Rápidamente miramos qué le está pasando a la tarjeta gráfica porque los tirones en los juegos de nuestro PC no son normales. Existen muchas razones a estos tirones, y vamos a describirlas todas.
Mientras jugamos a videojuegos podemos experimentar ciertos microcuelgues, tirones o caídas de FPS que afectan a la experiencia gravemente. No podemos asociar estos tirones de juegos a una causa específica porque existen muchas posibles causas, así que nos hemos propuesto abarcar todas y analizarlas para luego darle una solución.
Las soluciones no siguen un orden lógico
Índice de contenidos
Lo primero: actualiza todos los drivers de la GPU o tarjeta gráfica
Antes de ponernos a realizar ajustes, aconsejo a todo el mundo que sufra tirones en juegos a actualizar los drivers de la tarjetas gráfica. Es posible que tengáis instalados los drivers antiguos, y es que muchos lanzamientos de juegos van precedidos de parches de actualización en NVIDIA o AMD para que sus GPUs estén optimizadas.
Igualmente, los drivers se van actualizando para corregir los errores que van surgiendo, siendo notificados por betatesters o usuarios. Por tanto, dirígete a la página web de NVIDIA o AMD Radeon para actualizar tu tarjeta gráfica y comprobar si se ha solucionado el tirón de videojuegos.
Ajustes gráficos: busca el equilibrio en todos los escenarios
Unos ajustes gráficos mal configurados trae como consecuencia una mala experiencia, ya que muchos hemos sido demasiado optimistas ajustando todo en «alto» cuando nuestro equipo no era demasiado potente. Quizás, en interiores o desactivando las sombras, veamos una experiencia muy estable, pero no quedaros con eso.
Tenemos que ajustar los gráficos de cara al peor de los escenarios. Por ejemplo, en un juego como The Division 2, tenemos que pensar siempre en escenas de mundo abierto con explosiones, humo, partículas, etc. Ahí es cuando hay más carga gráfica y la GPU trabaja más, experimentando caídas de FPS notorias.
Nuestro consejo es que vayáis jugando con los ajustes (las sombras y la oclusión ambiental quitan muchísimos FPS)y que activéis DLSS o FidelityFX Super Resolution si lo tenéis disponible. Normalmente, los juegos tienen pruebas internas que podemos utilizar en las que se pone a examen la experiencia en distintos escenarios dentro del juego.
Stuttering o tearing, conoce estas anomalías
Ya tenemos un artículo específico sobre el tearing y stuttering, pero puede que algunos estéis experimentando esto y creáis que son tirones en juegos. Más que eso, son anomalías producidas por una desincronización entre pantalla y GPU, existiendo 2 claras diferencias:
- Stuttering: la GPU renderiza demasiado lento y no envía el frame al monitor a tiempo, por lo que éste redibuja el frame anterior. Esto hace que se muestre la información 2 veces.
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- Microstuttering: se diferencia en que son microtirones que se desvelan en la pantalla y no duran 1-2 segundos.
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- Tearing: la GPU se adelanta a renderizar el próximo frame, mientras que el monitor muestra el frame actual. Esto causa una anomalía caracterizada por ver la pantalla partida de forma vertical u horizontal.
¿Cómo solucionarlo? Lo ideal es disponer de un monitor compatible con G-SYNC o FreeSync (NVIDIA o AMD) para poder eliminar de una estas 2 anomalías. De lo contrario, el tearing se puede eliminar con la sincronización vertical activada, pero tened en cuenta que veremos una caída de FPS importante.
Carga repentina de muchos elementos gráficos
Esta causa está relacionada con la de los ajustes gráficos, y es que, en determinados escenarios, la GPU debe cargar muchos más elementos gráficos como de costumbre (partículas, objetos 3D, sombras, etc.). Esto provoca que experimentemos una caída de FPS, lo que se termina convirtiendo en ligeros tirones en nuestros juegos.
La solución pasa por bajar los ajustes gráficos de calidad, ya que nuestra actual configuración es demasiado pesada para la GPU en dichos escenarios (puede ser en explosiones, sombras, mundos abiertos, etc.).
Siempre hay que velar por una configuración que permita mantener una estabilidad durante todo el juego. Sí, bajar la configuración significará disparar los FPS en escenarios cerrados, pero es el precio que hay que pagar.
¿Te pasa en online? Vigila el ping
Si esto te ocurre solo en multijugador u online, puede que el problema esté en tu conexión de red. Conforme saturamos y demandamos velocidad de descarga a la red, va subiendo la latencia; por otro lado, una conexión Wi-Fi tendrá más ping normalmente.
Una subida de ping demasiado alta causa el famoso «lag», nos «teletransportamos» de un lugar a otro o no vemos al enemigo bien porque va a «trozos». Puede que no se trate una caída de FPS, estando el culpable en alguien que se esté descargando algún archivo, que esté usando servicios streaming o alguna tarea similar.
Desactivad también el VPN o un Proxy, que no se estén realizando videollamadas, que no tenemos virus o hayan programas ejecutándose en segundo plano.
