Era cuestión de tiempo la vuelta de uno de los ratones más exitosos en la comunidad gamer, el Razer Deathadder V3 Pro se actualiza por completo para volver a ser una referencia en su segmento. Para ello ha equipado el nuevo sensor óptico Razer Focus Pro de 30K DPI que soporta grandes velocidades, y una conectividad 2,4 GHz con HyperPolling a 4000 Hz, la más veloz del mercado.
Todo ello con un diseño adaptado en mayor medida a palm grip, ergonómico para diestros y 5 botones programables con switches ópticos de gran durabilidad. El peso se ha ajustado al máximo con solo 63 g, teniendo en cuenta que lleva una batería capaz de alcanzar las 90 horas de duración. Probaremos el ratón junto al dongle Razer HyperPolling Wireless con esos 4000 Hz.
Antes de seguir, agradecemos a Razer su confianza en nosotros al enviarnos este ratón para su análisis.
El dongle Razer HyperPolling Wireless y ratón Razer Deathadder V3 Pro vendrán en cajas independientes al ser productos que se compran por separado. El primero de ellos utiliza una simple caja de cartón rígido tipo estuche, colocándose dentro de un molde de espuma. El segundo, vendrá dentro de una caja de cartón duro con tapa de apertura deslizante, colocado a su vez sobre un molde de cartón junto al resto de accesorios.
El contenido sumando ambos productos será el siguiente:
El diseño general del Razer Deathadder V3 Pro ha sido ligeramente modificado respecto al V2, y donde más lo notaremos será en su anchura, al disminuir 4 mm, con picos frontales menos pronunciados. También gana 1 mm de largo y 2 mm de altura, lo que aumenta ligeramente la curvatura de la cúpula para adaptarse mejor al agarre tipo palma que será el predilecto para él.
Está construido sobre un chasis de plástico con cubiertas del mismo material, presentando acabado blanco mate con superficie micro rugosa capaz de proporcionar un sólido agarre. Desconocemos el tipo de material concreto ABS o PBT, pero los acabados son de gran calidad. Es uno de los ratones inalámbricos más ligeros con un peso de 63 g, y la agilidad de movimientos será impresionante.
Nos colocamos en la zona frontal para ver una clara inclinación hacia la parte derecha, mejorando así el manejo del clic derecho y reduciendo el uso a diestros obviamente. Estos botones son amplios y separados del resto del cuerpo del Razer Deathadder V3 Pro, con superficie cóncava para adaptarse mejor a los dedos. Bajo ellos se esconden switches mecánicos ópticos de 3ª generación aumentando la resistencia a 90 millones de pulsaciones, dándonos un comportamiento impecable, clic ligero, sin gap y de sonido agradable.
En la zona central inferior tendremos la conexión USB-C de carga y modo de uso alámbrico, con una hendidura donde también se introduce parte del cable para evitar golpes. Entre los botones encontramos la amplia rueda, bastante salida y con superficie de goma punteada para dar un buen agarre. La zona de corte se aprovecha para integrar el indicador LED de estado. Esta rueda posee saltos poco acentuados, un desplazamiento silencioso con clic central de baja dureza y poco ruidoso.
Continuamos con la zona media, donde únicamente encontramos dos botones de navegación en la parte izquierda y ubicados en una posición perfecta para el dedo pulgar. Son botones curvados y amplios, pero muy poco salidos respecto a la carcasa, evitando así clics accidentales. Dejan suficiente espacio inferior para colocar el dedo en agarre, y utilizan de igual forma switches mecánicos con mínimo recorrido y dureza baja. Se alcanzan perfectamente en todo tipo de agarres especialmente en tipo garra.
La zona trasera cuenta con una caída suave desde la parte central hasta el mismo borde del suelo, solamente con un pequeño corte antes de tocar el suelo para minimizar la superficie de contacto. En esta ocasión el logotipo de Razer no tiene iluminación, ahorrando algunos gramos del sistema de LEDs.
