Redmi Note 10 Pro Review en Español (Análisis completo)

En un par de días se pone a la venta el Redmi Note 10 Pro, el nuevo smartphone de Xiaomi que sigue la estela numerada de sus predecesores. En esta ocasión, aunque encontramos similitudes con el modelo Pro anterior en lo que respecta a tamaño de pantalla, resolución y batería, casi todo lo demás ha sufrido cambios en mayor o menor medidas.

Nos encontraremos con un tipo de pantalla diferente a la que se le añade una tasa de refresco de 120 Hz, un mejor procesador y un sensor principal que aumenta enormemente su cantidad de megapíxeles. En otros aspectos como el diseño, también vemos cierta renovación general en su estilo que le sientan realmente bien, aunque otras decisiones en torno a su diseño son más cuestionables.

¡Veamos qué tal se desenvuelve y se siente durante un testeo y uso prolongado!

Características técnicas Redmi Note 10 Pro

Unboxing

La caja del Redmi Note 10 Pro cuenta con un diseño sencillo y minimalista en el que predomina el color blanco. Las únicas notas de color se presentan en el frontal con unas imágenes del terminal. El resto del exterior de la caja está salpicado con el nombre del modelo y algunos datos sobre este. Una vez abierta la caja, el interior muestra una sencilla y muy usual disposición de los diferentes elementos.

La única sorpresa, que siempre es bienvenida y no siempre se incluye, es una funda de gel, para ya desde el primer día tener una protección extra. Se le puede comprar una funda mejor, pero ésta ya de por si ofrece una buena protección en algunos puntos, como en la cámara, que como luego veremos, necesita de ello. A destacar también la inclusión de un protector de pantalla ya colocado y que apenas se nota.

En resumidas cuentas, dentro de la caja encontramos:

• Redmi Note 10 Pro.
• Funda de gel transparente.
• Adaptador de corriente.
• Cable de carga USB a microUSB C.
• Extractor de bandeja SIM.
• Guía de usuario.
• Hoja de garantía.

Diseño a lo grande

El Redmi Note 10 Pro cuenta, a diferencia de su predecesor, con un estilo que ha reducido su curvatura en todos sus bordes laterales. Su diseño en los laterales es más rectilíneo y en los bordes superior e inferior apenas se aprecia una mínima curva hacia su parte trasera. Los laterales a cada lado si se unen hacia la parte trasera con una suave curva que ofrecen una muy buena sensación al tacto. Esto, junto al poco grosor del dispositivo, hace que, aunque el agarre sea bueno, muchas veces parezca que se va a resbalar de las manos en cualquier momento. Sensación que se puede paliar si se usa la previamente mencionada funda.

El material usado en los laterales sigue siendo el plástico, un material muy socorrido por Xiaomi, y que en esta gama media suele dar buen resultado. La parte trasera, por su parte está construida en cristal, ofreciendo una sensación en mano muy satisfactoria, pero corre un alto riesgo de quebrarse frente a caídas o golpes. Este cristal ha sido recubierto mediante la tecnología P2i Nano coating con un revestimiento a prueba de líquidos y cuenta con la certificación IP53, lo que nos ofrece una protección frente a partículas de líquidos y polvo, pero no a una inmersión completa del termina bajo agua.

Gracias a su pantalla de 6,67 pulgadas nos encontramos ante un terminal de unas dimensiones considerables, pero a la que muchos de los mortales nos estamos acostumbrados. Cada vez es más dificil ver terminales pequeños. Concretamente este Redmi Note 10 Pro cuenta con 76.5 x 164 x 8.1 mm. Unas medidas que hacen complicado su uso a una sola mano para llegar a algunos puntos. Incluso con manos grandes, la solución en multitud de ocasiones será usar ambas manos. El peso de 193 gramos, aunque elevado, no se hace notar tanto y cuando uno se acostumbra resulta incluso ligero.

