Muchos queréis hacer streaming, pero no sabéis qué cámara comprar para tal fin, así que hemos decidido explicaros qué opciones tenéis. Enfocaremos el contenido de cara a diversos presupuestos y teniendo en cuenta las resoluciones a las que podemos retransmitir.
Comprar un micrófono para hacer streaming puede ser más sencillo que una cámara, y eso que ésta no carece de importancia porque será parte de la imagen de nuestro contenido. La gente quiere vernos cómo reaccionamos o cómo interactuamos con ellos, así que debemos proporcionar cierta calidad de imagen. Por ello, os decimos qué cámara puede ser la más interesante.
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Antes de recopilar modelos, queremos explicaros que podemos encontrar 2 tipos de cámaras para hacer streaming: webcams y DSLR. Nosotros no somos de marcas, sino de resultados, por lo que veréis marcas distintas en nuestras recomendaciones.
Luego, tendréis 2 opciones más profesionales que son muy poco comunes y que dudamos que vayáis a tener en cuenta: videocámaras y cámaras de cine. Son productos con un precio bastante elevado, por lo que nos parecen soluciones «súper profesionales», aunque lo dejamos apuntado para que quede en acta.
No necesitan mucha presentación porque todo el mundo las conocen: son un periférico que se conecta al PC a través de USB y que su fin es retransmitir. Han sido menospreciadas desde que las DSLR entraron en Twitch como cámaras elegidas para setups profesionales, pero debemos decir que han mejorado muchísimo en los últimos años.
Es posible encontrar webcams 4K, con más FPS, zoom, iluminación integrada y micrófonos que funcionan bastante bien. La clave de estas cámaras está en que son plug-and-play: las conectamos por USB y ya podemos usarlas. Como contrapartida, y a pesar de las soluciones software que hay, es complicado configurar demasiado estas cámaras porque no se puede controlar la exposición u otros valores que en las DSLR sí.
Otra cosa que hay que entender, es que son 100% dependientes del PC: no funcionan por sí solas. Esto quiere decir que no podemos usarlas para otros fines que no sea hacer streaming, videoconferencias o clases online. Por el contrario, son perfectas para streaming largos y agotadores.
Tampoco necesitan presentación, pero sí que son un producto menos conocido a fondo por parte de la mayoría de las personas. Son las famosas «cámaras réflex» y, aunque mucha gente crea que son para hacer fotografías, muchas tienen unas capacidades de vídeo brutales. La pionera fue la Canon 5D Mark II, hace ya más de 15 años, y después todas las marcas apostarían por un enfoque de vídeo similar.
Con la llegada del COVID-19, en 2020, las principales marcas de cámaras DSLR lanzaron actualizaciones para que éstas pudiesen ser usadas como cámaras web. Pues bien, esto ha supuesto un cambio notorio para streaming, siendo este tipo de cámara una de las más consideradas a nivel profesional.
La parte positiva es que podemos coger esta cámara y llevárnosla de viaje, como instalarla en nuestro escritorio con un trípode para hacer streaming. De hecho, podemos cambiar los objetivos, filtros, controlar casi todos los valores (exposición, balance de blancos, aperturas, profundidad de campo, etc.), como tener acceso a multitud de accesorios.
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Sí, es la opción con mayor calidad del mercado de cara a streamear, pero lo cierto es que instalar en nuestro setup una cámara de este tipo implica complicarnos un poco. Las webcams se instalan y se disfrutan, mientras que las DSLR no, ¿por qué? Porque requieren más configuración.
En primer lugar, tenemos que hablar de salidas HDMI o USB. Podemos encontrar determinadas DSLR que vienen con transmisión USB para usarlas como webcam. Esto no es lo habitual, mientras que la salida HDMI limpia sí suele ser más común, pero ojalá fuese conectar cables y ya está.
Muchas DSLR no están diseñadas para emitir vídeo (que sí para grabar), por lo que no crean esa señal de vídeo. Así que, tenemos que recurrir a una capturadora de vídeo, que es la que creará esa señal de vídeo y la mandará al PC. Después, hay un trabajo a nivel software por parte del sistema operativo a través de los codificadores para convertir esa señal de vídeo de una forma u otra.
Básicamente, el proceso es que nuestro PC recibe esa señal de vídeo, la codifica y la transforma en una compatible con el streaming de Twitch, YouTube o la plataforma que sea.
Entonces, ¿compramos la capturadora y se acabó? Sí, pero no hay que comprar cualquier capturadora, especialmente si queremos muy buena calidad. Estos productos no son baratos precisamente, y el precio de éstos sube más aún cuando buscamos capturadoras de vídeo 4K.
Por otro lado, debemos decir que las capturadoras son útiles para poder retransmitir desde consolas igualmente, y también sirven para grabar.
Explicados los conceptos básicos, vamos a dejaros ciertas propuestas para comprar una cámara con la que hacer streaming. Para darle más sentido a todo, os pondremos opciones de ambos tipos.
