El Ssupd Meshroom S v2 puede ser uno de los chasis en formato ITX más versátiles que tenemos actualmente, disponible en hasta 6 colores distintos nos ofrecerá todo lo que necesitamos para nuestro montaje de oficina, gaming o de creador.
Su diseño full mesh nos brinda excelente capacidad flujo de aire, además de tener espacio para radiadores de hasta 280 mm, o hasta 5 ventiladores. A esto le sumamos la posibilidad de albergar placas ATX, PSU SFX o ATX y GPU dedicadas de gran tamaño hasta 4 slots. Eso sí, todo esto está sujeto a varias condiciones de espacio, las dejaremos claras en esta review ¡comencemos!
Agradecemos Ssupd su confianza en nosotros por enviarnos este chasis para su análisis.
Comenzamos efectuando el Unboxing de este Ssupd Meshroom S v2, el cual nos llega en una pequeña caja de cartón rígido y acabado neutro, donde se nos muestran algunas de sus especificaciones en una tabla externa. El chasis como siempre vendrá dentro de una bolsa de plástico aislante y sujeto mediante dos moldes acolchados.
El contenido del paquete será el siguiente:
El análisis externo del Ssupd Meshroom S v2 va a ser bastante sencillo, ya que básicamente es un chasis con todas sus caras estilo mesh para proporcionar el máximo flujo de aire. El punto positivo es que está disponible en multitud de colores, y por ejemplo la combinación de amarillo interior y exterior negro es muy original.
Empezamos mirando la cara frontal, donde tenemos, adivinad, un panel de metal con malla de agujeritos. Tras ella no encontramos filtro de partículas, así que las motas más pequeñas de polvo entrarán sin problema. Este panel está fijado mediante 4 puntos a presión al chasis, así que es de extracción rápida.
Las dos placas laterales son exactamente iguales, es decir, dos paneles mallados, sin filtro y con fijación por 4 puntos a presión.
El techo es también una malla sin filtro fijada con clips a presión, y en ella tenemos el pequeño panel I/O compuesto por:
Como podéis ver la posición natural del chasis es tipo torre, así que la zona trasera del mismo se presenta con bastantes detalles a comentar. En la zona superior derecha tenemos el hueco para el panel de puertos trasero de la placa, el cual se puede modificar en ancho o posición mediante una placa movible. Justo debajo tenemos el hueco para PSU, que de serie viene para formato SFX, pero que retirando la placa superpuesta en él, se convertirá en ATX.
A continuación, en la esquina superior izquierda tenemos un total de 3 slots de expansión dispuestos para posibles tarjetas de expansión que queramos colocar tendidas. Sin embargo la posición natural de ésta, si es de gran tamaño, será vertical con los puertos mirando hacia el suelo. La última zona de rejilla cuenta con varios agujeros para fijar unidades de almacenamiento.
La zona inferior nos ofrece una zona abierta precisamente para acceder a las conexiones de la GPU en caso de colocación vertical, y justo a su lado dos huecos para almacenamiento SSD de 2,5”. Las patas utilizadas podemos considerarlas temporales, pues se incluye un kit de 4 patas para elevar la posición del chasis y así acceder bien a los respectivos puertos. Vemos una gran cantidad de agujeros extras que servirá para según qué componentes, cuya identidad desconocemos al no habernos hecho falta en nuestro montaje.
Ahora llega el momento de estudiar detenidamente el interior del Ssupd Meshroom S v2, que, pese a parecer sencillo, resulta bastante complejo de cara a las posibilidades de montaje que podemos ejecutar en él.
Comencemos por la placa base, y es que este chasis soporta placas ITX, Micro ATX e incluso ATX, ocupando absolutamente todo el espacio del compartimento izquierdo, si así lo podemos llamar. Tengamos en cuenta que parte de la placa quedará en volandas al no estar presentes todas las fijaciones para ella.
Debemos tener en cuenta que, si instalamos una placa ITX, solo entonces podremos instalar fuentes de alimentación ATX (las de 150 mm) así como SFX o SFX-L. El tamaño de ésta además estará limitado en caso de instalar ventiladores (170 mm como máximo) o tubos de refrigeración líquida (160 o 150 mm como máximo), lo mejor es usar una PSU 150 mm si se nos da este caso. Mientras que si instalamos placas más grandes, estamos limitados a solamente PSU SFX.
