MSI Modern 15 B7M es uno de esos portátiles que reúne todo lo que un usuario necesita para uso doméstico, estudio, trabajo y productividad, y lo hace a un precio ajustado para no dejarnos un riñón en un equipo gaming sin necesidad alguna. En este caso tenemos APU de bajo consumo AMD Ryzen 7 7730U de 8 núcleos, 16 GB de RAM integrada y SSD NVMe, bajo un chasis de plástico con buena calidad de fabricación, pantalla IPS FHD y periféricos que funcionan bien. A fin de cuentas es un equipo sencillo y asequible, lo que la mayoría busca, por lo que esta review será muy interesante y útil para nosotros.
Agradecemos a MSI su confianza en nosotros al enviarnos este portátil para su análisis.
El MSI Modern 15 B7M llegará en una delgadita caja de cartón rígido y acabado neutro donde se nos muestra una skin básica en color negro denotando el enfoque del portátil. En el lateral tenemos la pegatina identificativa del modelo, mientras que en el interior el producto se almacena entre moldes de cartón cubierto por una bolsa.
El contenido será bastante escueto:
MSI Modern 15 B7M nos ofrece un planteamiento no muy alejado de lo que podemos ver en otros modelos MSI superiores, con estética minimalista y acabado en gris mate, pero en este caso el cuerpo del portátil es íntegramente de plástico, aquí no veremos metal. Hay que decir que son acabados de muy buena calidad, y si no fuese por su sonido al darle golpecitos, perfectamente la tapa y zona de teclado se podrían confundir con el aluminio.
Sus medidas son relativamente compactas y acordes a un equipo de 15 pulgadas actual, ajustando el grosor a 20 mm como máximo, con un peso por debajo de los 2 kg. Esto, unido a un adaptador de corriente pequeño, nos asegura una excelente portabilidad. Ahora será cuestión de ver si la batería acompaña.
En la tapa de pantalla tenemos el logotipo de MSI estilo moderno, esquinas redondeadas, al igual que la terminación de los bordes, llegando hasta sus cantos laterales planos. El mismo estilo se utiliza para los bordes de la mitad inferior del equipo, proporcionando un buen agarre sin dejar demasiadas huellas en la superficie pese a ser mate, esto está bien.
El sistema de apertura para la pantalla consiste en una bisagra que ocupa toda la zona central del equipo, la cual nos proporciona suave apertura hasta un rango 180º para poder colocarla totalmente tendida en el escritorio. Además el borde inferior es de los que se apoya sobre la mesa para elevar un poco el equipo y permitir que circule aire por debajo.
La tapa inferior es también de plástico, pero de un acabado más básico, estilo rugoso y con abundantes aberturas para la entrada de aire. Esta sí es más fácil de retirar que la de los modelos gaming.
Abrimos el MSI Modern 15 B7M para ver una distribución sobre base de plástico con teclado en formato completo, el cual no tiene hundimiento por la zona central, y touchpad amplio ubicado en el centro. Las aberturas de los altavoces se han mantenido en la ubicación típica de las esquinas inferiores, mientras que en la zona de teclado no tenemos rejillas ni otros elementos útiles.
El sistema de bisagras hace que la pantalla se quede pegada al cuerpo del portátil para así disminuir un poco los marcos, que son de 7 mm para los laterales, 15 mm para el borde superior donde se integra la webcam y 20 mm para el borde interior. La rigidez de la pantalla es excelente, mejor que algunos equipos con tapa de aluminio, así que estamos satisfechos con el resultado.
Es el momento de ver la conectividad del MSI Modern 15 B7M y la ubicación de puertos, que se repartirán en los laterales.
