Una unidad USB dañada no es algo extraño, suelen darse este tipo de problemas de forma frecuente. Si ese es tu caso, no te preocupes, hay posibilidades de revivir esta unidad y que todo vuelva a la normalidad. Aquí te mostramos cómo hacerlo paso a paso, y en caso de que tenga solución, que puedas seguir haciendo uso de ella como antes del problema.
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¿Por qué puede dejar de funcionar una unidad USB?
Antes de nada, es importante conocer los motivos por los que una unidad USB puede estar dañada:
- Daños físicos: las unidades USB son sensibles a los golpes y caídas. Si se te cae o la expones a temperaturas o humedades extremas, sus componentes internos pueden dañarse y dejar de funcionar. En caso de que no sea nada de lo anterior, también pueden producirse daños físicos por otros motivos, como un mal funcionamiento de algún componente, sobretensiones, etc.
- Desgaste: como cualquier dispositivo electrónico, las unidades USB se desgastan con el uso. Esto se acelera si la usas mucho o si no la tratas bien, forzándola, golpeándola mientras está conectada al puerto (lo cual no solo puede estropear la unidad USB, también el propio puerto del ordenador), sometiéndola a golpes, vibraciones, temperaturas más altas, suciedad, etc. Esto es algo normal por el uso, aunque si se cuida bien no debería ser una causa, al menos en los primeros años.
- Problemas de software: otros motivos pueden pasar por errores, virus, desconexión sin usar la opción segura, apagones inesperados, etc., haciéndola ilegible o inaccesible debido a la corrupción de datos. A veces incluso pueden ser cosas pasajeras, que el sistema operativo no la reconozca por cualquier motivo y que al reiniciar vuelva a funcionar todo bien.
- Fallos de conexión: asegúrate de que se conecta bien al ordenador, ya que un puerto USB defectuoso o una conexión suelta pueden impedir su funcionamiento.
- Firmware desactualizado: el firmware que controla la USB necesita actualizarse periódicamente en algunos casos. Si está obsoleto, puede causar fallos o que la unidad sea ilegible.
- Errores de formato: si la desconectas del ordenador sin cuidado o la formateas incorrectamente, se pueden producir errores en el sistema de archivos que la hagan inaccesible. Es otra de las causas más comunes.
Ahora ya conoces los posibles motivos, y para no perder tus datos, vamos a intentar hacer una serie de pasos para salvarla.
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Cómo reparar una unidad USB dañada
En el caso de que te encuentres con una unidad USB que no funcione, entonces puedes intentar realizar los siguientes pasos para tratar de salvarla, aunque no siempre es posible, lo que lleva a una pérdida de datos. Por ese motivo, siempre aconsejamos tener backups o copias de seguridad hechas.
Si tu memoria USB no funciona, no te desesperes. A continuación te presento algunos pasos que puedes seguir para intentar repararla:
Inspección física
Revisa la memoria USB en busca de grietas, roturas, quemaduras, u otros daños físicos. Si el daño es grave, es probable que tengas que reemplazarla. No intentes forzarla, ya que podría romperse aún más. Pero, si sabes lo que haces y ves que pudiera tener solución, como por ejemplo mediante soldadura de algún conector que se ha soltado o cosas así, puedes proceder a solucionarlo.
Actualización del firmware
Visita el sitio web del fabricante de tu memoria USB y descarga el firmware más reciente.
Instala el firmware actualizado siguiendo las instrucciones del fabricante. Esto también puede solucionar algunos problemas de las unidades USB. Aunque no es frecuente que necesiten este tipo de operaciones, nos debemos asegurar de que no sea esto.
No olvides que no debes descargar firmware desde sitios de terceros, siempre desde la web oficial, ya que de lo contrario podría contener código malicioso.
Comprobar el sistema de archivos
Si no puedes acceder a la memoria USB, verifica el sistema de archivos (FS) para asegurarte de que está formateado correctamente. Si el sistema de archivos está dañado, es posible que tengas que volver a formatear la memoria USB. ¡Ten en cuenta que esto borrará todos los datos almacenados en ella!
Otra posibilidad es que lo que falla es la tabla de particiones, que esté dañada y no permita acceder al contenido de la memoria USB. En tal caso, puedes usar programas como GParted para solucionar los problemas de las tablas y también del sistema de archivos.
Análisis de malware
El malware pueden dañar la memoria USB y hacer que sea ilegible o que los datos estén corruptos. En estos casos, es posible que haya un código malicioso que esté causando el problema. Te recomiendo ejecutar el análisis profundo de tu software antivirus o antimalware para tratar de detectar y eliminar posibles amenazas.
Tanto en el caso de que la memoria USB estuviese corrupta o con malware, puedes intentar recuperar tus datos con herramientas como Recuva o EaseUS Data Recovery, entre otras. De este modo, podrás salvar tus archivos, o parte de ellos…
Administración de discos
Si la memoria USB no aparece en el Explorador de Windows, puede que sea necesario inicializarla en la herramienta Administración de discos. Para ello, abre Administración de discos, haz clic derecho en la memoria USB y selecciona «Inicializar disco».
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Prueba con otro ordenador
Si la memoria USB sigue sin funcionar, intenta conectarla a otro ordenador o a un puerto diferente. Si funciona en otro ordenador, el problema podría estar en el puerto USB o en los controladores de tu ordenador.
Te recomiendo también comprobar si existe holgura, a veces esto causa que no sea reconocible. También podría estar sucio el puerto USB, evitando que haga bien el contacto. Trata de limpiarlo si ves que lo necesita.
Eso sí, no uses productos químicos o agua para la limpieza. Debe hacerse siempre con el equipo parado y desconectado de la corriente. Puedes usar un bastocillo algodón humedecido en alcohol isopropílico. Y comprueba que el puerto esté totalmente seco antes de probarlo.
Reparación del hardware
En el caso más extremo, puede que el problema esté en el hardware, y muy probablemente se necesite reparar el puerto USB, que se haya roto o despegado de su posición correcta. En estos casos, se necesitaría la intervención de un técnico.
No obstante, arreglar un puerto USB en un portátil es una tarea tediosa y no demasiado barata. Y reparar la unidad USB tampoco merece la pena en muchos casos, y lo mejor pasa por comprar directamente una unidad USB nueva…
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