AMD Ryzen PRO 7000 Series ya se ha dado a conocer. La nueva gama de procesadores diseñados especialmente para entornos empresariales ha llegado. Estos nuevos chips basados en la microarquitectura Zen 4 traen muchas novedades interesantes de seguridad, rendimiento y fiabilidad adicional. ¿Quieres conocerlos?
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Los nuevos procesadores Ryzen PRO 7000 Series, basados en la microarquitectura Zen 4, ofrecen un aumento significativo en el rendimiento en comparación con la generación anterior, Zen 3. En promedio, el rendimiento en instrucciones por ciclo (IPC) es un 13% mayor, lo que significa que en cada ciclo de reloj se pueden ejecutar hasta un 13% más de instrucciones.
Estos impresionantes avances se han logrado gracias a varias mejoras clave en el diseño de los núcleos de CPU. En primer lugar, se ha trabajado intensamente en el Front-End del núcleo. Se ha mejorado el Branch Predictor, lo que ha permitido una mejor predicción de las bifurcaciones en el flujo de instrucciones. Esto reduce la penalización en ciclos de reloj cuando se produce una fallo y se necesita vaciar la pipeline. El nuevo Branch Predictor tiene una tasa de aciertos superior en comparación con la microarquitectura anterior.
Además, se ha implementado una memoria caché de micro-operaciones más grande en el Front-End. Esto permite un almacenamiento más eficiente de las operaciones, mejorando aún más el rendimiento.
En el Back-End del núcleo, se ha ampliado la Instruction Retire Queue, lo que permite tener una cola más larga de instrucciones preparadas. También se ha aumentado el tamaño del registro de fichero para las unidades de enteros y de coma flotante, lo que contribuye a un mayor rendimiento.
Adicionalmente, la unidad de coma flotante de punto flotante (FPU) ahora es compatible con las instrucciones AVX-512, que son instrucciones de punto flotante SIMD avanzadas.
Se han realizado mejoras en las unidades de carga y almacenamiento (Load/Store) para agilizar su rendimiento. Y, para finalizar, otro aspecto destacado es que la memoria caché L2 ahora tiene una capacidad de 1M con una asociatividad de 8 vías, lo que mejora aún más el rendimiento y la eficiencia del sistema.
Por otro lado, lo anterior es equivalente a todos los SKUs de la serie 7000 basada en Zen 4-. Sin embargo, los nuevos AMD Ryzen PRO 7000 Series tienen algo que el resto de procesadores de escritorio no tienen, y es una serie de ventajas y características especialmente pensadas para entornos empresariales (o para el teletrabajo), como:
Para que todo esto sea posible, tenemos tecnologías PRO como:
Debido al aumento en la cantidad de cargas de trabajo de inteligencia artificial, impulsadas por tecnologías como los asistentes de voz, la IA en cámaras web, mejoras gráficas impulsadas por IA, entre otras, los procesadores han tenido que adaptarse mediante la integración de aceleradores de inteligencia artificial. Esto se ha hecho necesario debido a que las cargas de trabajo de IA consumen muchos recursos y las CPUs convencionales no tienen la arquitectura ideal para optimizar su rendimiento.
Como ya sabrás si nos sigues regularmente, la IA requiere datos de coma flotante de baja precisión, como FP8, FP16, etc. Estos datos son más simples. Sin embargo, las FPUs de los procesadores convencionales están diseñadas para FP32, FP64 y SIMD superiores, por lo que no están optimizadas para estos datos de baja precisión. Lo mismo ocurre con las GPUs, aunque han avanzado considerablemente con las unidades Tensor y los aceleradores de cómputo dedicados a estos datos simples.
Apple fue uno de los pioneros en integrar estos aceleradores de IA en sus SoCs, como la serie A y M, que incluyen una NPU (Neural Processing Unit) que Apple llama Neural Engine. Estas unidades son procesadores dedicados que actúan como aceleradores para cargas de trabajo de IA, como el procesamiento de ciertas aplicaciones, el asistente virtual Siri y las tecnologías de la cámara para el ajuste y mejora de imágenes, entre otras.