Revisa las temperaturas de los componentes
¿Conoces el thermal throttling? Este fenómeno surge cuando nuestros componentes (CPU y GPU, generalmente) llegan a unas temperaturas muy elevadas, bajando su rendimiento a modo de refrigeración. En el caso de que la CPU o GPU lleguen a una temperatura límite, el PC se reiniciará, puede haber un pantallazo azul o, incluso, un crasheo.
Estos tirones en juegos pueden ser causados por culpa de un sobrecalentamiento en nuestra tarjeta gráfica o procesador, por lo que os recomendamos monitorizar las temperaturas para comprobar que todo está bien. Si no sabéis cómo, os recomiendo HWMonitor porque es gratis y muy ilustrativo.
Después de revisarlas y comprobar que están por encima de los 70ºC en carga (GPU) o de los 65º (CPU), hay que mejorar la refrigeración de los componentes.
- ¿Cambiaste la pasta térmica hace poco? Si hace mucho tiempo (más de 1 año) que no cambias la pasta, puede ser la clave en el caso de la CPU.
- Curvas de ventilación: configura unas curvas de ventilación en el disipador o kit AIO de la CPU, como en la GPU (a través de MSI Afterburner).
- Mejora la ventilación de la caja, aunque la temperatura ambiente afecta mucho (ojo con el verano en el sur de España o Latinoamérica).
Actualiza la BIOS
Parece que lo último que miramos es la BIOS como culpable, pero hemos leído a muchos usuarios en foros que han arreglado ciertos tirones en juegos a través de la actualización de firmware. Por tanto, recomendamos esta solución, así como os invitamos a que leáis cómo actualizar la BIOS de tu placa base.
Overclock inestable
Aquellos que hayáis practicado overclock a la GPU o CPU, deciros que, si tenéis tirones en los juegos, es lo primero que tenéis que mirar. Todo overclock útil es estable, por lo que uno que enseñe anomalías mientras jugamos… es inestable.
A menudo, se suele asociar inestabilidad con «crasheos», cuelgues o temperaturas muy elevadas, pero esto es claramente una inestabilidad. Os recomendamos acudir de nuevo a la BIOS para revisar bien el overclock a la CPU, como a MSI Afterburner (o el programa que hayáis usado) para reajustar el overclock a la GPU.
De hecho, recomendaría restaurar la configuración por defecto para que quede claro si los tirones vienen del overclock o de otro lado.
Fuente de alimentación insuficiente: revisa la potencia que necesitas
Es cierto que los componentes pueden funcionar aunque la fuente de alimentación no ofrezca la potencia necesaria, pero esto tiene una consecuencia: rendimiento irregular. Primero, no podremos disfrutar del máximo rendimiento del equipo; segundo, experimentaremos irregularidades porque habrá situaciones en las que CPU o GPU demanden más potencia.
Cuando llega dicha situación, se pueden producir cortes o tirones en los juegos, ya que estamos usando los componentes en carga y esto supone un aumento del consumo. Sin duda, se va a producir un cuello de botella por culpa de la fuente.
La solución no es barata: comprar una fuente que dé potencia suficiente a los componentes. Pero, ¿cuándo sé que mi fuente no da suficiente potencia? Todos los que tengáis una fuente de 500-550W para abajo… puede que os suceda esto; de lo contrario, dudo que sea la fuente el problema.
Memoria RAM insuficiente, ¿usas 8 GB?
Los últimos videojuegos están pidiendo como requisito recomendado 16 GB como mínimo, por lo que las configuraciones de 8 GB pueden ser un problema. Yo mismo he sufrido este problema jugando a The Division 2, ya que tenía 8 GB DDR4, pero un equipo que podía con todo; finalmente, tuve que comprar 16 GB.
Pensad que no solo estáis jugando, sino que tendréis más programas abiertos: segundo plano, el lanzador del videojuego (Steam, Ubisoft Connect, etc.), como otros procesos que deben estar ejecutándose. Así que, te invito a que revises los requisitos del videojuego en concreto porque puede que ese sea el problema.
Por si se os ha ocurrido, mezclar memorias RAM puede no ser lo más inteligente, así que recomendamos la lectura de dicho artículo porque lo tratamos a fondo.
HDD como culpable de la lenta carga
Otro de los tirones en videojuegos que he vivido es el de tener instalado el videojuego en el HDD, debido a que mi SSD no tenía suficiente espacio. Los últimos videojuegos vienen preparados para cargarse a determinado ritmo, algo que para la velocidad de transferencia de un disco duro mecánico puede ser fatal.
Por ejemplo, viví este problema en Borderlands 3, un juego no muy amigable con los HDDs. Más que tirones, se trataba de lag a la hora de cargar el menú del inventario o ir a las máquinas de compra; incluso se bugueaba a veces. Podéis probar a instalar el juego en el SSD para ver si se soluciona el problema.
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¿Qué tirones habéis sufrido vosotros?
