Ya llegan las pantallas de 16K, sí, si ya las de 4K están muy bien para muchos gamers, y las de 8K es un total lujo para algunos, ahora también llegan estas nuevas para ir más allá de lo que ofrece actualmente una pantalla con resolución 6K u 8K. ¿Tendrán tan poco éxito como las 6K y 8K? ¿Harán que las de resoluciones más bajas bajen de precio considerablemente? Veremos…
BOE mostró en la DisplayWeek 2023 algo para lo que muchas de las GPUs actuales no están preparadas, ni siquiera algunas de nueva generación. Y es que las pantallas 16K necesitarán una potencia extra para poder funcionar y sacar de ellas todo su potencial. Y es que, por mucho que te acerques a ella, no podrás ver los píxeles como sucede con otras pantallas grandes de menor resolución…
La pantalla LCD que han mostrado en el evento es de 110 pulgadas, un tamaño importante, pero que no es extraño, ya que hemos visto otras pantallas de tamaño similar anteriormente. Lo más destacado de esta pantalla es su resolución 16K y que puede trabajar con una frecuencia de refresco de 60 Hz.
Esto implica una cantidad extrema de píxeles respecto a las actuales pantallas, concretamente 16 veces más que en una pantalla 4K y 64 veces superior a las FullHD o 1080p. Y eso es más de lo que pueden soportar algunas tarjetas gráficas como la NVIDIA GeForce RTX 4060 Ti o la AMD Radeon RX 7600. Y, ni que decir tiene, cuidado con las de 8GB, sean las que sean…
Recordar que en 2022, gracias a AMD Eyefinity y NVIDIA Surround, se podían usar resoluciones 16K usando monitores multi-monitor. Además, en 2019, VESA ya anunció de forma oficial el estándar DisplayPort 2.0 compatible con 16K.
Por otro lado, esta pantalla también ha demostrado tener una relación de contraste de 1200:1, 400 nits de brillo, y con una cobertura de color de 99% DCI-P3, lo que no está nada mal. Y la puedes ver en esta imagen capturada por este twitero:
Desgraciadamente, BOE no ha comentado de forma oficial cuándo será el lanzamiento de estas pantallas, ni tampoco se sabe el precio.
La resolución de 16K se refiere a una imagen o video digital con una medida de 15360×8640 píxeles. También puede referirse a dispositivos que pueden producir imágenes con esa resolución. Al igual que con resoluciones anteriores, el número «16K» indica la cantidad de píxeles en la dimensión más larga de la imagen. Aunque las dimensiones más comunes son 15360×8640 px con una relación de aspecto de 16:9, puede haber variaciones dependiendo de la aplicación.
4K UHD | 8K UHD | 16K UHD | |
Dimensiones | 3840×2160 | 7680×4320 | 15360×8640 |
Píxeles totales | 8.3MP | 33.2MP | 132.7MP |
Relación de aspecto | 16:9 | 16:9 | 16:9 |
Hay que decir que el anuncio de BOE no es el primero. Existen algunos otras pantallas como una Sony 16K, aunque con un precio realmente prohibitivo. Concretamente, el modelo Sony Crystal LED 16K de 20 metros de tamaño, puede costar casi un millón de euros aproximadamente.
Evidentemente, aunque no se haya mostrado el precio, hay que esperar que sea extremadamente caro, inasequible para la mayoría de los usuarios. Sin embargo, incluso si el precio nos sorprenda y sea barato, hay que tener en cuenta otras cuestiones sobre las pantallas 16K, ya que puede que no compensen en todos los casos:
Dicho esto, ¿realmente merece la pena comprar pantallas 16K cuando salgan? La pregunta depende del punto de vista del espectador y del creador. Desde la perspectiva del espectador, factores como el tamaño de la pantalla, la distancia de visualización y la agudeza visual personal afectarán la apreciación de la resolución 16K. Aunque el ojo humano puede procesar esa cantidad de píxeles, los espectadores tendrían que estar extremadamente cerca para notar la diferencia en una pantalla de tamaño medio. Por tanto, ni por presupuesto ni en la práctica merece la pena comprar un monitor o pantalla 16K aunque pudieras. Al menos por el momento. No obstante, puede que las pantallas 16K puedan ser interesantes para empresas de eventos, para cines, o para usos experimentales.
Desde el punto de vista de los profesionales del vídeo, grabar en 16K puede tener ventajas futuras y de calidad. Asegura la compatibilidad con avances tecnológicos, permite una mayor flexibilidad en la posproducción y ofrece una mayor libertad de reencuadre y edición. Sin embargo, el metraje de 16K genera archivos de gran tamaño que requieren una inversión significativa en almacenamiento y hardware más poderoso. Y, dado que los clientes no disponen por el momento de tecnología para visualizar este contenido, también carece de importancia para los creadores.
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Las pantallas 16K ofrecen grandes oportunidades para cineastas y empresas comerciales, eso está claro. Sin embargo, es altamente improbable que el consumidor promedio pueda sacarle potencial en el hogar, y mucho menos si se tienen en cuenta los precios a los que se venden incluso las pantallas 8K, resultando prohibitivas.
Por esta razón, en lugar de gastar en la máxima resolución, lo más inteligente en la actualidad es invertir ese dinero en potenciar otras características como el alto rango dinámico (HDR), la gama de colores y la frecuencia de refresco, etc., y obtener una pantalla 4K mejor. Estos elementos probablemente desempeñen un papel más importante en la calidad general de la imagen tanto para vídeo como para gaming.
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