Si optamos por disipador de aire, entonces tendremos una altura disponible de hasta 74 mm si solo utilizamos tarjetas de 3 slots, mientras que si ampliamos a 4 slots estará limitado a 54 mm. ¿Por qué ocurre esto? Pues porque el tamaño es tan ajustado que para utilizar 4 slots debemos mover el panel de acero central utilizando el segundo extensor que se incluye como accesorio, quitando espacio a un lado y dándolo en otro.
La GPU en este Ssupd Meshroom S v2 podrá instalarse verticalmente y mirando hacia abajo, que sería lo más normal por tamaño, u horizontalmente con los puertos mirando hacia atrás. En cualquiera de los casos, debemos usar un cable riser que nos permita doblarlo y una gran movilidad.
Las condiciones de instalación de una PSU dependen de varios factores, tipo de placa usada, radiador en caso de tener uno y el propio tamaño de la misma. La capacidad máxima será de 332 mm de largo y 82 mm de grosor utilizando una placa ITX y PSU SFX, que es nuestro caso. Con placa ATX o Micro ATX el grosor se limita a 62 mm. Si la colocamos horizontalmente está limitada a 212 mm.
A su lado podríamos instalar un radiador o bien ventiladores de 120 o 140 mm, lo que provocaría un límite en su anchura de entre 152 y 124 mm, en cualquier caso la mayoría cumple esta restricción. Los elementos de sujeción inferiores se pueden mover a distintos lugares, así como la fijación del conector riser, que será indispensable para su instalación.
Nos queda el almacenamiento, que podrá ser de hasta 8 unidades SSD de 2,5” o bien 4 unidades de 3,5” si instalamos una GPU horizontal SFF, mientras que este recuento se reduce a 4 unidades de 2,5” o 2 de 3,5” con GPU vertical. Con un montaje de placa ITX + PSU SFX + GPU tendremos 2 huecos SSD de 2,5” y otros 2 para HDD de 3,5”, y si usamos placa ATX y PSU SFX, el espacio se limita a 2 SSD de 2,5” y 1 HDD de 3,5”.
No hay espacio destinado a cables, así que estos tendrán que coexistir con el resto de componentes y enrutarlos lo mejor que sepamos. No obstante hay bastante espacio para ellos con un montaje “normal”.
Este Ssupd Meshroom S v2 aún tiene más que ofrecer, pues podremos instalar múltiples configuraciones de ventilación tanto de 120 como 140 mm.
Si lo que queremos son ventiladores tenemos:
En principio la única limitación la marca la zona superior con grosores de 15 mm, y en el lateral derecho el grosor y anchura de la tarjeta gráfica. En el frontal somos libres de colocar cualquier tamaño de ventilador.
Si vamos a instalar refrigeración líquida tenemos:
El frontal será el lugar de instalación indicado para la refrigeración líquida, ya que con una placa ITX no tendríamos problemas por su grosor, al soportar como máximo 63 mm y 332 mm de largo.
En el lateral derecho estamos limitados nuevamente por GPU, pues si utilizamos placa base ATX el espacio se limita a formatos de 240 mm y 53 mm de grosor. Con placas ITX no deberíamos tener problemas de grosor para las RL AIO genéricas.
Procedemos al montaje de nuestro banco de pruebas y puesta en marcha del Ssupd Meshroom S v2, y en este caso hemos sido algo conservadores con:
Efectivamente el disipador de perfil ultra-bajo que hemos utilizado es demasiado pequeño para el 7600X y deberíamos hacerle undervolting, pero podremos instalar con total libertad el modelo Noctua L9x65 e ir mucho más holgados, o bien una RL de 280 mm en el frontal si vamos a utilizar su máxima capacidad con overclocking.
Dicho esto, lo primero que deberíamos instalar en este chasis es la tarjeta gráfica, sobre todo si es muy grande, para estar seguros de si debemos o no reubicar el panel central. En este caso no es necesario, así que colocaremos el cable riser en un lateral para proceder a su instalación. Su ubicación y tipo de riser que ha incluido la verdad es que no nos gusta nada, porque debemos doblar el cable 180º para poder colocarlo, y luego hacer más dobleces para conectarlo a la placa base.
