Cuando queremos comprar una televisión nos surge la duda sobre qué panel debemos comprar. Por ello, os traemos la comparativa entre QLED vs OLED con el objetivo de ayudaros a elegir entre los mejores paneles del mercado.
LG trajo el OLED, mientras que Samsung intentaba darle respuesta con el QLED, pero hay grandes diferencias entre una tecnología y otra. De entrada, el nombre puede confundir al consumidor creyendo que se trata de la misma tecnología, pero lo cierto es que no tienen nada que ver. Vamos a explicar brevemente qué es cada panel y luego los compararemos para disipar vuestras dudas.
Índice de contenidos
OLED
Este panel es usado, principalmente, por LG, aunque es una tecnología que la marca coreana comparte con otras marcas como Sony, Panasonic o Philips. Realmente, nos tenemos que remontar a 2004 para ver el primer televisor OLED, el cual fue presentado por Sony.
Todavía era una tecnología que estaba «verde», pero la consolidación viene de la mano de LG en 2010 con el 15EL9500 OLED, una TV de 15 pulgadas. Sin embargo, todavía era pronto y podemos hablar del panel OLED seriamente a partir de 2013, aunque salieron al mercado con los famosos problemas de «burn-in» o quemado.
Las siglas significan Organic Light-Emitting Diode (diodo de emisor de luz orgánico) y se trata de un panel orgánico que funciona sin backlight (retroiluminación). Este sistema permite que cada píxel se ilumine individualmente, gracias a ello se consiguen los negros puros tan famosos.
El hecho de carecer de backlight es una encrucijada: el panel se sacrifica en brillo, pero en escenas oscuras la imagen es brutal. Cabe decir que el resultado es más que satisfactorio porque, de este modo, se consigue que una escena oscura sea mucho más realista. Por otro lado, podemos encontrar paneles LED que tienen más brillo que los OLED, ¿pero merece la pena? Luego, veremos que el brillo y los «nits» no lo son todo.
Además, el panel OLED se compone de carbono (de ahí que se diga que es orgánico), así como de menos capas que un panel LCD-LED convencional. Esto se traduce en un peso mucho más ligero y un grosor en la TV más reducido. Puede que esta característica no sea tan interesante para el usuario, ya que no va a mover el televisor del sitio.
Sin embargo, este panel tiene beneficios realmente buenos y de los que debemos hablar:
- Tiempo de respuesta de 0.001 ms. En lo que a televisiones se refiere, es un gran avance porque los paneles LED suelen venir con unos 8 ms fácilmente.
- Tasa de refresco mejorada. Decir que esta característica depende del televisor, pero rara vez veremos un LCD LED con 144 Hz de tasa de refresco. En OLED, LG tiene alguna opción con esta característica.
- Muy buen espacio de color. En los OLED veremos unos colores muy vivos gracias a que el panel contempla una gama de colores muy amplia.
QLED
En este caso, nos encontramos con una tecnología completamente exclusiva de Samsung, aunque podemos ver a algunas marcas utilizar paneles de este tipo, como TCL. Aparece como la alternativa al OLED, pero, ¿realmente lo será?
La marca coreana nos explica que el panel QLED está basado en los Quantum Dots, unos semiconductores ultrafinos medidos en nanómetros. Todos los Quantum Dots producen distintos colores de luz (dependiendo del tamaño de cada uno), permitiendo una emisión de luz precisa, ya que se ajustan a velocidades de nivel cuántico.
Samsung nos vende los QLED como un panel de «alta luminosidad«, refiriéndose al brillo de la pantalla. De ahí que veamos la palabra «nits» por todos lados en la publicidad de estos televisores, un aspecto en el que ganan por goleada. Y es que un brillo alto beneficia a la relación de contraste, como a las capacidades de HDR (alto rango dinámico).