Continuando con el frontal de Redmi Note 10 Pro, éste posee unas esquinas redondeadas que engloban la pantalla con una superficie útil del 85%, ello nos deja en torno a 3 milímetros de marco en casi todos los lados de la pantalla, a excepción del marco inferior que cuenta con 5 milímetros. Sigue estando de moda el paso del notch al agujerito en la parte superior de la pantalla, en esta ocasión en lugar de en un lateral, se mantiene centrado en la parte superior de la pantalla, igual que con el Redmi Note 9 Pro y al ser tan pequeño, apenas molesta. Esta parte frontal está protegida frente a arañazos con Gorilla Glass 5.

La parte trasera de cristal está disponible en 3 colores de estilo aluminizado que varían según la incidencia de la luz: Dark Night como nuestro modelo que es como gris, Bronce o Glacial Blue que es similar a un azul muy clarito. Estos colores le dan un aspecto bastante elegante al Redmi Note 10 Pro, pero su fabricación en cristal hace que las huellas se marquen con facilidad.

En esta parte trasera, a excepción del nombre de la marca serigrafiado, solo encontramos el módulo de cámaras traseras. Este módulo posee la desventaja de contar con dos niveles. En el primer nivel se ubica el flash LED y el dual LED, mientras que en el segundo es donde se hallan los 4 sensores con los que dispone este Redmi Note 10 Pro, entre ellos el principal con unos sorprendentes 108 megapíxeles. Los otros tres son los encargados de proporcionar una gran angular, profundidad y modo macro.

Pese a la buena predisposición a usar más y mejores cámaras, ese módulo de doble nivel posee el inconveniente de no mantener el teléfono estable en superficies plana y a su vez consigue que sea una parte que puede recibir mayor daño al estar más expuesta. Una funda puede minimizar ambos problemas, pero llegamos a la cuestión de hasta que punto es necesario añadir tal montículo para hacer fotos. Al final es algo personal y habrá quien se decante por una mayor calidad de fotos a la hora de sacrificar diseño o quienes piensen todo lo contrario. En mi caso particular, prefiero perder alguna función o tantos megapíxeles y ganar en diseño.

Como se ha podido ver, el sensor de reconocimiento de huellas dactilares brilla por su ausencia en la parte trasera. En su lugar se ha recolocado en el borde lateral derecho, como parte del botón de encendido y apagado. Una medida tomada quizás para redistribuir mejor el espacio que ocupa la batería de mayor capacidad. Sin embargo, colocar el sensor de huellas en el botón de encendido sigue pareciendo una opción más incomoda o menos natural a la ya habitual en la parte trasera. Como también ocurre con muchas cosas, es cuestión de acostumbrarse. Justo encima del botón de encendido y apagado, encontramos el típico botón de volumen conformado en una sola pieza.

Mientras que en el borde lateral izquierdo únicamente encontramos el alojamiento para la bandeja de doble tarjeta nanoSIM y una tarjeta microSD; en el borde superior se sitúan el sensor de infrarrojos que sigue incorporando Xiaomi en todos sus terminales, el micrófono para cancelación de ruido, un altavoz para reproducir contenido multimedia y, por fortuna para muchos, el Jack de 3.5 mm se sigue conservando. Para finalizar, el borde inferior aloja el micrófono para llamadas, el conector de carga microUSB tipo C y el altavoz multimedia.  El altavoz para llamadas se encuentra justo en la arista del borde superior. En este aspecto, vemos un estilo muy continuista en la línea de los terminales previos de la compañía.

En términos generales, el Redmi Note 10 Pro posee un diseño que no innova en nada pero que ofrece un producto que se siente bien en la mano y únicamente rompe la estética su módulo de cámaras.

