Ya analizamos la silla Sihoo Doro S300, y ahora tenemos en nuestras manos la silla ergonómica para oficina Sihoo Doro C300, una opción menos avanzada y asequible, pero sin renunciar a un diseño ergonómico de gran adaptabilidad.
Su chasis de plástico y patas de acero cromadas cuentan con ajuste en altura en asiento y respaldo, lumbar autoajustable, reposacabezas 3D y reposabrazos 4D. Todo ello con una malla elástica flotante transpirable que distribuye el peso. ¡Os contamos nuestras sensaciones con ella!
Debemos agradecer a Sihoo su confianza en nosotros por enviarnos esta silla para su análisis.
Comenzamos desempacando la Sihoo Doro C300, que viene desmontada en una caja de cartón considerablemente compacta, pero superando los 20 kg de peso.
En esta ocasión la distribución de elementos está bastante más cuidada que en la S300, al menos la unidad que nos llegó, pues aquí vemos moldes para cada pieza y una distribución muy bien llevada a cabo.
El contenido del paquete será el siguiente:
Esta Sihoo Doro C300 se presenta en talla única y versiones en blanco o negro, siendo la nuestra, evidentemente la blanca.
En la caja puede confundir el hecho de ver el código C300L, pero esto no indica el tamaño, pues la silla es de talla única.
Comenzamos ensamblando la base de la Sihoo Doro C300, que en este caso incluso las patas vienen desmontadas en 6 piezas.
Partimos de un núcleo central de acero en color negro, el cual quedará fuera de la vista del usuario, el cual forma un diseño de estrella de 5 brazos clásico. En cada extensión cuenta con dos agujeros para atornillar las patas.
Dichas patas, también se construyen en acero, pero cuentan con cierta curvatura hacia abajo para elevar la altura de la base, y un llamativo acabado cromado que aporta elegancia a esta versión blanca.
Como detalle que sí tenía la S300, pero aquí no vemos, es que el sistema de unión no tiene cubiertas de plástico internas que eviten ruidos o chasquidos de rozar el metal con metal.
Pues nada, toca ensamblar las patas y apretar los 10 tornillos con la herramienta que se incluye, con cierta dificultad en la rosca para así asegurar una presión adecuada.
Seguimos con las ruedas, un total de 5 unidades con doble superficie de rodamiento independiente de 6 cm, construidas en poliuretano, con pernos de acero que acoplaremos simplemente por presión en los extremos de las patas.
El siguiente elemento a ensamblar será el pistón, una configuración clásica de gas de clase 4 con un rango de ajuste en altura de 9,5 cm mediante una apalanca que ejerce presión en el extremo superior del mismo.
Para unificar la estética de la Sihoo Doro C300, este elemento también dispone de acabado cromado exterior, así que no es necesario embellecedor telescópico. Sí que se incluye un embellecedor metálico cromado para la unión pistón-base.
En cuanto al mecanismo que nos proporciona gran parte del ajuste de la silla (altura e inclinación del respaldo), para esta versión Sihoo Doro C300 se deriva de uno de silla gaming normal, mientras que la Sihoo Doro C300 Pro sí que lo integra en el propio asiento, como la S300.
El primer factor a tener en cuenta es que este mecanismo no permite ajustar la profundidad del asiento como sí hace la versión Pro. Tampoco utiliza accionadores mediante cable.
Está construido en acero, provisto de una sola palanca para ejecutar el ajuste en altura, y función de bloqueo para el mecanismo de inclinación del respaldo en 110º, 120º y 130º o modo completamente libre.
En lugar del típico mecanismo de ajuste de dureza por rosca, cuenta con un sistema de sensor de peso mecánico que realiza precisamente esa acción de poner más o menos duro el sistema de inclinación.
Personalmente, lo noto con la dureza justa y necesaria para inclinarme suavemente hacia atrás ejerciendo poca fuerza, por tanto, parece que el sistema cumple con lo que promete.
Continuamos con el asiento de la Sihoo Doro C300, el cual se basa en un chasis de plástico rígido de gran robustez, compuesto por dos elementos, la base, y el marco donde nos sentamos, unidos mediante tornillos.
Para el apoyo se utiliza una malla de alta elasticidad en diseño tipo cascada (o patata Pringles) muy transpirable y que se adapta uniformemente al cuerpo cuando nos sentamos, para ejercer una presión constante en todas las zonas.
El sistema de fijación de esta malla es simplemente a presión dentro de una doble estructura del marco de plástico, por tanto, no debería de salirse. En cuanto a la elasticidad, un sistema de doble mallado de nailon evitará que el material ceda excesivamente y asegura una larga vida útil.
La silla, y, por tanto, el asiento, soporta un peso máximo de 136 kg, ofreciendo una superficie de 49,5 cm de ancho y 42,5 cm de profundidad útiles, aunque la profundidad máxima es de unos 46 cm.
Mediante el ajuste en altura, el asiento queda a una distancia mínima del suelo de 47 cm y máxima de 55 cm medidos desde la zona central de apoyo. El borde frontal quedará entre los 38 y 47,5 cm de altura.
Por parte de los reposabrazos, están formados por un segmento de unión al asiento y otro vertical donde se coloca el elemento de apoyo con una gruesa superficie acolchada y formato cóncavo en color gris claro.
Dispone de movilidad 4D, esto significa que permiten un rango de ajuste en altura de 6,5 cm en 6 saltos, y no requiere palanca, ya que en el último salto se libera el mecanismo para volver a la posición inicial.
De igual forma, admite giro hacia dentro o fuera en 6 posiciones y ajuste en profundidad, sin bloqueo para ninguno de ellos. Son bastante estables y tienen poca holgura, aunque de base, son bastante elevados.
