AMD se ha estado beneficiando de la capacidad y la tecnología de fabricación de TSMC, uno de los fabricantes de chips avanzados mas importante del mundo. Sin embargo, el aumento de la demanda desde mediados del año pasado hasta la fecha, están haciendo que su capacidad se vea cada vez más reducida.
Los procesadores Ryzen se han ido beneficiando del nodo de proceso de 7 nm de TSMC durante años, pero las alarmas se encendieron cuando la cuota de mercado de AMD bajo en el cuarto trimestre del año pasado, una situación que se vincula con la falta de capacidad de fabricación de TSMC.
La demanda de chips es cada vez mayor para TSMC y muchas compañías como Nvidia, AMD o Apple requieren de sus servicios. La capacidad de fabricación no es ilimitada por lo que cada compañía tiene un porcentaje de participación en esa capacidad máxima.
La demanda de procesadores de AMD es cada vez mayor, pero no es posible aumentar el ritmo de fabricación, y esto se traduce en falta de stock. Al no haber los suficientes chips Ryzen o Threadripper en las tiendas, las ventas bajan y se pierde cuota de mercado.
Intel no tendría este problema al ser una compañía autosuficiente que fabrica sus propios chips, aunque también han sufrido algunos problemas de stock debido a los retrasos con el nodo de 10 nm en el pasado.
Si la situación sigue y TSMC no puede aumentar el ritmo de producción de obleas, es posible que AMD tenga que buscar alternativas para evitar entrar en una curva descendente de su cuota de mercado.
La compañía podría tener un crecimiento en los ingresos del 37% en 2021, un crecimiento que sería menor que el esperado. Os mantendremos informados.
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