Un cambio de dirección en la tecnología de Pantalla

Adiós a las pantallas IPS y bienvenido al Super Amoled. Es lo que pensó la marca al crear este terminal. Una tecnología que como muchos sabemos, ofrece un mayor contraste y calidad de negro, y a su vez, un menor consumo energético. Además del tipo de pantalla y la diagonal de 6,67 pulgadas. Es necesario saber que el Redmi Note 10 Pro dispone de una resolución FHD + de 2400 x 1080 píxeles, lo que da una densidad de 395 píxeles por pulgada, una densidad alta pero ligeramente inferior a otros modelos al mantener la resolución mientras se aumenta la diagonal de la pantalla.

Otro aspecto a tener en cuenta es la relación de aspecto de la pantalla, mientras hace poco tiempo el estándar se mantuvo en 18:9, el doble de larga que ancha, en este caso la pantalla se alarga aún más, manteniendo una relación de aspecto de 20:9. Un estiramiento de la pantalla, que puede venir bien para ver más información en páginas web, en redes sociales u otras apps pero que puede no venir tan bien para videos o juegos que no estén preparados.

Tal y como comentaba previamente, nos encontramos frente a una pantalla que en primera instancia se ve realmente bien, con unos colores cálidos y saturados, que siempre han gustado a unos y han sido odiados por otro. En líneas generales, el mayor contraste de 4500000:1 no le sienta nada mal al contenido del Redmi Note 10 Pro y los negros puros son un aliciente al reproducir vídeos. Sin embargo, una de las pocas pegas de la tecnología Amoled siempre ha sido la pequeña perdida de definición que posee, aunque es solo perceptible si se compara junto a un panel IPS.

Pese a que se incluyen características significativas ya vista usualmente, como el uso del espacio de color ampliado DCI-P3, la utilización del estándar HDR10 para visualizar contenido con alto rango dinámico o la certificación TÜV Rheinland que asegura que la pantalla mitiga la fatiga visual; una de las características más llamativas de este Redmi Note 10 Pro y que tampoco es algo que no se haya visto antes, es la posibilidad de aumentar la tasa de refresco de la pantalla hasta los 120 Hz. Esa posibilidad de aumentar las veces que se refresca la imagen por segundo es lo que permite disfrutar de unas animaciones realmente fluidas cuando uno se mueve por el sistema MIUI. Una opción que al igual que la Realidad virtual, es algo que uno debe experimentar y difícilmente se puede explicar con palabras. Como contrapartida, el uso de esta opción, drena la batería más rápidamente.

Hace tiempo que los ángulos de visión son un problema más del pasado que de las pantallas actuales. En este caso, la calidad de imagen sigue siendo buena desde cualquier ángulo desde el que se mire.

El brillo es un aspecto que me ha sorprendido para bien, me esperaba algo similar a otros modelos de gama media de la compañía, y he encontrado que el brillo máximo está algunos puntos por encima, en torno a 550 o 600 nits. Con el modo Diurno activado y en ocasiones de luz muy intensa, el software puede llegar a incrementar los nits a 700. Algo alejado de los 1200 nits que se anuncian y que se consiguen midiendo una minúscula parte de la pantalla en un momento de brillo máximo.

Las opciones de pantalla son las comunes en sistemas MIUI. Podemos encontrar el ya famoso Modo oscuro cada vez más frecuente y que se puede programar para reducir la fatiga visual o ahorrar batería, sobre todo en una pantalla Amoled de este tipo. Otra opción permite programar además el brillo tanto para momentos Diurnos como para Nocturnos. El Modo lectura reduce la dañina luz azul y también permite programar horarios como en las opciones anteriores. Con el esquema de colores es posible ajustar el contraste y temperatura de los colores. La opción de aumentar la tasa de refresco viene por defecto a 60 Hz, para quienes quieran disfrutar de los 120 Hz, deberán activarla aquí.

