Consejos para comprar monitor | GUÍA RÁPIDA 2024

Un monitor de PC es un componente clave de cualquier ordenador. Es el dispositivo de visualización, por lo que es importante saber elegir el adecuado. Sin embargo, los monitores de PC tienen una gran variedad de tamaños, tipos de paneles, características técnicas, interfaces de conexión, y formas, lo que dificulta mucho la elección.

El monitor de PC adecuado para ti depende de tus necesidades y preferencias personales. Debe tener un tamaño y una forma que se adapten a tu espacio de trabajo y unas características que satisfagan tus necesidades, como el ajuste del brillo y la configuración de la pantalla. Por ejemplo, si quiere poder utilizar su monitor de PC de pie o sentado a diferentes alturas, asegúrese de que tiene opciones de montaje flexibles.
* Artículo patrocinado por ASUS

Índice de contenidos

Cómo elegir un buen monitor

Por último, si tienes dudas de cuál modelo de monitor deberías elegir según tus necesidades, aquí tienes unos puntos en los que deberías fijarte para acertar en la compra:

¿Cuánto dinero puedo invertir? Es la primera pregunta que debes hacerte, ya que gracias a ella se podrán filtrar multitud de modelos que no se adaptan a tu presupuesto. Esto te dejará frente a los que sí que te puedes permitir, y podrás centrarte en ellos verificando los siguientes puntos para ver cuál es el que más te conviene según tus preferencias.
¿Para qué lo necesito? Es necesario contestar primero a esta pregunta para determinar las características que debería tener tu monitor. Por ejemplo, no busca lo mismo un ingeniero que trabajará con programas CAD que un gamer. Por tanto, al igual que el primer punto, esto debería ser otro gran filtro de modelos para centrarte en algunos de ellos y en los siguientes puntos.
Resolución: cuanto más alta mejor se verá la imagen, especialmente si la pantalla es de gran tamaño. Lo mínimo debería ser una FullHD o de ahí para arriba, como una 4K, etc. Pero no menos de FullHD.
Tamaño: el tamaño también importa, ya que de él dependerá el espacio de trabajo del que dispongas y también la densidad de píxeles en función de la resolución elegida. Es decir, los píxeles se repartirán por la pantalla en una cantidad justa de píxeles por pulgada (ppi), mientras mayor sea la concentración de píxeles por unidad de superficie, mayor será la calidad de imagen, especialmente cuando la miras de cerca.
Frecuencia de refresco: también es un factor que hay que buscar cuanto más grande mejor. Se trata de las veces que el monitor es capaz de actualizar los fotogramas por segundo. Se mide en hercios (Hz) y si una pantalla tiene 144 Hz, estamos hablando de que puede actualizarse hasta 144 veces en cada segundo, lo que evitará imágenes poco nítidas, especialmente cuando se trata de movimientos rápidos de las escenas que se están reproduciendo. Ten en cuenta que la tarjeta gráfica debe estar a la altura, como he mencionado. Por ejemplo, si compras un monitor de 90 Hz 4K, deberías asegurarte de que la GPU puede ofrecer 4K a 90 FPS, de lo contrario, habría un desajuste entre GPU-monitor que se traduciría en ciertos problemas visuales. Para evitar estos problemas se han desarrollado tecnologías como G-Sync de NVIDIA y FreeSync de AMD, haciendo que no importe si monitor y GPU están descompasados, ya que sincroniza a ambos para evitar esos inconvenientes. Por tanto, sería recomendable comprar un monitor que sea compatible con estas tecnologías de sincronización.