Poco a poco, esta necesidad de aceleradores de IA también se ha extendido a otros SoCs y procesadores. AMD fue el primero en sorprender este año al introducir la tecnología AMD Ryzen AI en sus procesadores Ryzen para portátiles basados en Zen 4, incluidos los Ryzen PRO 7000 Series. Esta unidad es otra NPU similar a la de Apple, diseñada para acelerar cargas de trabajo de IA en el sistema, convirtiéndose en los primeros chips x86 en incluir un acelerador de este tipo.
La tecnología AMD Ryzen AI ha revolucionado la experiencia en portátiles, ya que los procesadores de la serie AMD Ryzen PRO 7000 para este segmento de mercado son los primeros en incorporarla, como mencioné anteriormente.
Gracias a este hardware dedicado para IA, se logra acelerar aún más estas tareas sin sobrecargar las demás unidades de ejecución, lo que permite realizar multitareas en IA. Además, se ha optimizado este motor para reducir su impacto en la vida útil de la batería durante cargas de trabajo intensas.
Con AMD Ryzen AI, se obtiene un rendimiento en IA que supera con creces a otros procesadores convencionales, brindando nuevas experiencias en aplicaciones de uso diario que se basan en este tipo de cargas de trabajo. De esta manera, AMD se acerca más a Apple en este sentido, dejando atrás a Intel, que aún no ha implementado algo similar en sus procesadores.
Por supuesto, para que esta tecnología funcione correctamente, también se requieren controladores o drivers adecuados. Por lo tanto, AMD Ryzen AI recibirá importantes actualizaciones de software y hardware en los próximos años para continuar mejorando en aplicaciones como videoconferencias, gaming, seguridad informática y predicciones de interfaz de usuario.
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En cuanto a la parte gráfica, la APU AMD Ryzen PRO 7000 cuenta con una GPU integrada de la serie AMD Radeon 700M, la cual se basa en la nueva arquitectura RDNA 3, presente en las tarjetas gráficas Radeon RX 7000 para PCs de escritorio. A pesar de ser una GPU integrada, ofrece un rendimiento bastante sólido, como podrás comprobar.
La GPU RDNA 3 ha sido optimizada para un uso más eficiente de la batería. Existen diferentes versiones disponibles, como la Radeon 780M, que es la más potente y está destinada a los procesadores Ryzen 9 y Ryzen 7. Cuenta con hasta 12 unidades de procesamiento gráfico (CU, por sus siglas en inglés) y velocidades de reloj de hasta 2.8 GHz. Para los modelos Ryzen 5, se encuentra la Radeon 760M, con 8 unidades de procesamiento y velocidades de hasta 2.6 GHz.
Esta tarjeta gráfica integrada puede alcanzar un rendimiento de hasta 2.8 TFLOPS en FP16 y es compatible con el ancho de banda de la memoria DDR5 que comparte con la CPU. Además, cuenta con un motor dual para codificación y decodificación AV1, lo cual es especialmente útil para los streamers. También incorpora tecnologías similares a las presentes en las tarjetas Radeon RX, como el trazado de rayos (Ray Tracing), entre otras. Una gran ventaja para entornos empresariales que necesitan de una buena GPU para multimedia, etc.
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En cuanto al rendimiento del Ryzen PRO 7000, AMD también ha aportado ya algunos datos preliminares, y que han resultado en un rendimiento bastante interesante en varios aspectos:
Para finalizar, hay que decir que los SKUs para escritorio que ha presentado AMD por el momento, de esta serie Ryzen PRO 7000 son los siguientes modelos que puedes ver también en la imagen superior:
No obstante, es probable que lleguen más, por ejemplo, los Threadripper PRO, que también se deberían dejar caer en unos meses. Además, ya conocimos la gama para portátiles:
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