Hay otras opciones menores y menos importantes, pero es necesario destacar una opción no disponible en otros modelos de la marca y es la de Pantalla siempre activa. Una opción que permite mostrar diferentes mensajes, dibujos o relojes mientras la pantalla está apagada en reposo. Algo similar a Samsung con su Always On. Una opción disponible solo en este modelo justamente por el ahorro de este tipo de pantallas al mantener apagados los píxeles negros.

Añadiendo sonido estéreo a los Redmi

Las compañías les añaden altavoces a los smartphones porque es necesario tener un medio por el cual reproducir los tonos de llamadas y porque en estos últimos 20 años han servido además para reproducir música o videos. Así que muchas compañías simplemente ponen un altavoz y se acabó, aunque estos últimos años esa tendencia a no hacer tanto caso al sonido móvil ha disminuido. Es por ello, que en el caso del Redmi Note 10 Pro, es una sorpresa descubrir que se le ha añadido un segundo altavoz multimedia en el borde superior al igual que ha hecho ya la compañía con otros modelos propios de gama alta. Y hay que reconocer, que todo lo que sea estéreo casi siempre se va a escuchar mejor, si la calidad del sonido acompaña, claro está.

La calidad dada por estos altavoces es bastante buena, aunque no llega a ser excelente. Ofrece un sonido equilibrado en sus diferentes frecuencias, siendo las más altas y sobre todo las bajas las que cojean un poco. La potencia ofrecida al nivel máximo de volumen es realmente alto, pero cuando se incrementa tanto se produce una leve distorsión por lo que es recomendable reducir algo el volumen. Se gana claridad y se sigue manteniendo un buen volumen.

El uso de auriculares consigue incluso mejorar la calidad del sonido emitido, si se usan unos buenos auriculares, y permite acceder a unos ajustes extras en opciones, que nos pueden brindar algunas mejoras de sonido o hacer uso del ecualizador. Por defecto, con los altavoces solo se permite acceder a cuatro ajustes preestablecidos: Inteligente, música, video y Voz.

Un pasito más hacia el aumento del Rendimiento

Xiaomi ha dado un pasito más y con el Redmi Note 10 Pro han decidido montar el Snapdragon 732G Octa-Core con 2 núcleos Kryo 470 a 2.3GHz y 6 núcleos Kryo 470 a 1.8 GHz junto con una GPU Adreno 618,  6 u 8 GB de memoria RAM LPDDR4X y 64 o 128 GB de memoria interna de tipo UFS 2.2.

Nos encontramos ante un SoC ya usado por Xiaomi en alguno modelo anterior y que rinde bastante bien dentro de la gama media. Por lo que ningún usuario medio echará en falta mayor potencia. Moverse por los diferentes menús del sistema es fluido y no hemos notado ralentización ni cuelgues del sistema. Para darle más caña hemos estado probando algunas de las apps y juegos que consumen más recursos y tampoco hemos notado bajada de frames o ralentización evidente. Quizás algo esporádico en un momento puntual. Llegamos a un punto en que la gama media va ya incluso por delante de muchas apps del mercado. AnTuTu arroja un resultado de 289814 con nuestro modelo de 6 GB de RAM y 128 GB de memoria interna. Un resultado que no está mal, pero lo sitúa por debajo de otros smartphones como el Redmi Note 8 Pro, el Realme 6 o el LG G7.

Algunos smartphones más potentes pecan al sobrecalentarse mucho por la parte trasera, en el Redmi Note 10 Pro se ha notado un leve calentamiento y porque lo buscábamos. En condiciones normales es inapreciable.

El rendimiento del reconocimiento de huellas dactilares para desbloquear el terminal hay que decir que es bastante bueno y rápido, casi igual que el de un sensor colocado en la parte trasera. ¿Cuál es la diferencia? Personalmente pienso que su disposición en el botón de encendido lo hace más complicado de usar. A veces cuesta atinar rápidamente con el botón, aunque hay que reconocer que con la funda puesta ese proceso de encontrar el botón es más sencillo. Una vez uno se acostumbra el desbloqueo puede llegar a ser rápido.