En el lateral derecho tenemos:
A la izquierda:
Tenemos una aceptable cantidad de puertos con 4 USB en total, aunque dos de ellos serán 2.0, mientras que los otros dos sí que serán de 10 Gbps como opción para periféricos de alta velocidad. En ellos nos ha faltado la integración de DisplayPort en el USB-C, pero al menos en este sí que tenemos carga de 65W. También contamos con lector de tarjetas y puerto de vídeo dedicado para monitor externo.
En cuanto a la conectividad de red, tenemos únicamente la interfaz inalámbrica, que por otro lado es más que suficiente para el equipo. Se ha optado por una tarjeta MediaTek MT7921K propia de AMD con capacidad Wi-Fi 6E de triple banda en 2,4, 5 y 6 GHz hasta 2,5 Gbps de ancho de banda, igual que la AX211 de Intel. Cuenta también con Bluetooth 5.3.
Para un portátil como este MSI Modern 15 B7M solamente pedimos que la pantalla tenga una buena resolución y calidad de imagen, efectivamente así es en el panel de 15,6 pulgadas que se equipa. Se basa en tecnología LCD IPS proporcionando una resolución de 1920x1080p. Tenemos ángulos de visión de 178º que se cumple debidamente. Apenas se nos da información sobre el mismo, pero según los datos técnicos del panel Innolux N156HCA-EAB extraídos mediante software tenemos un brillo típico de 300 nits y contraste estándar 1000:1.
En este caso tenemos 60 Hz de frecuencia de refresco, pero creemos que también en este tipo de equipos más básico deberían adoptarse paneles de al menos 90 Hz para ofrecernos una experiencia de uso más fluida, ya que los gráficos integrados están capacitados para ello.
En cuanto al apartado de sonido, el MSI Modern 15 B7M cuenta con doble altavoz en estéreo de prestaciones básicas, y un codec Realtek ALC256 para el conector Jack integrado. El desempeño de estos altavoces nos deja un sonido ausente de graves, donde medios y agudos toman el protagonismo, con volumen más bajo que los modelos gaming. Son suficientes para un uso básico, pero no puede ir más allá de eso, así que será recomendable utilizar auriculares.
Brillo y contraste
Brillo Max. | Contraste | Valor Gamma | Temperatura de color | Nivel de negros |
298 cd/m2 | 1244:1 | 2,08 | 6664K | 0,2395 cd/m2 |
En cuanto a medidas básicas, este panel no pinta nada mal, ya que tenemos un brillo típico que se ajusta a lo prometido, mejor contraste, y ajuste de temperatura de color cercano al punto D65, por lo que obtendremos buen ajuste de blancos y escala de grises.
Espacios sRGB y DCI-P3
El apartado de calibración ya plantea más problemas para este panel, pues no viene con un ajuste especialmente bueno de serie, obteniendo un Delta E medio de 4,26 y una cobertura bastante justita del 61%, igual que el volumen de gama, por lo que no habrá margen de mejora para él.
En DCI-P3 las medidas son aún más discretas con una cobertura del 43% y Delta E medio de 5,34. En general las gráficas de color se muestran suficiente bien ajustadas, como es el caso de la curva gamma o luminancia, así como blancos y negros. Pese a ser un panel básico, cumple los mínimos en cuanto a fidelidad de control.
Calibración
Tras la calibración hemos mejorado un poco los resultados en el espacio sRGB, pero no lo suficiente como para dejarlo todo en verde, de hecho estamos lejos de esta gesta. De todas formas os dejaremos el perfil de color por si tenéis este portátil y queréis instalarlo en él.
En lo que respecto a teclado y touchpad, hemos quedado muy satisfechos con los que ha equipado el MSI Modern 15 B7M, pues son cómodos para su uso en productividad y edición de documentos.
Tenemos un teclado en formato completo, es decir, con panel numérico, el cual es estrecho para dejar espacio suficiente al panel principal, respetando ciertos márgenes a cada lado del dispositivo. La distribución y diseño es similar a la de la serie Prestige y demás, es decir, teclas amplias tipo isla, con membrana de muy buen comportamiento al ser silenciosa y firme en su rebote.