Tiempo de respuesta: no hay que confundirlo con lo anterior, en este caso es el tiempo que tarda un pixel en conmutar de un color a otro, es decir, el tiempo que tarda en cambiar de color. En este caso, mientras más bajo sea mejor, ya que tardará menos tiempo en pasar de un color a otro y eso es lo que se busca. Por lo general, lo ideal es que tengan 5ms o menos, especialmente si vas a usarlo para gaming sería conveniente velocidades de 2ms o menos.
Tipo de panel: aunque la mayoría son IPS, existen otros tipos de paneles que deberías conocer. De ellos también dependerá la agilidad de la pantalla, la calidad de los colores, el contraste, el brillo, y otros factores. Por ejemplo:
- Rendimiento
  - TN: no es el mejor en cuanto a frecuencia de refresco, pero sí que es el más rápido en cuanto a tiempo de respuesta.
  - VA: la frecuencia de refresco es alta, pero los tiempos de respuesta son peores.
  - IPS: los tiempos de respuesta son algo más lentos que TN, pero más rápidos que VA, mientras que la tasa de refresco es bastante aceptable.
- Visualización
  - TN: peor en ángulos de visión y peores colores.
  - VA: mejores ángulos de visión que TN, pero peores que IPS. El color es bueno, con gran contraste y mejor profundidad de color.
  - IPS: tiene mejor color que los anteriores y mejores ángulos de imagen.
- Precio
  - TN: resulta barato.
  - VA: también es barato.
  - IPS: el más caro
- Mejor uso
  - TN: Gaming
  - VA: Uso general
  - IPS: Uso profesional
¿Debería conseguir un monitor curvo? Depende de la preferencia, se supone que ofrecen una experiencia más inmersiva, pero no son tan abundantes en el mercado como los planos y pueden resultar más caros. Además, pueden traer otro problema añadido y es que desde ciertos ángulos pueden generar deslumbramiento, lo que no es lo óptimo.
Contraste: es importante considerar el contraste de un monitor, ya que debe ser bueno para generar una diferenciación entre las zonas de la escena que están oscuras y las zonas que tienen brillo. Con contrastes bajos esa definición no será tan evidente, y empeora la calidad de imagen.
Luz azul baja no debería ser algo que te preocupe prioritariamente a la ahora de elegir monitor, pero sí que es interesante si el monitor ofrece algún tipo de protección para tu vista. No obstante, siempre tienes software que puedes instalar en cualquier momento y que filtra la luz azul para no dañar tus ojos y generar menos fatiga ocular.
Certificados: como mínimo, debe contener estándares RGB y Adobe RGB, temperaturas de color de entre 5.000 y 7.500 K y preajustes de gamma de entre 1,8 y 2,4. Los monitores utilizados para la producción de televisión o películas también deben ser compatibles con el estándar gamma BT.1886.
Profundidad de color: cuanto más alto, mejor. Cuando se trata de uso profesional se debería optar por un monitor con profundidades de color de 10-12 bits. Pero, al igual que ocurre con la frecuencia de refresco, la GPU tiene que tolerar esa profundidad de color, ya que de poco te serviría si no. El monitor es capaz de rellenar por interpolación si la GPU no llega a tanto, pero eso no es lo óptimo. Vigila que la GPU elegida no se limita solo a 8 bits si vas a elegir un monitor superior.
Otros extras: si el monitor dispone de otras tecnologías o funciones adicionales, mucho mejor. Por ejemplo, si dispone de HDR la calidad de imagen se verá afectada de forma positiva.
Interfaz de conexión: no es lo más importante, pero sí que debería ser compatible con la salida de vídeo de tu GPU, para no tener que usar adaptadores que no son nada recomendados si se pueden evitar. Por lo general, si disponen de conectores HDMI y DisplayPort, será compatible con casi cualquier monitor actual.

