Nos acaba de llegar el e-scooter INMOTION Climber, tu mejor opción si quieres un desplazamiento ágil y alta potencia si habitas en una zona con pendientes e irregularidades. Y es que este modelo cuenta con dos motores de 450W, uno en cada rueda capaz de entregar picos de 750W siendo capaces de subir pendientes del 36%.
Para ello cuenta con un chasis de aluminio IP56 y baterías IPX7, soportando cualquier inclemencia, capaces de dar una autonomía de 56 km en llano y soportar pesos de 140 kg. Se controla a través de su pantalla LCD o mediante App, ofreciendo varios modos de funcionamiento y hasta 38 km/h si el cliente así lo solicita antes de la compra.
Agradecemos a INMOTION su confianza en nosotros por enviarnos este e-scooter para su análisis.
El INMOTION Climber nos llega en una trabajada presentación en forma de caja de cartón rígido con acabado liso en color gris mostrando imágenes del patinete y sus características destacadas. En este caso la caja se abrirá por arriba, y ordenadamente iremos retirando los distintos moldes que sujetan el vehículo hasta poder sacarlo completamente de la misma. Todo es rápido y limpio.
El contenido del paquete será el siguiente:
Lo más sencillo para sacar el INMOTION Climber de la caja es desplegar su manillar y montaje previamente, ya que es viene desmontado en el interior. El tubo de guía del manillar tiene una bisagra para poder plegarse y transportar el patinete, que a su vez utiliza un sistema de unión reforzado con dos pernos de hierro adicionales con bisagra interna. El sistema de fijación será mediante pestaña de bloqueo manual con seguro que evita aperturas accidentales.
Una vez tenemos el tubo principal montado, es momento de colocar el manillar sobre éste, pero antes debemos asegurarnos de conectar los dos extremos del cable que pasa por dentro del tubo, el cual dará energía y control a todo el sistema eléctrico. Ahora sí, acoplamos el manillar y lo fijamos con 4 tornillos. Se ha incluido una extra de repuesto por si se nos pierde.
Para concluir el montaje, vamos a colocar la patilla en la zona izquierda de la plataforma transporte, y fijarla mediante 2 tornillos, aunque se incluye 3 por si alguno se pierde. Esta patilla es plegable de forma manual e indispensable para aparcar el patinete de pie.
Si en lugar de aparcarlo queremos transportarlo, entonces debemos accionar la pestaña de bloqueo del tubo de guía y al mismo tiempo tirar de ella para separar los elementos. De esta forma abatiremos el manillar, mediante la argolla ubicada tras la pantalla, y un gancho sobre el guardabarros trasero, lo engancharemos para poder transportarlo o subirlo por escaleras. Tened en cuenta que el e-scooter pesa unos 21 kg, aunque para su tamaño y motores es una cifra más que aceptable.
El INMOTION Climber se presenta con un diseño típico en e-scooter, sin asiento, con una plataforma amplia para transportarnos y un sistema de conducción con manillar de 47,5 cm de extensión, sobre un tubo central abatible y ligeramente inclinado para proporcionarnos una posición de conducción cómoda si no somos muy bajitos. Dicho tubo no tiene sistema de ajuste de altura, por lo que será fijo a una altura de 120 cm.
Todo el chasis está construido en aluminio robusto de nivel aeronáutico, con certificación IP56 resistente al polvo y a salpicaduras de agua, aunque la zona inferior de la base, es decir, la tapa de las baterías es de plástico. Éstas están certificadas con IPX7, por lo que soportan sumergimiento en agua. Todo el conjunto utiliza un color negro mate y llamativo color naranja para los tapacubos de las ruedas, clave de su identidad y modelo de producción.
Nos situamos sobre el manillar, el cual parte de un tubo recto de casi 50 cm de largo con puños suaves y acolchados de goma antideslizante. En la zona izquierda se sitúa el único freno manual para la rueda trasera, utilizando maneta de aluminio y accionamiento mediante cable de acero con ajuste de tensado, nada de sistema hidráulico en este caso. Sobre ella también se integra un timbre.
En la parte derecha encontramos el acelerador, en forma de anillo con pulsador electrónico, por lo que permite ajustar la velocidad con su recorrido. La zona de la potencia del manillar es la que integra la pantalla de estado con una cubierta de plástico en lugar de cristal con la siguiente información disponible:
Con el único botón disponible podremos apagar y encender el INMOTION Climber, seleccionar el modo de funcionamiento (dos pulsaciones) y apagar y encender la luz.
Bajamos hacia la zona central donde tenemos instalada la luz de posición frontal, la cual es LED con un amplio alcance, además admite ajuste de posición manual. Bajo ella tenemos un reflector que siempre marcará nuestra posición a los que vienen de frente. También vemos en la parte trasera de la potencia el gancho para el plegado del patinete, el cual es de aluminio.
En todo momento los cables van enrutados por el manillar, entran por la parte superior y salen por la zona de la de plegado para evitar su rotura debido al giro. Podemos ver claramente en la killa de la rueda delantera que este INMOTION Climber no tiene ningún sistema de suspensión, y lo mismo podemos decir de la rueda trasera, así que no será el mejor modelo para absorber los baches la verdad.
