Intel ha mejorado sus iGPUs en Rocket Lake-S, así que hemos analizado la UHD Graphics 730 para ver si podéis «ir tirando» sin GPU dedicada en gaming. Veremos si puede alcanzar los 60 FPS en 1080p en los juegos mainstream.
Los gráficos integrados son una solución temporal hasta que el precio y el stock de las tarjetas gráficas vuelva a la normalidad. En concreto, hemos escogido estos UHD Graphics 730 porque vienen integrados con el Intel Core i5-11400 de Rocket Lake-S, el cual viene con 6 núcleos, 12 hilos y se sitúa por debajo de los 200€. Puede que sea una gran compra para muchos porque su rendimiento con GPU dedicada no está nada mal.
Índice de contenidos
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Ficha técnica | Intel UHD Graphics 730 |
| GPU | Rocket Lake GT1 |
| Arquitectura | Generation 12.1, 14 nm+++ |
| Núcleos | 192 |
| TMUs | 48 |
| ROPs | 24 |
| EUs | 24 |
| Frecuencia base/boost | 300/1300 MHz |
| TDP | 15 W |
| Compatibilidad con APIs | DirectX 12 (12_1) OpenGL 4.6 OpenCL 3.0 Vulkan 1.2 Shader Model 6.4 |
El protagonista de este análisis son los gráficos integrados Intel UHD Graphics 730, los cuales están equipados en solo 2 procesadores de Rocket Lake-S:
Ambos procesadores son de escritorio y pertenecen a la 11ª generación de chips, caracterizados por estar configurados por 6 núcleos y 12 hilos, que funcionan de 2.6 GHz a 4.4 GHz. Al tratarse de Intel Rocket Lake-S, tenemos una generación basada en un proceso de 14nm y compatible con el socket LGA1200. Con estos chips nos despedimos de los 14nm en escritorio, así como del socket de Comet Lake-S y Rocket Lake-S (LGA1200).
¿Desde qué punto partimos? Los Intel UHD Graphics 730 suceden a los UHD Graphics 630, los cuales venían integrados con los Intel Core i5-10400, que pertenece a Comet Lake-S. Esta CPU equipaba una GPU Coffee Lake GT2 con los mismo núcleos, pero con 24 TMUs y 3 ROPs, por no hablar de su menor frecuencia.
A priori, se nos presenta un procesador interesante por su calidad-precio, que puede darnos un rendimiento gaming curioso si decidimos equipar una GPU potente. Pero antes, veamos por qué usar una iGPU y cuál es su rendimiento.
Esta iGPU es lanzada al mercado en una situación de escasez de tarjetas gráficas grave: no hay casi stock, y los pocos modelos disponibles cuestan el doble o, incluso, más. Así que, la primera razón por la que usar iGPU es porque acceder a una GPU Ampere o RDNA 2 es casi imposible.
La segunda razón está en el presupuesto, y va relacionada con la primera: las tarjetas gráficas son los componentes más caros. Es cierto que si nos vamos a CPUs entusiastas, nos podemos ir a los 1000€, pero, ¿cuánto costará la RTX 3080 Ti o la RTX 3090? Se acercan a los 1500 e, incluso, a los 2000€ la unidad. Por tanto, no todos tienen un presupuesto holgado.
En tercer lugar, el rendimiento de las iGPUs actuales. Con el surgimiento de las APU de AMD, Intel ha trabajado más sus gráficos integrados para hacerlos competitivos. El resultado es que podemos jugar a algunos títulos en 1080p y 60 FPS, pero, ¿podrá hacerlo una UHD Graphics 730? Luego lo comprobaremos.
Por último, el tener una CPU con iGPU nos permite 2 cosas: darnos un uso versátil del PC y ahorrarnos el coste de una GPU dedicada.
A continuación, vamos a ver cómo se comportan los UHD Graphics 730 en 1080p en varios juegos. La configuración gráfica es baja, muy baja o la más baja de todas porque esta iGPU no es tan potente como una dedicada. No esperéis jugar con ninguna APU o iGPU en calidad Ultra y en 1080p, salvo que el juego sea muy antiguo.
Intel y AMD ofrecen sus gráficos integrados para dar una solución genérica: para el máximo rendimiento gaming hay que ir a una RTX 3000 o RX 6000. Hemos usado como fuente de datos 2 canales de YouTube que se centran en comparativas de benchmarks de este tipo:
Configuración gráfica:
Ajustes gráficos bajos en:
Después de ver varios benchmarks de distintos canales de YouTube, nos hemos sorprendido porque su rendimiento gaming es peor que el i5-10400. Tratándose de una CPU más nueva, el i5-11400 da peor rendimiento que el i5-10400 de Comet Lake-S, siendo parejos en otros juegos.
Decir que podemos encontrar el i5-11400 por menos de 200€, ofreciendo un gran consumo y un rendimiento bastante bueno. El Ryzen 5 3600 ofrece un rendimiento similar, pero hay que decir que no equipa iGPU, por lo que da «menos» por el mismo precio, prácticamente.
¿Qué diferencia hay entre comprar el i5-10400 vs i5-11400? Sinceramente, lo único que cambia en términos de rendimiento es la iGPU. Si te planteas acompañar este chip con una GPU dedicada, como podría ser una RTX 3070, no veremos apenas diferencia en FPS. Es más, hay varios juegos en los que el i5-10400 da 3-5 FPS más.
La única diferencia palpable es que el i5-11400 viene con PCIe 4.0, lo que puede ser interesante de cara al futuro. Sin embargo, ambos procesadores hacen uso de LGA1200, por lo que son 2 chips destinados a quedar obsoletos en menos de 1 año cuando salga Alder Lake-S y LGA1700.
¿Me compraría el i5-11400 para largo plazo? Mi opinión personal va dirigida a que esperéis a las nuevas generaciones de Intel y AMD: Alder Lake-S y Zen 4. Si os preguntáis por qué, las razones son simples:
Por tanto, mi respuesta es no: no es una buena opción a largo plazo porque LGA1200 es una plataforma que ha llegado a su fin y a finales de 2021 llegarán chips mucho más interesantes por debajo de 200€.
Analizado el rendimiento del Intel Core i5-11400 y de UHD 730, las conclusiones que extraemos son las siguientes:
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Esperamos que os haya sido de ayuda esta información. Si tenéis alguna duda, comentad abajo y os responderemos en breve. ¿Os convence su rendimiento?
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