Recomendación de los mejores monitores

Si quieres acertar en la compra, aquí tienes una selección con los 6 monitores más recomendados que puedes adquirir en el momento:

VG27AQZ

El primer monitor recomendado es un ASUS VG27AQZ. Un fantástico producto diseñado especialmente para gaming y que cuenta con unas características técnicas realmente destacables para el precio que tiene.

Este monitor tiene un panel tipo IPS, con una resolución de 2560×1440 px, es decir, WQHD. Su panel es de 27 pulgadas, lo que deja una densidad de píxeles extraordinaria. Además, impresiona por su frecuencia de refresco de 165 Hz, para gaming profesional, así como tiempos de respuesta de tan solo 1 ms gracias a la tecnología ASUS Extreme Low MOtion Blur Sync.

También posee soporte para tecnología Adaptive-Sync, que elimina los defectos de la imagen para disfrutar de juegos más fluidos y FPS más alto. Por supuesto, también está certificado para la tecnología NVIDIA G-Sync, por lo que es totalmente compatible. Y tampoco me gustaría olvidar que dispone de HDR10, el estándar para un nivel de brillo y abanico cromático destacable.

Y si todo eso te parece poco, también cuenta con un soporte ajustable en inclinación, orientación, rotación y altura de la pantalla, para ser más ergonómico.

VG247Q1A

La siguiente propuesta que te ofrecemos es este otro monitor gaming de ASUS, el modelo VG247Q1A. En este caso, se trata de un monitor con una pantalla de 23,8 pulgadas de tamaño, y con una resolución FullHD (1920×1080 px). Algo más modesto y barato que el anterior, pero no menos por eso.

Además, la tasa de refresco se mantiene en unos sorprendentes 165 Hz, para gaming profesional y para los que buscan una experiencia más inmersiva. También tiene tecnología ASUS Extreme Low MOtion Blur, consiguiendo velocidades de respuesta de solo 1ms, y soporte para Adaptive-Sync, eliminando esos defectos gráficos y las escenas borrosas para cobrar mayor nitidez.

En el anterior caso, soportaba G-Sync para NVIDIA, en este caso soporta tanto FreeSync para tarjetas gráficas AMD Radeon como Adaptive-Sync con tarjetas gráficas NVIDIA GeForce también. De este modo, tendrás una gran compatibilidad para que solo te tengas que preocupar de disfrutar de las excelentes imágenes que este monitor te ofrece. Con función Shadow Boost para mejorar los detales de las áreas oscuras sin sobrexponer las áreas brillantes.

VG277Q1A

Este otro monitor gaming de 27″ tampoco podía faltar en la lista de recomendados, ya que también tiene interesantes características. Por un lado, tiene una resolución WQHD de 2560x1440px, con panel IPS, lo que lo hace excelente para casi cualquier uso.

En cuanto a la frecuencia de refresco, aquí se sube un poco el nivel frente a las unidades anteriores, y se llega a los 170 Hz, con tiempo de respuesta de tan solo 1ms. Es decir, el sueño húmedo de todo gamer. Además notarás su optimización para los videojuegos, no solo en las velocidades de los fotogramas y las conmutaciones.

Su tecnología ASUS Extreme Low Motion Blur también hace apto de presencia en este modelo para pulir esos defectos gráficos y dejar escenas menos borrosas y con mayor nitidez. Y, por supuesto, en este caso es compatible con Adaptative-Sync con tarjetas NVIDIA GeForce y también con FreeSync para AMD Radeon. Incluye función Shadow Boost para mejorar los detales de las áreas oscuras sin sobrexponer las áreas brillantes.

VG27AQ1A

El siguiente monitor gaming de ASUS también es de 27 pulgadas de tamaño de pantalla, con un panel de tipo IPS, una tasa de refresco de 170 Hz y un tiempo de respuesta rapidísimo de 1ms, eliminando así todos los problemas con los fotogramas durante la reproducción de vídeo o en tus partidas con tus videojuegos favoritos.

Por supuesto, como los anteriores, integra la función Shadow Boost, que mejora los detalles de las áreas oscuras sin sobrexponer las áreas brillantes. Y tecnología ASUS Extreme Low Motion Blur (ELMB), para eliminar los defectos gráficos y hacer que las escenas borrosas cobren nitidez.

Es G-SYNC Compatible, soportando un rango de refresco variable (VRR) y asegura una experiencia de juego sin defectos de imagen con tarjetas gráficas NVIDIA Geforce. Soporta tanto Adaptive-Sync con tarjetas gráficas NVIDIA GeForce como FreeSync con tarjetas gráficas AMD Radeon.

MB165b

El siguiente producto escapa un podo de lo visto anteriormente, ya que se trata de un monitor portátil de 15.6″. También cuenta con un panel de tipo IPS, resolución HD de 1366×768 px, un marco muy fino, alimentación por USB, panel antirreflejos, es muy ligero, se ha diseñado para su fácil transporte y uso, y detecta automáticamente la orientación para cambiar de modo apaisado a vertical y viceversa.

Por tanto, este monitor ASUS ZenScreen MB165B se puede transformar en un gran complemento para tu equipo portátil o como pantalla secundaria para tu PC de sobremesa.

PA278QV

Por último, volvemos a los monitores estáticos con este modelo ASUS ProArt PA278QV monitor de 27″ con resolución WQHD (2560 x 1440) y panel LED IPS con marcos muy delgados. Un complemento profesional con precio competitivo que no puedes perderte.

