En esta guía te voy a explicar qué es Sandbox en Windows, para qué sirve, qué requisitos debes cumplir para poder ejecutar esta solución y cómo activarla paso a paso. Aquí te proporciono toda la información que debes conocer con respecto a esta herramienta que, con toda probabilidad, vas a poder utilizar en tu ordenador. ¿Te gustaría probar ejecutables poco confiables en tu equipo? ¿Quieres instalar aplicaciones en tu ordenador y borrarlas con solo un clic? Quédate, porque lo que aquí te muestro te interesa mucho.
Índice de contenidos
¿Qué es Sandbox en Windows y para qué sirve?
Sandbox en Windows es una herramienta del sistema, diseñada por Microsoft, que te permite ejecutar un entorno aislado del sistema operativo. Como si se tratara de una máquina virtual (en esencia, lo es), en una ventana vas a tener una instancia de Windows totalmente independiente, sin conexión alguna con el resto de componentes del equipo, ni físico ni de software.
Es interesante notar que Sandbox es una palabra que se traduce como cajón de arena en español. Habitualmente, este término se emplea como sinónimo de un espacio donde hacer pruebas sin consecuencias. Es como jugar a construir castillos en un cajón de arena sabiendo que, más tarde, van a desaparecer. En ningún caso, son construcciones permanentes.
Como si de ese cajón de arena se tratara, Sandbox en Windows no solo evita que los programas y ejecuciones lleguen hasta el sistema principal, sino que además tiene un carácter temporal en todas las acciones. Hagas lo que hagas, se habrá esfumado la próxima vez que abras la herramienta.
Esto es importante
Desde Windows 11 22H2, Sandbox conserva los datos y cambios efectuados en los reinicios solicitados desde el espacio aislado. Esto es útil para utilizar aplicaciones que requieren reiniciar el sistema para completar su instalación. Solo en ese caso, Sandbox en Windows conservará los datos del usuario.
En definitiva, hablamos de una ejecución virtual del escritorio, aislada y que no almacena los cambios, donde probar todo tipo de programas, aplicaciones y hasta malware. Sí, en Sandbox puedes descargar un virus, infectar el sistema, conocer sus efectos y cerrar la ventana sin que eso tenga consecuencias en tu ordenador. Interesante, ¿verdad?
Activar Sandbox en Windows paso a paso
Para activar Sandbox en Windows debes cumplir con los siguientes requisitos:
- Activar las opciones de virtualización en la BIOS. La mayoría de equipos modernos cuentan con esta característica. Debes entrar en el menú de configuración de la BIOS y habilitar esta función. Es normal que venga activada por defecto.
- Tener al menos 4 GB de RAM (Microsoft recomienda 8 GB de RAM).
- Tener al menos 1 GB de espacio libre. Preferiblemente, es mejor contar con un SSD.
- Procesador de 64 bits, ya sea X64 o ARM.
- CPU con al menos dos núcleos.
- Windows 11 Pro. Si tienes Windows 11 Home, puedes actualizar la edición con una clave barata de Windows.
Una vez cumplas con todos los requisitos, la mayoría bastante accesibles, incluso el último, vas a poder seguir los pasos para activar Windows Sandbox. ¿Cómo hacerlo? La forma más sencilla es mediante un solo comando. Para empezar, abre PowerShell como administrador utilizando la búsqueda de Windows.
Seguidamente, introduce el siguiente comando para habilitar la función de Sandbox:
- Enable-WindowsOptionalFeature -FeatureName «Containers-DisposableClientVM» -All -Online
Espera a que termine el proceso. Como te podrás imaginar, puede tardar un poco en completarse, pero no se demora demasiado. En algún momento del procedimiento, tendrás que confirmar con una respuesta afirmativa. Tienes que presionar en Y y, luego, en Intro.
Pero, ¡cuidado! Al hacerlo se forzará un reinicio del sistema. Así que te recomiendo guardar todos los cambios antes de nada. Cuando haya finalizado el reinicio, y la consecuente instalación de Sandbox en Windows, inicia sesión con tu cuenta y busca el espacio aislado en el menú de inicio. Basta con escribir Windows Sandbox en el cuadro de búsqueda, tal y como se aprecia en la siguiente imagen.
Ante ti se abrirá una nueva ventana. En ella cargará una réplica de Windows 11 en la que puedes hacer todas las pruebas que quieras. La máquina virtual aislada cuenta con las herramientas habituales en Windows, pero no con los programas que hayas instalado en tu ordenador.
Por eso, si no sueles utilizar Microsoft Edge, en el espacio aislado tendrás que hacerlo sí o sí. Claro, puedes descargar el navegador que prefieras, pero una vez cierres Sandbox, desaparecerá.
¿Cómo usar Sandbox en Windows?
Utilizar Sandbox en Windows es muy sencillo. Para empezar, puedes aprovechar esta funcionalidad en cualquier equipo, pues se trata de una versión ligera de Windows. Así que no importa demasiado que tu equipo sea modesto, siempre y cuando cumpla con loa requisitos mencionados anteriormente.
Aunque Sandbox es una especie de máquina virtual, aprovecha algunos recursos físicos de tu equipo. Por eso, su rendimiento es similar al de cualquier otra aplicación. Obviamente, y como he ido repitiendo, está completamente aislado de los componentes básicos del PC, así que ningún software que instales podrá dañar el equipo, solo la máquina virtual.
En cuanto a las funciones disponibles, hay algunas que no están disponibles. Por ejemplo, las opciones de cuenta no aparecen y no puedes personalizar el escritorio porque la copia de Windows no está activada. Tampoco es posible enviar archivos del PC a Sandbox arrastrándolos desde el explorador. Vas a tener que copiar y pegar los elementos porque, eso sí, el portapapeles es compartido.
A partir de aquí, tu imaginación pone el límite. Puedes hacer tantas pruebas como quieras en este espacio aislado o maltratar el sistema lo que quieras. Nada de lo que hagas tendrá un impacto real en tu máquina.
Y tú, ¿para qué tienes pensado aprovechar Sandbox en Windows? Déjanos tus comentarios más abajo. ¡Te leemos!