Finalmente en la parte inferior encontramos una superficie amplia, pero con patas bastante reducidas especialmente las delanteras. Todas ellas serán 100% de teflón con una superficie ligeramente redondeada para proporcionar un desplazamiento muy rápido al existir poco rozamiento. Una pata central hará de protección a la entrada de suciedad dentro del sensor, método habitual ya en todos los fabricantes.
Nos centramos ahora en las prestaciones del Razer Deathadder V3 Pro, siendo uno de los modelos más potentes de la marca, sino el que más en algunos de sus apartados. Para él se ha utilizado un sensor óptico Razer Focus Pro 30K, el cual proporciona una resolución máxima de 30.000 DPI. Está diseñado para las más altas prestaciones soportando velocidades máximas de 750 IPS y 70G de aceleración, cifras top en el mercado.
Admite hasta 5 niveles DPI con saltos de 50 en 50 configurables desde Synapse 3. De igual forma, este sensor soporta calibración de superficie separando la distancia de despegue y aterrizaje en distintos puntos de corte con hasta 26 niveles de ajuste frente a los 3 niveles del modelo anterior. La capacidad por tanto se ha multiplicado enormemente en cuanto a versatilidad y ajuste a determinadas superficies, dando así más de un 99% de precisión.
La segunda gran novedad llega de cara a la conectividad, porque efectivamente es un ratón inalámbrico que opera sobre la frecuencia de 2,4 GHz, pero aumenta su sondeo con modo HyperPolling hasta los 4000 Hz. Esto lo convierte en el ratón inalámbrico más rápido por encima de modelos como el Dark Core Pro de Corsair, ofreciendo latencias mínimas de 0,25 ms.
Para conseguir desarrollar estos 4000 Hz necesitamos el dongle Razer HyperPolling Wireless, ya que el receptor incluido de fábrica solamente soporta 1000 Hz. Elemento que hemos utilizado para el análisis, el cual tiene el mismo diseño que los receptores normales de Razer con base para escritorio.
La idea es separarlo del resto de conexiones del PC para eliminar la influencia y ruido de otros cables o receptores, así que debemos utilizar un cable USB-C para su conexión. El cable mencionado no se incluye con el dongle, pero sí con el ratón, siendo un cordón USB-C – USB-A de tipo Speedflex muy ligero y manejable. Por ahora este dongle es compatible con el DeathAdder V3 Pro y Viper V2 Pro solamente.
Teniendo en cuenta que el Razer Deathadder V3 Pro solo pesa 63 g es de suponer que la capacidad de su batería integrada se debe haber resentido. Es cierto que dura menos que algunos de sus rivales, pero 90 h en modo 1000 Hz y 24 h en modo 4000 Hz son cifras más que suficientes para un uso cómodo del mismo.
En este caso no tenemos ajuste de peso ni botones desmontables, aunque sería este último un aspecto interesante para el ratón de Razer, ya que otro rival directo como el Asus ROG Chakram X con el mismo precio sí que lo tiene.
Analizamos algunos detalles que aún nos faltan en el apartado de control del Razer Deathadder V3 Pro, llevado a cabo obviamente mediante Synapse 3, la suite completa para todos los productos de la marca.
En primer lugar debemos enlazar el ratón con el software, algo que se llevará a cabo de forma directa si lo conectamos con el cable USB-C. En caso de utilizar el dongle de serie, se instalará la extensión correspondiente y de igual forma se enlazará automáticamente. Pero si utilizamos el Razer HyperPolling Wireless, debemos realizar el emparejamiento de dongle y ratón de forma manual. Para ello seguiremos el pequeño asistente de conexión del apartado de sincronización seleccionando el modelo en cuestión.
Una vez hecho esto, entramos en el control del ratón, cuyo primer apartado permite mapear los 5 botones + rueda con una infinidad de opciones, desde funciones de teclado hasta multimedia o accesos directos, por supuesto macros.
En el apartado de rendimiento tenemos opción de ajustar los saltos DPI, asignar un color al LED indicador y modificar el polling rate desde 125 Hz ahorrando batería, hasta 4000 Hz en modo competitivo. Se puede separar los saltos DPI en X e Y para usuarios muy selectos. De igual forma, el apartado de calibración permite ajustar la configuración de distancia de despegue y aterrizaje en puntos de corte separados. Finalmente el apartado de alimentación servirá para ajustar el modo ahorro de energía en minutos y modo batería baja en el umbral de porcentaje concreto.