Cuenta con fila de teclas F de doble función alternable y por supuesto retroiluminación blanca con varios niveles de brillo para un cómodo uso nocturno. En general, es un muy buen teclado, nos hemos sentido cómodos con él en la edición de este artículo de review, que es lo realmente importante en este tipo de portátiles, además está en español, con distribución ANSI.
En cuanto al touchpad, se amplían sus dimensiones respecto a la generación anterior con 120 mm de ancho y 75 mm de profundidad, con botones integrados en el borde inferior de clic silencioso y blando. No notamos holgura o mala instalación en el trackpad, siendo para nosotros lo más importante de cara a la usabilidad.
Como decimos lo positivo, también hemos visto cosas negativas, como es el mantener una webcam HD de calidad justita, sin sistema de reconocimiento facial ni tampoco lector de huella. Este apartado es importante en un equipo pensado para productividad, incluso nos atreveríamos a decir que le falta el sistema de cancelación de ruido para los micrófonos integrados, pues harían mejor papel en videollamadas.
La tapa que cubre el hardware del MSI Modern 15 B7M es bastante más sencilla de retirar que en los modelos gaming, sin embargo aquí tenemos pocas posibilidades de actualización del equipo, tan solo la unidad SSD.
Comenzamos por detallar el procesador equipado, que será una APU AMD Ryzen 7 7730U, modelo de bajo consumo con arquitectura Zen 3 de 7 nm TSMC. Este cuenta con 8 núcleos y 16 hilos a 4,5 GHz de boost, 16 MB de caché L3 y un TDP fijado en 15W. Pese a ser un modelo de serie 7000, cuenta con arquitectura de la anterior generación, una opción un tanto extraña, pero que en la práctica nos ha dejado satisfechos con su rendimiento multitarea. Cuenta con gráficos AMD Radeon RDNA con 8 núcleos a 2,0 GHz, compatibles con FreeSync.
En el apartado de memoria RAM tenemos un total de 16 GB integrados en placa, y por tanto sin posibilidad de actualización. Por el tipo de arquitectura del procesador, serán chips DDR4 a 3200 MHz.
El sistema de almacenamiento consiste en un SSD PCIe 3.0 de 512 GB, la capacidad máxima disponible para esta amplia familia de portátiles. Lo ideal sería tener opciones de 1 TB, aunque podremos sustituirlo al conectarse por ranura M.2 y formato 2280. Por cierto, no hay ranura adicional de expansión cuando la placa base tiene espacio de sobra para ello.
MSI Modern 15 B7M cuenta con un disipador formado por un solo ventilador tipo turbina, el cual tiene una amplia cámara metálica que empujará el aire hacia fuera por la única rejilla con bloque aleteado disponible en la parte trasera. Dos heatpipes de cobre se encargan de coger el calor de la CPU y VRM a través del cold plate de cobre, y transportarlo hasta dicho bloque. Es un sistema silencioso a máximo rendimiento, así que trabajamos cómodamente con el equipo en todo tipo de condiciones.
Un portátil de uso general como este MSI Modern 15 B7M debería equipar una batería lo suficientemente buena como para aguantar gran parte de la jornada. Tenemos en este caso un bloque de polímero de Litio con 3 celdas, 3448 mAh de capacidad y 39,3 Wh, aunque vemos que a su alrededor sobra bastante espacio bajo la cubierta para meter un módulo de mayor capacidad.
Nos ofrece una duración estimada de casi 11 horas en uso básico y modo ahorro activado, con brillo al 20%, sin iluminación en el teclado y uso activo de internet. Se trata de una medida bastante sorprendente si cuidamos los recursos, y clave de ello es la enorme eficiencia de esta CPU y una entrega de potencia controlada de la propia batería. El ciclo de carga completo es de unas 3 horas, medida típica en el apartado de portátiles.
