En esta ocasión tenemos la oportunidad de analizar la Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO uno de los modelos con el nuevo chipset Navi 23 XT de mejor rendimiento. Para ello, la marca ha utilizado una configuración de frecuencias bastante agresiva con 1607 MHz en modo boost, siendo la misma que la versión ROG Strix de Asus que también hemos probado. Veremos qué tarjeta es la que mejor se comporta, pero el rendimiento va a estar muy parejo entre los distintos modelos, así que el precio y su estética serán las notas diferenciales.
Aprovechamos para agradecer a Gigabyte su confianza en nosotros por cedernos temporalmente esta tarjeta para su análisis.
Y comenzamos efectuando el Unboxing de esta Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO, que como es costumbre utilizará una doble caja para su almacenaje. El envoltorio exterior de plástico flexible cuenta con el diseño típico de la marca y las especificaciones más importantes de la tarjeta en la parte de atrás. Dentro de ésta, se encuentra la caja de cartón rígido principal, lisa y con un molde de espuma de polietileno para la máxima protección del producto.
El bundle contará con los siguientes elementos
En el apartado de diseño, esta Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO es básicamente un copia y pega de los otros modelos Gaming OC de la marca. Sus dimensiones compactas de 282 mm de largo deberían de asegurar compatibilidad con todos los chasis ATX del mercado, sin renunciar a su sistema de triple ventilador WINDFORCE 3X.
El grosor también se mantiene invariante respecto a otros modelos como la 6700 XT Gaming OC con 50 mm, consumiendo así 2,5 slots de nuestro chasis. Tendremos una oportunidad en ella para montajes verticales, aunque posiblemente los ventiladores se queden cerquita del cristal. Deslucirá un poco el hecho de no tener ningún tipo de iluminación en la zona de ventiladores, pero es algo características de Gigabyte.
Para albergar los tres ventiladores, la Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO cuenta con una caraca de plástico rígido de aproximadamente 1 a 1,5 mm de grosor, en color negro mate con detalles en gris plateado. En estos años, este mismo diseño ha ido evolucionando ligeramente, ganando en estética minimalista y afinando sus líneas con claro toque moderno. Solamente tendremos una zona de iluminación RGB Fusion 2.0 en el lateral, coincidiendo con el distintivo de la marca.
En la cara principal se aprecian múltiples líneas y formas 3D atravesando los ventiladores, junto a esos dos detalles en color gris en las esquinas. A diferencia de los modelos de gama alta como la 6800 XT por ejemplo, esta versión tiene un disipador más estrecho y sin el peculiar escalón en el lado exterior. Son líneas que nos gustan más al estar más fluidas, lo que también se aprecia en las caras laterales, con más combinación de negro y gris.
En la cara exterior se deja el disipador bastante expuesto, caso tanto como en la interior, solamente tapando el grosor que ocupan los ventiladores para hacer pasar el aire por los tres bloques aleteados. El frontal por su parte permanece tapado para asegurar el paso de aire desde abajo hacia arriba por el hueco abierto en el backplate. De una forma bastante discreta se ha colocado el único conector de alimentación de la tarjeta, a la misma altura que todo el lateral.
Damos la vuelta a la tarjeta para ver un backplate que cubre absolutamente toda la zona y que está fabricado en aluminio. Su característica más relevante es que cuenta con una gran abertura en el extremo para dejar pasar el flujo de aire que general el ventilador, maximizando el rendimiento de la unidad. El socket permanece totalmente oculto, y en su lugar tenemos algunas líneas decorativas sin mayor relevancia. En este modelo no se ha implementado Switch Dual BIOS como en los modelos de gama alta, siendo un recorte relevante.
En cuanto al sistema de ventiladores WINDFORCE 3X, contamos con 3 unidades exactamente iguales de 80 mm de diámetro colocadas linealmente. Su diseño de hélices 3D los permite trabajar a altas RPM generando poco ruido, y además lo hacen con el sistema de giro alternado con la unidad central girando en sentido opuesto. Esto asegura un flujo de aire más limpio sobre el disipador, y en consecuencia mayor rendimiento.
