Nos gustan los monitores 1440p por su gran adaptabilidad a tarjetas gráficas de gama media y alta, sin perder potencia. Este Gigabyte M27Q X es un perfecto ejemplo de ello, con 240 Hz en un excelente panel Fast IPS de baja latencia.
Aunque ya tiene un largo recorrido en el mercado, estamos ante una revisión (rev 2.0) con mejoras de color en el panel, así que os traemos esta review por si buscáis un monitor potente y a buen precio. Vemos sus funciones avanzadas y rendimiento, ¡comencemos!
Agradecemos a Gigabyte su confianza en nosotros por enviarnos este monitor para su análisis
Nos encontramos con una presentación típica para este Gigabyte M27Q X; caja de cartón rígido y acabado exterior neutro, donde se muestra el monitor y algunas especificaciones.
Dentro, tenemos los habituales moldes de espuma de poliestireno expandido, colocados en tipo sándwich para sujetar las piezas del monitor desmontado, las cuales a su vez viene dentro de bolsas acolchadas.
El contenido del paquete será el siguiente:
El planteamiento de este Gigabyte M27Q X es un poco básico en lo que respecta diseño y estética exterior, pues el fabricante se centra en sus prestaciones puras y duras. La serie M tiene esta peculiaridad, mientras que, si buscamos diseños más trabajados, también los tenemos en la serie OLED y modelos AORUS.
Pues bien, estamos ante una base, la cual viene desmontada, no así para el brazo, la cual porta de un diseño en “V” pero bastante más ancho que los modelos AORUS, con chasis de metal y cubierta de plástico rígido de estilo rugoso.
La base lleva un anclaje con dos pestañas metálicas y el típico tornillo de rosca manual que apretamos desde abajo. Nos fijamos en que no lleva mecanismo de giro, por lo que la ergonomía será más justita.
Situados ya en el brazo de soporte con el monitor montado, tenemos un estilo poligonal, esbelto, con sistema hidráulico, y agujero para enrutar los cables desde la base. El acabado es bastante sencillo y básico a nivel visual y técnico.
Llegamos al mecanismo del soporte, el cual sujeta el panel mediante una robusta bisagra que resiste bien el tambaleo. Aunque ya está anclado el monitor, podemos ver claramente que es compatible con soportes VESA 100×100 mm.
Ahora nos fijamos en la cubierta trasera del monitor, construida en plástico rígido, combinando acabado rugoso mate y liso brillante en el borde superior. No integra iluminación.
La refrigeración interior se hace efectiva mediante una amplia rejilla superior, mientras que en la esquina derecha tenemos el joystick de control. Debajo, vemos la ranura Kensington, puertos y salidas de altavoces.
Con la vista al frente tenemos la configuración más habitual en lo que respecta a marcos, con los mínimos posibles para sujetar el panel, y, de nuevo, acabados básicos. Lo notamos en la ligera separación del panel en el marco derecho, o el plástico no pegado perfectamente en el borde inferior.
El grosor de ellos es de 9 mm para bordes laterales y superior, así como 22 mm para borde inferior. Hay que decir que el acabado Anti-Glare es excelente, le damos ese crédito a la marca.
La movilidad del Gigabyte M27Q X no es perfecta, considerándose un monitor gaming compacto, y es que no tenemos capacidad de orientación vertical ni tampoco rotación de pantalla.
Sí que cuenta con mecanismo hidráulico en el soporte, con rango de ajuste en altura de 130 mm. En la posición más baja se queda a 4 cm del suelo medidos desde el marco inferior, y extendido al máximo llega a 54 cm medidos en el marco superior.
La bisagra permite el ajuste horizontal del panel en -5º hacia abajo o +20º hacia arriba, lo habitual en estos casos.
Ahora estudiamos la conectividad del Gigabyte M27Q X, que en esta revisión parece no haberse modificado. Contamos con:
La interfaz vídeo a utilizar será claramente los DisplayPort, tanto físico como USB-C, los cuales soportan resolución 2560 x 1440p a 240 Hz al disponer de HBR3 (High Bit Rate 3), mientras que los puertos HDMI están limitados a 2560 x 1440p a 144 Hz. Se debería implementar HDMI 2.1.
Tenemos el detalle de contar con puertos USB-A de alta velocidad y función de suministro de energía de 18W para el USB-C, no está nada mal, aunque podría ser superior considerando el adaptador de corriente es de 90W.
