DeepCool Assassin IV es el nuevo disipador tope de gama de la marca de refrigeración excelencia, con un tamaño más grande y una capacidad de disipación de 280W, no habrá procesador que se le resista, o así debería ser. Mantiene un sistema de doble bloque, pero se ha diseñado una carcasa exterior de plástico donde se integran perfectamente sus dos ventiladores de 140 y 120 mm en modo pull, que conforma un conjunto muy elegante y sobrio. Además cuenta con switch para modo rendimiento y silencioso, sistema de instalación sencillo y plena compatibilidad con plataformas.
Agradecemos a DeepCool confiar en nosotros y enviarnos este disipador para su análisis.
Comenzamos la review del DeepCool Assassin IV con su presentación, que consiste en una caja de cartón rígido con acabado neutro, sobre la cual se ha colocado un segmento de cartón blanco con la imagen del disipador y sus especificaciones. En el interior encontramos dos moldes de espuma de polietileno para almacenar el disipador, y a su lado una caja de cartón con los accesorios.
Este será el contenido de la caja:
A primera vista el DeepCool Assassin IV puede parecer más grande que su predecesor, pero nada más lejos de la realidad el fabricante se las ha ingeniado para mejorar su rendimiento haciendo el conjunto más compacto. Clave de ello será el original empaquetado mediante carcasa de plástico que se ha diseñado para integrar los dos ventiladores, que pasando a ser una unidad de 140 y otra de 120 mm en lugar de las dos de 140 mm que llevaba la versión anterior.
Así que tenemos un bloque completamente cuadrado con 147 mm de ancho, en este caso sí que supera a su antecesor, 164 mm de alto, igualándolo y 145 mm de profundidad. Esta última medida, junto a su posición invertida respecto a la mayoría de disipadores, es clave para darnos plena compatibilidad con memorias RAM. Y es que este modelo no tiene ventilador frontal, sino que está ubicado en la parte trasera en modo pull, con el de mayor tamaño ubicado entre las dos torres en modo push.
La zona frontal por tanto se queda libre, con la superficie de aletas horizontales expuesta con patrón alternado de escalones que permiten una entrada de aire más eficiente que las configuraciones completamente planas. Vemos el marco que cubre toda esta zona y obliga al aire a pasar por el ventilador, incrementando el flujo, y en teoría, mejorando sustancialmente la capacidad de disipación de un bloque abierto. El segundo bloque tendrá la misma base de diseño, siendo un poco más ancho y con las aletas terminadas en triángulo, nuevamente para mejorar el paso de aire.
En el paso intermedio está cubierto con una rejilla tanto en la parte superior como laterales, aunque la primera es de extracción rápida al fijarse mediante puntos magnéticos al bloque. Debajo se esconde el ventilador central de 140 mm con anclaje rápido integrado mediante dos pestañas que empujaremos hacia dentro y tiraremos hacia fuera para retirarlo. Este movimiento es obligado al encontrarse justo debajo los dos tornillos de fijación al socket.
De esta forma llegamos a la zona inferior del DeepCool Assassin IV, donde tenemos un total de 7 heatpipes de cobre de 6 mm de diámetro cubiertos por pintura negra, las cuales parten del cold plate de cobre niquelado de 52×42 mm de área útil. Cada uno de estos tubos se extiende por cada lado a los bloques, repartiendo equitativamente el calor hacia el conjunto. Por su parte la placa de contacto tiene un excelente pulido en su superficie para maximizar el contacto con la CPU. Finalmente en la parte superior de la placa tenemos el sistema de fijación con dos tornillos para el socket.
Este DeepCool Assassin IV equipa dos ventiladores, uno de ellos de 140 mm interno y otro trasero de 120 mm, disminuyendo así el diámetro de uno de ellos frente al modelo anterior. El sistema se conecta mediante un multiplicador, que a su vez tiene un switch de control en la parte superior del bloque que nos permite seleccionar entre un modo rendimiento y silencioso, donde varía el perfil de RPM de ambas unidades. Un pequeño logotipo en la esquina nos dirá qué modo está activado con luz verde potente para el modo rendimiento, y más tenue para el modo silencioso.
El ventilador de 140 mm cuenta con cojinete de fluido dinámico (FDB) el cual nos proporciona control PWM y un régimen de 500 a 1700 RPM en modo rendimiento, 79,1 CFM de flujo de aire y 2,44 mmH2O de presión estática. En modo silencioso baja a 500 – 1350 RPM con la consiguiente disminución de prestaciones a 63,76 CFM y 1,58 mmH2O. Este ventilador cuenta con bordes cubiertos por goma antivibraciones y sistema de extracción rápida.
El segundo ventilador se ha colocado en un marco de plástico para integrarse directamente en el disipador, aunque en realidad es una unidad individual, así que se podría cambiar en caso de fallo. Esta unidad también opera en un rango de 500 a 1700 RPM en modo rendimiento, ofreciendo un flujo de aire de 58,06 CFM y 2,1 mmH2O de presión estática. En modo silencioso estas características bajan a 46,75 CFM y 1,35 mmH2O.