Superado este escoyo, procedemos a instalar los discos duros, en este caso un SSD de 2,5” que ubicaremos en el suelo del chasis. Aquí se nos ha planteado el siguiente problema: Nuestra PSU tiene el cable SATA invertido, y si pegamos al suelo el SSD no podremos conectar la alimentación. Parece una tontería, pero es un inconveniente, así que nos hemos inventado un sistema de elevación con los adaptadores que se incluyen en el kit de tornillos para colocar el SSD más alto y así compensar el grosor adicional del cable y el conector. Ha servido, pero es una solución “de andar por casa”. Quizás haya otra, pero en el momento de la review no se nos ha ocurrido.
A continuación instalamos la placa base con el disipador ya colocado y la fuente de alimentación, que como son dos elementos de formato compacto no tenemos absolutamente ningún problema con ellos. El proceso de conexión de alimentación y panel frontal se ha llevado a cabo cómodamente, tan solo debemos conectar:
Cerramos el chasis y listo, a trabajar con él.
A continuación mostramos el resultado final con el montaje realizado y el chasis funcionando.
Llevaremos a cabo las pruebas de estrés en el hardware durante 60 minutos para registrar las temperaturas dentro del chasis, con la configuración de stock de sus componentes.
| Ssupd Meshroom S v2 | Temperaturas |
| CPU | 96ºC |
| GPU | 65ºC |
| Chipset | 62ºC |
| PCB | 40ºC |
Las temperaturas de este 7600X son altas con este disipador, algo que ya sabíamos, pero en un escenario normal el usuario deberá tener un disipador mejor dimensionado para la CPU que utilice. El resto de componentes van bastante bien debido a la gran capacidad de renovación de aire que tiene el chasis.
Si atendemos a las posibilidades de montaje que nos da este chasis, posiblemente será el más completo para sus ajustados 14,9L de capacidad. Y es que esta pequeña torre es capaz de albergar placas base y fuentes ATX, tarjetas gráficas de hasta 4 slots y gran tamaño, refrigeración líquida y bastante almacenamiento.
Obviamente teniendo presente ciertas limitaciones, pero si jugamos bien nuestras cartas, las posibilidades son más amplias que en cualquier otro chasis del estilo. Dos detalles son los que no nos convencen, como son la ubicación inferior de los SSD totalmente pegados al suelo, y el sistema de fijación del cable riser al tener que doblar mucho los cables con peligro de que estos puedan romperse.
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Además cuenta con un diseño full mesh que le permite obtener total renovación de aire en el interior, aunque pagamos el precio de la entrada de polvo por no tener filtro de partículas integrados. La modularidad es excelente por tener todos los paneles fijados por clips a presión, y está disponible el bastantes colores para su acabado, sin ventiladores, para personalizarlo desde cero a nuestro gusto.
El precio de este Ssupd Meshroom S v2 será de 180€, cifra elevada, pero como las que vemos en otros chasis ITX del estilo, debiendo incluir el cable riser como en nuestro caso. Su estilo externo no creemos que justifique el precio, pero el trabajado diseño llevado a cabo en el interior ciertamente lo hacen superior cualquier opción de medidas similares. Con un poco de modding, añadiendo filtros y demás, tendremos un chasis excelente.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| DISEÑO Y DISTRIBUCIÓN EXCELENTE Y CON MUCHAS POSIBILIDADES | PRECIO ELEVADO |
| EXTERIOR FULL MESH PARA MÁXIMO FLUJO DE AIRE | TIPO DE INSTALACIÓN PARA CABLE RISER Y SSD 2,5” COMPROMETIDA |
| ADMITE PLACAS Y PSU ATX, Y GPU DE GRAN TAMAÑO | SIN FILTROS DE POLVO |
| GRAN CAPACIDAD DE VENTILACIÓN Y PARA RL DE 280 MM | |
| INSTALACIÓN CÓMODA, MODULARIDAD ELEVADA |
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