Los fabricantes deben ser cada vez más ingenioso en la creación de chasis de PC y explorar nuevas opciones de configuración y posición; esto es precisamente lo que hace el Sharkoon REBEL C20 ITX RGB.
Puede adoptar una posición horizontal o vertical en su alargado cuerpo repleto de rejillas con filtros, donde podemos instalar refrigeración líquida de 360 mm y GPU de hasta 365 mm y 65 mm de grosor. Gran capacidad para placas ITX ¡lo probamos!
Agradecemos Sharkoon su confianza en nosotros por enviarnos este chasis para su análisis.
Este Sharkoon REBEL C20 ITX RGB nos llega en una caja de cartón rígido y acabado en blanco y negro, con la presentación básica y prestaciones del chasis en el interior. Dentro, tenemos protecciones de espuma de polietileno para proteger el producto.
El contenido será el siguiente:
Comenzamos con el análisis externo y de los paneles del Sharkoon REBEL C20 ITX RGB, el cual únicamente está disponible en color negro, si bien existen dos variantes, una sin ventiladores, y la RGB con 3 unidades de 120 mm preinstaladas. En cualquier caso, el diseño es idéntico.
Empezando por lo que sería el lateral izquierdo en posición horizontal, tenemos un panel de metal con rejilla de patrón cuadrado y alta densidad que cubre toda la zona excepto el marco de fijación.
Tras esta rejilla tenemos un filtro de partículas metálico de grano fino con fijación magnética, muy fácil de retirar para su mantenimiento. Por su parte, el panel se fija al chasis mediante 4 puntos de presión de dureza media/baja.
El panel lateral derecho es un calco del anterior, mismo tamaño, sistema de fijación e implementación de filtro.
Nos vamos hacia el panel frontal, donde, sorpresa, nada cambia en cuanto a diseño. Otro panel de fijación por presión con rejilla y filtro, que da perfecto acceso al interior.
Aquí se ha situado el panel I/O cuando el chasis está en posición horizontal, mientras que lo moveríamos a lo que sería la zona trasera-superior para hacer la conversión a posición vertical.
En él se integran 2 de las 4 patas, e incluye los siguientes elementos:
A continuación pasamos a la cara superior (o frontal en vertical) la cual de nuevo cuenta con otro panel metálico tipo rejilla con filtro de polvo magnético interior y fijación por puntos de presión.
Seguimos con la parte trasera (o inferior en vertical) donde encontramos el hueco para el panel de puertos de la placa base, una abertura que da acceso a los 3 slots de expansión ATX y el panel cuadrado para ventilador de 120 mm con filtro de polvo básico.
Como elementos adicionales tenemos un hueco superior por donde pasaríamos los cables provenientes del panel I/O si optamos por el formato vertical. Debajo tenemos el puerto de alimentación C14 de 3 pines con cable de extensión, el cual también es extraíble.
Finalizamos con la base del Sharkoon REBEL C20 ITX RGB, donde tenemos una amplia abertura provista de filtro de polvo básico, así como dos aberturas en el extremo. Una de ellas servirá para recolocar el conector C14 en modo vertical.
Toca retirar todos los paneles que podamos del Sharkoon REBEL C20 ITX RGB, que serán 4, para adentrarnos en el interior y estudiar su capacidad.
El recinto interno está configurado en una sola cámara, donde coexistirán los cables y hardware del equipo, siendo en este caso admisible dado que no tenemos cristal con el que podamos visualizar el interior.
La zona de acceso está flanqueada por un raíl de ventiladores longitudinal, el cual podemos retirar para un mejor acceso. Esta será nuestra opción para instalar RL AIO.
En la chapa de interior se sitúa el marco de instalación de la placa ITX como único formato compatible, y justo a su derecha encontramos la semicubierta metálica donde se ubica la fuente de alimentación SFX, soportando 175 mm de longitud máxima.
En la parte izquierda tenemos los 3 slots de expansión con chapas atornilladas, y toda la zona inferior libre con potencial para instalar ventiladores si el grosor de GPU lo permite. Arriba ya tenemos 3 ventiladores colocados.
El espacio para placa base está habilitado para trabajar desde atrás en el disipador o ranura M.2 adicional. Si optamos por disipador de aire, soporta 175 mm de altura máxima.