En contraposición, el desbloqueo mediante reconocimiento facial funciona bastante bien y reconoce rápido las facciones. El único pero son la necesidad de encender primero la pantalla y que no funciona con gafas de sol, algo que si consiguen otros sistemas de reconocimiento facial. Sin embargo, en la oscuridad y con el brillo alto, sigue siendo capaz de reconocer rápidamente la cara con la luz que emite la pantalla.

MIUI 12

No hay mucha sorpresa al decir que el Redmi Note 10 Pro viene de serie con Android 11 bajo MIUI 12, la capa de personalización propia de Xiaomi. La última actualización disponible hoy por hoy es la MIUI 12.0.3, aunque es de esperar que en cuanto salga la siguiente gran actualización 12.5, también sea uno de los elegidos.

Tras las últimas actualizaciones el sistema se ve más sencillo y minimalista, a la vez que se facilita el acceder o entender determinados atajos. De igual manera, las animaciones se han visto mejoradas y el conjunto cumple perfectamente.

La caja del Redmi Note 10 Pro presume de disponer de fácil acceso a las aplicaciones de Google más usadas. El problema es que no mienten, pero se siguen incluyendo las aplicaciones propias de Xiaomi. Al final encontramos un batiburrillo de aplicaciones, muchas de ellas repetidas, una de cada compañía. Lo fácil sería poder elegir una y borrar la otra, pero mientras que con las de Google se puede, con las de Xiaomi no al menos que se usen métodos menos ortodoxos.

Por otra parte, moverse por los diferentes menús del sistema con la tasa de refresco a 120 Hz es una verdadera delicia. Es un aliciente que ayuda sobremanera a MIUI y que hace que volver a los 60 Hz de otros terminales sea difícil.

Como es normal, esta versión de MIUI no ha añadido o cambiado muchas cosas. Casi los únicos cambios en ajustes son los que afectan a la pantalla, ya sea por su tasa refresco o su paso a la tecnología Amoled. Entre los ajustes que se mantienen podemos encontrar el uso de tarjeta dual, la posibilidad de compartir nuestra pantalla, se puede configurar de múltiples maneras las notificaciones y el centro de control, incluso dando la posibilidad de mantener un estilo MIUI o el de Android estándar. Otros ajustes permiten modificar totalmente la pantalla de inicio, usar una bola flotante para notificaciones, usar el modo a una mano, usar gestos, pasar al modo Lite o simplificado, crear un segundo espacio o usar el Game Turbo para optimizar la experiencia en los juegos.

Cuatro cámaras y 108 megapíxeles

Uno de los temas que más ha dado que hablar de este Redmi Note 10 Pro es su cámara principal y no precisamente por el grosor que ocupa su módulo trasero sino por los 108 megapíxeles que incorpora. Aunque como ya se viene diciendo desde hace años, más megapíxeles no tienen porque venir unidos a una mayor calidad, pero las empresas siguen usando esos números como forma de promocionar sus productos. Echemos un ojo a cada sensor y vayamos desgranando que tal van.

El sensor principal de 108 megapíxeles es un Samsung S5KHM2 de tipo ISOCELL con un tamaño de sensor de 1/52, un tamaño de pixel de 0.7 micras y una lente de 6 elementos con una apertura focal de 1.9.

La cámara gran angular de 8 megapíxeles y un campo de visión de 118º usa un sensor Sony IMX355 de tipo CMOS BSI tiene un tamaño de sensor 1/2.8, un tamaño de pixel de 1.14 micras y una apertura focal de 2.2.

La cámara de profundidad posee 2 megapíxeles y usa un sensor Galaxy Core GC2M1 de tipo CMOS con un tamaño de pixel 1.75 micras y una apertura focal de 2.4.

La cámara telemacro de 5 megapíxeles usa un sensor Omnivision OV5675 de tipo CMOS con tamaño 1/5, tamaño de pixel 1.12 micras y apertura focal 2.4.

