Si te preguntas qué hay que tener en cuenta al comprar un portátil, solventamos la duda exponiendo todos los secretos de estos dispositivos. No vale con mirar solo la ficha técnica, sino que hay aspectos que no se ven y son súper importantes.
Vamos a contemplar todos los detalles que debéis tener en cuenta a la hora de ver qué portátil comprar, y eso que no son pocos. El fallo más común está en fijarse únicamente en la ficha técnica, y parece que ahí se disipan todas las dudas. Os desvelamos todos los secretos más guardados sobre los portátiles, así que coged papel y boli porque os ayudará en vuestra compra.
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¿Te importa la calidad de imagen? Pues, no te quedes solo con si lleva IPS-Level o tiene «X» hercios: fíjate en los nits que ofrece. Digo esto porque el portátil lo llevamos con nosotros y es posible que lo usemos en un entorno en el que haya mucha luz rebotando en la pantalla.
Si la pantalla no tiene suficientes nits, tendremos que forzar la vista porque el panel no tiene el brillo suficiente para responder ante la luz del sol o el brillo. Básicamente, ocurre como con los smartphones: en verano el brillo máximo se hace de notar.
Así que, una de las cosas a tener en cuenta cuando vais a comprar un portátil, es el brillo de pantalla, especialmente si os movéis mucho con él.
La gente lee «Intel Core i5» y ya se queda tranquila porque se piensa que obtendrá el mismo rendimiento que en escritorio, y en absoluto. Es cierto que Alder Lake-P traen más núcleos en total, pero porque Intel ha incrementado los eficientes, viendo configuraciones con solo 2 P-Cores, como 4 P-Cores en las opciones algo más potentes.
Por ejemplo, en la 11ª generación veíamos 4 núcleos y 8 hilos, mientras que en escritorio Rocket Lake-S nos daban procesadores de 6 núcleos y 12 hilos en Intel Core i5. Con esto queremos decir que no os quedéis con el naming, sino que investiguéis bien qué ofrece el procesador que estáis eligiendo.
En cambio, AMD ofrece los mismos núcleos e hilos que los chips análogos en escritorio, con la excepción de los Ryzen 9. Los únicos procesadores que no vienen con la misma configuración que en escritorio es la gama Ryzen 9, que se resume a 8 núcleos y 16 hilos en portátil.
Por otro lado, no debéis olvidar que en portátiles hay distintas gamas de procesadores, fijaros en las siglas del nombre de la CPU:
Muchos modelos anuncian a bombo y platillo que el portátil viene con la última NVIDIA MX, pero lo cierto es que es muy poco interesante. Intel y AMD han avanzado tanto en sus gráficos integrados que equipar nuestro portátil con una GPU de esta gama no vale la pena, siendo interesante a partir de una GTX (lee los siguientes párrafos).
De hecho, os fijaréis que cada vez hay menos modelos que vengan con estas tarjetas gráficas porque las iGPUs de los últimos Intel Tiger Lake o AMD Ryzen 5000 responden perfectamente a las necesidades de ese público objetivo.
Respecto a las GTX, una GTX 1650 no está mal, pero no esperéis ningún espectáculo aquí. Estaremos comprando un portátil con una GPU obsoleta que es superada por una RX 6500 XT o RTX 3050. Viendo los precios en el mercado, no vale la pena pagar 799-699€ por una GTX 1650, cuando tenemos una RTX 3050 o RX 6500 XT por 899€-999€. Sé que hay un aumento de 200€, pero es que el cambio es brutal.
Así que, no paguéis más por tener una GTX 1650 que no mejora tanto los gráficos integrados de un modelo actual.
Me gustaría hacer hincapié en lo que ha ocurrido en NVIDIA en los últimos años, ya que no vemos el naming Max-Q o Max-P para hacer referencia a la variante o al consumo de la GPU. Os aconsejo a que averigüéis más sobre la RTX 3050, 3060, 3070 o 3080 que tiene el portátil que queréis comprar, específicamente el TGP-TDP o el consumo que ofrezca.
¿Por qué? Hemos visto que hay modelos que anuncian la RTX 3060, pero es de bajo consumo y su rendimiento es claramente menor que la RTX 3060 más potente. Esto existe para dar vida a portátiles más finos y ligeros que otros plenamente enfocados al gaming o al trabajo pesado (y por ello pesan más).
No dejéis que os vendan gato por liebre, debido a que puede que estéis comprando una GPU menos potente de lo que pensáis.
Hay que destacar la problemática del almacenamiento, del tipo de unidad que lleva el portátil y de las posibilidades de futuro que ofrece. Esto es un ejemplo claro de qué tener en cuenta al comprar un portátil, pudiendo resumirlo en lo siguiente:
Por tanto, fijaros bien en qué SSD ofrece el portátil en cuestión, así como en las posibilidades de expansión.
