Si estás pensando en comprar un PC nuevo o actualizar alguno de los componentes de tu sistema, debes hacerlo cuanto antes. Vamos a repasar los problemas de suministros que existen en la industria y cuál o cuáles son los orígenes de estos problemas de suministro.
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Cuál es el origen de la escasez de componentes de PC
El encarecimiento de los componentes informáticos no tiene un único origen, sino que se han dado un conjunto de circunstancias que han provocado el encarecimiento del hardware. Son cinco frentes lo que han provocado la subida: la minería de Ethereum y otras criptomonedas, el teletrabajo, la pandemia por la COVID-19, las emisiones de CO2 en China y la subida de aranceles.
China quiere reducir las emisiones de CO2
Uno de los objetivos del gobierno chino es reducir las emisiones de CO2 y para ello están haciendo limpieza. El primer paso ha sido ilegalizar la minería de criptomonedas, aunque también lo hacen por no poder controlarlas y censurarlas.
Ahora China carga contra aquellas plantas de producción de chips y semiconductores que emitan mucho CO2. Quiere que las plantas sean más limpias y reduzcan el consumo eléctrico y las emisiones. Incluso han decidido que cerraran o cortaran la electricidad a las más contaminantes.
China ya ha empezado a cortar el suministro a algunas plantas de fabricación de semiconductores para compañías extranjeras. El motivo es la llegada del frío al país y la saturación de la red eléctrica. Para que la gente pueda calentar sus casas, han decidido cortar el suministro a los grandes consumidores.
Las compañías con plantas en las provincias de Jiangsu, Zhejiang y Guangdon deberán parar su producción. Esto afecta a empresas como NVIDIA, Intel, Apple o Qualcomm que tienen plantas de producción en esas zonas o acuerdos con terceros.
Algunas regiones plantean diferentes mecanismos para reducir el consumo energético. Se habla de parar varios días al mes, pero eso sería un desastre, ya que las fábricas de semiconductores necesitan estar operativas de manera constante.
La pandemia de la COVID-19
Que decir al respecto de la pandemia de la COVID-19, todos hemos sufrido los efectos del virus que nos ha obligado a cambiar nuestro modo de vida. Todos nos tuvimos que quedar encerrados en casa mientras los sanitarios se dejaban la vida por combatir a un ser microscópico que nos ha hecho la vida imposible durante meses.
El confinamiento que hemos vivido se ha repetido en todo el mundo y eso ha generado numerosos problemas. La industria de la informática y el hardware no se ha librado de la pandemia, teniendo que cerrar u operar por debajo de la capacidad habitual. Al tener menos mano de obra o tener que cerrar por la pandemia, la producción se ha visto afectada de manera notable.
Foxconn, quien manufactura los iPhone e iPad en China, tuvo que cerrar durante semanas por falta de personal para poder operar. Es solo un pequeño ejemplo, ya que TSMC, Samsung, Intel, Micron y tantas fábricas de componentes y otros elementos electrónicos han tenido que cerrar u operar muy por debajo de la plena capacidad.
Pero no solo han sufrido la pandemia los fabricantes de componentes informáticos y electrónicos, también quienes suministran materias primas. Debido a la pandemia, tareas como la extracción de metales, como cobre, aluminio o tierras raras se ha parado o ralentizado.
Sumamos a esto que el transporte en general ha priorizado el transporte y distribución de elementos de primera necesidad. Material sanitario, alimentación y productos de higiene, entre otros, han tenido prioridad. Bien es cierto que el comercio electrónico ha tenido un aumento en ventas por la imposibilidad de comprarlo en tiendas físicas.
Minería de Ethereum y otras criptomonedas
Tenemos que remontarnos al 11 de mayo de 2020. Todos estábamos inmersos en la pandemia de la COVID, pero ese día es importante en el mundo de las criptomonedas. Es el día exacto en el que sucede el tercer halving en la blockchain de Bitcoin, pasando la recompensa por bloque de los 12.5 BTC a los 6.25 BTC. Dicha fecha marca el inicio de la subida de precio de Bitcoin y por consiguiente, del resto de criptomonedas y tokens, ya que todas las altcoins tienen paridad con BTC.
