Amazon se encuentra en medio de una serie de despidos masivos. Se estima que la empresa va a despedir a unos 10.000 empleados en total, muchos de ellos pertenecientes al área responsable de Alexa y los dispositivos relacionados con el asistente. Como se mencionaba estas semanas, es una de las áreas que más pérdidas generan en la firma.
El área responsable del asistente virtual cerraría este mismo año con unas pérdidas de unos 10.000 millones de dólares. Por lo que es un enorme problema para la empresa.
Alexa y los dispositivos con el asistente eran una de las apuestas personales de Jeff Bezos. La idea de poder hacer todo tipo de acciones, sobre todo comprar, simplemente usando la voz, era considerado el futuro. Aunque el uso del asistente no es del todo ideal y sigue siendo impreciso o los usuarios no siempre desean comprar algo usando su voz. Por eso, las ventas de dispositivos y los ingresos generados por este área no han sido los óptimos.
Los planes para monetizar el asistente han fallado de forma notable. Además, el propio Bezos ha ido perdiendo interés en este área, reduciendo ya sus inversiones. Si se le suman ahora los despidos masivos en este mismo departamento, queda claro que no es un área que tenga prioridad dentro de Amazon.
Alexa pierde una de sus funciones clave en Android
El problema de Amazon es que sus dispositivos Echo se venden a precio de coste, ya que quieren obtener beneficios cuando los usuarios hagan uso de Alexa en los mismos, pero esto no está pasando. Por lo que su modelo de negocio no está funcionando. Así que ahora reducen las inversiones y despiden a una gran parte del personal. El futuro del asistente sigue siendo algo incierto de este modo.
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