La cámara principal en principio no hace uso de las capturas a 108 al menos que se seleccione. Por defecto las toma con 12 megapíxeles. Las imágenes tomadas con la cámara principal y su resolución por defecto a plena luz del día cuentan con un gran nivel de detalle, a la vez que mantiene unos colores fieles y naturales. El contraste es consistente y no se aprecia ruido en demasía. Sin necesidad de activar el HDR, el contraste dinámico es bastante bueno, sin llegar a ser sobresaliente. En algunos pocos casos, cuando el rango no es tan bueno y salta el HDR automático o podemos activarlo manualmente si lo vemos conveniente.

En escenas nocturnas los colores suelen ser bastante fidedignos y no aparecen sobresaturados. Las fotos poseen una buena iluminación y aunque pese a todo es inevitable encontrar ruido en la imagen se consigue cierto nivel de detalle. Para conseguir buenas fotografías es importante tener cuidado al disparar, sin movimientos bruscos. La velocidad de obturación de noche puede provocar imágenes borrosas. Haciendo uso del Modo Nocturno, es necesario mantener el Redmi Note 10 Pro un par de segundos estable, pero se consiguen unas imágenes más limpias.

Si decidimos usar el modo de 108 megapíxeles, lograremos unas fotografías con mayor nitidez de conjunto, pero se aprecia una falta de definición en otros aspectos como los edificios y la aparición de artefactos en la imagen. En general estas tomas no ofrecen un resultado tan impresionante como se esperaba, los colores y el contraste son bastante similares al de las fotografías que se toman por defecto, aunque se muestra una leve decoloración en la captura final. Es posible que una futura optimización mejore el resultado de estas fotos.

Por muchas cámaras de las que disponga el Redmi Note 10 Pro, la gran ausente es la de teleobjetivo. En su lugar se aprovecha el sensor de la cámara principal y sus 108 megapíxeles para hacer un recorte de la imagen y luego reescalarla, pero ocurre lo mismo de siempre con los zooms digitales, que no ofrecen la calidad mínima deseada.

Al igual que el sensor principal, la cámara de gran angular captura una gran cantidad de detalles, unos colores no tan buenos pero que siguen siendo precisos y un buen rango dinámico. Tampoco se aprecia en tomas diurnas demasiado ruido. Es en fotografías nocturnas donde aparece bastante ruido y se echa en falta algo más de iluminación en las imágenes tomadas, que se ven ensombrecidas. Los colores pierden algo de fuelle y el detalle es más que correcto. El mayor problema de estas cámaras de tipo ojo de pez, es que al tener que abarcar tanta imagen sufren distorsión en los bordes y esquinas que se intenta paliar mediante software. En el Redmi Note 10 Pro las capturas tomadas con gran angular muestran una corrección de distorsión bien solucionada y unas esquinas que se ven levemente borrosas.

La cámara de profundidad para fotografías en modo retrato crean un efecto Bokeh o efecto desenfoque realmente bueno. Distinguiendo con eficacia entre persona y fondo, aunque en ocasiones comete algún que otro pequeño fallo. El resto de aspectos como el color y los detalles son igual de buenos que la cámara principal, al usarse esta en conjunción con la de profundidad para las capturas. En escenas nocturnas el resultado casi nunca acaba saliendo del todo bien, pero se puede intentar según la luz en ese momento.

La cámara telemacro para capturar detalles u objetos cercanos, crea unas fotografías que poseen una gran definición y unos colores bastante vívidos. Como contrapartida, aparece un poco de ruido en la imagen y el contraste no es tan bueno como en las otras cámaras.

El Redmi Note 10 Pro puede grabar vídeos con la cámara principal de hasta 4K a 30 fps, si se reduce la resolución a 1080p, puede grabar a 60 fps. Con las otras dos cámaras, la macro y gran angular, la salida de vídeo máxima es de 1080p a 30 fps.