Llegamos al análisis del respaldo de la Sihoo Doro C300, el cual consiste en otro elemento compuesto por un chasis trasero de plástico y el marco del mismo material sobre el cual se coloca a presión la malla de apoyo, exactamente del mismo material que la del asiento.
No se puede ajustar su profundidad, y unido al hecho de tampoco poder ajustarse el asiento, sentimos que nos falta un poco de espacio atrás para sentirnos totalmente cómodos en la silla, dándonos la sensación de que vamos a escurrirnos hacia adelante, o de que estamos más al borde de lo que nos gustaría.
Para finalizar esta zona, tenemos un segmento de reposacabezas que se ancla en la parte superior mediante dos tornillos, con embellecedor, el cual ejerce movilidad 3D. Su base de fabricación es la misma; marco de plástico con malla transpirable en formato convexo.
Este elemento proporciona ajuste en altura en 5 saltos, ajuste de inclinación en 3 ángulos y ajuste de profundidad en 8 posiciones. Ésta última, se resetea en la 8ª posición hacia adelante. De él podemos decir que es muy cómodo y se ajusta bien al cuello o cabeza.
Hablando de dimensiones, el respaldo queda a una altura mínima de 106,5 cm y máxima de 125,5 cm si elevamos el asiento + respaldo + reposacabezas. Dispone de 55 cm de anchura útil en la zona de hombros y 49 cm en el segmento lumbar.
El reposacabezas se puede situar a una distancia en su zona media respecto del asiento, entre 57 cm en la posición más baja y 66 cm en la posición más alta o alejada.
Con esto concluimos el análisis de diseño y montaje de la silla Sihoo Doro C300, el cual hemos llevado a cabo en aproximadamente 30 minutos (proceso de fotos incluido).
Para ello disponemos de un manual en varios idiomas de correcta explicación e imágenes de cada paso (bastante pequeñas debemos decir).
Para cada uno de los tornillos y arandelas disponemos de una unidad extra, por si alguna se pierde o rompe, así como dos herramientas de montaje.
El resultado en esta versión Sihoo Doro C300 blanca ya lo estáis viendo, un estilo moderno con superficies curvadas, para adaptarse lo mejor posible a nuestro cuerpo y ejercer una posición saludable mientras estamos delante del escritorio.
No hace tanto tiempo que analizamos la S300, por tanto, es casi inevitable hacer cierta comparativa entre ella y este modelo Sihoo Doro C300, que inevitablemente está un poco más limitado en cuanto a ergonomía, pero claro, el precio es bastante inferior.
Y ciertamente puede compensarnos su compra, porque esta silla dispone de ajuste de altura del asiento y respaldo de forma individual, inclinación hacia atrás progresiva, reposabrazos 4D, lumbar autoajustable y reposacabezas 3D.
Todo ello le confieren un ámbito de posiciones que se adaptan a prácticamente cualquier posición y cuerpo dentro de una altura de entre 150 y 180 cm, aunque diríamos que una persona más alta también estaría cómoda dada la altura máxima a la que podemos situar el asiento.
Sólo encuentro una pega, y es que al principio cuesta un poco acostumbrarse al apoyo lumbar, porque se siente un poco salido, y da la sensación de que nos quedamos muy al borde del asiento. Ha faltado la posibilidad de ajustar la profundidad del asiento o este elemento para que la silla sea perfecta.
En lo que respecta a construcción, que no os engañe el chasis de plástico, porque es sumamente robusto y la superficie de tela flotante aguanta pesos de 136 kg, por lo que debería de mantenerse tensada duramente mucho tiempo.
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Ésta nos confiere gran comodidad y buen reparto de pesos, al mismo tiempo que alta transpiración y confort, especialmente para zonas calurosas. El reposacabezas y respaldo son muy cómodos al ajustarse bien a la curva del tronco.
En cuanto a los reposabrazos, también cuesta un poco acostumbrarse a su curvatura a la hora de usarlos como apoyo para teclado. Personalmente, soy de los que prefieren tenerlos bajo la mesa, y para ello se requiere una mesa con altura mínima de 69 cm, por tanto, hay bastante juego aquí.
El precio oficial de esta Sihoo Doro C300 será de $280 USD en la tienda oficial ($410 con descuento de $130) mientras que en Amazon la tenemos por 370€.
Es un buen precio si tenemos en cuenta que la versión C300 Pro está a 610€, con el añadido de ajuste de profundidad del asiento, reposabrazos 6D y dimensiones ligeramente más amplias.
Personalmente, reconozco que el ajuste de profundidad del asiento se me hace bastante necesario en esta silla, por tanto, si vuestro cuerpo es voluminoso o sois altos, os recomendaría la versión Pro, en caso de cuerpos más finos y bajos, con esta probablemente os sentiréis muy cómodos.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| DISEÑO ELEGANTE Y MODERNO EN NEGRO Y BLANCO | ASIENTO Y SEGMENTO LUMBAR SIN AJUSTE DE PROFUNDIDAD |
| EXCELENTE REPARTO DE PESOS EN ASIENTO Y RESPALDO | POSICIÓN BASE DE REPOSABRAZOS UN POCO ELEVADA |
| MALLA TRANSPIRABLE BIEN TENSADA | |
| EXCELENTE ERGONOMÍA: AJUSTE DE ALTURA ASIENTO, RESPALDO, REPOSABRAZOS, LUMBAR Y REPOSACABEZAS | |
| PATAS DE ACERO CROMADAS | |
| FÁCIL DE MONTAR |
El equipo de Profesional Review le otorga la medalla de platino:
Última actualización el 2024-11-21
Sihoo Doro C300 ofrece una gran ergonomía para trabajar y jugar con malla flotante, apoyo lumbar y reposacabezas ajustable, disponible en blanco y negro
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