Gracias al halving de Bitcoin el precio del resto de altcoins sube, destacando el precio de Ethereum. Al aumentar el precio de Ethereum y por lo consiguiente, la rentabilidad de la minería de Ethereum aumenta con una enorme fuerza.
Bitcoin se mina con ASIC, no con otros componentes, ya que por ejemplo, con tarjeta gráfica, la rentabilidad es nula. Pero la minería de Ethereum se realiza mediante tarjetas gráficas, ya que el algoritmo de esta criptomoneda está pensado para aprovechar la GPU de las gráficas y el ancho de banda de la VRAM.
Debido al aumento de precio y la rentabilidad, muchos han apostado por comprar gráficas para así obtener ganancias económicas en tiempos complicados. Esto ha supuesto una fuerte demanda de tarjetas gráficas que ha dejado sin stock al mercado. Posiblemente en circunstancias normales habría afectado mucho menos, pero con la pandemia y la producción reducida, ha tenido un enorme impacto.
Aumento notable del teletrabajo
Muchas empresas no han podido operar durante el confinamiento y aquellas que han tenido la posibilidad, han apostado por el teletrabajo. Esto ha obligado a muchos trabajadores y empresas a comprar nuevos PC y componentes para poder trabajar desde casa. Lo cual ha supuesto un estrés a la industria notable en un momento en que la capacidad de producción estaba mermada por la pandemia.
Los grandes fabricantes de portátiles han visto como la cantidad de stock disponible que tenían caía en picado por la pandemia. Era imposible predecir una demanda tan fuerte y claro, los fabricantes de ordenadores portátiles tienen un stock acorde a sus previsiones normales. La COVID-19 ha sido una completa anormalidad y ha generado problemas a los ensambladores de portátiles.
Estos fabricantes se han encontrado con una enorme demanda de productos, pero con la problemática de no poder reponer el stock e incluso, problemas para satisfacer la demanda. Se han encontrado con una fuerte demanda que no podían cubrir porque el suministro de componentes había decaído por las circunstancias.
Mayores costes de aranceles
Si bien esta circunstancia es anterior a la pandemia, también se ha visto afectada por la COVID-19. Antes de la pandemia, la guerra comercial entre China y Estados Unidos supuso una imposición de aranceles importante entre ambos países. Eso genero un aumento en impositivo a las importaciones y exportaciones. Se sumó a un encarecimiento del transporte de mercancías por la subida de los combustibles.
La pandemia ha provocado que muchas navieras que se dedican al transporte de mercancías tengan barcos parados. Aunque esto puede parecer bueno, realmente es negativo, porque las naves paradas tienen mayores costes que estando operativas. Tienes que mantener la plantilla, sin que esta produzca y además, costes de mantenimiento y estacionamiento de los navíos.
Por si las cosas no fueran bastante complicadas, que el Ever Given, un barco de transporte de mercancías bloqueara durante casi dos semanas el Canal de Suez solo hizo que hacer las cosas más difíciles. Las tareas para desencallar el barco fueron lentas, dejando a decenas de barcos a la espera de que se solucionara el problema. Algo que genero un aumento de costes a un sector que no lo estaba pasando bien.
Cómo está afectando a la industria de semiconductores
El origen de los problemas lo tenemos claro, ahora toca ver cuáles son los problemas que están enfrentando los fabricantes de semiconductores, de componentes pasivos y otros relacionados. Las informaciones que se han ido dando en las últimas semanas y meses no son para nada positivas.
Falta de mano de obra cualificada
Según un informe de IPC International, cuatro de cada cinco empresas tienen problemas para encontrar mano de obra cualificada. Esto estaría suponiendo un aumento de los costes laborales, que se suman al aumento de otros costes.
Intel, TSMC y Samsung están trabajando en la construcción de nuevas fábricas y fundiciones. Estas nuevas plantas podrán satisfacer la demanda, pero posiblemente no tengan la capacidad de satisfacer la demanda futura. Pero se enfrentan a un problema más serio y es la necesidad de mano de obra cualificada.
Los operarios de estas plantas normalmente son ingenieros y gente con alta cualificación. Se operan láseres, sistemas de filtrado y máquinas realmente complejas y delicadas que requieren de una formación técnica notable. El problema es que no existe suficiente personal cualificado para las necesidades de las nuevas plantas y ya no hablemos de futuras nuevas plantas.
Ante la necesidad de mano de obra cualificada, se daría una mejoras en las condiciones laborales. Mejores sueldos, mejores condiciones laborales, mejores bonus y otros incentivos para atraer a los trabajadores. También, que duda cabe, para robar trabajadores a la competencia.
Tierras raras y cada vez más caras
Las tierras raras, que son difíciles de extraer, también se están viendo encarecidas. Nikkei informa que el neodimio, por ejemplo, ha subido de precio en un 75% en tan solo 12 meses.
Quizá el mayor problema está en el Litio, que es vital para la construcción de baterías. Portátiles, smartphone, tablets y más recientemente vehículos eléctricos utilizan baterías basadas en el Litio. En los últimos 12 meses, esta tierra rara ha subido de precio en un 150%.
El aluminio, utilizando en los condensadores superficiales, ha subido más de un 55% en un año. Otro mineral como el cobalto, para la producción avanzada de chips, ha subido más de un 50%. Pero es que el cobre, utilizado en todos los componentes, ha subido más de un 37%.
Hablamos de tierras raras y minerales que son fundamentales en la fabricación de sistemas informáticos. Sin todos estos materiales, la mayoría de componentes informáticos no pueden existir.
Escasez de componentes pasivos (condensadores)
Los condensadores son básicos para cualquier circuito electrónico y los podemos ver en gráficas, placas base, fuentes de alimentación, etc. Sin estos componentes pasivos, no se pueden fabricar ninguno de los componentes mencionados.
Chemi-Con y Nichicon, los principales fabricantes de condensadores japoneses han tenido que cerrar entre julio y agosto. El motivo del cierre no es otro que el COVID. Actualmente habrían recuperado apenas el 60% de la plantilla y estarían trabajando para volver a la normalidad. El cierre y la falta de mano de obra estaría implicando una reducción de envíos de entre un 30-60%.
Muchos han demandado a fabricantes taiwaneses y chinos que les fabriquen condensadores. El problema reside en las especificaciones, ya que los condensadores japoneses son de muy alta calidad. Pero es que además se ha pasado de 4-6 semanas de entrega por parte de estos fabricantes, se ha pasado a periodos por la pandemia de 3-6 meses.
Un componente tan «simple» como los condensadores están sufriendo importantes problemas de abastecimiento.
Hasta 21 semanas para que lleguen los chips
La industria de los smartphone también está teniendo problemas en el suministro de componentes. Bloomberg informa que algunos pedidos se están retrasando hasta 21 semanas.
Parece ser que los que más retrasos estarían sufriendo son los destinados a la gestión energética y los optoelectrónicos. Aquellos que sufren más retrasos son los chips analógicos, lo cual está generando problemas a os fabricantes de terminales.
La industria del automóvil, muy afectada
Vamos aponer las cosas en perspectiva, porque si bien siempre hablamos de componentes informáticos, está afectando a otros segmentos. La industria del automóvil también está sufriendo unos retrasos enormes por la falta de chips y otros componentes. Actualmente un automóvil puede tener varias decenas de chips diferentes para diferentes usos.
Carecer de chips lo que está generando son retrasos en la entrega de vehículos o el cierre de plantas. La Seat de Martorell ha tenido que cerrar en varias ocasiones por la falta de chips. La Volkswagen de Pamplona también ha cerrado tres días en varias ocasiones por el mismo motivo.
Un problema tan grande, que el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha pedido a los fabricantes de chips que prioricen la entrega de estos componentes a los fabricantes estadounidenses.
Cuánto durara todo esto
Durante los dos primeros trimestres muchas voces de la industria apuntaban que para finales de año la cosa volvería a la normalidad. Hemos visto este pasado verano como volvía el stock de gráficas y los precios se volvían razonables. Desgraciadamente todo parece haber sido un espejismo, porque los problemas de stock han vuelto y los precios se vuelven a disparar.