Los vídeos realizados con la cámara principal a 4K y en escenas diurnas ofrecen unos colores y un contraste realmente naturales. La definición y el nivel de detalle también rayan a un gran nivel. Se aprecia además que la grabación esta exenta de mucho ruido y el movimiento de cámara es suave. Se puede hacer uso de la estabilización óptica pero limitando la grabación final a 1080p y 30 fps.

La grabación de vídeo de noche mantiene un nivel aceptable de colores y contraste, a la vez que no se pierde mucha calidad en los detalles. En estos casos, el ruido en la imagen se acentúa pero no de forma exagerada.La cámara frontal para selfies de 16 megapíxeles posee un sensor Sony IMX471 Exmor RS de tipo CMOS con un tamaño de sensor 1/3, un tamaño de pixel de 1 micra y una apertura focal de 2.45.

Esta cámara ofrece unas imágenes bien con un muy buen contraste, unos colores buenos que son bastante fidedignos y una definición muy competente pero sin alardes. Si se usa el modo retrato, la cámara realiza un buen trabajo aislando al sujeto del fondo y se consigue un efecto desenfoque bastante conseguido.

La app de la cámara mantiene el diseño visto anteriormente en otros modelos con MIUI 12. Una vez dentro y en modo foto, podremos seleccionar a izquierda y derecha otros modos como el Pro, Vídeo, Retrato y Más. En este último se encuentran muchas funciones extras como el modo a 108 megapíxeles, video corto, cámara lenta, exposición prolongada, time-lapse o clonación, entre otras.

Mientras que el Modo foto cuenta en el Redmi Note 10 Pro con una barra extra para hacer uso del zoom digital, en el Modo PRO se ha implementado entre los ajustes de los diferentes valores, la opción de elegir la cámara a usar.

En la parte superior de la app se sitúan los ajustes rápidos más habituales: flash, HDR, IA, filtros, Google lens y la pestaña para ajustes avanzados. Mientras que en la parte inferior, además de la opción de disparo, tenemos la opción de cambiar a la cámara frontal y de ver las últimas fotos realizadas. La interfaz sigue siendo sencilla e intuitiva, y cuenta con los suficientes efectos y opciones para la mayoría de situaciones.

Gran batería, gran autonomía

Uno de los aspectos más interesantes del Redmi Note 10 Pro, al igual que ocurría con su predecesor, es la capacidad de su batería que alcanza los 5020 mAh. Una capacidad que suele verse en modelos minoritarios y con características más bajas. Es un elemento que no suelen tener tan presente algunas marcas y que mucha gente piensa que es uno de los elementos primordiales. En nuestras pruebas con la tasa de refresco a 120 Hz y haciendo un uso normal con redes sociales, navegación web y reproducción de contenido multimedia esporádica la autonomía ha sido de 26 horas con 7 horas y media de pantalla. Las pruebas con la tasa de refresco a los 60 Hz por defecto dieron algunas horas más, exactamente 32 horas totales y 9 de pantalla. Una diferencia importante pero no tanto como esperábamos. Sin embargo, ambas autonomías arrojan unos datos realmente buenos teniendo en cuenta las características del Redmi Note 10 Pro. Sorprende, sobre todo, la duración con los 120 Hz, ya que su uso no penaliza tanto como se esperaba, por lo menos al principio. Con más meses de uso, habría que ver que tal se sigue comportando.

Con tanta capacidad, es necesario un buen cargador de carga rápida. El que se incluye ofrece una carga de hasta 33 vatios que es lo que puede soportar el Redmi Note 10 Pro. Este nos ha proporcionado la mitad de la carga de la batería en media hora y una carga completa en torno a una hora y media. Un buen tiempo, teniendo en cuenta su gran capacidad.