Retroiluminación de Samsung QLED
¿Qué pasa con los negros? Samsung implementa Direct Full Array, un sistema de retroiluminación, y aquí nos vamos a extender más. Al contrario que los OLED, el QLED es un panel LED que necesita retroiluminación a pesar del parecido de su nombre, pero encontramos 3 sistemas principales:
- Edge LED. Es el sistema más barato y se caracteriza por poner tiras LED en los extremos del panel, pudiendo encontrar una tira o 2 tiras. La desventaja de este panel es cuando hay una escena que requiere iluminación únicamente en el centro. Como las tiras LED están en los extremos deben hacer un esfuerzo extra para que el centro se ilumine, ocasionando una iluminación poco realista. En estos paneles no existen los negros, sino los grises.
- Direct LED. En este caso, los diodos LED están en la parte trasera y vienen sin Local Dimming (tecnología que atenúa las zonas donde no se requiere luz y mejora las áreas que requieren brillo). Es otro sistema de retroiluminación barato, y su contraste suele ser bajo.
- Full Array Local Dimming (FALD). Este sistema está presente en la gama alta y se caracteriza por tener diodos LED por todo el panel, lo que conduce a un mayor consumo. Quitando eso, la iluminación de todo el panel es mucho más precisa, permitiendo unos negros más reales porque se pueden apagar zonas concretas. Es el mejor sistema de los 3, pero también el más caro.
En el caso del QLED, nos venden el Direct Full Array como solución para los negros puros, pero lo cierto es que es otro sistema de retroiluminación. El problema aquí es que debemos investigar bien el panel QLED por el que nos interesamos, ya que puede ser Edge LED o FALD.
Dicho esto, puede que encontremos paneles IPS más interesantes que los QLED porque tengan retroiluminación FALD, a pesar de que no equipen los Quantum Dots tan famosos. Para que entendáis todo este «lío» de la retroiluminación, adjuntamos varias fotos para que veáis las diferencias.
- Dos televisiones Samsung. A la izquierda tenemos una Samsung KS9590 con backlight Direct LED, mientras que la de la derecha es una Q9 QLED Edge LED. Al final, marca la diferencia tener Direct LED frente a Edge LED, aunque no todos los QLED sean Edge Led (que este sí lo es).
- Sony FALD vs Samsung QLED Edge LED.
¿Esto quiere decir que evitemos los QLED porque son Edge LED? En absoluto, hay que mirar bien el modelo concreto. En la actualidad, encontramos televisores QLED con retroiluminación FALD, una grandísima combinación bajo mi punto de vista. A modo de ejemplo, encontramos estos modelos:
- Samsung Q950R.
Última actualización el 2024-11-21
- Samsung Q85R.
- Samsung Q70R.
- Samsung Q80T.
¿Cómo saber si el backlight es FALD, Edge o Direct? Para no volveros locos, os recomendamos el comparador de TVs de Kitele para poder filtrar las características del panel a vuestro antojo.
OLED vs QLED, ¿qué panel es el mejor?
Presentados los contrincantes, es hora de evaluar qué panel es el mejor en términos de calidad de imagen, así como en términos de versatilidad o practicidad. Dependiendo de nuestras necesidades, puede ser más interesante un QLED vs un OLED. Así que, vamos a enfrentar a ambos en distintas categorías.
Negros puros: gana OLED
Los negros puros es el aspecto más perseguido por muchísimos usuarios a la hora de comprar un televisor. Si para ti es vital este punto, debemos decirte que los únicos paneles del mercado en ofrecer un negro 100%, son los OLED. Y es que la independencia de cada píxel hace posible este resultado, así como no necesitar retroiluminación.
El QLED al final es un panel LED «mejorado» con los Quantum Dots, pero sigue necesitando retroiluminación. El hecho de que un OLED tenga píxeles que se apagan por completo trae como consecuencia que se logre un negro puro.
Dicho esto, hay que decir que el nivel de negros de los QLED de gama alta está muy conseguido y es realmente bueno.
Color o espectro de color
Aquí tenemos que matizar un poco porque no todos los QLED son iguales, pero, igualmente, el backlight produce contaminación lumínica. Como los OLED no tienen, consiguen unos colores ricos, saturados y percibimos una imagen más realista. Sin embargo, hay otros paneles que vienen con muy buenos espectros de color (DCI-P3, RGB, BT.2020, etc.).