Para el montaje de una tarjeta gráfica dedicada, tenemos un espacio de 365 mm de longitud máxima, soportando grosores de hasta 65 mm, por lo que es posible montar la mayoría de tarjetas gráficas, excepto alguna custom de gama muy alta.
Pues bien, en este Sharkoon REBEL C20 ITX RGB no hay espacio dedicado a cables como tal, éstos deberán coexistir con el resto de hardware, y enrutarlos lo mejor que podamos utilizando las distintas aberturas para colocar presillas disponibles.
Tenemos 3 lugares de instalación de almacenamiento, siendo el primero de ellos en la base del chasis. Distinguimos 4 agujeros compatibles con una unidad SSD/HDD de 2,5”. Dependiendo del grosor de la GPU, estará o no disponible, y además invalida un espacio de ventilador.
El segundo espacio se ubica en la cubierta de PSU, donde tenemos 2 brackets metálicos para unidades SSD/HDD de 2,5”. Retirando los dos accedemos a la capacidad de 1 HDD de 3,5”.
La tercera zona está situada junto a la cubierta de PSU, pudiendo atornillar 1 unidad SSD/HDD de 2,5” en la chapa.
Lo cierto es que con tan amplio espacio interno, se podría haber incrementado la capacidad para HDD, por ejemplo en la base, o incluso en el raíl de ventiladores desmontable.
Pasamos a estudiar el apartado de ventilación del Sharkoon REBEL C20 ITX RGB, siendo una de sus principales características por la amplia capacidad que nos proporciona.
De serie ya contamos con 3 ventiladores Sharkoon SilentStorm 120 RGB, con un anillo de iluminación en el sistema de rotación. Soportan control PWM mediante cabecera de 4 pines.
Cada unidad opera en un rango de 400 a 1400 RPM, generando un flujo de aire de 93,6 m3/h, 1,91 mmH2O de presión estática y 20,4 dBA de ruido máximo. Por tanto, a máximo rendimiento serán unos ventiladores no demasiado ruidosos.
Para el control RGB tenemos su propio controlador instalado en el chasis, con capacidad para 4 cabeceras 5VDG, y potencial para sincronizar más ventiladores de chasis o RL.
El espacio para ventiladores será el siguiente:
El espacio para radiadores será:
Sharkoon no especifica en sus especificaciones que haya soporta RL, pero os podemos demostrar que así es, instalando un sistema RL AIO de 360 mm para la CPU.
La ubicación en el lateral hace uso del raíl desmontable, facilitando así el procedimiento de montaje, sin conflicto con la PSU o placa base, pues hay suficiente espacio para almacenamiento y cabezales de bombeo de CPU de gran tamaño.
Si optamos por la ubicación inferior (o trasera en modo vertical) podemos instalar 3 unidades, salvo que utilicemos uno de los huecos para el SSD de 2,5”, en tal caso, estaremos más limitados.
Procedemos al montaje de nuestro banco de pruebas y puesta en marcha del Sharkoon REBEL C20 ITX RGB con los siguientes componentes:
Lo primero que vamos a hacer es convertir el chasis horizontal en vertical, así que debemos retirar las 4 patas, incluido el panel I/O, y extraer el conector de alimentación.
De esta forma las patas las reubicaremos en lo que antes era la zona trasera, que ahora queda hacia abajo, con el panel I/O orientado hacia la cara donde están los ventiladores preinstalados. El conector de alimentación debemos colocarlo en el panel trasero.
Es un procedimiento bastante sencillo como se puede ver, así que continuamos instalando la PSU en su correspondiente cubierta, y la placa base justo a su lado, de tal forma que los puertos quedarán mirando hacia abajo.
No es la posición más cómoda para acceder a los puertos, pero la altura de las patas nos permite de forma relativamente cómoda conectar cabeceras USB y doblar el cable.
Antes de colocar el sistema de refrigeración debemos instalar la tarjeta gráfica, dado que posteriormente debemos colocar el raíl y cerrar parte del espacio de acceso. De nuevo, el mayor hueco dejado para los slots permite colocar cables DP o HDMI y doblarlos con comodidad.
