La serie de chasis de gama media de Sharkoon aumenta sus integrantes con el Sharkoon TG7M RGB. Se trata de una caja ATX con amplio espacio para hardware y sistemas de ventilación, contando con 4 ventiladores A-RGB preinstalados sincronizables con placa base.
Admite placas E-ATX, radiadores de 360 mm para montajes gaming en toda regla, con un frontal tipo mesh, marcos de aluminio y cristal templado lateral. A priori lo tiene todo, falta conocer si de buena calidad, así que comencemos la review.
Pero antes, agradecemos a Sharkoon su confianza en nosotros al cedernos este chasis para su análisis.
Sharkoon TG7M RGB características técnicas
Unboxing
El Sharkoon TG7M RGB utiliza la habitual caja de cartón rígido con acabado blanco y serigrafía en color negro para mostrar la imagen del chasis e información en sus caras. El interior no tiene mucho secreto, pues se ha colocado el producto entre moldes de poliestireno expandido (corcho blanco), y a su vez cubierta por una bolsa textil. Los accesorios vendrán dentro del propio chasis.
El contenido de la caja será el siguiente:
- Chasis Sharkoon TG7M RGB
- Adaptador trasero para montaje de GPU vertical
- Presillas de plástico
- Tornillos de montaje
- Multiplicador para ventiladores frontales
Diseño exterior
El formato de este Sharkoon TG7M RGB no puede ser otro que ATX, aunque admite placas E-ATX al tener unas medidas bastante amplias de 485 mm x 488 mm, siendo prácticamente cuadrada, y con 220 mm dando un grosor bastante generoso para almacenar cables y soportar disipadores gruesos. El chasis metálico nos da una pista de ser más resistente que los modelos inferiores con 7,8 kg, teniendo en cuenta que solo tiene un cristal.
Empezando el análisis en detalle por el lateral izquierdo, encontramos ese vidrio templado con leve oscurecimiento y ocupando toda la zona disponible. Se verá por tanto la cubierta de la PSU, aunque se ha colocado un marco opaco alrededor para tapar el chasis y el propio refuerzo de metal que tendrá el cristal para su instalación. El sistema consiste en pestañas frontales y dos tornillos traseros de rosca manual, ninguna novedad aquí.
En el lateral derecho tenemos una chapa de acero opaca con el color negro principal y exactamente el mismo sistema de montaje que el cristal. Varios puntos frontales y un refuerzo a ambos laterales permiten albergar una buena cantidad de cables sin ceder o curvarse.
Nos movemos hacia la zona frontal del Sharkoon TG7M RGB, que eleva la calidad de fabricación del conjunto al implementar dos marcos laterales de aluminio que derivan en una rejilla metálica de grosor medio ocupando toda la zona central. Nuevamente estamos ante un chasis optimizado para el flujo de aire, con tres ventiladores de 120 mm A-RGB preinstalados en esta zona.
En el punto medio se ha colocado un filtro de polvo, también de grano medio, en este caso de metal para adherirse magnéticamente al propio chasis. Esto significa que los ventiladores van instalados por la parte interior, y diríamos que no caben en la cara exterior. La carcasa interna que sujeta estos elementos metálicos será de plástico, con agarres de presión en los laterales y fácil extracción tirando desde abajo con la mano.
Nos movemos a la parte superior, la cual presenta una gran abertura escorada a la izquierda para dejar espacio a la placa y memoria si instalamos refrigeración líquida. Sobre la rejilla que admite ventiladores de 120 y 140 mm se ha colocado una malla metálica magnética que actúa como filtro de polvo de grano medio.
El panel de puertos I/O ubicado en el borde lateral longitudinalmente cuenta con:
- 2x USB 3.2 Gen1 Type-A
- 1x USB 3.2 Gen2 Type-C
- 2x Jacks de 3,5 mm para audio y micrófono
- Botón de encendido
- Botón de reset o control de iluminación
- LED de actividad para el disco duro y encendido
La zona trasera se presenta en un formato habitual, con zona de placa y ventilador preinstalado arriba, y espacio para PSU ATX abajo, la cual tenemos que instalar por la parte lateral. La zona central es la más relevante por así decirlo, ya que tiene 7 slots de expansión con chapas extraíbles y un módulo lateral opcional para montar tarjetas gráficas verticales. Podría admitir grosores de 55 mm aproximadamente.
Terminamos con la zona inferior del chasis, la cual cuenta con una amplia abertura en la parte de atrás para que la PSU tome aire. Se nota una buena calidad de fabricación al incorporar un filtro de partículas con marco de plástico extraíble y lavable. A su lado tenemos el espacio para el armario de discos duros, que esta vez solo admite una posición interior.
Interior y capacidad del Sharkoon TG7M RGB
Es el momento de entrar dentro del Sharkoon TG7M RGB para ver sus características técnicas, destacando por un amplio espacio principal que admitirá placas base ITX, Micro ATX, ATX y E-ATX. Es una gran opción para setups nivel medio, alto e incluso Workstation, y aunque no tenga calidades top, sí que hay buen flujo de aire, que al final es lo que importa.