Así que, depende del panel, pero la balanza se inclina hacia el OLED vs el QLED.
Brillo: gana QLED
En los paneles Samsung disfrutaremos de mayor brillo que en los paneles OLED de LG, Sony, Panasonic o Philips, pero, ¿esto lo es todo? Es cierto que el OLED tiene menos brillo (normalmente) que los QLED porque Samsung ha potenciado mucho este aspecto, lo que le da ventaja.
No obstante, tenemos que recordaros que el brillo es una característica más de un panel, no es determinante. De nada nos sirve tener 700 nits, si el sistema de retroiluminación es Edge LED, por ejemplo.
Sin embargo, las diferencias de brillo se notan bastante si alguna luz refleja en el televisor, momento en el que preferiremos un QLED vs un OLED.
Ángulos de visión: gana OLED
Este tema es importante porque rara vez estaremos alineados de forma perfecta con el televisor, sino que éste suele estar más alto que el sofá. En este sentido, importa saber qué panel se ve mejor cuando estamos a cierto ángulo de visión.
El panel que mejor ángulos muestra es el OLED, costándonos apreciar un deterioro en la imagen cuando nos agachamos o nos ponemos a los costados del panel. Sin duda, la hegemonía de OLED es brutal en este aspecto.
Retención de imágenes y quemados: gana QLED
Gana QLED, pero no penséis que los paneles QLED no se queman; otro tema distinto es que sea más complicado quemarlos. Igualmente, queremos advertir que no es lo mismo la retención de imágenes que los quemados:
- Retención de imagenes: se muestra de forma temporal, disipándose con el paso del tiempo.
- Quemado: es permanente e irreversible.
En un principio (2013, aprox), los OLED se quemaban mucho y daban muchos problemas, cosa que ya no es así. Los OLED han mejorado mucho en este aspecto, pero el riesgo sigue existiendo, y es mayor que en los QLED.
Precio y variedad: depende del modelo
Hace unos años, el OLED era inaccesible, teniendo que irnos a los 2000€ para disfrutar de un televisor con este panel. En el caso del QLED, encontramos distintas gamas dentro de Samsung que hay que diferenciar correctamente.
Un buen QLED FALD suele costar alrededor de 1000€ , por lo que nos vamos metiendo en gama alta si querernos compararnos con OLED. Por otro lado, encontramos QLED que son Edge LED, viendo modelos que varían bastante de precio: desde 500€ hasta casi 2000€. Sin duda, esto es una mala compra y ni se acercan a la calidad de OLED.
Si comparamos un OLED vs un QLED como tiene que ser, veamos qué encontramos en 55 y 65 pulgadas (tamaño estándar):
- Samsung Q90R 55″: alrededor de 1500€.
Última actualización el 2024-11-21
- Samsung Q80T 65″: entre 1100€ y 1300€.
Última actualización el 2024-11-21
- Philips OLED804 55″: alrededor de 1300€.
Última actualización el 2024-08-16
- LG BX6LB 55″: entre de 1000€ y 1600€ (depende de dónde compréis).
Última actualización el 2024-11-21
- LG BX6LB 65″: alrededor de 1500€.
- Sony A8 65″: alrededor de 1900€.
Tras este vistazo rápido al mercado, en 55″ me quedaría con un panel OLED vs QLED, pero en 65 pulgadas me lo pensaría más, ya que hay 200€ de diferencia o, incluso, más. De ahí que digamos que «depende del modelo». A la hora de escoger modelos con panel OLED, hemos tenido en cuenta que fuesen lanzamientos más o menos recientes, ya que aquí sí que se nota la evolución de 2017 a 2020.
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Esperamos que os haya sido de ayuda esta información. Si tenéis alguna duda, podéis comentar abajo y las responderemos encantados. ¿Cuál es el ganador para vosotros?