Pasamos a ver en acción este MSI Modern 15 B7M con las pruebas de rendimiento que realizamos habitualmente. Éstas se han llevado a cabo con el equipo enchufado a la corriente.
Realizamos a continuación los siguientes test sintéticos para CPU, GPU, RAM y SSD:
Esta CPU está aproximadamente en cifras del Intel Core i7-12650H, un modelo de alto rendimiento para la marca Azul, por lo que quedamos satisfechos con su rendimiento bruto. Además tenemos buenos gráficos integrados, un poquito inferiores a los Iris Xe, pero cerca de ellos.
El proceso de estrés al que ha sido sometido el MSI Modern 15 B7M ha durado alrededor de 60 minutos. Se ha llevado a cabo con FurMark, y la captura de temperaturas con HWiNFO.
MSI Modern 15 B7M | Reposo | Máximo rendimiento | Pico |
CPU AMD Ryzen 7 7730U | 49oC | 89oC | 93oC |
El disipador ha mantenido bien controladas las temperaturas de este equipo, y en ningún momento vemos que llegue a los 95ºC de TjMax que soporta esta CPU, aunque sí que se queda cerca. Las cifras estables son elevadas, pero para el tipo de disipador que tenemos, estamos satisfechos, además, tengamos en cuanto que es un proceso de estrés máximo continuado, escenario improbable en un uso normal del equipo.
MSI presenta su nueva actualización de la familia Modern, y a falta de probar versiones con procesador Intel, podríamos decir que esta es una de las grandes opciones por un precio inferior a 1000€.
Ofrece una buena estética y acabado de calidad, solo con la pega de no tener elementos de aluminio, pero es excelente de cara a la portabilidad y comodidad de uso. Su paquete de teclado y touchpad nos ha gustado bastante, si bien no se sienten top, tampoco es que lo necesitemos para uso normal del equipo. Sí que echamos en falta sistemas biométricos para desbloquear Windows, una webcam más potente y un apartado sonoro más contundente. Su pantalla IPS tiene buena representación de colores y contraste, pero 90 Hz de refresco mejorarían la experiencia de uso.
Te recomendamos la lectura sobre nuestra guía de los mejores portátiles del mercado
En el apartado de rendimiento la nota más positiva es incorporar este procesador AMD Ryzen Zen 3 de 8 núcleos, con un consumo tremendamente reducido en modo ahorro, y buen rendimiento cuando se le pide. Cierto es que la RAM no es ampliable, o que no hay versiones con SSD de 1 TB y ranura M.2 adicional, pero al menos este se podrá sustituir fácilmente cuando necesitemos más espacio. La autonomía nos ha sorprendido gratamente con más de 11 h en modo ahorro, una gran gesta para ser de 3 celdas y aún sobra espacio para módulos más grandes.
MSI Modern 15 B7M se presenta a un precio de 699€ en la versión con Ryzen 7 7730U, mientras que la opción con Ryzen 5 7530U baja a 629€. Se trata de cifras muy buenas para un portátil bastante decente en casi todos los apartados, solvente y con gran autonomía, así que a título personal lo considero una compra recomendable para uso en estudio, trabajo, productividad, multimedia y en general las tareas del día a día.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
DISEÑO ACTUAL CON BUENA CONSTRUCCIÓN PESE A SER DE PLÁSTICO | RAM INTEGRADA NO AMPLIABLE, SSD DE 512 GB SIN RANURA M.2 EXTRA |
AUTONOMÍA MÁXIMA +11 H | PANTALLA DE 60 HZ |
PROCESADOR AMD EFICIENTE Y POTENTE CUANDO SE LE NECESITA | SIN SISTEMAS DE DESBLOQUEO BIOMÉTRICO |
BUEN PACK DE TECLADO Y TOUCHPAD PARA TRABAJAR | |
DISIPADOR SILENCIOSO | |
BUEN PRECIO |
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