Tras la placa tendremos una gran abertura para trabajar en el disipador sin necesidad de retirar la placa, con amplitud suficiente para también acceder a posibles ranuras M.2 traseras en placas ITX. Le acompañan 4 grandes huecos laterales para pasar cables, sin protección de goma, así como doble agujero superior y triple inferior. En este sentido será un poco básico al tener los elementos expuestos disminuyendo la calidad visual.
Este espacio admite disipadores de CPU de 172 mm de altura, así como tarjetas gráficas de 380 mm de longitud máxima incluyendo ya los ventiladores instalados. En caso de que utilicemos un radiador frontal, la longitud se reduce a 340 mm aproximadamente. También admite instalación vertical de GPU, nuevamente con estas distancias y un grosor máximo de 55 mm, aunque lo ideal será 50 mm o menos para permitir la entrada de aire hacia los ventiladores.
La cubierta metálica de PSU es bastante peculiar y además está aprovechado, primeramente con abertura lateral para mostrar fuentes con pantalla o RGB y hueco para colocar disipadores en el frontal. Sobre la superficie tenemos 8 cabezas de goma para instalar unidades de almacenamiento HDD/SSD de 2,5” sobre ella. A su lado, múltiples rejillas para permitir el flujo de aire ascendente y refrigerar la zona de discos duros.
Espacio para cables y capacidad de almacenamiento
Pasamos a la zona trasera del Sharkoon TG7M RGB tenemos un grosor entre 10 y 20 mm aproximadamente sin ningún sistema complejo para cables más allá de las presillas ubicadas en la columna central. Aquí ya se han enrutado los cables provenientes del panel I/O, pero aún existe espacio para pasar los cables ATX o PCIe hacia el espacio principal.
Según la distribución del espacio, el controlador de iluminación no está del todo mal situado, pues sus cabeceras no tapan ningún hueco directamente, aunque todavía debemos tener mucho cuidado con no doblar las cabeceras. El método de Fractal de ubicar las cabeceras bajo el panel I/O en el borde superior es más limpia, pero esta PCB entra dentro de lo aceptable.
Junto a ella tenemos dos brackets metálicos que soportan unidades de almacenamiento HDD/SSD de 2,5”. El sistema de anclaje para ellos consiste en 4 puntos con tornillos y gomas antivibraciones, donde acoplaremos estos elementos. En la cubierta de PSU tenemos exactamente estos dos huecos, así que podremos mover los marcos hacia el espacio principal.
Para discos duros HDD de 3,5” tendremos un armario inferior que admite dos unidades. Una de ellas podrá instalarse en la bandeja de plástico extraíble. Este elemento metálico se podrá extraer retirando los tornillos de sujeción inferiores, y así dejar más espacio para cables.
Espacio para ventilación
Continuamos la review del Sharkoon TG7M RGB para ver sus posibilidades, además de las ya presentes.
Comenzando por la capacidad para ventiladores tenemos:
- Frontal: 3x 120
- Cubierta superior: 3x 120 / 2x 140 mm
- Trasera: 1x 120 mm
Como suele ser habitual en Sharkoon, se han colocado nada menos que 4 ventiladores de 120 mm de fábrica, y además de bastante buena calidad en líneas generales. Parecen ser suficientemente silenciosos, y están controlados por señal PWM para gestionar sus RPM desde BIOS. Para ello se han incluido cabeceras de 4 pines y un multiplicador que irá enchufado a la placa. Lástima que el controlador integrado solamente sea para RGB.
Resulta relevante que solamente se admiten ventiladores de 140 mm en el espacio superior, limitando un poco las prestaciones del chasis a consciencia. De hecho el frontal también podría haber implementado capacidad para 140 mm, pues espacio hay más que de sobra.
Mientras que la compatibilidad con radiadores será:
- Frontal: 120 / 240 / 360 mm
- Cubierta superior: 120 / 140 / 240 / 280 / 360 mm
- Trasero: 120 mm
El frontal en principio solo admite tamaños del 120 mm hasta 360 mm, contando con un grosor máximo disponible de 64 mm para radiador + ventiladores. Más que suficiente para los sistemas AIO incluidos radiadores de grosor extra como los Arctic Freezer, pero no podremos instalar sistemas push and pull.
Aunque la opción más interesante será su colocación en la zona superior, porque también se admiten grosores de unos 50 mm hasta la placa base, pero admitirá más al tener el marco de instalación cargado hacia la izquierda para separarse de la placa.
