Kingston Workflow Station Review en Español (Análisis completo)

El Kingston Workflow Station es el sistema que ha creado la famosa marca para facilitar y agilizar la conexión y transferencia de ficheros de manera simultánea y a gran velocidad. Algo que siempre se agradece en nuestro actual ritmo de vida donde el tiempo es oro y todo lo que nos haga ahorrarlo, vale la pena.

Este Kingston Workflow Station viene con cuatro alojamientos para miniHubs Workflow. Se incluye de serie el módulo Workflow para conectar USB y se pueden comprar otros por separado. No es de extrañar que disponga de conexión USB 3.2 Gen 2 para lograr las mayores velocidades actuales. Veamos que tal da la talla tras unas pruebas.

Agradecemos a la famosa compañía Kingston por la cesión de este Kingston Workflow Station y el resto de dispositivos para hacer posible esta review.

Características Técnicas del Kingston Workflow Station

Unboxing

La caja del Kingston Workflow Station cuenta con un buen tamaño, más o menos del doble del producto en sí. El exterior remarca la idea de ser un producto pensado para creadores de contenido. En el frontal, junto a una vista isométrica del producto y su nombre, se muestran las palabras: Capturar, Conectar y Crear. Siendo el paso intermedio el que se ve facilitado mediante este Kingston Workflow Station.

En la parte trasera se detallan algunas características, el contenido y una imagen del Kingston Workflow Station con los diferentes módulos Workflow introducidos. Por otra parte, en la zona inferior se explica con qué módulos es compatible este producto. Además del módulo para dispositivos USB que se incluye, se puede utilizar con los módulos para tarjetas SD (WFS-SD) o para tarjetas microSD (WFS-SDC).

Esta capa exterior de la caja, se desliza hacia un lado y se descubren un diseño más centrado en imágenes que en palabras. Al abrir la caja, encontramos dos compartimentos, uno encima del otro. En el superior se sitúa el Kingston Workflow Station, el módulo Workflow USB y la guía rápida y garantía. Este módulo tiene conexión USB A y USB C.

En el otro compartimento se encuentran el adaptador de corriente. Para hacer el paquete más internacional, hay cuatro enchufes para el adaptador. Con ellos se recogen los tipos de enchufes más utilizados en el mundo, es necesario acoplar al adaptador el que necesitemos. Posteriormente es fácilmente desacoplable.

En este compartimento también se encuentra en cable USB C a USB C para conectar el Kingston Workflow Station al PC. Es un aspecto curioso, porque no todo el mundo tiene todavía PCs con puertos USB C. Así que es necesario usar otro cable que tengamos por casa en caso de no contar con ese puerto USB C.

Para poder hacer una review más completa, Kingston nos ha enviado también los otros dos módulos Workflow, el de tarjetas SD y microSD. Ambos vienen a su vez con un cable USB C a USB C no muy largo. Adicionalmente, nos han enviado una tarjeta SD Kingston Canvas React Plus con adaptador USB y una tarjeta microSD Kingston Canvas React Plus también con adaptador USB y adaptador SD.

En resumen, el contenido de la caja original es:

• Kingston Workflow Station.
• Módulo Workflow USB.
• Adaptador de corriente.
• Cuatro conectores de enchufe.
• Cable USB C a USB C.
• Guía rápida y garantía.

El contenido recibido a parte es:

• Módulo Workflow para tarjetas SD.
• Cable USB C.
• Módulo Workflow para microSD.
• Cable USB C.
• Tarjeta Kingston SD con adaptador.
• Tarjeta microSD Kingston con adaptadores.

Diseño

El Kingston Workflow Station posee una construcción maciza pese a estar fabricado exteriormente en plástico. Cierto que es un plástico rígido y de calidad. Cuenta con un factor de forma rectangular, aunque la parte superior cuenta con una inclinación que sube hasta la parte trasera.

Las dimensiones finales del dispositivo son de 160,27 x 70,27 x 55,77 mm. Unas medidas contenidas y que no nos ocupará mucho espacio en nuestra área de trabajo. El peso de 292 gramos entra dentro de lo esperado, y lo hace fácil de transportar en caso necesario.

El exterior lateral que rodea el producto es de un gris claro mate que simula al aluminio pulido. En la parte frontal está serigrafiado el logo de Kingston en negro. Los laterales están vacíos y es en la parte trasera donde se sitúan los dos conectores. En la parte trasera central, a la derecha se sitúa el conector para el adaptador de corriente. Justo a la izquierda se halla el puerto USB 3.2 Gen 2 de tipo C.

En la parte superior de color negro mate y ligeramente rugoso, se encuentran los cuatro alojamiento para los módulos Workflow. Cada uno de ellos tiene la misma forma alargada y redondeada, con el tamaño justo para que quepan los módulos. Quizás puede haber 1 mm o menos de holgura cuando se introduce un módulo. En el interior de cada alojamiento hay un conector USB 3.2 Gen 1 macho de tipo C.

La parte inferior del Kingston Workflow Station cuenta con dos almohadillas antideslizantes de goma dispuestas de manera vertical y alargada en los extremos de esta zona. En la parte central entre las almohadillas, una etiqueta detalla los datos referidos al modelo, número de serie, fabricación, certificados, etc.

