El nuevo Logitech G PRO X SUPERLIGHT 2 es la evolución de uno de los ratones más especiales y exitosos de la historia de la marca. Se trata de un mouse claramente orientado al mundo de los eSports, al contar con un peso ultraligero de solo 60 gramos y sensor HERO 2 de alta gama, en una forma ergonómica muy interesante.
En esta review, tenemos el placer de analizar a fondo este ratón, te hablaremos de sus evoluciones respecto a la primera generación y sabrás si merece la pena para jugar tanto como parece. ¡Vamos allá!
Antes de comenzar, nos gustaría agradecer a Logitech la confianza depositada al enviarnos este ratón para su análisis.
El Logitech G PRO X SUPERLIGHT 2 llega en una caja que nos presenta el ratón con ese diseño refinado que caracteriza a esta gama.
En la parte trasera de la caja, se nos destacan sus principales características, con las que Logitech pretende convencernos de su gran calidad y capacidades para gaming:
Con muchas ganas de confirmar y comentar todo este set de características, abrimos la caja para encontrarnos al ratón muy bien presentado.
Junto a este, tenemos en la caja:
El cable no es especialmente flexible, pero su rigidez no nos preocupa: como verás en la review, lo vamos a usar más bien poco.
Pasamos ahora a echar un vistazo al diseño y ergonomía de este ratón, no sin antes retirar el plástico que protege toda la parte inferior.
Logitech se mantiene en líneas continuistas con este G PRO X SUPERLIGHT 2, y se cumple el principio de si funciona no lo toques, pues estamos ante otro ratón más con un diseño ergonómico simétrico (aunque diestro, porque solo el lateral izquierdo tiene botones) con un tamaño medio.
Sus dimensiones son de 125mm de largo, 63.5mm de ancho y 40mm de alto. Estas medidas hacen que no tenga unas líneas muy pronunciadas en el diseño, ni una «joroba» muy alta, y lo convierten en una opción ideal a nivel de ergonomía. En su parte frontal también vemos el conector USB-C para la carga.
Con este diseño y medidas, podemos utilizarlo con prácticamente cualquier tipo de agarre. No es un ratón pequeño ni grande, así que se adapta a cualquier tamaño de mano que no sea ni demasiado pequeño ni demasiado grande.
El ratón está disponible en negro, en blanco y en magenta.
En la parte inferior del ratón, tenemos un botón de encendido junto a una cantidad generosa de pies de PTFE, y una pieza magnética que sirve de tapa para el compartimento donde se guarda el dongle USB. Esta la podemos cambiar por la tapa compatible con carga POWERPLAY.
Como vemos, el ratón es extremadamente simple en lo relativo a los botones, pues no cuenta ni siquiera con un botón de DPI, tenemos lo justo y lo necesario con los 2 botones principales, botón de la rueda y 2 botones laterales.
Ten en cuenta que el Logitech G PRO X SUPERLIGHT (contando la primera versión y esta nueva, que tienen la misma forma) es el ratón más usado en eSports con diferencia. Si echamos un ojo a la web ProSettings, vemos datos bastante interesantes:
Estas estadísticas son bastante rompedoras, pues estamos hablando de un mundo donde el ratón es decisivo para ganar partidas, y de unos jugadores que son los que más exprimen un mouse. No pueden tolerar la falta de ergonomía, un sensor deficiente o una conexión inalámbrica con latencia.
Vamos ahora a analizar algunos aspectos técnicos de este Logitech G PRO X SUPERLIGHT 2, para confirmar que sus características se ajustan a lo que se necesita en los eSports.
Lo primero que nos sorprende es el peso, con apenas 60 gramos, una ligera reducción respecto a la anterior generación que pesaba menos de 60g.
Lo hemos probado en nuestra báscula para confirmarlo, dando un resultado de apenas 59 gramos, tengamos en cuenta además que la tapa que esconde el compartimento del dongle USB no pesa nada y prácticamente nos reduce el peso en 1 gramo adicional.
La verdad es que este peso nos deja una sensación espectacular en su uso. Ten en cuenta que para los shooters y demás juegos relacionados con los eSports se busca el menor peso posible, lejos quedan los años en los que los ratones incluían pesas para hacerlos todavía más pesados. Logitech consigue estos 60 gramos sin utilizar agujeros en el cuerpo del ratón, y manteniendo una gran calidad. No es el único ratón así, ojo, porque el Viper V2 Pro de Razer pesa 58g.
Mi sensación es que este peso tan ligero cansa mucho menos la mano, tanto en gaming como en el uso normal. Es otro concepto de ergonomía.
Al jugar, este peso tan bajo requiere adaptarse un poco, porque es sorprendente la poca fuerza que hay que hacer para mover el ratón. Tras unas pocas partidas, la adaptación nos llevará a tener la capacidad de ser mucho más precisos y jugar más debido a la comodidad extra para nuestras manos. ¡Una maravilla!
Pasamos ahora a hablar de la botonera, que es uno de los cambios respecto a la primera generación. Logitech ha optado por incluir botones óptico-mecánicos LIGHTFORCE, en vez de los mecánicos que usaban hasta ahora.
Como es de esperar, son fabricados por OMRON, y tienen una sensación y sonido bastante característicos. La sensación del click se nota bastante en la mano y no es precisamente silencioso, pero tampoco es un click duro. Un gesto que evidencia la calidad de construcción es que la sensación es bastante consistente.
Esta configuración «óptico-mecánica» significa que, por defecto, el ratón funciona de manera híbrida para mejorar la autonomía. Me gusta mucho porque busca lo mejor de ambos mundos, y si tras años usando el ratón sufrimos de los problemas de doble click que pueden dar los interruptores mecánicos, lo solucionaremos cambiando al modo óptico.
Lo que no nos ha dado tan buena sensación son los botones laterales. Son bastante duros y tienen un recorrido poco placentero, la construcción es buena, pero no nos convencen en un ratón de gama tan alta.
Al no tener iluminación RGB, la autonomía que nos podemos esperar de este Logitech G PRO X SUPERLIGHT 2 es buena, pero para conseguirlo también es necesario optimizar al máximo cada componente del ratón. Parece que Logitech se ha empeñado tanto en ello como en reducir el peso, y nos prometen hasta 95 horas de duración de su batería recargable.
No es tanto como lo que podemos ver en ratones con pilas, pero teniendo en cuenta el bajo peso conseguido con su pequeña batería de litio, nos parecen unas cifras extremadamente buenas. Esta autonomía es con movimiento constante y ha mejorado respecto a la primera generación, donde alguna gente nos comenta que pasan incluso más de 1 mes sin cargar el ratón, dándole un uso diario tanto para juegos como para trabajo.
La carga se realiza por USB-C, otra mejora respecto a la generación pasada que usaba micro-USB. Como decíamos, el cable no nos gusta mucho (aunque nos vale cualquiera), pero nos da completamente igual porque apenas lo cargaremos 1 o 2 veces al mes.
Además, carga bastante rápido. Nuestra unidad llegó a aproximadamente un 40% de batería y lo hemos llevado al 100% en apenas 1 hora. Si vas a jugar una partida y ves la luz roja del ratón indicándote que hay poca batería, con unos pocos minutos de carga tendrás batería de sobra para jugar.
E incluso puedes olvidarte de los cables con una alfombrilla POWERPLAY, que transmite la energía necesaria al ratón de manera magnética.
Un ratón inalámbrico de alta gama no solo necesita un bajo peso y alta autonomía, sino una conectividad inalámbrica fiable.
Por ello, el Logitech G PRO X SUPERLIGHT 2 nos trae la conexión LIGHTSPEED de ultra-baja latencia en la que tantos jugadores de eSports confían. En este caso ha mejorado y podemos aumentar la tasa de muestreo del sistema inalámbrico a 2000Hz, mientras que el USB en sí se queda en 1000Hz. Esto reducirá la autonomía, así que tampoco lo vemos necesario.
Otra de las mejoras del Logitech G PRO X SUPERLIGHT 2 respecto a su predecesor está en el sensor. Pasamos del HERO de 25.600 dpi al HERO 2 de 32.000 dpi, el mejor sensor que tiene Logitech, y que mejora la velocidad de detección máxima de 400 ips a más de 500 ips.
Nuevamente, es un sensor sin suavizado, sin aceleración y sin filtros, algo imprescindible para jugar con la máxima precisión posible. También nos permite configurar la distancia de elevación en tres configuraciones (baja, media y alta) para ajustarse a nuestro estilo de juego.
Pasamos ahora a nuestras humildes pruebas de uso del sensor, donde buscamos confirmar sus características principales.
Como vemos, los resultados son sensacionales y nos confirman las características más importantes del ratón. Nada que no esté demostrado sobradamente con la popularidad en eSports de este ratón.
El software Logitech G HUB es el encargado de darnos todas las opciones de configuración de este ratón. Es imprescindible instalarlo para hacer cualquier cambio, al no contar con botón dedicado de DPI. Lo bueno es que luego podemos desinstalarlo si no lo queremos en el PC, al activar la memoria on-board del ratón.
Afortunadamente, es un software bastante bien hecho y que no nos da una mala experiencia de uso. Veamos las configuraciones posibles.
Podemos modificar nuestras asignaciones de botones incluyendo una especie de «macros» con los botones G-ALT, lo que nos daría la posibilidad de tener un botón de DPI si sacrificamos uno de los botones, por ejemplo el de la rueda.
Podemos asignarle ahí el G-Alt, y hacer:
Está muy bien, pero tener un botón dedicado de DPI daría más posibilidades.
Finalmente, en la configuración podemos ver datos muy importantes como el consumo energético actual del ratón y su autonomía restante, cambiar la configuración de los switches LIGHTFORCE, activar la memoria on-board o calibrar el sensor.
Logitech sigue decidida a mantener su liderazgo en el mundo de los ratones de alta gama para eSports, y prueba de ello es este G PRO X SUPERLIGHT 2 que evoluciona al que es indudablemente el ratón más usado en el mundo del gaming competitivo profesional.
El conjunto de cambios aplicados a esta nueva versión es escueto pero positivo. Tenemos una autonomía mejorada todavía más, el sensor óptico HERO 2 de altísima gama, botones óptico-mecánicos LIGHTFORCE que se dan muy bien, y podemos seleccionar un polling rate inalámbrico de 2000 Hz.
A esto se le suman las otras tres grandes características que hacen destacar a este ratón:
Todo esto con la posibilidad de configurarlo mediante Logitech G HUB, y lo que es más importante, no dependiendo del software al poder guardar perfiles de configuración en memoria.
Los jugadores de eSports confían en este ratón por algo, siendo un componente clave en su trabajo, y la verdad es que ese es el mejor aval de calidad de este ratón. Sin embargo, no todo es perfecto, pues no nos ha gustado la sensación que dan los botones laterales, algo de lo que ya había quejas en la versión anterior, y que Logitech tenía que haber solucionado.
Te recomendamos la lectura de los mejores ratones del mercado.
Además, hay que tener claro que este no es un ratón para todo el mundo. Es para quien busca el máximo rendimiento y capacidad en gaming por encima de todo, y sin dar importancia a características como el RGB o botonera adicional (no hay ni botón de DPI).
En definitiva, un ratón inalámbrico de calidad, con buen sensor, autonomía generosísima y conectividad fiable… ¿a qué precio? Pues este Logitech G PRO X SUPERLIGHT 2 tiene un astronómico PVP de 179 euros, aunque ya lo encontramos en PCComponentes por 140€ (de color blanco).
Ojo, porque la competencia no es más barata, una de las opciones con las que más compite es el Razer Viper V2 Pro y éste cuesta incluso más. Para nosotros, el gran competidor de este ratón es precisamente su antecesor, puesto que la diferencia de características no es muy grande y el SUPERLIGHT original lo podemos encontrar más cerca de los 100€, por ejemplo también en PCComponentes.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
PESO ULTRALIGERO DE 60 GRAMOS | LOS BOTONES LATERALES SON MALOS… |
EVOLUCIÓN DEL RATÓN MÁS UTILIZADO EN ESPORTS | PRECIO MUY ELEVADO, COMPITE CON LA PRIMERA VERSIÓN DEL SUPERLIGHT |
SENSOR HERO 2 DE ALTA GAMA | SIN BOTÓN DEDICADO DE DPI |
INTERRUPTORES ÓPTICO-MECÁNICOS | |
CONECTIVIDAD LIGHTSPEED DE BAJA LATENCIA | |
AUTONOMÍA INMENSA, LO CARGARÁS MUY DE VEZ EN CUANDO | |
MEMORIA ONBOARD PARA NO DEPENDER DEL SOFTWARE |
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Última actualización el 2024-11-21
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