Aún no hemos terminado, porque vamos a darle la vuelta a los ventiladores Sharkoon del frontal para que queden en modo entrada de aire, y así muestren una estética más depurada en el resultado final.
Para finalizar, colocamos el sistema de refrigeración líquida y atornillamos el raíl, utilizando en este caso una configuración de ventiladores en modo entrada. Nos podemos permitir esta acción dado que hay muchas rejillas para sacar el aire caliente y no calentar tanto la placa y otros componentes.
A continuación mostramos el resultado final con el montaje realizado y el chasis funcionando.
Llevaremos a cabo las pruebas de estrés en el hardware durante 60 minutos para registrar las temperaturas dentro del chasis, con la configuración de stock de sus componentes.
Thermaltake The Tower 300 | Reposo | Estrés |
Chipset | 61ºC | 67ºC |
Ruido máximo | 43 dBA | 48 dBA |
Tal y como habíamos comentado, el chasis no tiene problemas de renovación de aire con los 6 ventiladores en modo entrada de aire, pues todo el resto de zonas se encargan de expulsar el aire por convección natural.
Es cierto que se concentrará un poco más de calor en los bloques de disipación de la placa base, pero nada importante de cara al rendimiento del equipo. Si estáis en un ambiente caluroso, recomendamos añadir ventiladores para expulsar aire, o simplemente dejar los 3 ventiladores en su posición de serie.
Llegamos al final de este análisis donde disfrutamos de la presencia de este chasis capaz de colocarse en dos posiciones distintas tan solo cambiando de lugar 4 elementos.
Sinceramente, nos parece más interesante estéticamente hablando el modo vertical, pues ocupa menos espacio en el escritorio y los ventiladores quedan “más resultones”, especialmente utilizando la RL de 360 mm.
Si bien es cierto el panel de acceso a puertos será el punto débil de este formato al quedar todas las conexiones debajo de la torre, excepto el panel I/O, claro. Podrían haber implementado una ubicación lateral para él, aunque conllevaría hacer cambios en las patas e integración del propio panel, por tanto, han optado por la vía más simple.
En lo que respecta al diseño del chasis, tenemos un exterior sobrio y elegante, primando la ventilación con abundantes rejillas protegidas por filtros de aire magnéticos, y paneles de fijación rápida sin tornillos de muy fácil acceso.
Aquí tienes la guía con las mejores tarjetas gráficas del mercado
El interior también está bien pensado para adoptar configuraciones gaming donde coexistan RL AIO de 360 mm y grandes tarjetas gráficas de 65 x 365 mm, con un sistema de instalación bastante cómodo.
Es cierto que no soporta fuentes de alimentación ATX aun existiendo espacio en el frontal (techo), pero así no quita espacio a la GPU. En cuanto al almacenamiento, existe bastante espacio siempre que utilicemos SSD, pero solo soporta un HDD de 3,5”. Se podrían haber aprovechado la base o raíl para darle espacio a más unidades de forma opcional.
El precio de este chasis Sharkoon REBEL C20 ITX RGB será de 152€ en Amazon para la versión RGB y de 142€ para la versión sin ventiladores. Lo cierto es que no es una cifra muy ajustada tratándose de Sharkoon
Si bien es cierto que el trabajo y técnica de implementación está por encima de gran parte de sus chasis, entrando más dentro de una gama media/alta para montajes profesionales tipo ITX. Un buen chasis, muy amplio para ser ITX, y bien construido, por tanto, es una compra acertada.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
CONFIGURABLE EN FORMATO HORIZONTAL Y VERTICAL | PRECIO UN POCO ELEVADO |
PANELES MESH DE EXTRACCIÓN RÁPIDA | POCO ESPACIO PARA HDD DE 3,5” |
FILTROS DE POLVO EN TODAS LAS ABERTURAS | NO SOPORTA PSU ATX |
SOPORTE PARA GPU DE GRAN TAMAÑO | |
INCLUYE 3 VENTILADORES RGB | |
SOPORTA RL AIO 360 MM | |
PANEL I/O POTENTE |
El equipo de Profesional Review le otorga la medalla de oro:
Última actualización el 2024-11-21
Sharkoon REBEL C20 ITX RGB es un chasis bien pensado para montajes ITX con GPU de tamaño masivo, pudiendo adoptar posición horizontal o vertical.
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