Elegir una TV 8K no es tarea fácil, ya que existen gran cantidad de marcas y modelos. Sin embargo, en esta guía podrás conocer algunos consejos para poder elegir la que mejor se adapte a tus necesidades y también algunos modelos recomendados para acertar siempre en la compra.
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Aquí verás 10 consideraciones que deberías tener en cuenta a la hora de comprar un TV 8K para no equivocarte en la compra:
Cuanto más gastes, mejores serán las características obtendrás en tu TV 8K, aunque esto no siempre es así, ya que algunas marcas ofrecen mucho por precios asequibles. No obstante, es importante tener en cuenta que una TV barata siempre debería ser inferior en calidad o en prestaciones.
Mas grande es mejor. Mucho mejor. Aunque deberías saber que el tamaño de la pantalla va en función de la distancia a la que vayas a mirar dicha pantalla. Por tanto, sería conveniente que hagas cálculos de cuánto hay entre el sofá o los sillones y la pantalla.
Debes saber que muchos fabricantes cuentan con tablas que te ayudan en la elección, como por ejemplo:
Tamaño TV (pulgadas) | Distancia recomendada SD (m) | Distancia recomendada HD (m) | Distancia recomendada 4K (m) |
---|---|---|---|
65 | 5,70 | 4,10 | 2,50 |
58 | 5,10 | 3,70 | 2,20 |
55 | 4,90 | 3,50 | 2,10 |
50 | 4,40 | 3,20 | 1,90 |
49 | 4,30 | 3,00 | 1,80 |
43 | 3,80 | 2,70 | 1,60 |
40 | 3,50 | 2,50 | 1,50 |
32 | 2,80 | 2,00 | 1,20 |
Tamaño TV (pulgadas) | Distancia recomendada HD (m) | Distancia recomendada 4K (m) |
---|---|---|
70 o más | 3.02 | 2,35 |
65 | 2,9 | 2,25 |
60 | 2,72 | 2,16 |
55 | 2,44 | 1,98 |
50 | 2,23 | 1,89 |
45 | 2,04 | 1,80 |
40 | 1,96 | 1,71 |
Tamaño TV (pulgadas) | Distancia recomendada (m) |
---|---|
55 | 1,7 |
65 | 2 |
75 | 2,3 |
85 | 2,6 |
Como sabes, actualmente tienes varias opciones disponibles en el mercado, aunque dos de las más populares son la LCD LED y la OLED. Ambas con sus beneficios y desventajas.
QLED | OLED | LED | |
Negro | Bueno | Perfecto | Bueno |
Motion Blur | Muy bueno | Perfecto | Bueno |
Ángulo de visión | Pobre | Bueno | Bueno |
Color | Muy bueno | Bueno | Bueno |
Uniformidad del gris | Media | Buena | Media |
Luminosidad | Muy buena | Buena | Muy buena |
Retención de imagen | Muy bueno | Pobre | Muy bueno |
Precio | Alto | Medio | Bajo |
Los televisores LED son menos costosos que los televisores OLED, aunque los precios de los OLED están bajando mucho conforme la tecnología va madurando.
Los televisores LED están retroiluminados, lo que significa que una luz brilla a través de un panel de cristales para crear la imagen. Los televisores OLED no tienen retroiluminación. En cambio, cada píxel de un televisor OLED se enciende, se apaga y se ajusta por sí solo. El resultado es una imagen muy superior y más real, especialmente en cuanto a negros.
Tanto los LED como los OLED funcionan bien en ambientes con bastante iluminación, aunque los LED siempre superan a los OLED en este sentido, ya que los OLED pueden ser mejores para habitaciones donde la iluminación es más tenue.
Dado que los televisores LED no pueden oscurecerse por completo, debido al panel de retroiluminación, los detalles de las sombras son peores. Con un OLED, los colores resaltan, el negro es negro verdadero, y el contraste y los detalles de las sombras son reales.
Cuanto más profundos sean los negros, mejor será el contraste. Y cuanto mejor sea el contraste, mejor será la imagen. Agregue a eso: no es solo la profundidad de los negros, son los detalles en los negros los que hacen una gran imagen. En pocas palabras: no hay competencia aquí, OLED clava los negros. Sin embargo, los colores no serán tan vivos.
Tanto los televisores LED como los OLED son delgados, pero OLED es más delgado aún, por lo que puede ser mejor para integrar donde no haya tanto espacio o a nivel estético. Por ejemplo, para colgarlo a modo de cuadro en la pared. No obstante, las diferencias no son tan abismales como para desechar los LED solo por eso.
