La división gaming de Gigabyte está en estado de gracia, y acaba de lanzar su monitor gaming más premium y grande hasta la fecha, el AORUS FO48U. De esta forma se da el salto a la tecnología OLED para crear monitores gaming con una calidad y experiencia de imagen apabullante. La tarjeta de bienvenida es impresionante, un panel de 48 pulgadas con diseño ultra delgado y chasis de aluminio, entregando una resolución 4K a 120 Hz con FreeSync Premium.
De esta forma casi planta cara a las versiones SS IPS 4K a 144 Hz tope de gama, estando muy enfocado a uso en consolas de nueva generación al ser compatible con HDMI 2.1. Por dentro, tenemos las mismas opciones tácticas de cualquier monitor AORUS: Aim Stabilizer, Bashboard o Game Assist, junto a un nuevo sistema KVM y Space Audio con altavoces integrados de gran fidelidad. ¡Sin más, veámoslo en acción!
Antes de nada, agradecemos a AORUS su confianza en nosotros por prestarnos este monitor para su análisis.
Teníamos muchas ganas de probar en carne propia esta bestia, y por fin la tenemos con nosotros, el FO48U nos llega en una enorme y delgada caja de cartón rígido, complicada de manejar pero con un buen peso de unos 16 kg. La superficie exterior presenta un acabado estilo vinilo con imágenes del monitor y parte de sus especificaciones, lo habitual.
Para desempacar el monitor, debemos de colocar la caja verticalmente y extraer los 4 agarres de plástico inferiores. De esta forma la tapa superior se desprenderá de la base, y se quedará el monitor perfectamente accesible. Con una serie de moldes de corcho blanco se protege y sujeta perfectamente. El resto de accesorios estarán ubicados en la zona superior, así que abriremos la tapa para acceder a ellos fácilmente.
El bundle contará con los siguientes elementos:
El mando a distancia traerá un par de pilas aparte, pequeño pero importante detalle de la marca. Por otro lado, nos ha faltado el cable USB-C para conexión con portátiles, ya que por el precio del monitor perfectamente se podría haber incluido.
Para resumirlo de forma rápida, el AORUS FO48U tiene un diseño similar a los televisores OLED, alejándose así de la estética menos premium de la serie IPS beneficiados por lo delgados que son los paneles de esta tecnología. Y es que la zona más gruesa de la pantalla, que es la inferior, solo mide 43 mm, pensado un total de 15 kg, cifras muy ajustadas incluso para ser un OLED.
Lo primero que debemos hacer es colocar las patas, siendo las típicas de doble punto de apoyo en los extremos. Las introduciremos en sus correspondientes ranuras y las atornillaremos desde la parte trasera. Esto significa obviamente que el monitor no admitirá ergonomía alguna, ni ajuste de altura, orientación o giro, nada. Con semejante tamaño, estará enfocado a instalación en pared, así que para ellos se ha dotado de compatibilidad con soportes VESA de 300 x 300 mm.
Comenzando el análisis en detalle por el frontal, tendremos unos marcos tremendamente ajustados a la diagonal del panel. En este caso, la tecnología OLED también nos brinda una ventaja técnica en este apartado al no tener retroiluminación. En todo alrededor tenemos unos marcos integrados en el panel de 5 mm, pero a estos hay que sumarle 2 mm en laterales y parte superior, siendo el grosor del chasis de metal. La zona inferior será la más amplia sumando en total 23 mm al disponer de una zona de salida de audio y de adorno con el logotipo de la marca.
Vemos que el chasis en sí mismo es sumamente delgado al ser completamente de metal, adquirirá más dureza que los de plástico de 3 mm que llevan las unidades IPS. La zona de pantalla tendrá una superficie que ni es totalmente mate ni tampoco espejo, pero sí que refleja un poco la luz que incide en ella. Por lo demás, no tenemos mucho más que ver en esta zona, solo el sensor IR para el mando a distancia.
Así que nos vamos a la zona trasera del AORUS FO48U en donde encontraremos varias partes bien definidas. En primer lugar, destacamos una zona superior de 135 mm sumamente delgada de 4 mm en la que solamente vemos el chasis de aluminio en color gris plata y lo justo para instalar el panel. No tendremos problemas de torsión, pues el chasis es bastante fuerte e incluso se puede tender sin problema. Esta zona deja bastantes huellas en la superficie brillante.