Este monitor fue uno de los primeros en abrir la veda a funciones avanzadas implementando KVM. Con ella podremos controlar dos quipos conectados al monitor, mediante ratón y teclado conectados a los USB-A. Está disponible en los puertos USB-B y USB-C, pudiendo configurar el comportamiento desde el OSD o Gaming OSD en Windows.
También dispone de funciones PIP/PBP con gran capacidad de ajuste para el tamaño de la pantalla secundaria, posición y switch para alternar la señal y sonido principal y secundarios.
A este Gigabyte M27Q X le da vida un panel SS IPS en un formato 16:9 de 27 pulgadas, proporcionando una resolución nativa de 2560 x 1440p (QHD). Desconocemos el fabricante de dicho panel.
No vemos diferencias remarcables entre la rev 1.0 y 2.0, parece aumentar ligeramente la cobertura del panel hasta un 94% DCI-P3, cifra excelente para un panel gaming, así como un 140% en sRGB. Con una buena calibración, tiene potencial de uso para tareas de diseño.
Sus características básicas nos dejan un contraste de 1000:1 y 350 nits de brillo típico, con certificación DisplayHDR 400, por lo que deberíamos tener 400 nits de brillo sostenido. Cuenta con 10 bis de color, mediante 8 bits interpolados con paleta FRC.
Lo más importante son sus prestaciones en juegos, siendo bastante contundentes con 240 Hz de refresco dinámico, gestionados mediante AMD FreeSync Premium, compatible con Nvidia G-Sync solo en la interfaz DisplayPort según vemos en el panel Nvidia.
Ofrece 1 ms de respuesta en GTG y MPRT, por lo que el ghosting debería estar completamente controlado y ofrecer una imagen en movimiento nítida. Dispone de Smart Overdrive con función de adaptabilidad, junto a otros 4 modos fijos.
Entre sus funciones exclusivas tenemos Game Assist, el cual incluye: Dashboard en pantalla para monitorizar telemetría de hardware y juegos, punto de mira virtual, alineación de pantalla y una lupa virtual para Sniper denominada Eagle Eye.
A estos se le suman funciones habituales como ecualizador de negros, modos de imagen ajustables mediante OSD, gestión completa en Windows mediante OSD Sidekick y Auto-Update para el firmware del monitor.
Los ángulos de visión también cumplen adecuadamente con 178º, especialmente en la vista superior. No hemos apreciado bleeding en las esquinas, al menos de esta unidad, por lo que hay buena fabricación, y excelente acabado Anti-Glare.
Vamos a analizar la calibración y el rendimiento del Gigabyte M27Q X, verificando que se cumplen los parámetros técnicos del fabricante. Para ello utilizaremos el colorímetro X-Rite Colormunki Display, y los programas DisplayCAL 3 y HCFR.
Vamos con una prueba de latencia End-to-End con Nvidia LDAT, utilizando el banco de pruebas con Intel Core i9-12900K y Nvidia RTX 4080. Usaremos Doom Eternal, en calidad Ultra, resolución nativa y 240 Hz activados sobre DisplayPort.
Se pretende medir la latencia del conjunto completo, desde que hacemos clic en el ratón hasta que los píxeles de pantalla responden al disparo.
Obtenemos una latencia media de 14 ms, cifra excepcional que sitúa a este monitor en los primeros puestos de nuestra lista. La puesta a punto del panel y firmware es excelente, y Smart OD parece hacer un buen trabajo en este aspecto.
Utilizando las pruebas de Testufo, buscamos artefactos como ghosting o desenfoque, efectuando capturas mediante cámara de la imagen en movimiento con los distintos modos Overdrive.
La prueba de Ghosting también ha sido pasada con muy buena nota, pues tan solo obtenemos una mínima estela tras la imagen en movimiento con OD Off.
El modo Smart OD es el que mejor resultado da en cualquier situación, mientras que los modos Calidad y Balanceado prácticamente dan el mismo resultado. El modo Speed genera una mínima estela blanca.
Ahora nos ocuparemos de realizar las pruebas básicas que nos den las medidas reales de brillo y contraste del Gigabyte M27Q X en el modo de imagen General.
| Brillo | Contraste | Valor Gamma | Temperatura de color | Nivel de negros |
| 362 cd/m2 | 1111:1 | 2,23 | 6203 K | 0,3249 cd/m2 |
El brillo típico cumple lo prometido al superar los 350 nits, aunque no hemos visto que se alcancen los 400 nits. El contraste es bastante bueno, con gamma bien ajustado, aunque temperatura de color algo por debajo del punto D65.
En sRGB hemos verificado que el mejor resultado de calibración lo obtenemos con el modo de imagen del mismo nombre, seleccionada en el OSD. De esta forma obtenemos un excepcional Delta E medio de 0,92, mejor que muchos monitores de diseño.
Para obtener la máxima cobertura debemos seleccionar el modo General, donde alcanzamos prácticamente un 100%, y un volumen de gama del 139%, cumpliendo así lo prometido.
En este espacio también se cumple lo prometido, alcanzando un 95% de cobertura de color y volumen algo superior al 98%. La calibración es también excelente, con Delta E medio de 1,69, inferior a 2.
Los resultados son mejor de lo esperado para un monitor gaming, demostrando la gran calidad del panel.
No vemos necesaria una calibración, pero si la llevamos a cabo, podemos ajustar el perfil de color con R=97, G=100 y B=99. Tras aplicar el fichero generado sobre el modo de imagen General, obtenemos Deltas E medios de 0,42 en sRGB y 0,65 en DCI-P3.
Finalizamos con el panel OSD del Gigabyte M27Q X, el cual se controla mediante el joystick de 4 direcciones ubicado tras la pantalla.
En cada dirección accederemos directamente a volumen (izquierda), entrada (derecha), modo de imagen (abajo) y ecualizador de negros (arriba). Pulsando hacia dentro obtendremos un segundo panel con opciones en cada dirección, accediendo a KVM y Game Assist directamente.
Ya en el panel principal tenemos 8 apartados, con especialmente importancia en principal, donde se encuentran las principales funciones. En la parte superior se hace un desglose de especificaciones de funcionamiento del panel.
Tenemos apartados dedicados para los modos de imagen, PIP/PBP y ajuste del OSD, pero dentro del OSD principal no encontramos las funciones KVM o Game Assist comentadas anteriormente.
El control mediante OSD Sidekick es similar al del OSD del monitor, con una interfaz más amigable integrada en GCC, en la cual se dividen los modos de imagen como perfiles individuales.
Así mismo, podemos configurar hotkeys para el acceso directo a funciones y acceder a otras configuraciones básicas de Windows. Para usar este software debemos conectar el monitor al PC mediante USB-C o USB-B.
El punto más importante de este monitor es sin duda el rendimiento bruto y calidad del panel, ambos a excelente nivel, por lo cual tenemos ya el 80% de lo que cualquier usuario busca en un monitor, y esto es muy positivo.
A nivel de prestaciones destaca el comportamiento a 240 Hz y 1 ms, obteniendo imagen en movimiento nítida, sin ghosting, así como una excelente latencia E2E. Esto destaca la gran optimización del panel elegido.
A esto le sumamos una completa gama de opciones aplicadas al juego, destacando Smart OD, o también KVM y PIP/PBP enfocados en creación de contenido y productividad. Mediante OSD Sidekick obtendremos mayor capacidad de gestión desde Windows. Incluso tiene altavoces.
Visita nuestra guía actualizada de los mejores monitores para PC del mercado
El otro punto destacado sin duda es la calidad de imagen, destacando en calibración con Delta E<2 y cobertura de color en los espacios de trabajo principales. El brillo típico es un poco flojo, pero es la única pega a poner en este apartado.
También hay aspectos más flojitos que debemos asumir, como la menor capacidad de HDMI al limitarse a 144 Hz, o una construcción más básica donde los acabados y ergonomía están claramente por debajo de los modelos AORUS.
El precio del Gigabyte M27Q X actualmente es de 467€ en PcComponentes y un poco más en Amazon. La cifra es bastante buena considerando la calidad y prestaciones del panel. Bastante por debajo de los 700€ del equivalente en AORUS y del G274QPX de MSI y cerca del TUF Gaming VG27AQML1A de Asus, su rival más directo.
Si lo que buscas es un monitor gaming con especificaciones y funciones de gama alta a buen precio, pero no te importa tanto su estética, el Gigabyte M27Q X será una buena inversión.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| CALIBRACIÓN Y COBERTURA DE COLOR SORPRENDENTEMENTE BUENAS | DISEÑO Y ESTÉTICA BÁSICOS |
| QHD – 240 HZ – 1 MS FREESYNC PREMIUM | HDMI LIMITADO A 144 HZ |
| EXCELENTE LATENCIA E2E Y GHOSTING | BRILLO UN POCO JUSTITO |
| AMPLIA GAMA DE OPCIONES OSD Y SOFTWARE | |
| SOPORTE COMPACTO Y COMPATIBILIDAD CON VESA 100X100 MM | |
| BUENA RELACIÓN POTENCIA/PRECIO |
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