Europa huele a desesperación e Intel tiene buenos ojos porque junto al Gobierno de Alemania van a soltar una subvención de 6.800 millones por la fábrica de Magdeburg: el 40% del coste total. El otro 60% lo asumiría Intel de su propio bolsillo.
Es una gran jugada, y esperemos que esto ayude a Europa porque la inversión es un auténtico disparate. Saldrá de los bolsillos de los alemanes y europeos, pero sobre todo serán los alemanes los más damnificados porque no se crearán pocos empleos precisamente. Es una gigafactoría de la que ya hemos hablado antes.
La fábrica de Intel en Europa en números: 6.800 millones de euros en subvención
Los estadounidenses están dando palmas desde que saben que recibirán un 40% del coste de la fábrica de Intel en Magdeburg (Alemania) por parte de Europa. Se estima que el precio total rondaría los 17.000 millones de euros, pero no recibirá los 6.800 millones de golpe, sino de forma fraccionada.
En primer lugar, pagarán casi 2700 millones este año a Intel para que comience a movilizarlo todo, mientras que a partir del 2023 seguirán los pagos. Como siempre, Europa mueve las fichas con normas bajo el brazo, como es el Proyecto Importante de Interés Europeo Común y la Ley de chips.
El objetivo que tiene Europa es que el 20% de la producción de semiconductores se realice en nuestro continente para 2023, debiendo competir contra los estadounidenses y asiáticos. Los asiáticos (China, Corea del Sur y Taiwán) van primeros en esta carrera y pronto llegarán los chips de 2 y 3 nm en masa.
Intel se ha vendido muy bien de cara a Europa, pero lo cierto es que ha tenido serios problemas en el avance de litografía dentro de sus fábricas. Por el contrario, TSMC y Samsung han bajado de los 10 nm sin ningún problema, así que a saber cómo le sale la jugada a Europa.
La megafábrica de Magdeburg comenzará a fabricarse en la primera mitad de 2023, y los primeros chips deberían fabricarse en 2027. Serán 2 fábricas en una que estarán habilitadas para procesos avanzados (20A en adelante), tanto para Intel, como para los clientes.
Encima, los alemanes se van a beneficiar de 3000 puestos de trabajo, aunque suponemos que podrán promocionar personas de todo el mundo, dando prioridad a los ciudadanos europeos. Adicionalmente, aseguran que crearán decenas de miles de puestos de trabajo adicionales con proveedores y socios.
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