Si te has comprado un nuevo portátil es posible que estés en esta situación, en la que tienes un portátil viejo y no sabes que hacer, lo cierto es que le puedes dar una segunda oportunidad, entre otras cosas. Por eso, en este tutorial te mostramos algunas buenas ideas para que tu equipo no se termine convirtiendo en un desecho sin utilidad.
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Si no quieres deshacerte de tu portátil viejo y quieres darle una segunda oportunidad para que siga siendo útil, podrías hacer alguna de estas ideas:
Una posibilidad es que le hagas una actualización de algunos componentes, como agregar más memoria RAM o sustituir la unidad HDD por un SSD. De esta forma, podrás ganar una cantidad de rendimiento considerable y seguir usando tu equipo. También puedes dárselo a un familiar una vez actualizado para que lo aproveche si no satisface tus necesidades.
Tampoco estaría de más darle una limpieza interna y renovar la pasta térmica, ya que obtendrás una mejora en la refrigeración, si es que este era el problema por el que lo cambiaste por otro nuevo.
En muchas ocasiones nuestro nuevo portátil se puede estropear, estar actualizándose, o quedarse sin batería. Por tanto, tener siempre disponible un segundo equipo nunca vendrá mal. Además, si hay varias personas en casa que usan estos equipos, así no tendréis que compartir.
Otra posibilidad es transformar tu equipo en un Chromebook, si quieres probar el sistema operativo Chrome OS de Google. No importa que tu portátil viejo no fuese Chromebook, tan solo tendrás que instalar el sistema operativo ChromeOS para sustituir a tu anterior sistema operativo. Así podrás disfrutar de la integración de multitud de servicios de Google y de las apps Android funcionando de forma nativa en tu portátil.
Si no te gusta esta opción, otra posibilidad es instalar alguna distro ligera. Busca una distribución GNU/Linux liviana que te guste y así podrás darle una segunda oportunidad a tu viejo hardware, haciendo que funcione de forma fluida, como ya no hacía desde hace tiempo.
No siempre se cuenta con una televisión para ver contenido por streaming (o tal vez esté acaparada por otro miembro de la familia). Mucho menos cuando estás viajando o fuera de casa. Por tanto, una oportunidad que te puede interesar es dedicar tu portátil viejo como televisión portátil para ver plataformas como Netflix, Amazon Prime Video, HBO Max, Disney+, etc.
Este tipo de apps no consumen muchos recursos, incluso algunas se pueden ejecutar desde el navegador web. Solo necesitarás una buena conexión a Internet y a disfrutar de todo el contenido, incluso cuando estés fuera de casa, ya que estas plataformas suelen tener una opción para descargar títulos y verlos offline.
También te podría interesar transformar tu portátil viejo en un centro multimedia o media center, para ello, puedes contar con Kodi.
Si necesitas un NAS y no tienes uno, también podrías dedicar tu portátil viejo a esta tarea para almacenamiento en red. Al igual que puedes convertirlo en otro tipo de servidor dedicado, tu portátil puede hacerte ahorrar cientos de euros en un NAS dedicado si instalas algún sistema como TrueNAS que sirve para gestionar estos medios de almacenamiento en red y tener tu «nube» particular para acceder al contenido desde donde quieras. Incluso se me ocurre ligar tu NAS a apartado anterior con Plex para tener todo el contenido centralizado.
Otra posibilidad es convertirlo en un servidor web propio con LAMP, por poner un ejemplo, o tal vez usarlo como un cortafuegos dedicado para proteger el resto de los componentes conectados de tu hogar u oficina. Para ello tienes opciones como IPCop.
Otros gamers incluso les parecerá una idea fantástica dedicar el portátil viejo como servidor de Minecraft, o para otros videojuegos multiusuario similares. No es nada complicado, y podrás tener tu propio mundo e invitar a quien quieras.
Si te encantan los clásicos, esos videojuegos retro con los que tanto disfrutabas hace décadas o en tu infancia, entonces también sería una idea fabulosa convertir tu portátil viejo en una videoconsola retro dedicada. Para ello existen gran cantidad de proyectos que te pueden ayudar. Por ejemplo, tienes emuladores como los de la Nintendo Game Boy que te presentamos aquí.
Existen muchos países pobres o personas con pocos recursos que no pueden acceder a un portátil. Por tanto, un acto bondadoso por tu parte sería donar tu portátil viejo para que otras personas puedan acceder a la informática en escuelas del tercer mundo, bibliotecas, o en organizaciones sin ánimo de lucro.
Existen muchas plataformas y asociaciones donde hacer esto. Además, tienes que saber que también es posible donarlo a desarrolladores de software como los de la FSF para que tengan hardware diverso donde probar el software que desarrollan y asegurarse de la compatibilidad.
Eso sí, tanto si lo vas a donar ordenadores por caridad o por el avance del software libre, siempre deberías asegúrate de formatear y borrar cualquier rastro de tus datos personales, ya que estará en manos de terceros y nunca sabes qué podría ocurrir. Recuerda que un formateo a bajo nivel sería la mejor solución, ya que los formateos normales podrían dejar datos que se podrían recuperar fácilmente con herramientas forenses.
También podrías sacar algo de dinero con tu viejo portátil si lo vendes o lo intercambias. Existen multitud de plataformas como Cash Converter, Wallapop, etc., que te permiten vender los portátiles viejos o intercambiarlos por otras cosas que necesites. También cabe la posibilidad de venderlo a una empresa de compra-venda de portátiles de segunda mano que se dedican a restaurarlos y venderlos.
Incluso si el portátil no funciona, también puedes sacar algo de rédito de él. Y es que muchas personas particulares o técnicos, compran este tipo de equipos viejos para sacar piezas para reparar otros equipos del mismo modelo o similares. Por tanto, también pagan bien por estas piezas. Incluso podrías ponerlo a la venta para piezas en eBay o similares.
Por último, y no menos importante, antes de deshacerte de mala manera de tu portátil viejo y que termine en un vertedero convencional o contaminando la naturaleza, considera llevar tu portátil viejo a un punto limpio para e-waste o basura electrónica. Allí no solo se encargarán de que no termine perjudicando el medioambiente con las sustancias tóxicas que contiene, también lo reciclarán para obtener materiales valiosos que servirán para construir otros productos en el futuro.
De un portátil viejo se pueden sacar materiales tan preciados como el oro, el cobre, vidrio, estaño, litio, etc.
Ahora ya sabes que tu portátil viejo no solo es un trasto del que deshacerte, te puede servir de utilidad. ¿Y tú? ¿Qué harías con él?
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