El chasis de aluminio se extenderá a lo largo de todo el borde del panel para sujetarlo y darle resistencia, pero tras el encontramos en ensanchamiento de 45 mm con carcasa de plástico. En esta zona es donde se almacena el hardware y se coloca el refuerzo interno para la instalación en pared a través de VESA 300×300 mm. Con un acabado rugoso en color negro mate, tenemos un borde superior con rejilla de ventilación. Extendiéndose en la zona principal, las dos alas junto al logotipo de la marca, en este caso sin iluminación. Lo cierto es que hubiese venido fenomenal un sistema de iluminación ambiental en este monitor, ganaría mucha presencia de noche para jugar, ver películas y ayudar un poco a la fatiga de la vista.
Seguimos un poco más hacia abajo, en donde encontramos la ranura Kensington para candados universales, así como los paneles de puertos a cada lado que veremos luego con más detalle. En la base del AORUS FO48U tenemos una rejilla que se extiende en toda la zona para brindarnos la salida del audio integrado. Así mismo, en la zona central encontramos el joystick para el control de OSD y encendido de monitor.
Dado que no hay disponible ergonomía más allá de la posición por defecto del AORUS FO48U, es el turno de estudiar la conectividad y las funciones asociadas a ella. En este caso encontramos el panel de puertos en la zona derecha con el monitor visto desde el frente, mientras que la entrada de alimentación estará sola, colocada en la parte izquierda.
Así que el panel de puertos cuenta con los siguientes:
El panel es muy similar al de otros monitores 4K con alta tasa de refresco, y su situación es la esperada para un monitor de gran tamaño como este. El problema, es que podría darnos problemas a la hora de realizar las conexiones si nuestro PC está situado en el lado contrario, pues los cables incluidos tienen una longitud estándar. Obviamente los puertos más importantes serán los HDMI 2.1, los cuales soportarán VRR. Será la tecnología de tasa de refresco variable especialmente pensada para las consolas de nueva generación como son las Xbox Series X de Microsoft. Estos puertos además son compatibles con conexión de consola 4K @ 120 Hz, pues está muy enfocado a Xbox Series X y PS5 en modo 4:2:0.
La tecnología KVM estará implementada también en este modelo igual que ocurre con los otros modelos IPS lanzados por la marca recientemente. A través de los puertos USB-B y USB Type-C, permite utilizar desde el monitor teclado y ratón para controlar dos equipos directamente desde estas conexiones. Obviamente tendremos también función PIP y PBP para mostrar múltiples fuentes de vídeo simultáneamente en el panel.
El puerto USB Type-C además cuenta con capacidad de enlace de vídeo al implementar DisplayPort 1.4, siendo por tanto una interfaz más muy útil para portátiles gaming. Lástima que no se haya incluido el cable USB-C. Tanto esta interfaz como la DP nativa también soportarán 4K @120 Hz sin mayores problemas gracias a la tecnología HBR3 que incrementa el ancho de banda de la interfaz a 32,4 Gbps. Las interfaces USB permiten carga de 7,5W para dispositivos.
Si no teníamos suficiente potencia con los nuevos paneles SS IPS, Gigabyte da un paso más para crear una nueva serie de monitores gaming con tecnología OLED. El AORUS FO48U aumenta el tamaño de su panel hasta las 48 pulgadas en un formato de imagen 16:9. Sin duda es un estreno por todo lo alto para esta tecnología en monitores gaming, y mucho más estará por venir.
Nos va a ofrecer una resolución nativa 4K (3840x2160p), con un tamaño de píxel de 0,274 x 0,274 mm y una densidad de casi 92 ppp. Debido al tamaño no será una densidad demasiado elevada, y a una distancia cercana al panel podremos diferenciar el tamaño de los píxeles. Será un factor puramente informativo, ya que a la distancia de visualización normal para su tamaño la imagen será completamente nítida y perfecta.