No lleva mucho tiempo en el mercado y ha demostrado ser una opción buenísima para hacer streaming a un bajo precio porque ofrece vídeo 1080p a 60 FPS. Además, ofrece la posibilidad de grabar en vertical a una relación de aspecto 9:16 girando la cámara. Tiene una lente Streamcam que produce una calidad de imagen realmente buena, además de dotarnos con un campo visual de 78 grados.
Hace uso de la interfaz USB-C para conectar y funcionar, incluyendo como software Logitech Capture para crear contenido de forma más sencilla. Esta cámara es perfecta para Twitch y YouTube, estando optimizada para OBS, Streamlabs (fue comprada por Logitech) y XSplit.
Como webcam que es, trae su clásica pinza para colocarla encima del monitor, así como un adaptador para usarse en un trípode. Entre sus características principales, encontramos el encuadre automático y la exposición inteligente adaptativa que hace uso de la IA para el seguimiento facial.
Su precio ronda los 90€, y nos parece más que justo.
Última actualización el 2024-11-21
No es que estemos enamorados de Logitech, pero su gran trabajo en webcams es patente y se materializa, entre otras cosas, con esta Logitech C925e Pro HD. Podemos decir que es una webcam asequible y fácil de usar, la cual otorga una calidad de imagen bastante correcta. Es compatible con el códec H.264 y ofrece una imagen a baja luz bastante interesante, retransmitiendo en Full HD a 30 FPS.
También equipa 2 micrófonos omnidireccionales estéreo que no van nada mal, aunque sabemos que para un equipo de streaming siempre preferiréis un micrófono dinámico más profesional (y que no tiene que costar mucho). Tendremos el clásico soporte para monitor y un adaptador para trípodes.
Tiene un precio ligeramente inferior a la StreamCam, moviéndose entre los 80 y 90€.
Última actualización el 2024-11-21
Frente a Logitech, encontramos la marca Elgato que no lo hace nada mal, y esta Facecam da «la cara». Esta webcam ofrece un sensor CMOS Sony STARVIS con una lente de 24 mm y una apertura de f/2.4. Podremos retransmitir a 1080p y 60 FPS, así como utilizar todo el software de la marca el cual no es nada malo.
Ofrece una imagen bastante nítida y nos parece una competencia sólida para Logitech porque viene con una pequeña luz LED para dar algo de iluminación, así como micrófonos que no suenan nada mal.
Última actualización el 2024-11-21
Se ha hecho con la mayoría de setups para streaming, y con razón, se trata de una webcam que ofrece resolución 4K y que es capaz de trabajar con poca luz. Lógicamente, siempre será mejor tener buena iluminación en el setup, pero hay que decir que es una webcam que está presente en más de un setup «famoso».
Podemos decir que se diferencia del resto de webcams en que es capaz de entregar 1080p a 60 FPS o 720p a 90 FPS, resolución 4K, 2 micrófonos omnidireccionales que funcionan muy bien, zoom digital 5x y campo de visión de 90º.
Era de esperar que el precio subiese bastante, pero sigue siendo más barata que una DSLR y a cambio da un rendimiento magnífico.
Última actualización el 2024-11-21
Antes, hemos dicho por encima que existía la posibilidad de poner una videocámara en nuestro setup para hacer streaming. Pues bien, aunque existen más opciones, nos parece que una GoPro Hero puede ser perfectamente viable para este fin. Teniendo en cuenta los límites de streaming de Twitch o YouTube, cualquiera de las 3 generaciones vale, aunque siempre es mejor optar por lo último (HERO10).
Podemos retransmitir hasta en 5K a 60 FPS, y lo cierto es que podemos conectarla a través de un cable USB-C, así como incluye una capacidad nativa de usarla como webcam (desde la GoPro HERO9). Eso sí, debéis tener en cuenta su campo de visión tan amplio, aunque sí que es verdad que podemos elegirlo entre varios modos.
El sensor CMOS es realmente bueno y tiene un rango ISO más que decente (100 a 6400 en HERO9), disponiendo de una pantalla LCD táctil cuyo uso es muy intuitivo.
Última actualización el 2024-11-21
Nos parece una gran opción en relación calidad-precio, aunque el problema de Sony son sus objetivos: hay que ir a la marca, y no son baratos. Dicho esto, nos parece que obtendréis una gran experiencia de vídeo con esta DSLR, aunque debemos decir que usa micro HDMI, algo a tener en cuenta.
No os preocupéis por ver DSLR antiguas funcionando en setups, ya que el mundo de las reflex no es como el de los smartphones o webcams: no salen modelos todos los años, y muchos profesionales siguen con DSLR de hace muchos años. Lo que nos interesa a nosotros es la configuración de la cámara y cómo conectarla al PC, así como su rendimiento en streaming: Full HD a 60 FPS con una calidad tremenda.
Su precio con el típico objetivo 16-50 mm no se va mucho más allá que lo que cuesta una GoPro Hero10.
Última actualización el 2024-11-21
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