Gigabyte en esta generación ha estrenado la tecnología de nano lubricante de grafeno para el sistema de rotación de estos ventiladores que aumenta la vida útil de los ventiladores hasta 2,1x veces la generación anterior. No nos olvidamos de que contará con la tecnología de disipación semi-pasiva con la cual los ventiladores permanecen apagados cuando la GPU está en reposo.
De forma rápida veremos los puertos equipados en esta Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO, en donde hay presencia equitativa entre HDMI y DP con:
Que recordemos, HDMI será la interfaz de mayor ancho de banda, y la que soporta resoluciones hasta 8K @120 Hz y 4K @144 Hz sin comprimir, ideal para los nuevos monitores gaming que están apareciendo.
Como ya hemos visto, solamente tendremos una cabecera de alimentación de 8 pines, suficiente para alimentar los 160 W de TBP que especifica esta GPU. Esta cabecera cuenta con un LED indicador que se iluminará en color blanco intermitente en caso de que la entrada de alimentación no funcione de forma nominal.
Por lo demás, no tenemos demasiadas novedades al respecto, pues esta tarjeta utiliza una interfaz PCIe 4.0 con 16 carriles habilitados para la transferencia de datos. Igual que los modelos superiores es compatible con Smart Access Memory activable desde la BIOS de la placa base. El paquete de ventiladores estará conectado a una sola interfaz, así que no se podrán gestionar de forma individual.
Llegamos al momento de conocer con detalle la construcción y componentes de esta Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO, cuyas características de rendimiento serán muy similares al resto de modelos. El modelo de análisis será el de ostenta la configuración de frecuencias más agresiva, y de igual forma la PCB con mejores componentes de alimentación. El objetivo es claro, luchar contra las versiones más potentes de Asus, MSI, EVGA y todo ensamblador.
Ya desde fuera podemos ver con bastante detalle el diseño y fabricación del disipador que completa la especificación WINDOFRCE 3X de esta tarjeta. Consiste en tres bloques de aluminio con denso aleteado transversal, por donde pasará el aire a presión para enfriarlos de forma efectiva. A diferencia de los modelos de gama alta, el fabricante hace más divisiones y reduce el tamaño de los bloques claramente para ahorrar peso y material.
Desde el bloque central que actúa como cold plate partirán 5 heatpipes de cobre pulidos y de unos 5 mm de diámetro, los cuales harán contacto con el Die de la GPU a través de pasta térmica. El resto del área del bloque de aluminio hará lo propio con los chips de memoria GDDR6, enfriándolos a través de almohadillas térmicas de alto rendimiento.
Serán 4 tubos los que unan los dos bloques periféricos con el central para conformar el disipador completo, mientras que uno de ellos vuelve sobre sí mismo para meterse en el bloque central y así mejorar el reparto de calor. En uno de los bloques tendremos dos placas de aluminio encargadas de refrigerar la única zona de VRM de la tarjeta, encargándose tanto de MOSFETS como de Chokes para asegurar la máxima estabilidad bajo estrés.
Del ensamblador depende la mayor parte de los elementos de la PCB excepto el chip de GPU y las memorias. Y esta Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO cuenta con una configuración de 8 + 2 fases de alimentación, con componentes de certificación Ultra Durable y MOSFETS DrMOS. Estos cuentan con equilibrio de carga y gestión PWM digital, así como una etapa de alisado compuesta por chokes metálicos y condensadores sólidos.
Todo ello con un diseño amigable eliminando el sobrante de los conectores de soldadura para que no nos pinche en casi de que manipulemos la PCB. Algo que no haremos hasta pasado el tiempo de garantía como es normal. RDNA 2 será la arquitectura encargada de dar vida al chipset más discreto en cuanto a rendimiento de AMD, fabricando a partir de un proceso de 7 nm por TSMC para el goteo de modelos que van llegando a las tiendas.