El comportamiento de este Razer Deathadder V3 Pro ha sido completamente satisfactorio en todo tipo de agarres, y a pesar de que su diseño se inclina más por agarres con palma, también nos ha encantado en el de punta de dedos. Su baja altura y posición de los botones de navegación hacen que con una mano grande se alcancen todos los botones de forma perfecta sin tocar el lomo.
El bajo peso hace que se desplace muy rápido haciendo poca fuerza en él, lo que a su vez evita hacer pulsaciones accidentales en los botones laterales. Lo cierto es que el afinado de esta 3ª generación ha sido impecable, y poco margen de mejora le vemos para próximas actualizaciones. De lo mejorcito que hemos tocado en los últimos tiempos siendo totalmente objetivos.
A modo de referencia, llevaremos a cabo algunas pruebas de comportamiento con el software mouse test, cuyos resultados serán puramente orientativos. Dichas pruebas nos dejan resultados excelentes en todos los apartados, con especial relevancia sobre la suavidad en la señal, haciéndose vale el dongle de Razer. El Polling Rate registrado tras varias repeticiones de la prueba y a máxima frecuencia de sondeo ha sido unos 230 Hz inferior a los 4000 Hz, una cifra excelente a pesar de no cumplir con el valor exacto.
Cumpliendo las expectativas, esta 3ª generación llega con más fuerza que nunca a un mercado donde en realidad el fabricante americano suele dominar o estar en el top 3 siempre. Pero esta vez creemos que lo hace de forma más clara con un ratón que reúne todas las condiciones para ser prácticamente perfecto.
El primer motivo será su diseño, mejorado respecto a la 2ª generación para hacerlo más cómodo a los tres tipos de agarre, y ajustando el peso hasta mínimos de 63 g. Se siente genial en la mano, siendo ágil con sus patas de teflón de bajo rozamiento, proporcionando buen agarre con la superficie micro rugosa. Todo ello con una completa gestión desde Synapse 3.
De ahí pasamos a otra razón de peso que serán sus cómodos y suaves botones, los cuales utilizan switches mecánicos con la dureza justa para ser veloces y a la vez evitar pulsaciones accidentales. El botón DPI reside en la zona inferior de forma no muy cómoda, pero asegura una parte superior más limpia precisamente para tener menos distracciones en los dedos.
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La tercera razón será su apartado técnico, donde prácticamente no tendrá rival al utilizar el sensor más potente de la marca, adoptando un polling rate de hasta 4000 Hz en frecuencia inalámbrica, donde nadie ha llegado aún. Pero como muchos no necesitarán tal velocidad, el dongle de serie vendrá limitado a 1000 Hz, pudiendo adquirir aparte el Razer HyperPolling Wireless para darnos su máximo.
Es la hora de pasar por caja, y ver que este Razer Deathadder V3 Pro está a un precio oficial de 159,99€, mientras que el dongle Razer HyperPolling Wireless suma otros 34,99€. Es un precio adecuado para un kit nivel profesional, similar a otros rivales como el Logitech G Pro X Superlight que consigue superar en prestaciones, o el Asus ROG Chakram X más enfocado en MMO/MOBA. El ratón definitivo para jugar de Razer, y por ello, más que recomendable.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| RENDIMIENTO TOP A NIVEL COMPETITIVO | DONGLE DE 4000 HZ NO INCLUIDO CON EL RATÓN |
| LIGERO Y CON EXCELENTE ERGONOMÍA PARA LOS TRES TIPOS DE AGARRE | SIN RGB |
| BATERÍA DE DURACIÓN DECENTE | |
| GESTIÓN POR SOFTWARE COMPLETA | |
| CALIDAD DE LOS SWITCHES |
El equipo de Profesional Review le otorga la medalla de platino y producto recomendado:
Razer Deathadder V3 Pro hace renacer la leyenda para gaming, con conexión inalámbrica de 4000 Hz, el sensor óptico más potente, completa configuración desde Synapse y 63 g
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