Tanto los LED como los OLED tienen buenos ángulos de visión. Los LED un poco mejor incluso, por lo que no tendrás problema si te quieres sentar en un lateral a ver la pantalla. No tienes que estar justo en el frente para verla bien y que no se distorsione la imagen.
Actualmente, la tecnología ha avanzado y madurado en todos los tipos de paneles y pueden servir para ver casi cualquier cosa en pantalla. También las imágenes rápidas, ya que las tasas de refresco y de conmutación son bastante buenas.
Una pantalla LED es un tipo de tecnología de visualización que utiliza pequeños LED, o diodos emisores de luz, para iluminar la pantalla desde la parte trasera. Las pantallas LED tienen algunas ventajas, como su eficiencia frente a otras tecnologías, además de su gran brillo, su viveza de colores, su buen ángulo de visionado, y sus prestaciones. Sin embargo, poco a poco han ido surgiendo algunas alternativas que han desplazado a la tecnología LCD LED a un segundo plano.
OLED (Organic Light-Emitting Diode) es un tipo de tecnología de paneles impulsada principalmente por LG y Sony. Emplea un tipo de LED orgánico para mostrar la imagen. Estos LEDs orgánicos producen su propia luz, en vez de usar una matriz de luces LED de color blanco como en las pantallas LED convencionales para la retroiluminación.
De esta forma se puede controlar mejor la iluminación de la imagen, y cada píxel del que se compone la pantalla se puede apagar o encender de forma independiente, generando unos mejores contrastes entre zonas de luz y sombra, así como un color negro más puro. Si observas una pantalla LED convencional, verás que al mostrar una imagen negra no es un negro real, sino una especie de gris oscuro luminiscente debido a que la retroiluminación está actuando y no se apaga.
Esa forma de gestionar sus píxeles también tienen otra ventaja y es que consumen menos que las pantallas que necesitan de una matriz de iluminación trasera siempre encendida.
A pesar de que la tecnología OLED se ha popularizado mucho en las televisiones de alta gama, no deja de tener sus desventajas. Uno de los puntos débiles es su durabilidad, que al tener materiales orgánicos, serán más perecederos. No obstante, poco a poco se ha ido mejorando la fiabilidad de estas pantallas, permitiendo que duren hasta 5 años o más. También se dan efectos negativos como las imágenes fantasmas o el burn-in (quemado) de la imagen.
Se basan también en la tecnología LED, pero estas pantallas QLED (Quantum Dot LED), desarrollada por Samsung, han llegado como alternativa a las OLED. En este caso, se emplea una matriz de iluminación LED con luz azul en vez de blanca, es decir, igual que una LED convencional, pero cambiando el color de iluminación por el azul. Sin embargo, por otro lado se parece a la OLED, dado que los puntos cuánticos se pueden controlar de forma independiente.
Dicho de otro modo, se trata de un panel similar a la LED convencional pero con las ventajas de la OLED al poder controlar mejor la iluminación y mostrar negros más reales. No obstante, no deja de tener desventajas. Una de ellas es que contiene materiales cancerígenos y peligrosos para el medio ambiente, como el cadmio. Otro problema es el nivel de contraste inferior a la OLED, ángulo de visión más pobre, peor tiempo de respuesta, menos eficientes energéticamente, menos pureza del tono azul, etc.
La nanocélula o nanocell es un tipo de tecnología LCD como las QLED y LED. Sin embargo, tiene algunas diferencias, como una capa de células que se intercala entre dos capas de electrodos. Mientras que los electrodos están en contacto directo con las células, éstas no están en contacto directo entre sí. Así, las células son menos susceptibles a la retención de imágenes y su vida útil es mucho más larga. Además, las células tienen una relación de contraste mayor que las de los televisores LCD LED convencionales. Poco a poco, esta tecnología de LG está cada vez siendo más y más barata, y pronto llegarán a los valores que tienen los actuales OLED, por lo que es otra tecnología a tener muy en cuenta.
Aunque 4K puede ser una buena resolución para la mayoría de usuarios, en este artículo nos centramos en las TVs 8K, que pueden ser beneficiosas cuando se elige una pantalla de gran tamaño, para así verla con mayor calidad de imagen incluso cuando te acercas a ella, dado que los píxeles tendrán una mayor densidad.
Pero, sea cual sea la resolución, es importante que sea compatible con HDR (High Dynamic Range). Esta tecnología mejora la calidad de la imagen de forma notable, por lo que es importante que cuente con soporte para ella o para alguna de sus nuevas versiones.
Con HDR, el color en un televisor se mantiene fiel a su estilo. Sin HDR, un televisor no puede reproducir ciertos colores de forma realista. Realmente, lo que HDR hace por un televisor es tan asombrosamente espectacular que vale la pena profundizar más.