Su premisa es clara: brindarnos el mejor rendimiento en juegos para la resolución Full HD. Y de hecho así lo demostró en nuestra primera review, y lo volveremos a verificar en esta otra para confirmar sensaciones. Cuenta con un área de 237 mm2, capaz de albergar 11,060 millones de transistores descendiendo su TBP (TGP) a 160 W también en los modelos de ensamblador. En este caso Gigabyte ha apostado por aumentar su frecuencia de stock ligeramente hasta un máximo de 2607 MHz en modo boost (2589 MHz en la tarjeta de referencia). Nosotros añadiremos un extra en el apartado de overclocking para ver hasta donde es capaz de llegar.
En el interior de esta GPU Navi 23 XT existen 32 unidades de computación (8 menos que en la 6700 XT), coincidiendo con el mismo número de núcleos de trazado de rayos al existir uno por cada UC. Las unidades de sombreado o stream processors pasan a ser un total de 2048, concretamente 64 unidades por cada UC. De esta forma alcanzamos 64 ROPs y 128 TMUs. Curiosamente el modelo RX 5600 XT de la anterior generación cuenta con más Shaders, ROPs y TMUs, aunque esta nueva generación ofrece mucho mejor rendimiento. Se demuestra por tanto el gran avance realizado en la nueva arquitectura, rindiendo hasta 1,4 veces más que el modelo precedente.
La configuración de memoria VRAM consiste en 8 GB, quedándose por debajo de su rival Nvidia RTX 3060. En compensación, AMD utiliza chips GDDR6 Samsung trabajando 2000 MHz de frecuencia de reloj, generando así una transferencia efectiva de 16 Gbps, la máxima disponible para esta arquitectura. Esta capacidad genera un bus de 128 bits, con 4 chips de 32 bits cada uno resultando en un ancho de banda de 256 GB/s. Esto sí será un pequeño hándicap respecto a sus rivales, y 192 bits creemos que hubiese sido lo ideal para ella.
No podría faltar el bloque Infinity Cache (L3), con una capacidad de 32 MB frente a los 96 MB que teníamos en la 6700 XT. El siguiente nivel L2 consistirá en 3 MB de caché unificados para el chip, L1 de 128 KB por matriz de procesamiento, y finalmente un nivel L0 de 32 KB por cada núcleo de computación. Con la tecnología AMD Smart Access Memory podremos eliminar los límites fijados por el bus PCIe y su Base Access Register (BAR) para incrementar el rendimiento de la tarjeta.
Mediante los controladores Radeon Adrenalin se introducen tecnologías por software para mejorar el rendimiento, como Radeon Boost que mejora en un 48% los FPS aplicando un 50% de Dynamic Resolution, o Radeon Anti-Lag que mejora un 13% la latencia en juegos. Destaca entre ellas la tecnología FidelityFX Super Resolution de la cual ya hemos realizado dos artículos evaluando su rendimiento, uno de ellos con esta misma 6600 XT y con la APU Ryzen 5 5600G. El trazado de rayos por hardware también es una de las grandes novedades del año para AMD, y aunque los núcleos RT de Nvidia parecen ser más potentes, ha permitido a las consolas de nueva generación y las GPU trabajar con juegos DXR.
Procedemos a analizar el rendimiento de la Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO para ver donde se sitúa en nuestra tabla de resultados. Para ello utilizaremos el banco de pruebas Intel habitual compuesto por los siguientes elementos:
|
| |
| Procesador: | |
| Placa Base: | Asus Maximus Formula XII |
| G.Skill Trident Z Royal RGB 16GB @3600 MHz | |
| Disipador | |
| Disco Duro | |
| Tarjeta Gráfica | Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO |
| Fuente de Alimentación | Cooler Master V850 Gold |
| Monitor | Viewsonic VX3211 4K mhd |
Los test se han realizado con la configuración por defecto de cada programa. Hemos ejecutado todas ellas sobre el sistema operativo Windows 10 Pro y con los drivers actualizados en sus últimas versiones.
La jugabilidad de una tarjeta gráfica podríamos valorarla en los siguientes escalones según el framerate que entregue:
| FRAMES POR SEGUNDO | |
| Frames por Segundo (FPS) | Jugabilidad |
| Menos de 30 FPS | Injugable |
| 30 ~ 40 FPS | Jugable |
| 40 ~ 60 FPS | Buena |
| Mayor de 60 FPS | Excelente |
| Mayor de 144 Hz | Realista |
Para las pruebas de benchmark utilizaremos los siguientes test sintéticos:
Veamos ahora el rendimiento en juegos de la Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO. Las pruebas las vamos a realizar a resoluciones Full HD (1920x1080p), 2K (2560 x 1440p) y 4K (3840 x 2160p) con la siguiente configuración gráfica.