El adaptador de corriente tiene un cable con cubierta negra de plástico de 1,2 metros. Una medida que no está mal, pero podría ser más larga. Sin embargo, el cable de conexión al PC apenas mide 1 metro, algo que se antoja escaso. Además del hecho comentado anteriormente de solo dotarlo de conectores USB C, algo aún no habitual en muchos PCs. Se puede usar un cable USB a USB C, pero puede no dar la máxima velocidad según su calidad y se recomienda usar el que viene de fábrica para lograr un resultado óptimo.

Los módulos Workflow tiene un diseño rectangular con los bordes laterales curvados. Están fabricados en plástico, pero su superficie es igual que el Kingston Workflow Station, simula el aluminio pulido y tienen el logo de la marca. Su tamaño es de 62,87 x 16,87 x 50 mm cada uno de ellos.

La parte trasera de estos módulos posee un puerto USB C hembra para encajar en el alojamiento del Kingston Workflow Station o para conectarle un cable directamente. Este puerto es USB C 3.2 Gen 1. La parte frontal en negro es la que cambia según si es el módulo con los puertos USB, las ranuras para tarjetas SD o para microSD. Los cables incluidos con cada módulo tienen solo 40 cm de longitud.

Pruebas de funcionamiento

El Kingston Workflow Station funciona tanto con Windows 8 y 10 como con Mac OS 10.10 o superior. Para nuestras pruebas hemos usado la aplicación Crystal Disk Mark sobre Windows 10.

Hemos realizado las pruebas con los tres módulos de los que disponemos y con las tarjetas y adaptadores USB cedidos por Kingston. La conexión se ha realizado con el cable USB C incluido. Tantos con las tarjetas conectadas directamente como con los adaptadores USB, las velocidades de escritura y lectura han superado en todos los casos los 200 Mb/s. En el caso de la tarjeta SD ha logrado siempre alcanzar o superar los 300 Mb/s.

Las temperaturas medidas se mantienen a buen nivel, llegando a unos 45 – 48 grados aproximadamente durante el traspaso de ficheros.

Si se conecta el cable directamente desde los módulos al PC, la velocidad desciende ligeramente en el caso del módulo USB hasta los 230 Mb/s. En los módulos SD conectados por cable, la velocidad desciende hasta los 35 Mb/s. No sabemos si es algo normal o tiene que ver con el software.

Si se conecta el adaptador USB con la tarjeta SD a un puerto USB 3.0, se consiguen unas velocidades cercana a los 300 Mb/s. Con la tarjeta SD directamente alojada en el slot para este tipo de tarjetas, la velocidades apenas alcanzan los 10 Mb/s.

Las velocidades con pendrives USB 3.0 también son bastante satisfactorios, logrando mediciones de más de 150 Mb/s.

En cualquier caso, es realmente interesante contar con este Kingston Workflow Station ya sea para disponer de gran cantidad de puerto y altas velocidades. Los módulos poseen la facilidad de poder transportarse por separado y conectarse a otro dispositivo.

En el caso de la conexión de los módulos Workflow en la Kingston Workflow Station, es tan fácil como encajarlos y hacer una leve presión hacia abajo. Sin embargo, el alojamiento de los módulos tiene una pequeña holgura que no le hace un gran favor al acoplamiento y a veces puede ser necesario mover un poco el módulo para que lo reconozca el sistema. Este aspecto podría haberse mejorado un poco.

Conclusión y palabras finales del Kingston Workflow Station

El Kingston Workflow Station es un producto bien pensado y diseñado para quienes estén continuamente pasando archivos o fotografías desde sus dispositivos a su ordenador o viceversa. Sus ventajas son evidentes, la conexión de los dispositivos de almacenamiento está al alcance la de la mano y accesible, no como algunos puertos USB o ranuras para tarjetas SD. Si uno tiene que moverse, puede coger el módulo y el cable y conectarlo donde se desee.

Otra de sus ventajas es la velocidad de transmisión, pero siempre y cuando se conecte el Kingston Workflow Station mediante su cable USB C a un puerto que lo soporte. Este puerto tiene el inconveniente de no estar todavía tan extendido, sobre todo en PCs de sobremesa. En portátiles si es más común ir encontrándolo desde hace unos años. Usar un cable USB a USB C puede repercutir en la velocidad.

Aunque por fortuna, el Kingston Workflow Station incluye el módulo USB con los puertos USB A y USB C, si se desea hacerse con el de tarjetas SD o microSD, hay que pagarlos aparte. Algo que puede no agradar a todo el mundo.

Lo ideal es disponer de los tres módulos para sacarle el máximo partido al producto. Lo bueno de venderse aparte es que cada uno puede comprar y acoplar los módulos que desee. Hay que tener cuidado con su uso al acoplarlos, ya que, aunque es fácil introducirlos, la holgura de los alojamientos puede dañar algún componente a largo plazo.

Echa un vistazo a los Mejores SSD del mercado

El Kingston Workflow Station consigue aportar la versatilidad que necesitan los creadores de contenido y cualquier persona que maneje trasfiriendo datos o fotografías. Su precio es de 97€, mientras que cualquiera de sus módulos Workflow sale por 27€.

La tarjeta SD Kingston Canvas React Plus SDXC de 128 GB con transferencias de hasta 300 Mb/s cuesta en torno a 102€ con el adaptador USB incluido. La tarjeta microSD del mismo tipo de 128 GB sale por 88€ con el adaptador USB y el adaptador para tarjeta SD.

El equipo de Profesional Review le otorga la Medalla de oro: