Una de las configuraciones de PC más extremas es la destinada a gaming, ya que los videojuegos son procesos de software que necesitan de bastantes recursos de hardware. Pero si lo que buscas es jugar a resoluciones realmente elevadas, como la 8K, entonces la elección de la tarjeta gráfica es crítica para conseguir una buena experiencia.
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Antes de nada, a día de hoy, el 8K no tiene demasiado sentido, pero eso cambiará en un futuro próximo. Lo digo porque puede faltar tanto hardware como contenido compatible con estas resoluciones. Por ejemplo, muchos videojuegos ofrecen una experiencia a resoluciones de 1080p, 1440p o 4Km, pero no 8K nativa.
Algunos videojuegos que soportan 8K son DOOM: Eternal, Far Cry 6, GTA V, Cyberpunk 2077, Deathloop, Horizon Forbidden West, Metro: Exodus, Bright Memory: Infinite, Control, Death Stranding, Justice, Scavengers, Watch Dogs Legion, etc.
Por otro lado, las tarjetas gráficas que soporten esas resoluciones 8K tan elevadas y que rindan de forma óptima para títulos AAA con una tasa FPS fluida, tendrán un coste muy elevado. Y, por otro lado, también del lado del hardware, no es fácil encontrar pantallas 8K (a veces tendrás que optar por una TV 8K conectada al PC), y los modelos existentes son caros. Además, necesitarás cables HDMI 2.1 o DisplayPort 1.4a o superior.
Además del alto coste y de la dificultad para conseguir configuraciones de PC gaming que puedan soportar estas cargas de trabajo gráfico, también necesitarás una tarjeta con gran capacidad de VRAM para que funcione adecuadamente. Y eso pasa por capacidades de memoria gráfica de 16 GB mínimo, o mejor configuraciones de 24 GB, 32 GB, etc., para mejorar la fluidez. Así mismo, vas a necesitar una buena refrigeración para disipar el calor generado por poner el hardware a tope…
También es importante destacar que deberían contar con tecnologías de escalado de imagen para ofrecer una buena tasa de FPS con esas resoluciones 8K, como NVIDIA DLSS y AMD FSR. Estas tecnologías de escalado de imagen pueden aumentar los FPS sin sacrificar demasiado la calidad de imagen, lo que puede ser útil para alcanzar objetivos de FPS más altos en 8K. Pero para ello, la GPU y el videojuego tienen que soportar la tecnología.
Las tecnologías AMD FreeSync y NVIDIA G-Sync estan soportadas por gran cantidad de modelos de monitor de última generación, pero dada la dificultad para encontrar pantallas 8K, a veces te verás obligado a usar una TV, y éstas no son compatibles con estas tecnologías que adaptan la frecuencia de refresco a la tasa de FPS que llega de la GPU.
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Por otro lado, tampoco hay que olvidar que, si la pantalla en la que vas a jugar no es inmensa, con las pulgadas más habituales de TV y monitor, la diferencia visual entre jugar en 4K y 8K es bastante sutil. La mayoría de los jugadores no notarán la diferencia a menos que tengan una vista muy aguda y se sienten muy cerca de la pantalla.
*Nota: si buscas jugar a videojuegos 8K o disfrutar de resoluciones de este tipo en un Mac de Apple, entonces tendrás que optar por una pantalla externa conectada a estos equipos, y deberías disponer de un SoC M2 Pro como mínimo, así como el M2 Max, M2 Ultra, M3, M3 Pro, y M3 Max, cuyas GPUs integradas permiten estas tasas.
No obstante, si quieres usar una pantalla 8K y sacar el mayor partido posible a tus últimos títulos AAA, aquí te mostraré algunas tarjetas gráficas que permiten jugar a estas resoluciones…
Para finalizar, en cuanto a las tarjetas gráficas recomendadas para jugar a 8K, te mostramos estas dos opciones que son las mejores por el momento:
Última actualización el 2024-11-24
Última actualización el 2024-11-24
Algunos de los monitores que hay en la actualidad que soporten resoluciones 8K son muy pocos. Algunos de ellos no están pensados para gaming y su enfoque es profesional. Y te avisamos que el precio no es caro, es carísimo.
Recuerda que la resolución 8K equivale a 7680 píxeles horizontales y 4320 píxeles verticales, lo que hace un total de 7680×4320 = 33.177.600 píxeles en todo el panel.
Última actualización el 2024-11-24
Como veis el DELL UltraSharp UP3218K es un monitor con un panel IPS de 32 pulgadas y soporta resolución 8K a 60 Hz. Esta resolución todavía no la vemos como una alternativa al 4K, pero si quieres tener lo último de lo último y te sobran más de 4000 euros, adelante. Cuéntanos tu experiencia que nos interesa.
Si buscas un monitor 4K pero con características premium, te dejo estas tres recomendaciones:
Es importante tener en cuenta que estos monitores son muy caros, con precios que oscilan entre los 2.000€ y los 5.000€. Y las TVs 8K no son muy diferentes… ¿Te parece interesante estos monitores 8K y GPU que soportan estas resoluciones? ¡Te leemos en comentarios!
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