Los portátiles están en continua evolución, y el concepto del portatil mini está ganando adeptos por varias razones. Ya no es inútil comprar un producto de este tipo, así que te decimos por qué puede ser interesante y te desvelamos los consejos claves.
Antes, comprar un portátil mini era una pérdida de dinero y tiempo porque se quedaba obsoleto en 1-2 años. Además, venían con muy poco almacenamiento y memoria RAM, así como una pantalla mediocre. Los fabricantes han trabajado en ello y, hoy, vemos portátiles mini con un rendimiento muy bueno. Acompañadnos en este artículo para conocer las claves para elegir el mini portatil perfecto.
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El primer consejo es observar el diseño, ¿qué es un portátil mini o a qué se le puede considerar como tal? Pues bien, nosotros creemos que se trata de un equipo de no más de 13 pulgadas. De este modo, los modelos de 15.4 y 17 pulgadas serían los portátiles normales al uso, y todo lo que esté por debajo de las 15.4 pulgadas podría considerarse como tal.
Sin embargo, un portátil de 14 pulgadas (alguno hay) está en «tierra de nadie» porque 1,4 pulgadas menos tampoco es una diferencia de tamaño abismal. Sin embargo, sí que se nota el cambio de las 13 pulgadas a las 15.4, así que voy a poner como límite «13.4 pulgadas«.
Aclarada la definición de portatil mini, vayamos con el diseño del equipo. Aquí hay que hacer referencia al grosor del equipo, y es que es antiestético comprar un ordenador portátil mini que sea «gordo», pero pequeño. Lo suyo es mantener la «harmonía» en las dimensiones, por lo que lo ideal es que el equipo tenga un grosor decente.
¿Qué grosor es el recomendable? Partamos de lo más fino del mercado: el Microsoft Surface Pro X con 7.3 mm de grosor. Lógicamente, esto es una excepción, por lo que hay que encontrar un «grosor medio» que nos sirva de orientación: entre 10 y 15 mm de grosor es lo ideal.
¿Cuál es el problema de los portátiles mini con este grosor? Que su precio es elevado, a pesar de que venga con mil tecnologías interesantes. Los modelos más baratos sobrepasan por poco los 15 mm, pero podemos tranquilizaros y deciros que hasta los 20 mm es un grosor aceptable.
Con todo esto, os doy 3 consejos:
Te recomendamos la lectura de la siguiente guía rápida:
Estrechamente relacionado con el diseño, encontramos el tamaño de la pantalla y volvemos a recordar que como máximo debe ser 13.4 pulgadas. Algunos no estaréis de acuerdo conmigo y consideraréis los equipos de 14 pulgadas como mini portatil, pero es imposible estar de acuerdo en todo.
Podréis encontrar muchísimos tamaños de pantalla distintos:
¿Qué tecnologías y resoluciones nos encontramos en un ordenador portátil mini? Pues nos solemos encontrar lo siguiente:
Curiosamente, el portatil mini nos ofrece un mercado con muy buenas pantallas, pero sacrificando mucha potencia debajo del chasis. No obstante, el público objetivo de este mercado se fijará más en la pantalla que en el procesador porque ya se da por hecho que su tamaño complica las cosas.
La mayoría de opciones son procesadores x86 con gráficos integrados, destacando la abundancia de Intel Celeron o Pentium Gold. Si nos vamos a la gama alta, veremos los Intel Core de bajo consumo (U) como los de uso profesional (G).
¿Y AMD? Hay muy poca oferta de procesadores AMD Ryzen en los ordenadores portátiles mini, encontrando más Ryzen 7 4700U que Ryzen 5 o 3. Los fabricantes optan por Intel cuando se trata de gama baja, aunque AMD tiene más presencia cuando subimos a las gamas altas con los Ryzen 7. Aun así, la oferta sigue siendo baja.
Salvo casos puntuales, no veremos tarjetas gráficas dedicadas, sino procesadores con gráficos integrados (iGPU) o APU en el caso de AMD. Para los interesados en GPUs dedicadas, os recomendamos subir de tamaño porque lo máximo que veremos en 13.4 pulgadas será una GTX 1650.
Esto tiene sentido por lo siguiente:
La aparición de los SSD M.2 fue una gran noticia para este segmento porque permitía a los fabricantes dotar a sus portátiles de SSDs de gran capacidad sin recurrir a los de 2.5 pulgadas. Además, estos SSD tienen velocidades de transferencia más altas que los SSD SATA de 2.5 pulgadas.
Ya que nos ponemos a comprar un portatil mini, elegid uno que venga con SSD PCIe (con 3.0 os sobrará) y que traiga algún slot M.2 extra si puede ser para una futura ampliación. Esto último es más complicado, si no es posible acudid a mayores capacidades ( 1 TB, por ejemplo).
Pasando a la memoria RAM, la sensatez nos lleva a partir de los 8 GB por la cantidad de recursos que consumen las aplicaciones hoy día. Si podéis optar a un equipo con 16 GB perfecto; si no, podremos ampliarla en el futuro, así que sería positivo que trajese un slot extra. En caso de que no haya slot extra, no os preocupéis, siempre se puede comprar memoria de más capacidad y sustituirla.
¡Cuidado con esto!El recortar dimensiones por todos lados trae una desventaja: menos espacio para el teclado. El «as de la manga» de los fabricantes es usar la tecla FN para activar teclas que faltan, pero tened cuidado con el layout del teclado porque veremos más opciones en US o EN que en ES (que es el de España y contiene la Ñ).
Aunque no uséis la «Ñ», advierto que no solo cambia eso, sino la distribución de otras teclas como «><«, por ejemplo. Mi recomendación siempre es tener layout español porque, de lo contrario, tendremos que reasignar las teclas del teclado y es un incordio.
No solo desaparece la tecla «Ñ», el público catalán no podrá utilizar la «Ç», debiendo copiarla y pegarla cuando necesiten escribirla.
Otra de las consecuencias que encontramos en portátiles mini son menos puertos en los laterales del portátil, aunque todo se soluciona con un HUB. Eso sí, hay ciertos requisitos que debería cumplir vuestro portatil mini:
Dicho esto, con un simple HUB en un puerto USB-C se pueden conseguir extender puertos de todo tipo, incluso HDMI o RJ45 para conectarnos vía LAN.
Al menos en Europa, ASUS es la única que apuesta por un portátil mini gaming que tenga 13.4 pulgadas. En el mercado encontramos los ASUS ROG Flow X13 como el portatil mini gaming por excelencia, y curiosamente solo está disponible con AMD Ryzen 9 y Ryzen 7 5800HS.
El fabricante taiwanés tiene 2 gamas gaming de este tipo: una con una GTX 1650 y un Ryzen 9 5900HS, que son acompañados por 16 GB y 1 TB SSD; y otra con un Ryzen 9 5980HS con una GTX 1650 y RTX 3080, acompañadas de 32 GB RAM y 1 TB SSD.
No son nada baratos, pero tienen un tamaño muy compacto que puede convencer a muchos, además de dar un rendimiento espectacular.
Última actualización el 2024-11-22
Última actualización el 2024-11-22
Esperamos que os haya sido de ayuda esta información. Si tenéis alguna duda, comentad abajo y os responderemos en breve.
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