Nvidia ha hecho una de sus revelaciones más importantes en el GTC 2021, se trata de su próxima CPU Grace basado en la tecnología ARM y que se lanzará en el año 2023.
La compañía verde no solo está enfocada en hacer GPUs, también diseña DPUs y CPUs. Nvidia hizo una revelación muy importante, que es la de su próxima arquitectura de CPUs basado en ARM llamado Grace.
Esta revelación llega luego el anuncio de la adquisición de ARM por parte de Nvidia. Al parecer, el equipo verde no va a esperar que se concrete esta adquisición para hacer anuncios sobre el ARM.
Esta es una de las primeras incursiones sería de Nvidia para diseñar una CPU propia basado en ARM. Actualmente, este chip alcanza un rendimiento en SPECrate2017_int_base de más de 300 puntos.
Nvidia asegura que su procesador Grace se centra en ofrecer un ancho de banda superior a los que ofrece AMD e Intel a través de su interconexión NVLink. Grace va a proporcionar unas velocidades de ancho de banda superiores de CPU a CPU y de CPU a GPU. Esto va a permitir acelerar las cargas de trabajo y trabajar con clusters de GPUs que aceleren datos cada vez más grandes.
La ventaja clave será NVLink, que puede ofrecer anchos de banda superiores a PCI Express. Los procesadores Grace utilizarán también las memorias LPDDR5x. En la comparativa con los sistemas GDX basados en x86, las comunicaciones entre la memoria y la GPU llega a los 2.000 GB/s frente a los 64 GB/s actuales.
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Según Nvidia, el superordenador ALPS del Centro Nacional de Computación Suizo va a ser el primero en utilizar los procesadores Grace en el año 2023 y ofrecerá un rendimiento de 20 Exaflops en el cálculo de IA.
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