La calidad de construcción y robustez salta a la vista al ver que todos los elementos del sistema de dirección son metálicos, incluido el guardabarros, contando con reflectores a ambos lados de la rueda para señalizar la posición.
Las ruedas utilizan un sistema de sujeción mediante tuercas y tapacubos laterales para aislar el motor, aunque en este caso se permite al usuario desmontarlas sin muchos problemas. Para facilitar el proceso, tenemos una llanta dividida en dos que nos permite sacar la cámara y cubierta muy rápidamente por si se produce algún pinchazo.
Estas ruedas serán de 10 x 2.125 pulgadas tanto delante como atrás, con gomas gruesas y huella aptas para todo tipo de condiciones, así como recámara interior muy gruesa para evitar en la medida de lo posible pinchazos. El fabricante ha incluido dos cámaras de repuesto, ya que esta configuración claramente nos indica que los neumáticos no son autosellantes como en otros e-scooter.
La plataforma construida en aluminio con refuerzos laterales soporta un peso máximo de 140 kg (75 kg por cada neumático tal y como se indica en ellos). Cuenta con bordes redondeados y un área útil de 17 cm de ancho y 50 cm de profundidad, aunque es extiende hasta los 77 cm aproximadamente para soportar con solvencia dos personas. El recubrimiento exterior será de goma antideslizante fácil de limpiar, aunque es cierto que mojada resbala un poco más según el tipo de calzado que llevemos.
El acceso a las baterías se lleva a cabo por la zona inferior, cubierta por una placa de plástico atornillada con protección IPX7 al interior. La toma de alimentación se ubica en la parte derecha a la altura de la patilla, con tapa de plástico y conector tipo Jack. Dos reflectores en la zona trasera delimitan de alguna forma la longitud y presencia del INMOTION Climber en la carretera. Incluso hay un pequeño rectángulo libre atrás en el cual podremos colocar el reflector o algún tipo de señalización adicional para el patinete.
Llegamos a la zona trasera, en la que tenemos otra rueda de mismas especificaciones que la frontal, y también un sistema de extracción y desmontaje sencillo para poder cambiar la recámara. Esta cuenta con un completo carenado de aluminio con guardabarros y luz trasera tanto de posición como de freno (parpadea cuando lo activamos). En la parte derecha tenemos un amplio disco de freno de acero ventilado, que será accionado mediante sistema de cable de acero, siendo básicamente igual que el de una bicicleta.
Tras ver la excelente calidad de construcción del chasis de este INMOTION Climber, es el momento de estudiar con más detalle qué puede ofrecernos a nivel de prestaciones y movilidad.
Una de las diferencias que marca este modelo es el integrar no uno, sino dos motores eléctricos instalados en las ruedas, con una potencia nominal de 450W en cada uno y picos de 750W, alcanzando una potencia máxima de 1400W a este patinete. Se utilizan motores de tracción directa de tipo brushless con alta durabilidad, proporcionando freno eléctrico en las dos ruedas para controlar siempre la velocidad del vehículo en pendientes.
El patinete soporta una velocidad máxima de 38 km/h, la cual podrá desarrollar sólo si el usuario lo pide expresamente para uso privado en el momento de la compra del vehículo. Por normativa europea y española estará limitada a 25 km/h en cualquier caso. Como cualquier otro patinete, tenemos 3 modos de funcionamiento básico; modo andar a 6 km/h, modo dinámico a 25 km/h y modo sport limitado a 25 km/h, pero con desarrollando toda la potencia y fuerza de los motores (mayor aceleración).
La configuración de batería consiste en múltiples pilas de litio sumando un total de 533Wh, soportando una autonomía de hasta 56 km medida en llano, con suelo liso con una carga de 75 kg circulando a un 30% de la velocidad máxima soportada, es decir a 23 km/h. El cargador de 84W tardará unas 9 horas en realizar una carga completa, cifra muy elevada incluso para un patinete, así que será mejor aprovechar la noche para cargarlo. En este caso los motores no llevan ningún tipo de sistema de recuperación de energía en la frenada.
Si echamos un vistazo a la resolución de 12 de enero de 2022, de la Dirección General de Tráfico, el patinete cumple los requisitos para un VMP de transporte personal al no desarrollar más de 1000W de potencia nominal, límite de velocidad y cumplir con las medidas máximas. Además cuenta con los elementos de seguridad necesarios como freno manual y luces de posición.
Nos descargamos la aplicación Inmotion de la tienda de Google para emparejar el INMOTION Climber y desbloquear algunas de sus opciones adicionales. Para emparejar el vehículo simplemente activaremos el Bluetooth del móvil y escanearemos el QR que hay en la pegatina de la pantalla o bien el de las instrucciones.