La frecuencia de refresco se mide en Hz y cuanto más rápida o más alta sea la tasa, más fluida será la imagen, lo que significa que es ideal para deportes, juegos y películas. No obstante, la mayoría de TVs actuales de gama media alta poseen una buena tasa de refresco, por lo que es algo por lo que no debes preocuparte demasiado.
Por otro lado está el tiempo de respuesta, que que no hay que confundirlo con la frecuencia de refresco. En este caso se mide en milisegundos (ms) y se trata de la velocidad a la que conmutan o cambian de color los píxeles. Mientras más rápida, es decir, mientras menos ms, mejor.
Relaciones de contraste es algo que cada marca las califica de manera diferente (no hay estándares) y algunas ni siquiera mencionan las relaciones de contraste. Es una especificación sin valor al comparar televisores, por lo que tampoco debes prestar demasiada atención a este valor cuando estás comparando TVs 8K.
Los televisores inteligentes, o Smart TVs, son bastante comunes actualmente. De hecho, los de gama más alta, como los 8K, raramente serán TVs convencionales. Además, tener una Smart TV siempre es garantía de contar con conectividad a Internet para extender las capacidades de tu televisor, instalando apps adicionales como Netflix, HBO, Amazon Prime Video, Disney+, entre otras muchas más y videojuegos.
Los cables y puertos de TV correctos realmente marcan la diferencia. Es importante que tu Smart TV cuente con un buen número de puertos y de opciones de conectividad, ya que de ello dependerá la cantidad de dispositivos periféricos que puedas conectar y de cómo te puedes conectar a la red.
No debes olvidar que deben tener al menos varios puertos USB para poder conectar unidades de almacenamiento externo como pendrives, discos duros con contenido multimedia, y más. También encontrarás otros dispositivos USB compatibles con Smart TVs como mandos de juego, receptores RF, etc.
Busca modelos con varios puertos HDMI en su televisor. Esto es importante debido a que muchos dispositivos como Apple TV, Android TV Box, Fire TV, etc., se conectan mediante este tipo de puerto a tu televisor, además de otros elementos como equipos de sonido, pantallas externas, PCs, etc. También debes consultar sobre la compatibilidad con HDCP (para contenido digital de gran ancho de banda). La próxima generación se llama HDCP 2.2, y no solo no es compatible con versiones anteriores, sino que muchos dispositivos nuevos ni siquiera lo admiten.
Conectividad Bluetooth también podría ser una opción, aunque esto no es tan importante. Este tipo de conectividad puede servir para ciertos mandos o periféricos de control, así como algunos dispositivos de sonido externos que se conectan de esta forma. Pero tampoco es la conexión más importante que existe. Es mejor disponer de USB y HDMI.
Lo que sí es importante es que disponga de puerto Ethernet mediante RJ45 y de WiFi. De esta forma podrás elegir cómo conectar la TV a Internet, si mediante la estabilidad que aporta el cable o mediante la conectividad inalámbrica que aporta el WiFi.
Aunque existen dispositivos como las barras de sonido, Home Cinema, etc., es importante que la TV 8K cuente con un buen sistema de sonido built-in. Ya que, si no piensas comprar ninguno de estos elementos extra, deberías disfrutar a diario de un sonido de calidad. Para ello, es importante que te fijes muy bien en los altavoces, su potencia, y el tipo de sonido y tecnologías que dispone tu futura TV.
No compres un televisor porque le gusta el control remoto. Puede actualizar el control remoto de su televisor en cualquier momento, y algunos de los controles remotos de terceros más nuevos son realmente impresionantes. No obstante, si usas este otro parámetro para decantarte entre dos TVs que son muy iguales en los anteriores términos, entonces sí que puede ser una buena idea.
Actualmente existen varios sistemas operativos para las Smart TVs. Estos televisores inteligentes vienen con sistemas operativos como:
Por último, para que no te equivoques en la compra, puedes optar por alguno de estos modelos de TV 8K del mercado que te recomendamos:
Se trata de una Smart TV de tipo QLED con una pantalla de 65 pulgadas, resolución 8K, Direct Full Array, HDR10, Inteligencia Artificial, tecnología MultiView, OTS+, asistente de voz Alexa integrado, y un control remoto Premium One Remote.
Última actualización el 2024-11-22
Por otro lado, también tienes una TCL con tecnología QLED de 75″ y resolución 8K. Cuenta con Google TV como sistema operativo, sonido Onkyo, Motion Clarity Pro, y dispones de Google Assistant, aunque es compatible también con Alexa.
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