Instalación y montaje de hardware
El montaje del Sharkoon TG7M RGB se ha llevado a cabo con los siguientes componentes:
- Placa base Asus Crosshair VII Hero
- CPU AMD Ryzen 7 2700X
- Disipador AMD Wraith Prism de stock
- 16 GB de RAM DDR4 G.Skill Trident Z Royal
- Tarjeta gráfica KFA2 RTX 3060
- PSU Antec HGC Gold 750 con extensiones Cablemod
- SSD M.2
Se trata de la configuración habitual utilizada en chasis ATX por nosotros, y no hemos tenido ningún tipo de problemas durante la instalación. Al tratarse de un chasis de casi 50 cm de alto y largo podremos empezar por la placa o PSU, pues se puede trabajar muy bien en las conexiones con los componentes instalados. Hemos decidido retirar el armario de discos duros inferior para dejar más espacio para cables, y lo cierto es que se agradece bastante al no tener canales o agarres trabajados tras la placa.
El componente modular para instalar GPU verticales no vendrá preinstalado, ya que requiere la retirada de todos los tornillos de las chapas horizontales para un correcto acoplamiento. Esto dificulta un poco su montaje, y simplemente abriendo un poco más los huecos para tornillos mejoraría bastante este punto.
Los cables que encontramos en el chasis y que requerirán conexión, serán los siguientes:
- Conector para USB Type-A
- Conector para USB Type-C
- Cabecera de audio AAFP de panel frontal
- Cabeceras para el sistema de arranque
- 4x Cabeceras de 4 pines de ventiladores
- Conector SATA para alimentación del microcontrolador
- Conexión 5VDG opcional para sincronizar RGB con placa
La instalación de iluminación ya está hecha al menos en la parte del microcontrolador, y será decisión de nosotros como usuarios conectar la cabecera 5VDG a la placa para sincronizar el sistema. O bien utilizar la cabecera RST SW del botón frontal para aprovechar los múltiples afectos integrados. El sistema es compatible con tecnologías RGB de Asus, MSI, Gigabyte y ASRock.
Resultado final
El montaje completo del Sharkoon TG7M RGB quedará tal y como se aprecia en las imágenes, con todo el sistema funcionando y el RGB activado.
Pruebas de temperatura
Para verificar que el sistema de ventiladores funciona perfectamente y la renovación de aire interior es buena, hemos estresado CPU y GPU simultáneamente durante 60 minutos, capturando los resultados mediante HWiNFO.
Palabras finales y conclusión acerca del Sharkoon TG7M RGB
Este chasis nos brindará justo lo que un setup gaming de cualquier gama de precios necesita, combinando bastante bien amplitud de espacio, excelente flujo de aire y un diseño elegante. No llega a ser chasis full tower, pero admite placas E-ATX con disipadores de aire muy altos, e incluso GPU dedicadas verticales con 50 mm de grosor.
Sobre un chasis de acero que tiene una calidad típica de la gama media, tenemos elementos muy interesantes a nivel estético. Obviamente con un especial enfoque en el frontal, que combina elementos metálicos y rejilla negra muy elegante, pero con gran entrada de aire gracias a su triple ventilador A-RGB. Se combina con un buen vidrio templado lateral, y ventilador trasero A-RGB para que exista renovación de aire.
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Elementos técnicos que suman en este chasis serán el módulo para GPU vertical, filtros de polvo frontal y superior magnético, así como filtro de partículas bien trabajo para la base. El interior estéticamente no está muy trabajado aunque es funcional, con capacidad para instalar SSD de 2,5” sobre la PSU, y espacio para cables trasero amplio, pero básico. El controlador integrado solamente da la posibilidad de gestionar el RGB, pero para la alimentación PWM deberá hacerse directamente con las cabeceras de la placa base.
El Sharkoon TG7M RGB está disponible por un precio de 130€, y como decimos en otros productos, podría ser un poquito más ajustado de no haber subido todos los precios a nivel global. Podemos decir que es un chasis con excelentes acabados externos, incluso superiores a su gama, con espacio para hardware, y 4 buenos ventiladores que lo hacen merecedor de un recomendado.
VENTAJAS |
INCONVENIENTES |
ASPECTO EXTERIOR MUY CUIDADO Y DE CALIDAD | ESPACIO PARA CABLES BÁSICO EN CUANTO A ENRUTAMIENTO |
CRISTAL TEMPLADO INTEGRADO Y FRONTAL MESH CON ALUMINIO | CONTROLADOR SOLO ADMITE A-RGB, PERO NO PWM PARA VENTILADORES |
4 VENTILADORES A-RGB PREINSTALADOS SILENCIOSOS | MODULO PARA GPU VERTICAL TEDIOSO DE INSTALAR |
ESPACIO INTERIOR AMPLIO PARA HARDWARE Y RADIADORES | |
MARCOS PARA SSD DE 2,5” TRABAJADOS | |
BIEN PRECIO PARA LO QUE OFRECE |
El equipo de profesional review el otorga la medalla de oro y recomendado:
Última actualización el 2024-11-23
Sharkoon TG7M RGB
DISEÑO - 91%
MATERIALES - 86%
GESTIÓN DEL CABLEADO - 84%
PRECIO - 88%
87%
El Sharkoon TG7M RGB refresca la gama media con un frontal mesh entre marcos de aluminio, cristal templado y 4 ventiladores RGB dando aspecto gaming y gran espacio para hardware