Lisa Su, CEO de AMD, ha indicado que el stock de sus componentes ya está volviendo a la normalidad. Esto sería perfecto, pero es mejor mantenerse en el pesimismo. TSCM está más que saturada produciendo las GPU y CPU de AMD, tanto para sobremesa, como para portátiles o los SoC para las consolas de nueva generación. Parece difícil que con todos los problemas en la industria y los problemas de producción de TSMC, puedan volver a existir una cantidad de stock coherente.
Pat Gelsinger, CEO de Intel, es mucho más pesimista a este respecto y apuntan a que 2022 será un año negro. Según ha indicado, la escasez mundial de semiconductores podría durar hasta el año 2023.
Cada vez son más las voces que apuntan a que 2022 será un año bastante complicado en el mercado del hardware. Es posible que la demanda siga siendo bastante superior a la capacidad de suministro de la industria. Volver a la normalidad no es un proceso sencillo y menos teniendo en cuenta la gran demanda.
Vemos que hay diferentes opiniones sobre el problema de stock para componentes de PC, así que comprar un sistema nuevo no será sencillo. Lo mejor, teniendo en cuenta los antecedentes, es ponernos en el marco más negativo.
Un oasis en el desierto: memoria RAM
La memoria RAM parece ser el único componente que va a ver reducido su precio. Durante los dos primeros trimestre de año se ha dado una subida de precios por chips del 10-15%. Durante el tercer trimestre el precio ha variado entre el 2-7% debido al ajuste de la demanda a la baja. Para el último trimestre de 2021 se espera una reducción de hasta el 10%.
Esto vendría dado por un pequeño parón en la demanda de los ensambladores de servidores y Data Centers. Ya estarían esperando a la llegada de los nuevos procesadores Intel Xeon con soporte para memoria RAM DDR5. Algo que provoca una reducción notable de la demanda y que el stock aumente.
Parece que la primera industria en ver la luz al final del túnel será la memoria RAM.
Por qué debo comprar ya los componentes para mi PC
Tenemos claros los factores que nos llevan a la situación actual de escasez de componentes y por qué todo se esta encareciendo. Con todos los datos sobre la mesa parece evidente que esperar puede terminar siendo contraproducente. Esto invita a comprar los componentes para el PC lo antes posible, siempre que encontremos precios razonables.
Durante este verano hemos tenido unos meses de calma, donde el stock ha fluido con cierta normalidad. Este flujo de stock ha provocado una caída de precios bastante notable de precios, hasta los precios recomendados por NVIDIA y AMD.
La «fiesta» ha durado poco, ya que a principios de septiembre ya se informaba de una reducción de suministro por parte de NVIDIA de un 30%. Esto ha originado que nuevamente los precios de las tarjetas gráficas se empiecen a disparar al alza.
Intel planea lanzamiento de nuevos procesadores para las próximas semanas. AMD también esta organizando el lanzamiento de nuevos procesadores. NVIDIA parece estar trabajando en las RTX 30 SUPER Series que se lanzarían en breve. Lo cual podría generar una elevada demanda de estos nuevos componentes y vuelta a la falta de stock.
Palabras finales sobre por qué debes comprar el componentes para tu PC cuanto antes
Estamos en un punto complejo donde esperar una hipotética bajada de precios puede ser bastante contraproducente. Muchos este verano han esperado y se han encontrado con que han esperado demasiado para actualizar. Todos los indicadores apuntan a una subida de precios de los componentes de PC, así que retrasar la compra podría ser negativo.
Te recomendamos este artículo para comprar la mejorar placa base
Una buena opción para ahorrar dinero es comprar una placa base, tarjeta gráfica u otros componentes PC reacondicionados. Estos productos han sido utilizados en exhibición en tienda o en torneos, y pueden tener restos de uso, que suele ser algo de polvo o pequeños arañazos.
Si necesitas actualizar tu sistema de manera urgente, cuanto antes lo hagas, mejor. Nada te garantiza que esperar al Black Friday vaya a resultar efectivo, más bien al contrario. Es posible que esas gráficas en oferta estén infladas y el descuento sea poco creíble. Comprar los componentes para tu PC nuevo será una tarea complicada, aún en el Black Friday.
¿Qué harás, actualizaras los componentes de tu PC o te quieres arriesgar y esperar un poco para comprar a ver si suena la flauta?