Ahora tenemos DDR5 y LPDDR5 como nuevas opciones de memoria RAM, pero el DDR4 sigue siendo la opción más común. No solo tenéis que fijaros en la memoria total que tiene el equipo, sino en qué frecuencia ofrece y cuántos módulos tiene instalados.
Si tiene solo un slot de memoria RAM, va a limitar mucho las cosas en caso de upgrade, por lo que siempre es mucho más interesante funcionar en Dual Channel y tener dos slots dentro del portátil. Sabemos que la mayoría no abriréis el portátil el día de mañana: en cuanto se quede obsoleto, compráis otro.
Sin embargo, debo decir que eso no siempre es un acierto y un pequeño empujón sale más barato y renueva bastante el portátil.
No vas a disfrutar de un teclado mecánico en un portátil, ni de la misma precisión, ni de la misma oferta de switches. Aunque varios fabricantes han mejorado mucho lo presente, hay que decir que no ofrece la misma comodidad y que están bastante limitados por cuestiones físicas.
La retroiluminación me parece muy interesante a día de hoy, independientemente de si es RGB o no. El hecho de que leáis SteelSeries en algunos portátiles gaming… no significa que vayáis a gozar con el teclado. Eso sí, siempre es mejor que una opción estándar que no creáis que va a ser la panacea.
Algunos modelos vienen con teclados que incorporan anti-ghosting, una función muy interesante para los que buscáis un portátil para jugar.
Un gran ejemplo de qué tener en cuenta al comprar un portátil, es la conectividad; concretamente, los puertos USB. Me he fijado que mucha gente no se fija en este apartado, el cual considero importantísimo, aunque está perdiendo importancia con la nube.
Si sois profesionales y trabajáis con HDD o SSD externos, os interesará disfrutar de los puertos USB más avanzados para no tener una transferencia de datos lenta. Por ello, os recomiendo estos tutoriales:
Dejando al USB a un lado, fijaros en si viene con HDMI o DisplayPort (comprobad sus versiones), y esto sí que me parece más importante porque ofrecerá la posibilidad de conectar monitores o conectar nuestro portátil a una TV.
Esta decisión es mucho más personal, y es que el trackpad es un elemento que muchos usuarios de Apple aprecian bastante. El hecho de tener un periférico integrado que nos permita trabajar más rápido a través de gestos y una buena superficie, puede ser interesante.
En la gran mayoría de casos, encontraréis una mera alfombrilla con la que funcionar y que responde correctamente. Sinceramente, esto lo expongo para quienes le den valor a ello porque la mayoría de portátiles Windows o sin S.O vienen sin trackpad, siendo un periférico reservado para las gamas altas.
Aquí sí que tengo que hacer hincapié porque, si te preguntas qué tener en cuenta al comprar un portátil, cuidado con el audio. En los portátiles de gama baja y gama media nos podemos encontrar con un audio bastante justito y que, si vienes de un portátil Apple, vas a encontrarlo mediocre.
Parece que la sociedad todavía sigue con la mentalidad de «para gastarme más de 1000€ en un portátil, me compro un Mac», pero lo cierto es que estaremos en gamas distintas. Por debajo de los 1000€, los fabricantes hacen reajustes para poder sacar beneficio de cada portátil vendido.
Por ejemplo, me he encontrado con algún MSI Modern cuyo sonido era bastante malo, lo cual es decepcionante para un portátil de 799€ (era lo que costaba). Sé que es difícil saber la calidad de audio que tiene un portátil, pero si investigáis sobre el modelo que os gusta, seguro que encontraréis alguna referencia en alguna review.
Cuidado con la autonomía que prometen los fabricantes porque no suele ser así en la práctica, ya que dichas cifras las sacan en modos muy conservadores de energía. Así que, no contéis con todas esas horas porque pueden que se reduzcan en 2 horas en muchos casos, especialmente si usamos el portátil bastante.
¡No te pierdas esta pedazo de guía! Cuidar la batería del portátil Y si tienes problemas con la autonomía -> batería del portátil no carga
Lógicamente, cuanto mayor sea la autonomía, con más margen contaremos y nos despreocuparemos de la batería. Eso sí, no esperéis autonomías buenas en portátiles gaming o profesionales con GPUs dedicadas que sean potentes (RTX A5500, por ejemplo).
Terminamos con lo último qué tener en cuenta al comprar un portátil: el peso. Independientemente de para qué lo vais a usar, intentad que sea lo más ligero posible, ¡es un portátil! Sabemos que, en ocasiones, esto es imposible y pesará cercano a los 3 KG para quienes busquéis soluciones más potentes.
Sin embargo, un portátil que pese más de 2 KG tiene que estar justificado en potencia de alguna manera, si no… es un ladrillo. Además, esto cobra importancia porque lo transportaremos, así que queremos que nos facilite la vida, no que nos la complique.
Esperamos que os haya sido de ayuda esta pequeña guía. Si tenéis alguna duda, la podéis dejar abajo en forma de comentario y os responderemos en breve.
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