Entre sus características básicas tenemos un contraste de 135.000:1, siempre con los negros reales que puede darnos esta tecnología al apagar completamente los píxeles para representar color negro. El brillo típico especificado será de 150 nits, y el máximo de 900 nits, aunque no cuenta con certificación DisplayHDR para paneles OLED. Los ángulos de visión de 178o serán perfectos en este panel, tanto vertical como horizontalmente, y además cuenta con tecnología Flicker-Free para evitar el parpadeo.
No olvidamos que se trata de un monitor gaming, y es de los primeros en entregar 4K a 120 Hz de frecuencia de refresco. Esta frecuencia será nativa, y no se requiere de ninguna opción de overclocking. Será interesante comparar la latencia de este AORUS FO48U frente a los monitores IPS, aunque el fabricante especifica un tiempo de respuesta mínimo de 1 ms GTG. Incluye tecnología de refresco variable AMD FreeSync Premium compatible con Nvidia G-Sync tras haberlo comprobado durante el análisis. No vamos a contar con modos Overdrive en este panel, así que la experiencia de fluidez y ghosting que obtengamos no se verá modificada.
AORUS tampoco ha descuidado lo más mínimo las prestaciones de color, y contamos con una profundidad de 10 bits reales con capacidad HDR10. Con una cobertura del 130% sRGB y 98% DCI-P3 la capacidad de representación de colores para tareas de diseño y creación serán muy elevadas, prácticamente al nivel de los mejores monitores IPS del mercado. No dispondremos de certificación de calibración ni tampoco se incluye reporte de fábrica, siendo el único pero que le podemos poner en este aspecto. Desde el OSD o desde el software de gestión dispondremos de 8 modos de imagen predefinidos y otros tres por defecto para personalizarlos a nuestro gusto con todas las opciones activadas.
Este panel OLED también cuenta con las tecnologías propias que introduce AORUS con todos sus monitores de juegos, que repasaremos ahora:
En este caso no contaremos con tecnología ANC como sí ocurre en algunos modelos AORUS, pero a cambio se ha implementado el que nos parece el mejor sistema de sonido integrado para un monitor (sin contar los televisores). De hecho, podríamos decir que también va a superar a muchos televisores de gama alta. Se compone de 2 altavoces de 10W para medios y agudos, y 1 altavoces de 20W actuando como woofer, siendo por tanto un sistema 2.1.
La tecnología que acompaña al sistema se denomina Space Audio, y básicamente se trata de un control mejorado para entregar un sonido de mayor calidad. En este, encontramos varios perfiles que se adaptan a juegos, películas o modo concierto en vivo, siendo básicamente un sistema de ecualización. El único aspecto que echamos en falta es que no tendremos este ecualizador para poder personalizarlo a nuestro gusto, aunque siempre podremos utilizar el propio de Windows.
Procedemos a analizar las características de calibración y el rendimiento del AORUS FO48U, verificando que se cumplen los parámetros técnicos del fabricante. Para ello utilizaremos el colorímetro Colormunki Display, y los programas DisplayCAL 3 y HCFR. Así mismo, verificaremos estas propiedades con el espacio de color sRGB y también DCI-P3.
Efectuaremos una prueba de latencia End-to-End en este equipo y monitor con la herramienta LDAT de Nvidia y el juego Doom Eternal, en resolución 4K, 120 Hz y sin utilizar V-Sync. Con él se pretende medir la latencia del conjunto completo, desde que hacemos clic en el ratón hasta que los píxeles de pantalla responden al disparo.
Los resultados obtenidos son bastante similares a los que vimos en los modelos UHD IPS de la marca, como el FV43U o el FI32U, así que podemos decir que este panel OLED es casi tan rápido como los demás.
Verificaremos las prestaciones de este panel con algunas pruebas de Testufo en busca de artefactos como ghosting. Para ello hemos mantenido la configuración por defecto del test en cuanto a color y velocidad.
En este caso las pruebas se reducen bastante al no disponer de modos Overdrive para configurar la respuesta del panel. Y tampoco es que nos haga mucha falta, porque el rendimiento es impresionante. En la captura, y mucho mejor en persona, podremos ver una imagen en movimiento sin estela alguna y con una excelente nitidez que muchos IPS envidiarán.