Ambos ventiladores generan un ruido máximo de 29,3 dBA en modo rendimiento, que bajará a 22,6 dBA en modo silencioso. Es por tanto uno de los disipadores más silenciosos del mercado, solamente nos ha faltado un tercer modo con cero RPM para apagar por completo los ventiladores, aunque esto realmente lo podremos hacer desde la BIOS mediante control PWM.
DeepCool Assassin IV ofrece compatibilidad con todas las plataformas de Intel, incluida la de Workstation de la marca azul, mientras que en AMD solamente es compatible con los sockets actuales AM4 y AM5.
El socket que utilizaremos será el LGA1700 de Intel, así que lo primero que debemos hacer es poner el backplate tras la placa, extendiendo los puntos de anclaje al máximo para este tipo de montaje. A continuación colocamos los tornillos elevadores, donde irán colocadas las pletinas de fijación. Atentos porque estas pletinas van al contrario de lo que habitualmente tenemos, es decir, en orientación horizontal en lugar de vertical, por así decirlo.
Ahora debemos de retirar la placa metálica superior y sacar el ventilador para acceder a los dos tornillos de fijación del disipador. El hecho de traer jeringa de pasta térmica facilita la posibilidad de realizar mantenimientos futuros, y además también trae paleta para extender la pasta y toallita impregnada para limpiar bien el IHS. Con ayuda de la llave “L” que se incluye accederemos perfectamente a los tornillos. Además por el otro extremo tendremos una cabeza Allen para poder desinstalar los ventiladores y parte del disipador.
Notad que el disipador irá orientado con el ventilador exterior mirando hacia el panel de puertos. Si optáramos por la posición contraria, descubriríamos que el cable de conexión hacia CPU_FAN no llega a la cabecera por muy poquito.
Pasamos a evaluar el rendimiento del DeepCool Assassin IV sometiendo a estrés durante 24h un AMD Ryzen 5 7600X con PPT configurado a 80W y PBO en modo manual con curva optimizada a -25 para obtener una media de temperaturas en igualdad de condiciones con otros disipadores que probemos. Todo ello con una temperatura ambiente de 24oC en este caso.
El banco de pruebas consiste en:
BANCO DE PRUEBAS | |
Procesador: | AMD Ryzen 5 7600X |
Placa Base: | Asus X670E Crosshair Hero |
Memoria RAM: | 32 GB G.Skill RGB DDR5 6000MHz |
Disipador | DeepCool Assassin IV |
Disco Duro | SSD SATA |
Tarjeta Gráfica | Nvidia RTX 4080 |
Fuente de Alimentación | Corsair RM1000 |
Las temperaturas que nos está dando este disipador resultan bastante similares a las de sistemas de refrigeración líquida de alto rendimiento, siendo realmente un rival directo para ellas. Por su baja sonoridad, recomendamos utilizar siempre el modo rendimiento así iremos un poco más holgados.
Hacemos balance final de los resultados y análisis de este DeepCool Assassin IV, y lo que podemos decir de él es que su rendimiento, pese a no estar al nivel de los sistemas de refrigeración líquida, es bastante bueno para CPU de gama alta y tan exigentes como las Raptor Lake de Intel. Es por tanto un disipador de garantías para montajes de gama alta siempre que el chasis esté bien enfriado.
Quizás una de sus mayores cualidades será el desempeño tan silencioso que tiene, incluso en modo rendimiento, donde prácticamente no se oyen sus dos ventiladores. Resulta útil el switch superior para seleccionar el modo silencioso o rendimiento, aunque en última instancia podremos hacer esto mismo desde la BIOS o software de la placa base si es que tiene.
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El apartado estético es uno de los más cuidados que tenemos en un disipador de aire, consigue ser más compacto que la versión anterior sin comprometer el rendimiento ni compatibilidad con RAM que será absoluta. Colocar el ventilador atrás en modo pull en lugar de al frente en modo push sacrifica un poco el flujo de aire, pero en líneas generales el rendimiento sigue siendo correcto. Se le suma un sistema de anclaje sencillo y buen acceso para retirar ventiladores gracias a anclajes rápidos.
El precio de este DeepCool Assassin IV será de entre 100 y 150€ según las cifras vistas en Amazon o Coolmod. La cifra está dentro de lo que ofrecen 3 rivales principales como son el Cooler Master MasterAir MA824 Stealth, Be Quiet! Dark Rock Pro 4 y Noctua NH-D15. Esta nueva variante de DeepCool ofrece una estética más depurada que el resto, rendimiento similar, máximo silencio y comodidad a la hora de instalarlo.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
DISEÑO ELEGANTE Y SOBRIO | VENTILADOR TRASERO EN MODO PULL SACRIFICA UN POCO EL FLUJO DE AIRE |
BUENA MODULARIDAD DE SUS VENTILADORES PARA EXTRAERLOS | |
INSTALACIÓN SENCILLA Y COMPATIBILIDAD MÁXIMA CON RAM | |
PRECIO SIMILAR AL DE SUS RIVALES | |
DISIPADOR SILENCIOSO, SWITCH PARA MODO RENDIMIENTO Y SILENCIOSO | |
RENDIMIENTO AL NIVEL DE RL DE GAMA ALTA |
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