Las placas base Intel B760 y los procesadores Core de 13ma generación no-K de 65W se van a lanzar el 3 de enero. La intención de Intel es la de lanzar las placas base orientadas al valor junto con los procesadores con multiplicador bloqueado durante el CES 2023.
Las placas base B760 son más modestas que las placa base Z790 y van a ser los sucesores de las actuales B660. Estas placas base van a llegar a tiempo para el lanzamiento de aquellos modelos Core ‘Raptor Lake’ no-K, que vienen bloqueados y que van a estar limitados a un consumo TDP de 65W.
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Según los datos confirmados desde Microsoft y Gigabyte existen, al menos, uno 20 CPU en preparación que incluyen las piezas de 65W, las variantes «F» (sin iGPU), y las variantes «T» (35W TDP). La cantidad de modelos por variante sería la siguiente:
Las placas bases B760 van a tener el objetivo de bajar el precio para aquellos usuarios que quieran dar el salto hacia la nueva generación de procesador Raptor Lake, y tendrá la tarea de hacer frente a aquellas placas base B650 de AMD, que pertenece al mismo segmento para los procesadores Ryzen 7000. Sin embargo, para dar el salto hacia Raptor Lake no hará falta obligatoriamente comprar una placa base B760, se puede seguir utilizando la placa base B660.
Fabricantes como MSI, Gigabyte o ASRock, entre otros, deberían tener listos sus modelos para el 3 de enero.
Existen muchos usuarios de PC que están esperando a las variantes no-K para poder dar el salto, así que no falta mucho para verlo. Os mantendremos al tanto de toda la información.
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