La puesta a punto del panel es una gozada, y además nos olvidamos del bleeding al no afectar a esta tecnología. Quizás sí que deberíamos acordarnos del burn-in, es decir, el quemado que se puede producir en los paneles OLED cuando representa una imagen estática durante mucho tiempo. Para evitar esto, lo ideal es mantenerlo a un brillo no muy alto, cambiar de fondo y dejarlo apagado mientras no lo usamos.
Ahora nos ocuparemos de realizar las pruebas básicas que nos den las medidas reales de brillo y contraste típicos del AORUS FO48U.
| Brillo Max. | Contraste | Valor Gamma | Temperatura de color | Nivel de negros |
| 282 cd/m2 | 1:1 | 2,01 | 6587 K | 0,0 cd/m2 |
Al ser un panel OLED el colorímetro nos estará midiendo un contraste 1:1, es decir, negro absoluto frente a blanco puro perfectos. La temperatura de color en el modo custom que hemos utilizado está casi perfecta, mientras que el brillo obtenido al 100% sin HDR será normalito, en torno a los 300 nits.
Realmente no tiene mucho sentido verificar la uniformidad al ser diodos que generan su propia luz, y las variaciones que podamos más bien pueden deberse a las capturas del propio colorímetro.
En este espacio obtenemos no solo la cobertura total, sino un volumen de gama de nada menos que el 160%, un 30% más que el prometido. Impresionantes datos los que ofrece el panel, y la calibración tampoco está nada mal al darnos un Delta E medio de 2,62. La calidad de imagen es bestial, ya lo hemos mencionado, pero si además tenemos una precisión en los colores casi perfecta, este panel OLED será válido para tareas de diseño nivel profesional.
En este espacio estamos obteniendo un Delta E medio de 2,22, excelente al mejorar incluso a sRGB. Igual que antes, la cobertura en esta ocasión será de prácticamente el 98%, justo lo prometido, y un volumen de gama del 113%. Incluso en Adobe RGB obtenemos casi un 90% de cobertura, un espacio utilizado para diseño bajo los programas de Adobe. El monitor de hecho cuenta con modos de color para estos tres espacios, aunque nosotros lo hemos mantenido en la opción estándar al ser la más equilibrada.
Realmente no vemos necesaria una calibración para este monitor, y de hecho la temperatura de color esta perfectamente perfilada en el punto D65. De todas formas, la hemos llevado a cabo, obteniendo leves mejoras en el Delta E medio de 2,12 en sRGB y 1,86 en DCI-P3. No es un incremento significativo, pero os dejaremos el perfil para descarga igualmente.
El menú OSD que nos encontramos en este AORUS FO48U será exactamente el mismo que el de los otros modelos de la marca. En esta ocasión tendremos mando a distancia para el control de OSD, siendo la opción que más nos gusta por comodidad. Con el joystick obtendremos un control rápido e intuitivo, con los correspondientes accesos directos para Modo de Audio (Izquierda), Entrada (Derecha), Modo de Imagen (Abajo) y Black Equalizer (Arriba).
Pulsando hacia dentro una vez obtendremos el menú de acceso con otras 4 funciones, Dashboard (Izquierda), Game Assist (Derecha), Apagado (Arriba) y Menú Principal (Abajo). Accedemos ya al menú principal en donde obtenemos 6 apartados y un modo Reset. En la primera sección Gaming tendremos las funciones asociadas a juegos, como el estabilizador de puntería, ecualizar de negros o FreeSync. Notamos la ausencia del Overdrive, que ya hemos mencionado que no está en este monitor. En función del modo de operación del monitor, algunas de estas opciones se deshabilitarán.
Los modos de imagen y sus opciones de personalización estarán en el segundo apartado, repitiéndose todas las opciones para cada modo predefinido. Parte de estas opciones estarán desactivadas según para el modo que elijamos, pero todas ellas estarán activas para los modos custom. La opción KVM estará ubicado en el tercer apartado, siendo de aquí la opción más interesante al poder gestionar hasta dos equipos desde un solo monitor con ratón y teclado. El modo HDR será automático, combinándose con la opción de Windows.