También queremos ver el rendimiento con Ray Tracing en las mismas resoluciones usadas en el apartado anterior. Lo haremos con los siguientes juegos y configuraciones:
Se ha probado su rendimiento en renderizado para ver cómo afecta el aumento de frecuencia que ha hecho la marca:
Continuamos ahora con la prueba de overclocking manual en la Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO. Hemos utilizado Radeon Software. Para ver la mejora en números, hemos hecho una nueva prueba en 3DMark y Shadow of The Tomb Raider en las tres resoluciones.
| Shadow of the Tomb Rider | Stock | @ Overclock |
| 1920 x 1080 (Full HD) | 142 FPS | 149 FPS |
| 2560 x 1440 (WQHD) | 95 FPS | 100 FPS |
| 3840 x 2160 (4K) | 50 FPS | 53 FPS |
| 3DMark Fire Strike | Stock | @ Overclock |
| Graphics Score | 27650 | 28487 |
| Physics Score | 29112 | 28489 |
| Combinado | 22993 | 23277 |
Con el software de AMD hemos podido exprimir bastante esta tarjeta aplicando un aumento de frecuencia de GPU hasta 2800 MHz, en VRAM de 2120 MHz y aumentar un poco el power limit hasta el 107%. Con total estabilidad en juegos y benchmarks, hemos conseguido un aumento de 7 FPS en FHD, 5 FPS en 2K y 3 FPS en 4K con Shadow of the Tomb Raider.
Seguidamente obtendremos las cifras de temperaturas y consumo de la Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO en su frecuencia de stock. Hemos usado FurMark para el estrés, HWiNFO para ver la telemetría, y un vatímetro que mide la potencia de todo el equipo excepto el monitor. La temperatura ambiente en la habitación es de 23°C.
Temperaturas excelentes y un ligero incremento de consumo respecto a la versión de Asus, pero no hay mucho que remarcar salvo lo silenciosa que es la tarjeta. Esta generación de disipadores y ventiladores de Gigabyte funciona a las mil maravillas aunque su estética no sea una revolución.
Pues llegamos al final de este análisis con las sensaciones esperadas, es decir, nos encontramos con una tarjeta que nos ofrecerá un gran rendimiento no solo en Full HD, sino también en 2K y muchos juegos en 4K. Ciertamente la 6700 XT es más versátil, pero el descenso de precio de la 6600 XT la hace perfecta para setups gaming de nivel medio.
La frecuencia ligeramente incrementada respecto a la versión de stock se debería dejar notar. Y más con este excelente disipador de triple ventilador tan silencioso y que nos da excelentes temperaturas bajo cualquier condición. Echamos en falta la función Dual BIOS para un modo silencioso, pero siempre tendremos el software de AORUS para gestionar la potencia del conjunto desde el sistema operativo.
Aquí tienes la guía con las mejores tarjetas gráficas del mercado
En cuanto a diseño, no hay mucho que comentar, pues será un calco del resto de modelos del ensamblador, con estilo moderno, minimalista y elegante, pero menos iluminación que sus rivales. El precio de esta Gigabyte RX 6600 XT Gaming OC PRO se sitúa en aproximadamente 560 euros como el más bajo que hemos visto, pero será puro humo decir una cifra concreta al todavía existir problemas de stock.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| RENDIMIENTO ÓPTIMO EN FHD | SIN DUAL BIOS |
| BUENA CAPACIDAD TANTO EN 2K COMO 4K EN LA MAYORÍA DE JUEGOS | FALTA DE STOCK Y PRECIOS INFLADOS |
| SOLUCIONES POR SOFTWARE PARA MEJORAR RENDIMIENTO | |
| DISEÑO ELEGANTE Y BUENOS ACABADOS | |
| PCB DE CALIDAD Y COMPLETAMENTE FIABLE |
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