto muy populares últimamente, aunque en la mayoría de los casos no son tan necesarios como nos hacen creer.
• VPN privada. Aunque la llamo así, no necesariamente tiene que proporcionarla una empresa. También es frecuente en centros educativos. La cuestión es que con una VPN, vas a poder acceder a una red local de manera remota y segura. Por ejemplo, imagina que un empleado teletrabaja, pero necesita compartir un archivo en un disco duro de red. Gracias a la VPN, obtiene acceso a este recurso sin necesidad de estar físicamente conectado a la red local ni acudir a la oficina.

En los primeros casos, el de las VPN comerciales, lo más usual es que el proveedor facilite una aplicación que gestione la conexión privada. Desde ella también es posible hacer cambios en el comportamiento de la conexión, como cambiar la ubicación o aplicar filtros.

Si hablamos de VPN proporcionadas por una organización, como una empresa o universidad, la cosa cambia. Generalmente, lo que se proporciona en este caso no es una aplicación que automatice la conexión, sino unos credenciales para que el usuario establezca la conexión manualmente. Es en estos casos cuando hay que seguir los pasos mencionados en el apartado anterior. También será necesario poner en práctica este método si creas tu propia VPN casera.

Diferencias entre conectar manualmente una VPN en Windows 11 y hacerlo con una app

Si hablamos de alguna de las mejores VPN comerciales, lo más habitual es que dispongan de una aplicación que se encarga de crear la conexión en tu ordenador. Con la herramienta incluida, además, se proporcionan ajustes adicionales que son útiles para el usuario. Por ejemplo, en la mayoría de los casos, vas a poder cambiar la ubicación de tu conexión o activar algún filtro para bloquear contenido en Internet.

Como te he explicado más arriba, conectar manualmente una VPN en Windows 11 suele ser necesario cuando esta conexión no es comercial, sino que la provee una empresa. No obstante, en el momento en el que estás conectado mediante una VPN, el efecto es el mismo: tus datos viajan a través de un túnel que los hace invisibles del resto de usuarios de tu red local.

Por lo tanto, las diferencias que existen entre conectar manualmente una VPN en tu PC y hacerlo con una aplicación radican en los ajustes que vayas a poder aplicar una vez se ha activado la conexión. Pero, a efectos prácticos, tanto si te conectas a una red privada mediante una aplicación como si lo haces introduciendo de forma manual los datos de conexión, tus datos se mantendrán a salvo. Al menos de los agentes externos a la conexión VPN, como tu ISP o cualquier otro usuario que esté conectado al mismo WiFi.

Y tú, ¿por qué necesitas conectar manualmente una VPN? ¿Tu empresa suele utilizar este tipo de redes privadas para proteger la información? Deja tu comentario más abajo. ¡Nos leemos!