En los modelos más actuales de Gigabyte, el modo PIP/PBP ha subido bastante de nivel, ya que nos permite controlar más parámetros de las fuentes de vídeo mostradas en la pantalla. Por ejemplo, localización, tamaño USB, o la salida de audio. Por lo demás, tendremos las opciones típicas para la visualización del OSD y capacidad de almacenar 3 perfiles de configuración.
El software OSD Sidekick traslada todo lo visto en el menú de pantalla a una aplicación disponible en Windows. Para llevar a cabo la configuración necesitamos conectar el puerto USB-B o USB-C con el equipo, y descargarnos la versión disponible en la página de soporte del monitor. La interfaz está dividida modos de imagen, que harán las veces de perfiles de configuración. Además, admite atajos de teclado para configuración rápida de opciones, actualización del firmware y por supuesto los modos PIP/PBP y KVM.
Espectacular experiencia de imagen y juegos nos ha dado este monitor de nada menos que 48 pulgadas, y por supuesto lo hemos probado con nuestro banco de pruebas y la RTX 3080 Ti. Es una única forma de sacarle todo el jugo a su resolución 4K y 120 Hz, aunque será compatible con consolas de nueva generación gracias a HDMI 2.1.
El panel OLED equipado no solo nos mostrará negros verdaderos, lo cual ya es una gran ventaja, sino una calidad de imagen impresionante, colores de perfecta saturación y sin el típico brillo verdoso típico de esta tecnología. La evolución es evidente, y no solo los verdes, sino también los rojos y azules se verán de maravilla.
Nuestras dudas sobre su rendimiento en juegos han sido totalmente disipadas, y realmente se queda muy cerca de la velocidad de los paneles IPS. De hecho será más rápido que muchos ellos con 1 ms GTG, excelente latencia End-2-End y una imagen en movimiento nítida y sin ghosting. Sorprende lo bien optimizado que está, y solo esperamos los nuevos modelos que se vayan a lanzar sean igual de buenos, con un tamaño más adecuado a un escritorio.
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Otra nota muy positiva la da la amplia gama de opciones de personalización y asociadas a juegos que nos da el monitor, siendo básicamente las mismas que en los modelos IPS. Tenemos bastantes modos de imagen predefinidos, Game Assist, Aim Stabilizer, Dashboard, etc. Así mismo, se apuesta fuerte por opciones como KVM y PIP/PBP, para controlar dos equipos desde el monitor. Con Sidekick se facilitará bastante el trabajo de gestión, y también con el mando a distancia incluido.
¿Qué podemos decir de su diseño? Pues que es una maravilla, al nivel e incluso por encima de muchos televisores OLED, con chasis de aluminio e increíblemente delgado. Solo nos ha faltado contar con iluminación ambiental en la parte de atrás, que tendría todo el sentido para esta unidad. Valoramos la presencia de puerto USB-C con interfaz de vídeo, pero sobre todo su gran apartado de sonido. AORUS aquí ha demostrado su calidad dándonos seguramente el mejor apartado sonoro de un monitor de PC/consola, alto, equilibrado y con bastantes graves, nos ha encantado.
El AORUS FO48U estará disponible por un precio de 1500 euros, que es una cifra bastante atractiva considerando que el FV43U IPS de 43” lo encontramos a 1100 euros y cifras similares para otros monitores 4K a 144 Hz. Es cierto que baja a 120 Hz, pero ¿Quién puede necesitar más que esto?, y además con tecnología OLED muy bien afinada y audio integrado de gran calidad. El mejor monitor para consolas de nueva generación sin duda.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| DISEÑO PREMIUM MUY DELGADO | SIN RETROILUMINACIÓN AMBIENTAL ATRÁS |
| CALIDAD DE IMAGEN Y GRAN COBERTURA DE COLOR | DEMASIADO GRANDE PARA USARLO COMO MONITOR DE PC |
| 4K A 120 HZ SIN GHOSTING Y CON BUENA RESPUESTA | ECHAMOS EN FALTA UNA NVIDIA SHIELD TV INTEGRADA |
| OPCIONES GAMING EN SU OSD | |
| NEGROS VERDADEROS Y POTENTE BRILLO | |
| BUEN PRECIO POR LO QUE OFRECE |
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