Conectividad casi al día

El Redmi Note 10 Pro cuenta con múltiples conexiones, entre ellas:  Bluetooth 5.0 LE, Wi-Fi a/b/g/n/5GHz/ac, Wi-Fi Direct, GPS, A-GPS, GLONASS, Galileo, NFC, Infrarrojos, VoLTE, Jack de 3.5 mm y radio FM.

La mayoría de las funciones ya son comunes a prácticamente cualquier smartphone que se precie. El Redmi Note 10 Pro posee eso y algunas que la gente teme perder como el Jack de audio, la radio o los infrarrojos. Sin embargo, la única característica ausente y que le falta para estar completo es la falta de banda 5G. Es la conexión de datos por excelencia de este y los próximos años y cada vez más operadoras lo incluyen. Se puede sobrevivir sin ello si a uno no le importa la velocidad de conexión, pero es una ausencia importante que se ha visto condicionada por usar el Snapdragon 732G que no lo soporta.

Conclusión y palabras finales del Redmi Note 10 Pro

Como es norma de la cada, Xiaomi vuelve a ofrecer un terminal en relación calidad y precio realmente bueno. Es verdad que hace años era el rey y cada vez tiene más competencia, quizás por ello saque tantos terminales sin ton ni son. Quiere abarcar lo más que pueda y por el camino termina confundiendo a sus clientes. En esta ocasión han sido más conservadores y han sacado un modelo que mejora ciertos aspectos de su predecesor mientras mantiene otros que ya eran buenos.

Hay que destacar lo bien que le ha sentado y se ve la nueva pantalla Super AMOLED y lo bien que funcionan los 120 Hz. MIUI, aunque mejorado, siempre ha ido un poco cojeando y la mayor tasa de refresco le da un vidilla y fluidez muy necesaria. Lo mejor de todo, es que incluso a 120 Hz, la autonomía sigue siendo muy alta, y quienes quieran aún mayor autonomía, solo deben mantener los 60 Hz que trae por defecto el Redmi Note 10 Pro.

El diseño y el rendimiento son dos de los aspectos que cumplen su cometido, pero tampoco tienen virtudes a destacar. En todo caso, el sensor de huella en el botón de encendido, es un aspecto que cada usuario valorara, no nos termina de convencer del todo, pero hay que darle una oportunidad. Lo mismo ocurre con el módulo de cámaras, no queda estético.

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Hay aspectos a mejorar como el sistema operativo y su batiburrillo de apps de dos compañías, el bombo que se le ha dado a los 108 megapíxeles y que luego ha quedado un poco en agua de borrajas, aunque el resto de sensores si cumplen sin llegar a ser excelentes. Por último, hay que hacer hincapié en la ausencia de módulo 5G para aquellos que estuvieran pensado en saltar a la nueva generación de conexión con este modelo. Para ello tiene Xiaomi otros modelos.

En conclusión, el Redmi Note 10 Pro es un smartphone muy bueno en la mayoría de aspectos, si se le pueden perdonar sus pequeños fallos o carencias. Como siempre, todo es cuestión del presupuesto. Ahora mismo es posible conseguirlo a través de Aliexpress PLAZA con envío desde España y dos años de garantía y con un descuento hasta el día 10 de marzo por su lanzamiento. El modelo de 6 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento se puede conseguir en gris o bronce por 249€ en lugar de 279€, y el modelo de 6 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento está disponible por 269€, solo veinte euros más. Los modelos de 8 GB de memoria RAM parecen no estar disponibles aún.

Si vais en busca de algo más económico, es posible encontrar también en oferta hasta el día 10 de Marzo, el Redmi Note 10, que también posee unas buenas características pero reducidas en comparación a las de su hermano PRO, por 179€ la versión de 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento y por 199€ el modelo con 128 GB de almacenamiento. Es posible, además, usar el código 38PRIM15 para obtener 15€ extra de descuento también hasta el día 10 de Marzo.

El equipo de Profesional Review le otorga la medalla oro: