Be Quiet! Dark Rock Elite es el disipador de aire más potente y grande que ha fabricado la marca alemana. Superando al Dark Rock Pro, esta bestia de doble bloque con 7 heat pipes de cobre, nos dará capacidad de 280W de TDP, para soportar las CPU Intel y AMD más exigentes.
El disipador cuenta con dos ventiladores Silent Wings de 135 mm integrados sobre un chasis desmontable que además nos da una excelente estética en el conjunto final. Si buscas una opción por aire equivalente a una RL de alto rendimiento, esta puede ser la solución, ¡veamos si es así!
Agradecemos a Be Quiet! confiar en nosotros y enviarnos este disipador para su análisis.
La presentación del Be Quiet! Dark Rock Elite está a la altura del producto que esperamos, con una caja de cartón rígido robusta y de acabado liso donde se muestra a color el producto y sus especificaciones. En el interior encontramos el bloque ya montado, sujeto con molde de espuma de polietileno junto a una caja de accesorios. Cuidado al sacarlo, porque al cogerlo desde arriba posiblemente se nos desprenda la carcasa superior, así que agarradlo de los lados.
El contenido del paquete consta de:
Este modelo Be Quiet! Dark Rock Elite no solo recibe un incremento de rendimiento con respecto a los Dark Rock Pro, sino también una estética más refinada y elegante que ayudará a homogeneizar un montaje con componentes de la marca alemana. Tal es así que incluso se ha adoptado iluminación RGB en la parte superior, siguiendo la línea de algunos nuevos productos de la marca.
Empezamos precisamente por esta zona superior, la cual consta de una tapa que cubre las terminaciones de los dos bloques de disipación y sus tubos de calor. Está compuesta por un aro exterior de plástico que cubre los puntos de fijación del elemento central. Al mismo tiempo, este elemento consta de rejilla metálica como difusor y una zona central provista de dos zonas RGB sincronizables con placa base mediante cabecera 5VDG.
Descubriremos que dicha cubierta está integrada en el marco de instalación del ventilador central, la cual nos ayudará a extraer este elemento para la fijación del disipador al socket. El sistema de fijación consiste en 4 pasadores superiores y dos puntos de alineación inferiores. Es esta forma es fácil y rápido de gestionar, sin necesidad de tornillos y con una estética depurada.
Lo mismo podemos decir del sistema de instalación para el ventilador frontal, que consiste en otro marco fijado al bloque mediante tornillos. Unos raíles a cada lado sirven para acoplar el ventilador sin necesidad de usar los brackets tradicionales. Esta es un arma de doble filo, ya que si el ventilador se rompe, tendremos que utilizar el método tradicional, para el cual también hay unos bordes en el disipador, pero no se han incluido brackets.
Dejando el disipador al descubierto, tenemos un sistema de doble bloque similar al Dark Rock Pro, con 7 heatpipes que parten de ambos lados del cold plate para repartir el calor hacia las torres aleteadas de aluminio. Todo el sistema tiene un excelente acabado mediante procesos CNC, y cubierto en pintura negra con cobertura cerámica, incluidos los tubos de cobre. Como hemos mencionado antes, el diseño lateral de los bloques es compatible con brackets tradicionales de ventiladores.
La elevación del cold plate permite instalar memorias RAM de hasta 63 mm midiendo solo el bloque, pero debemos añadirle el ventilador, que en posición base limita la altura a 32 mm. En cualquier caso, podríamos elevar su posición (perdiendo efectividad) para colocar memorias de mayor tamaño. La zona de contacto con la CPU es de cobre niquelado con perfecto pulido y medidas de 40 x 45 mm con difusor de calor superior, mediante el cual lo fijaremos al socket.
A continuación pasamos a analizar los ventiladores del Be Quiet! Dark Rock Elite, que se trata de dos unidades Be Quiet! Silent Wings especialmente diseñadas para esta unidad, al tener chasis con carcasas de plástico para su fijación al bloque. Este diseño lo dota de cierta exclusividad para la unidad mejorando su estética.
Se trata de unidades de 135 mm y 25 mm de grosor, compuestas por una zona de rotación con 7 amplias hélices de superficie ondulada para maximizar el flujo de aire. Al igual que las unidades de chasis, éstas utilizan un motor PWM de 6 polos con cojinete fluido dinámico y vida útil superior a 300.000 h.
Entre sus especificaciones tenemos un régimen de funcionamiento entre 1500 y 2000 RPM, generando un ruido máximo de 35,4 dBA en modo rendimiento, aplicable a las dos unidades. Esto quiere decir que los dos perfiles por defecto no tienen modo parada total, pero podríamos hacerlo a través de la placa base.
La cubierta superior del ventilador central guarda un interesante detalle técnico en forma de switch para seleccionar entre dos perfiles de rendimiento o RPM de los ventiladores. De esta forma tenemos un perfil silencioso hasta 25,8 dBA, y el de máximo rendimiento para desarrollar toda la potencia de los ventiladores sin necesidad de gestionarlos desde la BIOS, que sería la opción por software por así decirlo.
Be Quiet! Dark Rock Elite adopta un sistema de montaje igual que los últimos modelos lanzados por el fabricante. Este asegura compatibilidad con las plataformas Intel y AMD mainstream, pero no las orientadas a Workstation pese a tener un TDP de 280W.
La diferencia entre el socket Intel y AMD es básicamente el tener que utilizar backplate incluido para las placas de la marca azul, mientras que en AMD debemos retirar las fijaciones que trae por defecto. Se ha incluido una pequeña jeringa de pasta térmica basada en metales para al menos dos montajes, de hecho el fabricante asegura que el disipador es también compatible con pasta térmica de metal líquido.
Una vez hecho esto, colocamos los tornillos elevadores del socket y a continuación las pletinas de fijación. A ellas atornillaremos finalmente el disipador, apretando al máximo los dos tornillos con ayuda del destornillador incluido. Durante el proceso, debemos retirar los ventiladores para acceder a estos tornillos.
La segunda parte del proceso de montaje consiste en conectar los ventiladores al sistema, siendo un tanto peculiar en este caso, al tener un pequeño controlador con dos perfiles de rendimiento. El ventilador central sale un cable de 4 polos con dos conexiones, una de diseño propietario donde conectaremos la segunda unidad, y otra genérica que llevaremos hasta CPU_FAN.
Pasamos a evaluar el rendimiento del Be Quiet! Dark Rock Elite sometiendo a estrés durante 24h el procesador AMD Ryzen 5 7600X con PPT configurado a 80W y PBO en modo manual con curva optimizada a -25 para obtener una media de temperaturas en igualdad de condiciones con otros disipadores que probemos. Todo ello con una temperatura ambiente de 24oC. El banco de pruebas se compone de:
| BANCO DE PRUEBAS | |
| Procesador: | AMD Ryzen 5 7600X |
| Placa Base: | Asus X670E Crosshair Hero |
| Memoria RAM: | 32 GB G.Skill RGB DDR5 6000MHz |
| Disipador | Be Quiet! Dark Rock Elite |
| Disco Duro | SSD SATA |
| Tarjeta Gráfica | Nvidia RTX 4080 |
| Fuente de Alimentación | Corsair RM1000 |
El disipador cumple con lo prometido, y hasta el momento es la unidad de aire con mayor rendimiento que hemos probado. Sus prestaciones se comparan a un sistema de refrigeración líquida de 360 mm, aunque los modelos más potentes conseguirán mejores resultados en CPU desbloqueadas por pura capacidad de intercambio de calor. Con la CPU a máximo rendimiento las temperaturas se han mantenido bastante similares.
En vista a los resultados obtenidos, podemos decir que el Be Quiet! Dark Rock Elite es uno de los disipadores de aire con mayor rendimiento del mercado equiparándose a sistema de refrigeración líquida de 360 mm. Sus datos así lo refrendan, añadiéndole un gran contenido estético al conjunto para lucirlo en un chasis de cristal.
Sus 280W de TDP están pensados para lidiar con CPU topes de gama de Intel y AMD, al menos con configuraciones de energía fijadas en la BIOS. Si dejamos estas CPU completamente liberadas (consumo ilimitado), igual que ocurre con casi cualquier disipador o RL convencional, estaremos llegando al TjMax de la unidad. Mantiene un sistema de fijación al socket que no es el más sencillo y cómodo, pero firme que con buena presión sobre el IHS.
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La calidad de fabricación es impecable, el color negro acompaña, incluso se ha integrado una cubierta superior con dos zonas RGB sincronizables con placa base y sistema de control de ventilación con dos perfiles “silencioso” y “rendimiento”. El sistema de fijación para los ventiladores Silent Wings es excelente tanto en comodidad como estética, aunque aporta menos flexibilidad en caso de tener que sustituir alguna unidad.
El precio recomendado del Be Quiet! Dark Rock Elite será de 115€, unos 15 a 20€ más caro que la versión Dark Rock 4 en el momento de la review. Es una cifra que perfectamente podemos asumir por las mejoras estéticas, técnicas y de rendimiento que nos brinda esta unidad. Entonces ¿es un disipador recomendado para un i9-14900K o Ryzen 9 7950X? Sí, siempre que tengamos controlados los parámetros de consumo y Thermal Velocity Boost. Es de lo mejor que encontramos en su categoría, así que es absoluta recomendación.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| RENDIMIENTO TOP EN SU CATEGORÍA | VENTILADORES CON CARENADO EXCLUSIVO NO INTERCAMBIABLE |
| MEJORAS DE RENDIMIENTO, SOPORTE HASTA 280W | |
| VENTILADORES SILENT WINGS CON DOS PERFILES RPM INTEGRADOS | |
| EXCELENTE ESTÉTICA Y EMPAQUE, CON RGB INTEGRADO | |
| PRECIO EQUILIBRADO |
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