La salida de los AMD Ryzen 7000 puede retrasarse por culpa de unos problemas relacionados con el soporte y las optimizaciones en la BIOS. Ya están trabajando en ello, y AGESA está en el centro del huracán en estos momentos.
El 29 de agosto era el día señalado para la presentación de los procesadores AMD Zen 4, pero la fecha de lanzamiento está en juego ahora mismo. Hay medios que hablan del 27 de septiembre, pudiendo coincidir con Intel Raptor Lake, así que el «salseo» está servido. Dicho esto, los problemas no serían ninguna tontería: tiene que ver con la BIOS.
La salida de los AMD Ryzen 7000 podría retrasarse
Efectivamente, nos referimos al lanzamiento de los AMD Ryzen 7000, y lo cierto es que todo ha surgido tras los informes de los profesionales encargados de las reviews. Además, la fuente asegura que hay expertos que colaboran con las marcas que ya han comunicado estos problemas.
Por este motivo, AMD ya ha pedido firmar un nuevo NDA porque el lanzamiento estaba previsto para el 15 de septiembre: ahora estará fijado para el 27 de septiembre. Se retrasan casi 2 semanas, y el motivo estaría en la BIOS.
Acordaros de 2017 y los problemas de inestabilidad que trajo AMD con AM4, no soportando muchas marcas de memorias RAM DDR4. Finalmente, ese tiempo pasó, pero sirve para recordar que no sería la primera vez para AMD tiene un lanzamiento algo estrellado.
Como bien apunta la fuente, hemos visto la llegada de varias versiones de AMD AGESA, desde el parche A hasta el parche G. Los fabricantes de placas tendrían que lanzar el parche D de AGESA v.1.0.0.1, pero no ha sido así, ¿por qué? Por los problemas. El primer problema es que la versión anterior no estaba optimizada para AMD Ryzen 7000, el socket AM5 y AMD EXPO.
Así que, cuando salgan al mercado, las BIOS serán las V1.0.0.2, o eso es lo que se prevé ahora mismo para el futuro. Los problemas son varios, pero se concentran en:
- Optimizaciones.
- Correcciones.
- Soporte.
Por tanto, la prioridad es actualizar cuanto antes el firmware de AGESA para ya lanzar la plataforma AM5. AMD ha aprendido de lo que ocurrió en 2017 con Zen, por lo que ha visto mejor retrasar el lanzamiento y que los usuarios ya tengan una plataforma estable.
No solo hay que tener en cuenta que evitan sufrir los mismos quebraderos: las CPU Zen 4 serán más caras y no se puede vender un producto más caro cuando ofreces una plataforma con bugs iniciales.
Me permito citar a Miguel de Unamuno, quien dijo: «venceréis, pero no convenceréis», y es que hay un alto porcentaje de probabilidades de que AMD saque chips más potentes que los Intel actuales. Sin embargo, ese producto hay que venderlo.
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