Está equipado con puertos DisplayPort 1.2, miniDP, DVI-D, HDMI 1.4 y un hub USB para conectar otros dispositivos a él. Incluso puede importar archivos de unidades externas si lo necesitas gracias a su puerto USB.

Por otro lado, viene con una tecnología para bajar la intensidad de la luz azul tan dañina, para proteger tu salud ocular contra las emisiones de esta longitud de onda gracias a 4 filtros a los que se puede acceder desde el menú de configuración de la pantalla del monitor para su ajuste.

En cuanto a la imagen, también hay que destacar su gran fidelidad cromática con tonos de colores vibrantes y realistas, y su calibración de fábrica ProArt con una precisión de ∆E < 2 que asegura que el resultado final sea exactamente igual a la imagen que ves en la pantalla. Algo imprescindible para diseñadores y otros profesionales de la imagen.

Diseño ergonómico compatible con VESA y ajustes de inclinación, giro, altura y orientación para una cómoda experiencia de visualización.

Por supuesto, los monitores citados anteriormente son compatibles con otras tarjetas gráficas, es decir, es probable que se adapten a tu configuración actual, sin que tengas que realizar ningún cambio en ella. Sin embargo, si quieres sacarles el mayor partido y aprovechar las prestaciones que te ofrecen, deberías reconsiderar estas otras gráficas.

Bonus track: tarjetas gráficas recomendadas

Para estos monitores, también deberías considerar estas otras tarjetas gráficas con las que exprimir al máximo sus características:

ASUS ROG Strix NVIDIA GeForce RTX 3090 OC Edition

Se trata de una de las tarjetas gráficas más poderosas e impresionantes del mercado. NVIDIA ha creado este monstruo denominado GeForce RTX 3090 que ahora se monta sobre una placa ASUS, acompañada de 24 GB de memoria tipo GDDR6X para un rendimiento gaming simplemente brutal.

Además, cuenta con interfaz HDMI 2.1, DisplayPort 1.4a y se inserta en una ranura PCIe 4.0. En cuanto a la refrigeración, posee tres ventiladores para mantener bajo control la temperatura durante tus partidas.

ASUS TUF Gaming AMD Radeon RX 6900 XT OC Edition

Y de un monstruo pasamos a otro monstruo, otra de las grandes en el sector, pero esta vez llegada desde las mesas de diseño de AMD. Se trata de este modelo de tarjeta gráfica ASUS con un chip de GPU AMD Radeon RX 6900 XT para que tus videojuegos funcionen de forma fluida y puedas realizar todo tipo de trabajos de forma ágil.

Esta tarjeta gráfica viene equipada con 16 GB de memoria VRAM tipo GDDR6, así como doble ventilador ball-bearing, cubierta de aluminio, y puertos como el HDMI 2.1 y el DisplayPort 1.4a.

ASUS TUF Gaming NVIDIA GeForce RTX 3070 Ti

La siguiente recomendada es esta otra ASUS pensada para el gaming. En este caso monta un chip de GPU NVIDIA GeForce RTX 3070 Ti que sale algo más económico que las dos anteriores, pero que tiene un rendimiento suficiente para la mayoría de los videojuegos actuales.

Cuenta con 8 GB de memoria VRAM GDDR6X, con un ventilador triple para mantener la temperatura bajo márgenes adecuados, con certificado militar, y con conexiones HDMI 2.1 y DisplayPort 1.4a.

ASUS Dual AMD Radeon RX 6700 XT STD Edition

Por último, también te recomendamos otra excelente tarjeta gráfica de precio más económico. Se trata de la AMD Radeon RX 6700 XT en una flamante placa ASUS. Este modelo viene equipado con nada menos que 12 GB de memoria VRAM tipo GDDR6.

Además, es compatible con PCIe 4.0, posee una potencia bastante destacable en todo tipo de videojuegos actuales, tiene puerto DisplayPort 1.4a y también HDMI 2.1, y cuenta con un sistema doble de ventiladores axiales.

Ahora ya sabes un poco más sobre cómo elegir un monitor, además de tener una buena lista de monitores recomendados que tienes a tu alcance. ¿Con cuál te quedas?

Isaac29 agosto, 2022

11 minutos de lectura aproximada.