En cualquier caso, el dashboard nos ofrece información completa sobre el uso del patinete, tiempo de viaje total, distancia, velocidad máxima y kilómetros recorridos en total. En la parte inferior tenemos el botón de bloqueo, el cual requiere autenticarnos como propietarios del vehículo e introducir el número de serie, aunque a nosotros no nos ha funcionado.
La luz sí que funciona, igual que todas las opciones para seleccionar el modo de conducción, visualizar advertencias, modificar las unidades de medida, fijar el límite de velocidad o una útil opción como es la de proporcionar impulso desde parado o después de nosotros empujarle con el pie (opción por defecto). También cuenta con control de crucero, modo de calibrado del acelerador, diagnóstico de los sistemas y actualización de firmware.
Hemos estado varios días con este INMOTION Climber haciéndole kilómetro para evaluar su comportamiento, y lo que más destaca de él es la velocidad de respuesta y aceleración de los motores, que aprovecharemos al máximo con el modo sport activado. Con el modo sport y una conducción agresiva hemos consumido alrededor de un 7% cada 3 km de desplazamiento, lo que nos da una autonomía estimada de 42 km. Esto quiere decir que en modo normal y siendo más suaves sí que podremos alcanzar más de 50 km sin demasiado esfuerzo.
La sensibilidad del acelerador es muy buena a nivel de control de velocidad, y realmente los puños se sienten bastante acolchados y cómodos a la hora de conducir durante mucho tiempo. La ausencia de amortiguación se nota bastante en zonas bacheadas e irregulares, aunque por otro lado nos permite tener un control más preciso en curvas y giros rápidos que en ciudad agradeceremos, ya que la suspensión no es tan necesaria en su ámbito de uso más habitual.
La presencia de los dos motores nos dará unas prestaciones adicionales en lugares donde el terreno tenga más desniveles, ya que es capaz de subir pendientes muy empinadas de forma muy solvente, sirva de ejemplo mi caso personal con un peso de 85 kg. Esto lo hace muy buena opción para pueblos y localidades que no son tan llanas como ciudades, así como largos desplazamientos por rutas.
Terminamos nuestro recorrido por uno de lo patinetes más potentes y ágiles que hemos tenido en nuestras manos (tanto de review como en la vida normal), lo de él podemos destacar sobre todo la potencia que tiene su sistema de tracción total a las dos ruedas con motores que desarrollan 900W de potencia nominal. Una salvajada tratándose de un vehículo sin carnet y que cumple la normativa de la DGT.
Esto lo hace ser muy solvente en desplazamientos largos y lugares geográficos con pendientes habituales, por ejemplos cualquier pueblo de Andalucía, siendo excelente en este tipo de condiciones. Además da una autonomía muy elevada incluso en modo sport al superar los 45 km en conducción agresiva. Sin embargo también tenemos algunas ausencias como son la suspensión o sistema de recuperación de energía en la frenada, lo que vendría fenomenal para extender un poco más las cifras de duración.
Visita nuestra guía de mejores patinetes eléctricos del mercado
A nivel de diseño tenemos un chasis de aluminio robusto, con las medidas habituales de un patinete con plataforma amplia, sistema de plegado para el manillar, freno trasero de disco, luces de posición trasera y delantera, y gestión mediante App, con bloqueo (que no nos ha funcionado), limitador y algunas opciones interesantes. Las ruedas de 10 pulgadas son robustas y con sistema sencillo de desmontaje, ya que en este caso tienen recámara en lugar de ser antipinchazos, tened en cuenta esto.
El precio de este INMOTION Climber será de 899€, entrando de lleno en los modelos de gama muy alta por prestaciones y posibilidades, pero siendo menos accesible para un público general. El desembolso merecerá la pena para usuarios que vayan a darle un uso masivo y su entorno de movilidad tenga pendientes pronunciadas y largos desplazamientos, ya que marcará la diferencia respecto a otros modelos más sencillos.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
TRACCIÓN TOTAL CON DOS MOTORES DE 900W DE POTENCIA NOMINAL | SIN SUSPENSIÓN |
RESPUESTA, ACELERACIÓN Y FUERZA EN PENDIENTES PRONUNCIADAS | SIN SISTEMA DE RECUPERACIÓN DE ENERGÍA |
CHASIS DE ALUMINIO ROBUSTO Y CON PESO AJUSTADO PARA SU TAMAÑO | LAS RUEDAS NO SON AUTOSELLANTES FRENTE A PINCHADOS |
AUTONOMÍA SUPERIOR A 45 KM EN MODO SPORT | CARGA UN POCO LENTA DE 9 HORAS |
FRENO ELÉCTRICO EN AMBAS RUEDAS, FRENO DE DISCO TRASERO | |
CÓMODO SISTEMA DE PLEGADO DEL MANILLAR | |
CONTROL POR APP |
El equipo de profesional review le otorga la medalla de platino:
CHIEFTEC acaba de presentar dos nuevas cajas para PC, Visio y Visio Air con un…
Asus ZenWiFi BT8 es un sistema Mesh Wi-Fi 7 el cual se sitúa por debajo…
Qualcomm anuncia nuevos SoC Snapdragon X, pero no se trata de una nueva generación, sino…